Mostrando entradas con la etiqueta competividad. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta competividad. Mostrar todas las entradas

martes, 30 de diciembre de 2014

“Para que la gente tenga confianza en Italia, hay que decir la verdad”. Diego Della Valle combina su afición a la ‘dolce vita’ con un espíritu rebelde que le lleva a tronar contra los políticos que, a su juicio, pierden el rumbo.

Uno de los hombres de negocios más ricos del mundo tiene un plan: involucrar a otros empresarios de éxito en el rescate de su país.


De vez en cuando, Diego Della Valle la lía. Cualquier día, sin avisar, este empresario italiano de éxito, uno de los hombres más ricos del mundo según la revista Forbes, propietario de la firma de zapatos Tod’s y mecenas de la restauración del Coliseo, se acerca a un micrófono o compra una página de los principales periódicos de Italia y pone de vuelta y media a quien considera oportuno. Desde Silvio Berlusconi hasta Matteo Renzi –a quienes apoyó al principio de sus carreras políticas– pasando por la familia Agnelli, propietaria de la Fiat. Ahora, además de señalar la paja en el ojo ajeno, Della Valle tiene un plan para arrimar el hombro ante la grave situación social, política y económica que atraviesa Italia.

Usted dijo recientemente que Matteo Renzi y Sergio Marchionne –el consejero delegado del grupo Fiat Chrysler Automobiles (FCA)– eran dos charlatanes, gente sin palabra. Llama mucho la atención que uno de los empresarios italianos más importantes se exprese públicamente con esa beligerancia. Mire, en Italia hay siempre esta actitud un poco de curas viejos –que no es la del papa Francisco, que me gusta mucho– que es la de decir y no decir, de expresar opiniones falsas, de ocultar las propias preferencias… Aquí, tradicionalmente, solo se expone el que no tiene nada, pero el que tiene un papel relevante no lo hace. Yo creo que todos somos personas libres, cada una con sus opiniones, y que no hay que tener miedo a expresarlas. Cuando lo he considerado oportuno, he criticado a Berlusconi en el sitio más público del mundo, en la televisión, o pagando una página de publicidad en los periódicos, y allí ha terminado nuestra relación. Pero no había nada personal.

Ahora tiene un gran desencuentro con Sergio Marchionne, a quien acusa –junto a la familia Agnelli– de haberse llevado la Fiat de Italia cuando el país más necesita inversión y empleo. Y tampoco en este caso hay nada personal. Pero si queremos que la gente tenga de nuevo confianza en el país, es necesario decir la verdad. Si no, la gente no entiende. Y cuando decimos que hay una política que no funciona, que hay una clase dirigente que no funciona, la Fiat es el ejemplo macroscópico de todo esto. Es una empresa y una familia que han tenido ayudas de Italia durante 30, 40, 50 años, y en el momento en que el país tiene necesidad de que sea apoyado, de que exista una unidad nacional, ellos escapan y se van donde les es más cómodo. Fiat tendrá la sede legal en Holanda, la fiscal en Reino Unido y cotizará en Nueva York. Pero en Italia solo dejará los problemas. Más de 18.000 trabajadores sin empleo, planes anunciados por Marchionne que nunca se llegan a ejecutar. Y encima tienen la arrogancia de querer hablar de Italia. Es intolerable.

Si el triunfo personal no es puesto a disposición de los demás, se convierte en algo vacío”


¿Quién es Diego Della Valle? Hace años que no me hago esa pregunta… Pero, fundamentalmente, soy una persona afortunada, porque hago aquello que soñaba hacer desde niño y he tenido la fortuna de poder hacerlo según el ADN que a mí y a mi hermano nos transmitieron nuestros padres. Intentar que de nuestro éxito también se beneficien los demás. Un respeto social fuerte. Y, objetivamente, hoy después de tantos años le puedo confesar que esa manera de hacer las cosas reporta también una satisfacción personal. El hecho de fabricar productos bellos, que la gente está contenta cuando los compra, que son fabricados por personas que están felices de hacer lo que hacen, y que además una parte de los beneficios son puestos a disposición de los que tienen necesidad o del territorio donde están nuestras fábricas… Es un poco la cuadratura del círculo. Y esto es lo que hemos buscado estos años y queremos reforzar en los próximos…

¿Por eso decidió que Tod’s asumiera la restauración del Coliseo? Sí, porque somos una familia orgullosa de ser italiana. Nuestro grupo es italiano, vive del made in Italy, y el Coliseo es el más grande ejemplo de ese concepto. Estamos muy orgullosos de poder hacerlo, pero no solo nosotros, sino también nuestros empleados y nuestros clientes. Cuando usted compre un par de nuestros zapatos pensará que además está contribuyendo a restaurar un trocito del Coliseo. Y, además, ha servido de ejemplo, ha estimulado a otros. La fuente de la plaza de España ha sido reparada, se está rehabilitando la Fontana di Trevi…

¿Qué se propone hacer ahora? Quiero construir una operación que yo llamo “competitividad y solidaridad”. Se trata de que los emprendedores y las empresas que vayan bien destinen un pequeño porcentaje de sus beneficios a sostener las necesidades del territorio donde se asientan o a carencias importantes que tiene ahora Italia. No se trata de una teoría. Se puede hacer. Hay centenares de emprendedores italianos en disposición de hacerlo. Se crearía además una cadena solidaria fortísima y obtendríamos grandes resultados. En primer lugar, desde el punto de vista práctico de ayudar a la gente. Y en segundo, y casi más importante, desde el punto de vista de valores: que las personas que tienen necesidades no se sientan que se las deja solas. Este es el concepto. Tenemos además grandes compañías estatales, muy exitosas, para las que sería muy fácil evitar que, por ejemplo, Pompeya se cayera a pedazos. Las cinco o seis empresas más importantes tendrían que hacerse cargo de lo más urgente.

Una idea la suya que une dos palabras que no suelen ponerse de acuerdo: competitividad y solidaridad. Sí, habitualmente son competitivas las personas de éxito, que ... ver más en El País semanal.

martes, 23 de octubre de 2012

Ciencia para la prosperidad de la UE. CARTA ABIERTA DE 42 PREMIOS NOBEL Y CINCO MEDALLAS FIELDS a los jefes de Estado y de Gobierno de la UE.

En vísperas de la reunión en la que se discutirá el presupuesto de la UE para 2014-2020, reputados científicos piden a los jefes de Estado y de Gobierno un apoyo decidido a la ciencia. Transformar el conocimiento en innovación, dicen, es la única forma de dotar a Europa de ventaja competitiva.

A los jefes de Estado o de Gobierno de los países de la UE, a los presidentes de las Instituciones de la UE:

A menudo se dice que toda crisis también presenta una oportunidad. La crisis actual nos obliga a tomar decisiones, y una de ellas se refiere a la ciencia y su apoyo. Allá por el año 2000, ustedes y sus predecesores acordaron el objetivo de convertirse el área “basada en el conocimiento más dinámica del mundo en el año 2010”. La intención era ambiciosa y noble, pero el objetivo ha quedado muy lejos.

La ciencia puede ayudarnos a encontrar respuestas a muchos de los problemas acuciantes a los que nos enfrentamos: nuevas formas de aprovechar la energía, nuevas formas de producción y nuevos productos, nuevos marcos para entender cómo funcionan las sociedades y cómo podríamos mejorar su organización.

Estamos justo en el comienzo de una nueva y revolucionaria comprensión de cómo funcionan nuestros cuerpos con consecuencias incalculables para nuestra salud y longevidad futuras.

Europa está a la vanguardia de la ciencia en muchas áreas. La transformación de este conocimiento en la innovación de nuevos productos, servicios e industrias es la única forma de dotar a Europa de una ventaja competitiva en el cambiante panorama mundial y asegurar a largo plazo la prosperidad futura de Europa.

El conocimiento no conoce fronteras. El mercado global de talento sobresaliente es altamente competitivo. Europa no puede permitirse perder a sus mejores investigadores, y se beneficiaría fuertemente de la atracción de talento extranjero.

La reducción de los fondos disponibles para la investigación de excelencia se traduce en un menor número de investigadores que alcanzan esta condición. En caso de una severa reducción en el presupuesto comunitario de investigación e innovación corremos el riesgo de perder una generación de científicos de talento, justo cuando Europa más los necesita.

En este sentido, el Consejo Europeo de Investigación (ERC) ha logrado un reconocimiento mundial en un tiempo extraordinariamente corto. El ERC financia a los mejores investigadores donde se encuentren en Europa, independientemente de su nacionalidad: investigadores excelentes con proyectos excelentes. El ERC complementa la financiación nacional de la investigación fundamental, añadiendo un valor adicional a la excelencia.

La financiación de la investigación a nivel de la UE cataliza un mejor uso de los recursos disponibles y ayuda a que los presupuestos nacionales sean más eficientes y eficaces. Estos recursos de la UE son extremadamente valiosos pues han demostrado su capacidad de lograr beneficios esenciales para la ciencia europea, así como beneficios crecientes a la sociedad y un aumento de la competitividad internacional.

Es fundamental que sigamos apoyando, y más importante aún, inspirando la extraordinaria riqueza del potencial de investigación e innovación que existe en toda Europa. Estamos convencidos de que la nueva generación de investigadores también hará oír su voz y deberán oír lo que tienen que decir.

La pregunta que queremos plantearles, a ustedes, jefes de Estado o de Gobierno y presidentes reunidos en Bruselas los días 22-23 de noviembre para discutir el presupuesto de la UE para el periodo 2014-2020, es simple: cuando se anuncie el acuerdo para el futuro presupuesto de Europa, ¿cuál será el papel de la ciencia en el futuro de Europa?

Firmado por 42 premios Nobel y galardonados con la medalla Fields: Sidney Altman, Werner Arber, Robert J. Aumann, Françoise Barré-Sinoussi, Günter Blobel, Mario Capecchi, Aaron Ciechanover, Claude Cohen-Tannoudji, Johann Deisenhofer, Richard R.Ernst, Gerhart Ertl, Martin Evans, Albert Fert, Andre Geim, Serge Haroche, Avram Hershko, Jules A. Hoffmann, Roald Hoffmann, Robert Huber, Tim Hunt, Eric R. Kandel, Klaus von Klitzing, Harold Kroto, Finn Kydland, Jean-Marie Lehn, Eric S. Maskin, Dale T.. Mortensen, Erwin Neher, Konstantin Novoselov, Paul Nurse, Christiane Nüsslein-Nolhard, Venkatraman Ramakrishnan, Richard J. Roberts, Heinrich Rohrer, Bert Sakmann, Bengt I. Samuelsson, John E. Sulston, Jack W. Szostak, John E. Walker, Ada E. Yonath, Rolf Zinkernagel, Harald Zur Hausen; Pierre Deligne, Timothy Gowers, Maxim Kontsevich, Stanislav Smirnov, Cedric Villani. CARTA ABIERTA A LA COMISARIA EUROPEA DE INVESTIGACIÓN Investigadores del CSIC denuncian en la UE la situación de la ciencia en España Una carta firmada por más de 2.400 personas, incluidos directores de centros, explica las dificultades para recibir incluso la financiación asignada en proyectos europeos