Mostrando entradas con la etiqueta incendio del Reichstag. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta incendio del Reichstag. Mostrar todas las entradas

miércoles, 4 de mayo de 2011

"Advertencia", una película de Bardem estrenada en 1985

La biografía de Giorgi Dimitrov se emitió por la segunda cadena el 27/01/1985, hace ya 26 años.

Advertencia, una película hasta entonces inédita en España de Juan Antonio Bardem, Realizada en 1982 y ganadora del festival de Karlovy Vary, narra la historia de Giorgi Dimitrov, el fundador del Partido Comunista búlgaro, detenido en Alemania y acusado por los nazis de haber intervenido en el incendio del Reichstag. La película describe su largo exilio y el proceso en el que desarrolló su propia defensa, llamando incluso a declarar al todopoderoso ministro nazi Hermann Goering.

DIEGO GALÁN. Advertencia no había sido estrenada en España hasta ahora, aunque su director fuese Juan Antonio Bardem, uno de los más prestigiosos cineastas de nuestro país, especialmente contratado por la cinematografía búlgara, que, en unión de la soviética, quiso rendir homenaje a su líder en el primer centenario de su nacimiento. Película de gran presupuesto y de un admirable rigor documental, que insiste en cubrir el desconocimiento que pueda existir respecto a la personalidad de Dimitrov.

Con esa responsabilidad trabajó Bardem: "Hay que suministrar toda la información previa. No es una historia de chico y chica en la que se pueda heredar códigos anteriores. Se debe explicar la época, lo que está pasando, quién es Dimitrov, de dónde viene... Por eso dura más de dos horas. Quizá ello explique el nulo interés mostrado por los distribuidores españoles, aunque creo que políticamente Advertencia puede interesarnos hoy."

Otra película búlgara narró el proceso a Dimitrov: "Se titula Yunque o martillo, utilizando un verso de Goethe que Dimitrov pronunció en el juicio. Se es yunque o se es martillo: no hay otra alternativa".
La advertencia, pues, sería esta: "La necesidad de una unidad política de todas las fuerzas de izquierda, de un frente común de lucha contra el capital, la reacción, el fascismo creciente... Dimitrov se dio cuenta que se debía perseguir esa unidad. Años más tarde fue el gestor de los frentes populares".

Juan Antonio Bardem, que trabajó durante año y medio en la realización de la película, considera que ha contado con mayores medios técnicos que en cualquiera de sus anteriores: "No he trabajado en Hollywood, pero es idéntico. Una vez aceptado el guión, hay que hacerlo. Yo veía, con mi mentalidad de hombre del subdesarrollo, que podía costar mucho dinero lo que luego en la pantalla iba a durar escasos segundos, y hasta me sentía a veces inclinado a renunciar al rodaje de momentos tan costosos. Pero es absurdo. Esos breves momentos pueden ser los que acaben conformando el ambiente de la película."

"Me siento muy orgulloso de ella. Creo que está bien el ensamblaje de la parte dramática con la documental, con las canciones, que, lamentablemente, no han podido subtitularse. El encuentro mítico en el proceso entre Dimitrov y Goering, cara a cara, es uno de los momentos más importantes y que yo más aprecio en la película: Dimitrov cita, como testigo, a Goering, presidente del Reichstag y ministro del Interior. Lo acosa de tal manera, que Goering pierde los estribos. Pero de ello no había material documental y tuvimos que encontrar una solución que no partiera de la elección de un actor que interpretara al personaje, porque así como nadie conoce el rostro de Dimitrov, el de Goering tiene una imagen pública conocida."

"Itsvan Szabo, en Mephisto, hizo aparecer a un Goering sin citarlo, utilizándolo como personaje, pero sin decirlo, y salvó el conflicto. La solución que yo encontré fue la de trasponer esa parte del juicio a una especie de representación infantil, como si se tratara de un cartel de ciegos, mientras otros niños leen lo que realmente se dijo en el juicio. Creo que es un sistema que funciona estupendamente, aunque tampoco hayamos podido subtitular ahora la cancioncita que habla de eso".

"El proceso", continúa el director, "fue filmado por los nazis, pero no se ha conservado ese material. Sólo el sonido, y en él nos hemos basado para recomponer el juicio. La reproducción no puede ser exacta: duró tres meses. Pero sí está condensado en las intervenciones claves".

"En este sentido", añade con humor, "mucha gente va a creer que los diálogos los he escrito yo. Pero cuanto se dice durante el juicio fue dicho allí realmente. Mi trabajo ha sido condensarlo. Los diálogos los escribió Dimitrov. Las críticas, a Dimitrov, por favor".

El director más comercial en Bulgaria
Aun siendo Advertencia una de las dos películas más comerciales en la historia del cine búlgaro, y de haber sido su director premiado con el Premio Dimitrov, Bardem decidió continuar su trabajo en España: "Uno es de aquí, de la calle de Valverde, y debe trabajar aquí. Una cosa es hacer una película de su mundo y para su mundo y otra tratar de conectar las distintas culturas". Cuenta Bardem con humor sus primeras sensaciones en Bulgaria, donde toda su obra es ampliamente conocida: "Cuando iba a visitar los estudios todo el mundo decía 'don Bardem', lo que hinchaba mi vanidad. Hasta que me enteré de que 'donbardem' significa 'buenos días".

"Estoy trabajando con entusiasmo en el proyecto sobre Lorca", película que inicialmente producía la cinematografía soviética y para la que no se encontró coproductor español. La posterior intervención del Estado mexicano quedó congelada, por sus graves problemas económicos. El guión, escrito en colaboración con Ian Gibson, ha sido finalmente aprobado por Televisión Española: "Antes se hablaba de censura política, y la había. Ahora, también como antes, existe la censura económica. De ahí que está claro que la intervención del Estado en la realización de películas sea fundamental. Sólo en manos de capitalistas ya sabemos el cine que se hace. El proteccionismo es la única fórmula de que no desaparezca el cine. En el sentido de que las multinacionales no engullan las cinematografías locales luchamos todos. Quedó claramente expuesto en las actas de Madeira y lo está igualmente en la actitud de todos los Gobiernos sensibilizados".

Más aquí.