CTXT (Contexto y Acción)
En su libro The Other Slavery, Reséndez, mexicano afincado en California, desgrana la historia de la esclavitud, sus raíces económicas desde el desembarco de Colón en La Española en 1492
Estados Unidos abolió por ley la esclavitud en 1865, con la aprobación de la decimotercera enmienda constitucional. Lo hizo tras una guerra civil en la que las oligarquías sureñas pelearon hasta la extenuación por el mantenimiento del trabajo forzoso. Pero, según detalla el historiador Andrés Reséndez, hubo en el continente americano otra esclavitud, taciturna y olvidada, que precedió a la de los negros traídos de África, y sobrevivió con mucho a la abolición de la misma: la de los indígenas americanos a manos de los colonos españoles. En su libro The Other Slavery, Reséndez, mexicano afincado en California, desgrana la historia de la esclavitud, sus raíces económicas desde el desembarco de Colón en La Española en 1492, y la sorprendente pugna que desató entre los intereses empresariales de todo el Imperio, desde Chile a Filipinas, y una Corona incapaz de hacer valer su autoridad ante estos. Reséndez, nominado por su trabajo al prestigioso Premio Nacional del Libro, rescata del silencio las vidas de cinco millones de esclavos en su propia tierra, las triquiñuelas legales que permitieron cuatrocientos años de sometimiento, y el inacabable mercado que los devoró.
Uno de los aspectos más interesantes que plantea es la cuestión de la visibilidad. Cuando uno habla de esclavitud en América, se piensa siempre en los esclavos africanos. Pero como demuestra su libro, la presencia de esclavos indígenas no es algo anecdótico. Habla de cinco millones de esclavos, desde el desembarco de Colón hasta el siglo XIX. ¿A qué se debe esa invisibilidad?
Bueno, esa es una muy buena pregunta. Por un lado, se debe a la documentación. En el caso de los africanos tenemos documentos muy buenos, primero porque la esclavitud de africanos era legal, y segundo, porque tienen que cruzar el Atlántico, por lo que se puede consultar toda la documentación portuaria. En el caso de los nativos americanos, tenemos menciones más o menos vagas sobre expediciones para traer a esclavos. A pesar de que no tenemos una documentación exacta, sabemos que éste fenómeno ocurrió en todas partes de la actual América Latina y que se mantuvo esto desde el siglo XVI hasta el siglo XIX, como mencionas. El segundo problema es quizá la dispersión. Muchos de los esclavos africanos iban a plantaciones muy visibles, donde había concentraciones importantes. En el caso de los esclavos indios hay una dispersión muy notable. Cuando pones todas las regiones en un listado, te das cuenta de la magnitud del fenómeno.
Por seguir con esa comparación, usted señala que los nativos americanos sufrieron una merma en su población incluso mayor en términos relativos que los africanos durante el período de la esclavitud. La historia oficial a ambos lados del Atlántico culpa de esa merma a las enfermedades que portaban los europeos. ¿Es eso cierto?
La respuesta contundente a esa pregunta es probable que nunca la vayamos a saber. De entrada, porque no sabemos exactamente cuál es el número de nativos americanos que había en 1492. Pero lo que sí podemos ver es la dinámica poblacional en las primeras tierras colonizadas por los españoles. Y conocemos el trabajo de demógrafos como Massimo Livi Bacci, quien estudia sobre todo la viruela, que es la que supuestamente mata a un mayor número de indígenas. Y sin embargo, la viruela no llegó inmediatamente al nuevo mundo porque el viaje desde España hasta el Caribe en el siglo XVI tardaba cuatro o cinco semanas. Alguien que hubiera sido infectado se hubiera muerto en tránsito. Las primeras menciones innegables de viruela son de 1518, veintiséis años después de la llegada de Colón. Y sin embargo, antes de 1518 tenemos indicios muy claros de que la población de la isla Española va en franco declive y no lo podemos atribuir a la viruela. La documentación que tenemos es muy clara en el sentido de que las guerras iniciales, la falta de comida y la explotación en las minas de oro fueron responsables de esa merma inicial, antes de que tengamos indicios de viruela. Es un caso importante para entender los otros factores, los humanos, que llevaron a la despoblación en este caso del Caribe.
En el libro cuenta que la colonización elevó a la práctica a lo que ahora entenderíamos como tráfico de seres humanos ¿Con qué se encontraron los conquistadores y qué prácticas desarrollaron?
Antes de la llegada de los españoles, había prácticas de esclavitud en toda América. Estas prácticas se daban en patrones culturales muy circunscritos a distintas regiones. Por ejemplo, en el centro de México lo que tenemos son cautivos que eran sacrificados en las pirámides, como bien sabes. En la zona del actual Nueva York tenemos prácticas de traer cautivos de grupos vecinos para reemplazar a los muertos del propio grupo o para vengarse en caso de guerras. En el Pacífico noreste, lo que tenemos son prácticas de dar cautivos para finalizar matrimonios entre familias de élite de los grupos nativos. Con la llegada de los españoles estas prácticas especializadas se fueron uniformizando, monetizando y comercializando, en un proceso que llevó su tiempo.
Sorprende de su relato el ansia por la esclavización que acompañó el proyecto colonizador desde el principio, incluyendo al propio Colón. ¿Qué se encontró Colón en el Caribe, en particular, y cómo reaccionó a su hallazgo?
Lo que me parece interesante de Colón es, primero, que había visitado San Jorge de la Mina, el dominio portugués en el Golfo de Guinea, un enclave importantísimo desde donde se embarcaban esclavos de África. Colón tenía esa experiencia previa. Y cuando descubrió estas nuevas tierras de América eso fue lo primero que propuso a los reyes españoles como forma de sustentar este proyecto. Hay numerosas cartas que explican que trata de ir más allá con este proyecto, y lo justifica apoyándose en algunas ideas de la época, en el sentido de que las gentes que vivían en las zonas cálidas eran más inteligentes y podrían ser muy adecuados como esclavos.
Usted describe que Colón veía su proyecto como un negocio, y que le pareció que una de las mejores maneras de sacarle beneficio era aprehender esclavos y venderlos.
Exactamente, y esto en el contexto de haber encontrado un poco de oro, pero no demasiado, y de no haber encontrado especias, que era lo que estaba buscando desde el principio. Era una manera de mantener viva su esperanza en el proyecto.
Y, sin embargo, Colón se encontró con dos obstáculos para su proyecto esclavista: por un lado la riqueza natural del propio Caribe, en el sentido de que hacía falta gente, indígenas, para extraer y explotar esas riquezas. Y, por otro, la oposición de la Corona española. ¿En qué se basaba esa oposición? Y, si era tal, ¿cómo pudo persistir la esclavitud en América, contra la voluntad de la más alta esfera del Imperio?
La esclavitud era una institución bien establecida en Europa, especialmente en la Europa Mediterránea, desde antes de las conquistas en América. Se vendían esclavos de las Islas Canarias, de África, de la zona del Mediterráneo del este. Y sin embargo, para que estos fueran legítimamente esclavizados, había que demostrar que eran enemigos del cristianismo y de las coronas europeas. Entonces, en el caso por ejemplo de los africanos, muchos de ellos profesaban el Islam, y era muy fácil demostrar que eran enemigos del cristianismo. En el caso de los indígenas, que eran paganos, esto era más difícil de demostrar y desde luego, demostrar que estaban haciendo una guerra contra España era imposible, porque, bueno [ríe], la realidad era la contraria. En términos legales, era mucho más difícil justificar la esclavitud de los indígenas que la de los africanos. Por otro lado, tenemos figuras extraordinarias, como la Reina Isabel, que desde el principio se opuso. Hubo distintos matices y distintos niveles de oposición a la esclavitud de indígenas, y esto fue variando con el tiempo.
Esa resistencia llevó, en primer término, a una prohibición explícita de la esclavitud, al menos sobre el papel. Pero luego las reglas se fueron relajando, incluyéndose excepciones. ¿Qué consecuencias tuvo ese régimen variable en la manera en la que se desarrolló la esclavitud en América?
Efectivamente, la esclavitud fue permitida en ciertas circunstancias, a principios del siglo XVI. Por ejemplo, en el caso de esclavos que habían sido esclavizados por otros indígenas y que eran vendidos a los españoles, o los que eran caníbales, o los que habían sido obtenidos en “guerras justas”, era legal conseguir y mantenerlos como esclavos. Las excepciones a la regla hicieron que básicamente la prohibición no tuviera mucho efecto, y llevaron a la promulgación de las nuevas leyes que en 1542 prohibieron absolutamente la esclavización de indígenas. Esta era una iniciativa de la Corona muy loable, y muy ambiciosa, pero al mismo tiempo era imposible de hacerlo en el nuevo mundo, porque todos los negocios y toda la actividad económica dependían de la labor de los indígenas. Entonces, la esclavitud de indígenas se volvió clandestina, y se utilizaron eufemismos y todo tipo de fórmulas para mantener la esclavitud de los indios... Sin llamarlo esclavitud.
Otro personaje importante en el relato es Hernán Cortés, a quien describe como un hombre vigoroso, decidido a desarrollar un proyecto basado en la esclavitud. ¿Cuál fue su papel?
Hernán Cortés es efectivamente una figura increíble en términos de su ambición y su vigor, en especial en su actividad económica. Por ejemplo, es uno de los pioneros en el desarrollo de la industria minera en México. Está en mejor posición que nadie para llevar a cabo estos negocios, porque tiene las encomiendas más grandes. Entonces obtiene todo tipo de alimentos de sus indios encomendados, lo cual le permite alimentar a trabajadores. Y los trabajadores que busca para estas minas son esclavos, tanto indígenas como negros, así como algunos trabajadores asalariados. En ese momento, en la década de 1520, 1530, las minas se venden con esclavos, y él es uno de los principales compradores de minas, y se convierte también en uno de los principales dueños de esclavos indios, quizá el mayor de la Nueva España.
El sistema de esclavitud que describe, ya a mediados del siglo XVI, es complejo, con diferentes escalafones, empezando por el rey. Sitúa a un hombre llamado Luis Carvajal en el centro de ese esquema. ¿Quién era y qué papel cumplió? ¿Cómo se fue abriendo camino en ese sistema?
Luis Carvajal de la Cueva es una figura interesantísima, porque formó parte de un sindicato esclavista en la costa oeste de África primero, y de ahí se transfirió a la costa del Golfo de México. Ahí se enfrentaron, en los comienzos de la guerra Chichimeca, grupos del norte de México y los colonos europeos. Desde su origen, surge un debate teológico y moral sobre la forma en que se puede llevar a cabo esta guerra y cuáles van a ser sus límites. La Corona española había prohibido la esclavitud de indios, y surge entonces un sistema donde se da la esclavitud de facto, con castigos, con crímenes… Y Carvajal es un hombre versado en estas lides, que se entrenó en África en esto, y que lleva esta tecnología al norte de México, convirtiéndose en un gran traficante de esclavos.
Al tiempo que se producía esa explosión de la minería, basada en la esclavitud, se dio una suerte de tira y afloja entre la Corona española y los esclavistas, en el que entraron en juego prácticas lobistas que nos recuerdan al presente. ¿En qué se manifestó y a quiénes enfrentó esa disputa? ¿Y cómo es posible que la Corona, insisto, no pudiera hacer valer sus postulados respecto de la prohibición de la esclavitud?
Es muy interesante. La disputa de la que hablas nos deja muy claros los límites del poder de la Corona española en el Nuevo Mundo. Los bandos son muy claros: Felipe IV, por sus escrúpulos morales, inicia una cruzada anti esclavista a lo largo de las Américas y hasta Filipinas. Fue sucedido por su esposa la Reina Mariana y por su hijo Carlos II, El Hechizado.Los tres estaban muy interesados en tratar de mejorar la situación de los indígenas. En contra de ellos tenemos a todos los beneficiarios del trabajo de los indios, en el Nuevo Mundo. Y como bien señalas, hubo distintas trayectorias, en algunos casos, por ejemplo en el Caribe, lo que encontramos es que los oficiales españoles, básicamente, acatan las órdenes que vienen de Madrid, y soportan todas las críticas locales de los que han sido despojados de sus esclavos indios. En otros casos, como en el del norte de México, especialmente en la zona de Sinaloa, tenemos unos oficiales de la corona inicialmente dispuestos a pelear pero que, finalmente, son derrotados por los intereses esclavistas. Y en otros casos, como en el caso de Chile y Filipinas, el peso relativo de los intereses esclavistas es tal que los edictos de la Corona son rechazados muy rápidamente, y las liberaciones de esclavos son muy escasas, si es que las hubo.
Esos intereses esclavistas, ¿tenían a los esclavos para trabajar en las minas? ¿O en sus propias casas?¿Por qué eran tan poderosos?
En todo. En algunos lugares habían minas y los usaban en las minas, muchos de los esclavos los usaban en sus propias casas, en haciendas productoras agrícolas. En el caso de Chile, por ejemplo, a principios del siglo XVII hubo una revuelta por la cual la Corona hizo una excepción y permitió la esclavización de indios por su carácter hostil. Durante gran parte del siglo, la esclavización de indios fue legal y en ese sentido lo que tenemos es toda una serie de mecanismos que vinculan íntimamente al gobierno de Chile con estos intereses esclavistas. De ahí que la oposición a liberar a los esclavos sea mayor que en otras partes.
Según avanza en el tiempo, el libro va trasladando el foco del Sur y el centro de América hacia el Norte ¿Cómo se fue expandiendo la esclavitud, hasta llegar a los actuales Estados Unidos?
Estas minas de plata nunca llegaron hasta lo que ahora es el suroeste de los Estados Unidos. Pero la necesidad de trabajadores en estas minas llevó a los esclavistas a meterse en Nuevo México, a irse hasta California, a irse hasta Texas. También se dio el fenómeno contrario. En el caso de Nuevo México tenemos comerciantes locales que no han encontrado plata y la única manera en la que pueden comerciar con las regiones más ricas, que están al sur, es vendiendo, bien esclavos que ellos mismos llevan a vender a Parral, o bien productos que son hechos con mano de obra esclava. Entonces, por ejemplo, llevan textiles desde Nuevo México hasta Parral, y los hacen con trabajadores indígenas que han capturado en la zona y tienen en talleres. Más allá de la crueldad de ciertos individuos, lo que me parece más importante resaltar es que la razón por la que ellos podían hacer esto es porque había un mercado para todos estos esclavos. Lograban asentarse en zonas donde los indios se congregaban, por ser ricas en términos de pescado y de aves. En el momento en que pueden controlar esa zona, pueden explotar a esta población.
Otra trama en su relato es la historia de los Comanches y cómo la introducción de los caballos y las armas de fuego en su cultura permitió que se convirtieran ellos también en esclavistas en Nuevo México. ¿Hasta qué punto la apertura del mercado esclavista y las tecnologías europeas facilitaron que los indígenas esclavizasen a otros indígenas?
Muy buena pregunta. Como habíamos dicho, había esclavitud antes de la llegada de los españoles y con esta, algunos indígenas se convirtieron en aliados de los españoles y algunos de ellos participaron en las actividades esclavistas desde el principio, pero siempre subordinados al poder militar español, que tenía caballos y armas de fuego. Cuando estos grupos lograron hacerse con caballos y armas, empezaron a cobrar más fuerza y se hicieron proveedores independientes de esclavos. Es el caso de los Comanches y los Yutas, que básicamente se vuelven depredadores de otros grupos que tienen menos acceso a estos caballos y a estas armas de fuego. Y así es como crean un modo de vida, digamos.
También habla, a través del trabajo de un periodista de investigación estadounidense, de la expansión de la esclavitud en las últimas décadas del siglo XIX en México, mucho después de conseguirse la independencia. ¿Qué descubrió ese periodista?
Se llama John Kenneth Turner, y es un periodista muy ingenioso que va a Yucatán cuando se está viviendo un momento de crisis económica. Haciéndose pasar por un inversionista norteamericano, va a las plantaciones de Neken, de los Yucatecos, le abren las puertas y le platican sobre el sistema de las plantaciones, le enseñan a comprar trabajadores Mayas y en algunos casos indios Yaquis, que han sido traídos desde un extremo del país hasta el otro. Hay esclavos que vienen desde Corea. Y bueno, le dicen que por ese precio puede obligarlos a trabajar, que no pueden salir de su plantación porque están endeudados. Además les daban una cartilla con la fotografía de ese trabajador, así que en caso de que huyera, simplemente, llevaban esta cartilla a las autoridades, que perseguirán al trabajador fugado y se lo regresaban. Se trata de un sistema de esclavización en todo menos en nombre.
En el oeste americano, la esclavitud la lanzaron primero, según cuenta, los rancheros mexicanos, pero luego fue expandida por los estadounidenses hasta la frontera de California. Cuenta también que convivía en el tiempo con la de los negros en el Sur. ¿Qué particularidades tenía cada esclavitud?
La demografía de las dos esclavitudes es bien distinta. En conjunto, los esclavos africanos en su mayoría son adultos y hombres y varones. En el caso de los esclavos indios, en su mayoría son mujeres y niños. En algunas de estas minas había esclavos negros, había esclavos indígenas, había trabajadores, o sea, asalariados indígenas, todos ellos coexistiendo en el mismo lugar. En California, México prohibió la esclavitud de africanos en 1828, entonces para los años treintas o cuarentas no había esclavos. Por lo menos legalmente no se podía tener esclavos africanos; pero sí se podían tener estos peones indígenas, y muchos de los inmigrantes americanos, angloamericanos que llegan a California adoptan este sistema de peonaje que aprendieron de los rancheros mexicanos o que introdujeron ellos mismos. En el caso del sur de Estados Unidos es muy interesante porque, después de la guerra civil, al prohibir la esclavitud en el Sur, los poseedores de esclavos del sur trataron de introducir los mecanismos que se habían introducido en México o en el resto de América Latina durante siglos, que era criminalizar actividades, como por ejemplo la vagancia y de esta manera mantener el control sobre la población afroamericana.
Es de sobra conocido el final de la esclavitud de los negros en América, con el movimiento abolicionista primero y la guerra civil americana después. ¿Cómo terminó el régimen de esclavitud para los indígenas? ¿Qué tumbó a un sistema que, según describe, tuvo en contra desde su origen intereses poderosos, empezando por la propia Corona española?
Sencillamente, decayó hasta casi cero a fines del siglo XIX, principios del siglo XX, por razones económicas. Pero en realidad nunca desapareció. De alguna manera las formas contemporáneas de esclavización y de tráfico tienen sus raíces en este tipo de esclavitud que experimentaron los indios durante cuatrocientos años. Más que hacia la esclavitud de africanos que, de alguna manera es excepcional en el sentido de que hoy por hoy la esclavitud está prohibida, hay que buscarle vueltas a la ley de la misma manera que la prohibición que hizo la Corona en el siglo XVI: hizo que los esclavistas le buscaran la vuelta a la ley. Esa es la conclusión un tanto apabullante de mi libro: esos son los antecedentes del tipo de esclavitud que ha perdurado hasta la fecha.
Fuente:
http://ctxt.es/es/20180404/Politica/18811/Andres-Resendez-entrevista-esclavitud-indigenas-americanos.htm