_- Salim Lamrani
Al Mayadeen
El autor del libro El capital en el siglo XXI denuncia la hipocresía de la troika y del Fondo Monetario Internacional sobre la cuestión de la deuda. [1]
En el pasado, las deudas públicas fueron mucho más importantes que la actual deuda de Grecia. Esta se eleva a 312.000 millones de euros y representa el 170% de la producción anual del país. La deuda de Grecia en realidad es irrisoria, pues la economía del país sólo representa el 2% del PIB de la zona euro. Por lo tanto la deuda apenas representa el 3% del PIB de la zona euro y no constituye un peligro para el equilibrio económico de Europa.
Las grandes potencias europeas como Francia, Alemania y el Reino Unido también tuvieron en el pasado, particularmente en el siglo XIX y el siglo XX, una deuda superior al 200% de su PIB. Cada vez que ocurrió, se encontró una solución.
“En el siglo XX, Francia y Alemania son los dos países por excelencia que nunca reembolsaron su deuda pública”.
“Hay algo irónico” en exigir a Grecia un reembolso imperativo de su deuda olvidando que “Europa se construyó después de la Segunda Guerra Mundial sobre ciertos principios, particularmente la cancelación de las deudas del pasado para invertir en el porvenir”.
Así, en 1953, Europa decidió colectivamente cancelar toda la deuda exterior de Alemania pues había “elegido el porvenir”.
Existen varios métodos frente al problema de la deuda. El método lento e ineficiente, que se aplica actualmente a Grecia, consiste en pedir a la nación que acumule excedentes presupuestarios (recaudaciones tributarias superiores a los gastos públicos) y los dedique al rembolso de los créditos. Tiene el defecto de durar a veces más de un siglo, socavar el crecimiento económico y tener un costo social muy elevado.
“Cuando se supera cierto nivel de deuda pública hay que utilizar métodos más rápidos”. Existen tres que se usaron en el pasado: la inflación moderada, los impuestos excepcionales sobre los patrimonios privados y sobre todo la cancelación de las deudas.
“Hubo cancelaciones de deudas en la pasado y habrá otras en el futuro”.
“Los gobiernos no tienen el valor de poner [el tema de la cancelación de la deuda] en la mesa”, lo que de todas formas es inevitable si se quiere salir de la crisis y “cuanto antes mejor”.
Se presenta al pueblo griego como que vive por encima de sus recursos. No obstante en la actualidad, bajo el gobierno de Alexis Tsipras, el presupuesto de Grecia está en equilibrio sin contar el servicio de la deuda. Incluso hay “un leve excedente primario” equivalente al 1% del PIB, lo que representa 1.830 millones de euros. El rembolso de la deuda se vuelve insostenible, sobre todo si se toma en cuenta el hecho de que los bancos privados concedieron a Grecia préstamos con tasas usurarias que podían alcanzar el 18%, convirtiendo los créditos en algo matemáticamente impagable.
Las instituciones financieras internacionales exigen a Grecia, en virtud de los acuerdos impuestos en 2012, que dedique el 4% de su PIB al rembolso de la deuda durante los 30 próximos años. “El presupuesto total de todo el sistema de la enseñanza superior griego representa menos del 1% del PIB. Significa entonces que se le pide al contribuyente griego que dedique, durante los próximos 30 años, cuatro veces más de dinero a rembolsar la deuda del pasado que todo lo que se invierte en la formación superior del país. ¿Acaso es la mejor forma de preparar el porvenir? Desde luego ¡no! Entonces es absurdo”.
“Jamás se pidió, afortunadamente, a Alemania, Francia y a los países europeos después de la Segunda Guerra Mundial que hicieran eso. Se procedió a cancelaciones de las deudas y ello permitió la reconstrucción de Europa en los años siguientes. Pudimos librarnos del peso de la deuda e invertir los recursos públicos en las infraestructuras, la educación y el crecimiento”.
“Europa, mediante el Tratado Presupuestario de 2012, eligió el método británico del siglo XIX, de la penitencia durante décadas y décadas, en vez del método europeo de la posguerra, que consistió en proyectarse en el porvenir”.
“Hay una amnesia histórica extremadamente grave. La ignorancia histórica por parte de nuestros dirigentes es algo que consterna en absoluto”.
“El Gobierno francés tiene una responsabilidad muy grande” en esta situación al no oponerse a la intransigencia de Alemania. El presidente “Hollande debe tomar sus responsabilidades y decir que la restructuración de la deuda es ahora”.
Sin un gesto firme hay un riesgo de “prolongar el periodo de incertidumbre”, que tiene un gran impacto en el crecimiento, y “volver a hundir a Grecia en la recesión, lo que es extremadamente grave”.
“El problema de la deuda en Europa no es más importante que en Japón o en Estados Unidos”.
“Hay mucha hipocresía en todo esto, pues los bancos franceses y alemanes están muy contentos de ver los activos financieros de los griegos ricos que se transfieren a esos mismos bancos y por supuesto no se transmite la información a la Hacienda griega”, privando así al Estado helénico de fuentes de ingresos fundamentales y haciéndose cómplices del fraude fiscal a gran escala.
Desde 2010, las instituciones financieras internacionales han cometido “enormes errores en Grecia”. “Incluso el FMI reconoció haber subestimado las consecuencias de las medidas de austeridad en términos de recesión”.
Esas medidas de austeridad “llevaron a un aumento desmesurado de la deuda” griega pues el PIB cayó un 25 % entre 2010 y 2015. “Esta fue la razón de la explosión de la deuda hasta un 170% del PIB mientras que sólo representaba un 110%”.
“Me ubico en el punto de vista de las jóvenes generaciones griegas. ¿Acaso son responsables de los actos del [primer ministro] Papandreu en 2000 y 2002? No son más responsables de esos errores que los jóvenes alemanes de los años 1950 o 1960 de los errores precedentes. Dios sabe sin embargo que los gobiernos alemanes hicieron cosas mucho más graves que los gobiernos griegos”.
“Todas las deudas de la zona euro deben restructurarse. Hace falta cancelar una parte como siempre ocurrió en la historia”.
“Hace seis meses que el Gobierno griego pide un restructuración de la deuda” y cada vez recibe el rechazo obstinado del Eurogrupo.
No obstante en 2012 Europa “prometió a los griegos que cuando el país estuviera en situación de excedente se renegociaría el importe de la totalidad de la deuda”. Hoy Europa se niega a cumplir su promesa.
“Los charlatanes que pretenden que se va a expulsar a un miembro de la Unión Europea para disciplinar a los demás son sumamente peligrosos. El ideal europeo está a punto de ser destruido por las decisiones de esos charlatanes”.
Nota:
[1] Thomas Piketty, «C’est à vous», France 5, 23 de junio de 2015. https://www.youtube.com/watch?v=VIzv3peNLFk (sitio consultado el 9 de julio de 2015); Thomas Piketty, «Il faudra parler de la restructuration de la dette grecque», Europe 1, 29 de junio de 2015. https://www.youtube.com/watch?v=e6SUVZmCxgM (sitio consultado el 9 de julio de 2015).
*Doctor en Estudios Ibéricos y Latinoamericanos de la Universidad Paris Sorbonne-Paris IV, Salim Lamrani es profesor titular de la Universidad de La Reunión y periodista, especialista de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos. Su último libro se titula Cuba, the Media, and the Challenge of Impartiality, New York, Monthly Review Press, 2014, con un prólogo de Eduardo Galeano.
http://monthlyreview.org/books/pb4710/ Contacto: [email protected] ; [email protected]
Página Facebook:
https://www.facebook.com/SalimLamraniOfficiel
Fuente:
http://espanol.almayadeen.net/Study/Suaxbsfy_0q97qTpAG2_Rg/25-verdades-del--economista-del-a%C3%B1o--thomas-piketty-sobre-la
domingo, 23 de junio de 2019
sábado, 22 de junio de 2019
La guerra de Bolton
Rafael Poch de Feliu
Blog personal
El demente belicista que dirige el Consejo de Seguridad Nacional en Washington siempre ha batallado por cargarse todos los acuerdos importantes de nuestro nuclearizado mundo
¿Se acuerdan de Sheldon Adelson? El multimillonario de los casinos y padrino de Netanyahu quería abrir en 2012 el “Eurovegas” en Barcelona. Tras la explosión de la burbuja inmobiliaria, Artur Mas se entrevistó con él en la ciudad condal en un intento de apuntalar la economía política convergente posterior al 3% y con ella lo que llamaba el “eje Massachusetts-Barcelona-Tel Aviv”. Aquella genial jugada queda para la patética historia del “procés”, pero de lo que hoy se trata es de algo serio: de los “Altos de Trump”.
El Informed Comment de Juan Cole dice que Adelson, quinta fortuna de Estados Unidos, fue quien presionó a Donald Trump para colocar en un alto cargo al criminal demente John Bolton. Se trata de empujar a Estados Unidos a una guerra con Irán que cubra el flanco oriental de la expansión israelí proclamada por Netanyahu: anexionarse Cisjordania. “Irán es el único país que continua oponiéndose activamente a la lenta limpieza étnica de los territorios palestinos ocupados, y Adelson y su cachorro Netanyahu buscaban un gran matón para romperle las piernas a Irán”, dice el portal de Cole. Ese matón es Trump, y Netanyahu ya le ha honrado estos días bautizando como “Ramat Trump” (Altos de Trump) uno de los 33 asentamientos judíos de los altos del Golán arrebatados a Siria en 1967, oficialmente anexionados por Israel en 1981 y que Trump reconoció como israelíes, contra todo derecho internacional, el pasado 25 de mayo.
Decir que Bolton es un criminal demente no es un capricho retórico. El hombre que el millonario Adelson colocó al frente del Consejo de Seguridad Nacional, es un loco belicista empeñado en cargarse todos los acuerdos de nuestro mundo nuclear. Comenzó con el acuerdo antimisiles balísticos (ABM, en inglés) alcanzado en 1972 por Nixon y Brezhnev. Batalló con éxito contra el acuerdo entre Clinton y los norcoreanos, y ha sido puntal de la retirada de Estados Unidos del acuerdo nuclear con Irán de 2015 firmado por Obama. Últimamente se ha cargado el acuerdo sobre fuerzas nucleares intermedias (tácticas) INF firmado por Reagan y Gorbachov, lo que incrementa el riesgo de una guerra nuclear en Europa, y ayudado por su colega Mike Pompeo apunta claramente contra el acuerdo sobre armas nucleares estratégicas (START) que debería ser renovado con Rusia en 2021. Bolton es el tipo que el pasado abril proclamó en Florida, “para que todos lo oigan”, que “la doctrina Monroe está viva y en forma”. Corrigiendo así la afirmación de 2013 del presidente Obama ante la Organización de Estados Americanos de que “la era de la doctrina Monroe ha pasado”. Pues bien, este personaje junto con Pompeo es quien está pilotando lo que la web israelí Maariv Online anuncia como “asalto táctico” contra Irán, es decir una guerra.
Este asalto ya tuvo su ruptura diplomática con la retirada unilateral del acuerdo nuclear de 2015 que estaba bien encarrilado, según la ONU y todos los demás firmantes, y está lanzando estos días los habituales pretextos de guerra en forma de sabotajes en puertos del Golfo Pérsico (14 de mayo) y extraños ataques a petroleros como el del 13 de junio, que coincidieron con la visita del primer ministro japonés Shinzo Abe a Teherán, de la misma forma en que aquel atentado químico de Siria coincidió con la llegada a Damasco de una delegación de la ONU para supervisar la destrucción del arsenal químico de Bashar el-Assad. Todo con un gran perfume a incidente del Golfo de Tonkín.
Según Nathalie Tocci , la consejera jefa de la desvalida representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Federica Mogherini, el pilotaje de Bolton de la extrema presión ejercida sobre Irán indica que Trump no controla la situación. “Quizás debería cambiar a su consejero de seguridad nacional”, que le empuja hacia un insensato cambio de régimen en Irán que se sume a los desastres de la guerra interminable iniciada por Washington tras el 11-S y que en 18 años ha producido varios millones de muertos, de refugiados y un sinfín de problemas.
Que los militares toreen a los presidentes en Estados Unidos es algo que ya vimos en Siria, cuando bombardearon instalaciones rusas para reventar acuerdos de cooperación militar alcanzados por John Kerry con Moscú, tal como explicó el propio secretario de Estado al abandonar el cargo. Si sucedió con Obama, ¿por qué no con Trump?
La denuncia de Bolton de que Irán ha incrementado su presión militar en Irak y Siria, ha sido desmentida por el jefe militar británico en Irak, Chris Ghika: “no ha habido un aumento en la amenaza proveniente de las fuerzas apoyadas por Irán en Siria e Irak”, dijo para desesperación de los americanos. Paralelamente, 76 generales y embajadores retirados publicaron una carta a Trump en la que se dice que, “la guerra con Irán ya sea consciente o por error de cálculo, tendrá repercusiones dramáticas en un Oriente Medio ya desestabilizado y arrastrará a Estados Unidos a otro conflicto armado con un inmenso coste financiero, humano y geopolítico”.
Sea como sea, la voluntad de los halcones de la Casa Blanca por cambiar el régimen en Irán, no es una línea del gusto de muchos jefes militares de Estados Unidos, que, cómo los generales y embajadores retirados, auguran más caos como resultado. Su argumento es que los verdaderos adversarios no son países como Irán, cuya capacidad militar es escasa, sino Rusia y China, países que aprovecharon el caos de estos 18 años para modernizar sus fuerzas, con miras a “erosionar de forma significativa la ventaja americana en tecnología moderna”, en palabras del entonces Secretario de Defensa, Jim Mattis, partidario de reorientar el esfuerzo hacia la competición entre grandes potencias en lugar de concentrarse en el llamado “terrorismo”.
Según el analista Michael T. Klare, actualmente hay en Estados Unidos dos proyectos de guerra, el de Bolton y el de la Marina y los 750.000 millones de dólares del presupuesto previsto para el año que viene están comprometidos con el segundo proyecto. El Pentágono se inclina más hacia la doctrina enunciada en marzo por el actual secretario de defensa interino Patrick Shanahan. “Disuadir o derrotar la agresión de una gran potencia es un desafío fundamentalmente diferente que los conflictos regionales implicando a estados gamberros y organizaciones extremistas violentas que hemos afrontado en los últimos 25 años”, dice Shanahan. De todo esto, Klare, deduce que habrá fuertes reticencias del Pentágono a la “guerra de Bolton”, por considerar que distrae el esfuerzo del principal escenario: un pulso en el Mar de China Meridional, donde las tensiones ya revisten carácter semanal, el proyecto de la Marina.
El objetivo militar chino es convencer a los militares americanos que en un conflicto regional y limitado allá, las fuerzas aeronavales de Estados Unidos saldrían perdiendo y que por tanto es preferible no intentarlo. El de los americanos es destruir la capacidad china en los sistemas de armas conocidos como A2/AD (Anti Access/Area Denial), la versión moderna de una muralla china de misiles y recursos electrónicos y espaciales para cegar al adversario, hundir sus barcos, derribar sus aviones e impedir su agresión.
Quizá sea esta división de opiniones y proyectos dentro del establishment de la desgraciada guerra eterna de Estados Unidos, el único dato positivo de esta dramática hora cuando los tambores de guerra redoblan alrededor de Irán.
Publicado en Ctxt
Fuente:
https://rafaelpoch.com/2019/06/19/la-guerra-de-bolton/#more-305
Blog personal
El demente belicista que dirige el Consejo de Seguridad Nacional en Washington siempre ha batallado por cargarse todos los acuerdos importantes de nuestro nuclearizado mundo
¿Se acuerdan de Sheldon Adelson? El multimillonario de los casinos y padrino de Netanyahu quería abrir en 2012 el “Eurovegas” en Barcelona. Tras la explosión de la burbuja inmobiliaria, Artur Mas se entrevistó con él en la ciudad condal en un intento de apuntalar la economía política convergente posterior al 3% y con ella lo que llamaba el “eje Massachusetts-Barcelona-Tel Aviv”. Aquella genial jugada queda para la patética historia del “procés”, pero de lo que hoy se trata es de algo serio: de los “Altos de Trump”.
El Informed Comment de Juan Cole dice que Adelson, quinta fortuna de Estados Unidos, fue quien presionó a Donald Trump para colocar en un alto cargo al criminal demente John Bolton. Se trata de empujar a Estados Unidos a una guerra con Irán que cubra el flanco oriental de la expansión israelí proclamada por Netanyahu: anexionarse Cisjordania. “Irán es el único país que continua oponiéndose activamente a la lenta limpieza étnica de los territorios palestinos ocupados, y Adelson y su cachorro Netanyahu buscaban un gran matón para romperle las piernas a Irán”, dice el portal de Cole. Ese matón es Trump, y Netanyahu ya le ha honrado estos días bautizando como “Ramat Trump” (Altos de Trump) uno de los 33 asentamientos judíos de los altos del Golán arrebatados a Siria en 1967, oficialmente anexionados por Israel en 1981 y que Trump reconoció como israelíes, contra todo derecho internacional, el pasado 25 de mayo.
Decir que Bolton es un criminal demente no es un capricho retórico. El hombre que el millonario Adelson colocó al frente del Consejo de Seguridad Nacional, es un loco belicista empeñado en cargarse todos los acuerdos de nuestro mundo nuclear. Comenzó con el acuerdo antimisiles balísticos (ABM, en inglés) alcanzado en 1972 por Nixon y Brezhnev. Batalló con éxito contra el acuerdo entre Clinton y los norcoreanos, y ha sido puntal de la retirada de Estados Unidos del acuerdo nuclear con Irán de 2015 firmado por Obama. Últimamente se ha cargado el acuerdo sobre fuerzas nucleares intermedias (tácticas) INF firmado por Reagan y Gorbachov, lo que incrementa el riesgo de una guerra nuclear en Europa, y ayudado por su colega Mike Pompeo apunta claramente contra el acuerdo sobre armas nucleares estratégicas (START) que debería ser renovado con Rusia en 2021. Bolton es el tipo que el pasado abril proclamó en Florida, “para que todos lo oigan”, que “la doctrina Monroe está viva y en forma”. Corrigiendo así la afirmación de 2013 del presidente Obama ante la Organización de Estados Americanos de que “la era de la doctrina Monroe ha pasado”. Pues bien, este personaje junto con Pompeo es quien está pilotando lo que la web israelí Maariv Online anuncia como “asalto táctico” contra Irán, es decir una guerra.
Este asalto ya tuvo su ruptura diplomática con la retirada unilateral del acuerdo nuclear de 2015 que estaba bien encarrilado, según la ONU y todos los demás firmantes, y está lanzando estos días los habituales pretextos de guerra en forma de sabotajes en puertos del Golfo Pérsico (14 de mayo) y extraños ataques a petroleros como el del 13 de junio, que coincidieron con la visita del primer ministro japonés Shinzo Abe a Teherán, de la misma forma en que aquel atentado químico de Siria coincidió con la llegada a Damasco de una delegación de la ONU para supervisar la destrucción del arsenal químico de Bashar el-Assad. Todo con un gran perfume a incidente del Golfo de Tonkín.
Según Nathalie Tocci , la consejera jefa de la desvalida representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Federica Mogherini, el pilotaje de Bolton de la extrema presión ejercida sobre Irán indica que Trump no controla la situación. “Quizás debería cambiar a su consejero de seguridad nacional”, que le empuja hacia un insensato cambio de régimen en Irán que se sume a los desastres de la guerra interminable iniciada por Washington tras el 11-S y que en 18 años ha producido varios millones de muertos, de refugiados y un sinfín de problemas.
Que los militares toreen a los presidentes en Estados Unidos es algo que ya vimos en Siria, cuando bombardearon instalaciones rusas para reventar acuerdos de cooperación militar alcanzados por John Kerry con Moscú, tal como explicó el propio secretario de Estado al abandonar el cargo. Si sucedió con Obama, ¿por qué no con Trump?
La denuncia de Bolton de que Irán ha incrementado su presión militar en Irak y Siria, ha sido desmentida por el jefe militar británico en Irak, Chris Ghika: “no ha habido un aumento en la amenaza proveniente de las fuerzas apoyadas por Irán en Siria e Irak”, dijo para desesperación de los americanos. Paralelamente, 76 generales y embajadores retirados publicaron una carta a Trump en la que se dice que, “la guerra con Irán ya sea consciente o por error de cálculo, tendrá repercusiones dramáticas en un Oriente Medio ya desestabilizado y arrastrará a Estados Unidos a otro conflicto armado con un inmenso coste financiero, humano y geopolítico”.
Sea como sea, la voluntad de los halcones de la Casa Blanca por cambiar el régimen en Irán, no es una línea del gusto de muchos jefes militares de Estados Unidos, que, cómo los generales y embajadores retirados, auguran más caos como resultado. Su argumento es que los verdaderos adversarios no son países como Irán, cuya capacidad militar es escasa, sino Rusia y China, países que aprovecharon el caos de estos 18 años para modernizar sus fuerzas, con miras a “erosionar de forma significativa la ventaja americana en tecnología moderna”, en palabras del entonces Secretario de Defensa, Jim Mattis, partidario de reorientar el esfuerzo hacia la competición entre grandes potencias en lugar de concentrarse en el llamado “terrorismo”.
Según el analista Michael T. Klare, actualmente hay en Estados Unidos dos proyectos de guerra, el de Bolton y el de la Marina y los 750.000 millones de dólares del presupuesto previsto para el año que viene están comprometidos con el segundo proyecto. El Pentágono se inclina más hacia la doctrina enunciada en marzo por el actual secretario de defensa interino Patrick Shanahan. “Disuadir o derrotar la agresión de una gran potencia es un desafío fundamentalmente diferente que los conflictos regionales implicando a estados gamberros y organizaciones extremistas violentas que hemos afrontado en los últimos 25 años”, dice Shanahan. De todo esto, Klare, deduce que habrá fuertes reticencias del Pentágono a la “guerra de Bolton”, por considerar que distrae el esfuerzo del principal escenario: un pulso en el Mar de China Meridional, donde las tensiones ya revisten carácter semanal, el proyecto de la Marina.
El objetivo militar chino es convencer a los militares americanos que en un conflicto regional y limitado allá, las fuerzas aeronavales de Estados Unidos saldrían perdiendo y que por tanto es preferible no intentarlo. El de los americanos es destruir la capacidad china en los sistemas de armas conocidos como A2/AD (Anti Access/Area Denial), la versión moderna de una muralla china de misiles y recursos electrónicos y espaciales para cegar al adversario, hundir sus barcos, derribar sus aviones e impedir su agresión.
Quizá sea esta división de opiniones y proyectos dentro del establishment de la desgraciada guerra eterna de Estados Unidos, el único dato positivo de esta dramática hora cuando los tambores de guerra redoblan alrededor de Irán.
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Fuente:
https://rafaelpoch.com/2019/06/19/la-guerra-de-bolton/#more-305
jueves, 20 de junio de 2019
Breve historia del precursor de la independencia de Haití Toussaint Louverture, la dignidad insurrecta (II)
Salim Lamrani
Rebelión
SEGUNDA PARTE
1. La unificación de la isla y la instauración del poder
La parte española de la isla había pasado a ser francesa el 22 de julio de 1795 con la firma del Tratado de Bale. Pero la República, que consagraba todos sus esfuerzos al advenimiento de la Revolución y a los sobresaltos procedentes de la traición termidoriana y del asesinato de Robespierre, no había tomado todavía posesión del territorio. Ése se encontraba aún bajo el control de un gobernador español. El 26 de enero de 1801, Toussaint Louverture decidió proceder a la unificación territorial y, mediante sus esfuerzos, logró instaurar la paz civil en la isla. Se incitó a los colonos que habían huido tras la Revolución Louverturista a que regresaran para brindar su concurso al desarrollo de la isla. [1]
La Asamblea Central de Santo Domingo, bajo la autoridad de Toussaint Louverture, adoptó una constitución el 2 de julio de 1801 que ofrecía una importante autonomía a la isla, emancipándola de la tutela de Francia pero sin romper definitivamente el lazo con la potencia colonial. Se basaba en el artículo de la Constitución francesa de 1799 que estipulaba que “el régimen de las colonias francesas se determina[ba] mediante leyes especiales”. El líder revolucionario fue nombrado gobernador vitalicio de Santo Domingo. [2]
La Constitución de 1801 era obra de progreso. El artículo 3 ponía fin a la esclavitud: “No puede haber esclavos en este territorio, se abole la servidumbre para siempre. Todos los hombres nacen, viven y mueren libres y franceses”. Santo Domingo se convirtió así en el primer territorio del Nuevo Mundo en abolir la esclavitud. El Artículo 4 proclamaba la eliminación de los obstáculos erigidos por el sistema segregacionista en el mercado laboral: “Todo hombre, cual fuere su color, es admisible para todos los empleos”. Finalmente, el artículo 5 consagraba la igualdad entre todos los habitantes de la isla: “No hay otra distinción que la de las virtudes y talentos ni otra superioridad que la que la ley otorga en el ejercicio de un cargo público. La ley es igual para todos, sea cuando castigue, sea cuando proteja”. La Asamblea Central, si no tenía la iniciativa legislativa, disponía del poder de adoptar o rechazar las propuestas de ley formuladas por el gobernador. Las decisiones de los tribunales eran soberanas y no dependían del poder ejecutivo, el cual no podía dictar ninguna amnistía. Se proclamaba el Estado de derecho con la prohibición de todo arresto no motivado por la ley y no realizado por un funcionario jurado (artículo 64). [3]
Toussaint Louverture, fiel a la República Francesa, sometió la Constitución a Napoleón Bonaparte, el cual se encontraba en el poder desde el golpe de Estado del 18 Brumaire (9 de noviembre de 1799). Mientras tanto, pregonó la reconciliación entre todas las categorías étnicas, llamó a la concordia a todos los habitantes de la isla para edificar un futuro próspero para Santo Domingo. Cuando el gobernador se enteró de que su sobrino adoptivo, el general de división Moïse, se comportaba como un déspota y oprimía a la población blanca y mestiza, poniendo el peligro el precario equilibrio de la nueva sociedad, lo mandó fusilar. [4]
El Espartaco Negro, tal era su apodo conquistado durante la lucha por la libertad, se dedicó a la construcción de la isla y al desarrollo de su economía, para permitir que sus habitantes accedieran a una existencia digna. Se puso el énfasis en la agricultura y la edificación de infraestructuras. Florecieron escuelas en todo el territorio para permitir la emancipación de los habitantes mediante la educación. Hubo poco espacio para las protestas y el descontento y se implementaron las medidas con mano firme. Los excesos se sancionaron con autoridad, a veces de modo cruel y exagerado, particularmente en el campo. El propio Napoleón reconoció la calidad “del orden de trabajo establecido por Toussaint, que ya estaba coronado de éxito”. [5]
2. La expedición de Bonaparte contra Santo Domingo
Napoleón Bonaparte, mediante su golpe de Estado del 18 Brumaine, aniquiló la República y cavó el sepulcro de los valores de la Revolución Francesa. La guerra contra Gran Bretaña, que se había reanudado en 1798 cuando las monarquías europeas unidas atacaron a Francia, finalizó con la firma del Tratado de Amiens en octubre de 1801. Rodeado de una casta de pudientes nostálgica de la época colonial, el cónsul Bonaparte decidió mandar a su cuñado, el general Victor-Emmanuel Leclerc, a la cabeza de imponentes tropas, para aplastar la Revolución de Santo Domingo. En un acto de negación de los ideales revolucionarios, cimentados en la primera máxima de la República que afirmaba que “los hombres nacen y permanecen libres e iguales en derecho”, el Primer Cónsul decidió restablecer la esclavitud para 500.000 habitantes. Thomas Jefferson, Presidente de Estados Unidos, apoyó con entusiasmo la iniciativa: “Nada sería más fácil para nosotros que suministrar a su ejército y su flota con todo lo que necesitase y reducir así a Toussaint al hambre”. [6] En una misiva a Talleyrant, su Ministro de Relaciones Exteriores, con fecha del 13 de noviembre de 1801, Bonaparte le hizo partícipe de su decisión de “destruir en Santo Domingo al gobierno de los negros”. [7] Una expedición de 23.000 hombres aguerridos por las guerras napoleónicas abandonó Francia el 14 de diciembre de 1801 para apoderarse de la isla y eliminar a Toussaint Louverture.
En un correo enviado a Toussaint Louverture, Napoleón le informó de su intención de retomar el control de la isla, recordándole las fuerzas en presencia: “Le enviamos al ciudadano Leclerc, nuestro cuñado, en calidad de Capitán General, como primer magistrado de la colonia. Está acompañado de fuerzas suficientes para hacer respetar la soberanía del pueblo francés”. [8] La respuesta del gobernador de Santo Domingo fue cortés. El representante de Francia sería recibido con “el respeto de la piedad filial”. Pero le recordó que la libertad conquistada mediante la lucha sería defendida con la misma pugnacidad: “Soy un soldado, no temo a los hombres, sólo temo a Dios; si hay que morir, moriré como un soldado de honor que no tiene nada que reprocharse”. [9]
El 5 de febrero de 1802, el general Leclerc desembarcó en Cap cual conquistador y exigió del comandante de la ciudad, Henri Christophe, una rendición lisa y llana y en caso contrario “la ira de la República lo devorará como el fuego devora sus cañas secas”. [10] Lejos de intimidar al oficial de Toussaint Louverture, ése le transmitió el siguiente mensaje al invasor: “Entonces piensan que somos esclavos; dígale al general Leclerc que los europeos caminarán aquí sólo sobre un montón de cenizas, y que les quemará la tierra”. Anunció entonces el desencadenamiento de una operación de resistencia: “Las proclamas que usted trae respiran el despotismo y la tiranía. Voy a pedirles a mis soldados que presten juramento de apoyar la libertad arriesgando su vida”. [11]
Cuando recibió la misiva del general Christophe, el expedicionario Leclerc lanzó un ultimátum al oficial negro: “Le advierto de que si hoy no me entrega los fuertes Poclet y Bel-Air y todas las baterías de la costa, mañana al amanecer, desembarcarán quince mil hombres”. [12] El oficial haitiano no se dejó impresionar y reiteró su fidelidad “al gobernador general Toussaint Louverture, mi jefe inmediato, de quien tengo los poderes de los cuales me visto”. Le informó de que sólo recibía órdenes de su gobernador:
Hasta que reciba su respuesta, no le puedo permitir que desembarque. Si dispone de la fuerza con la cual me amenaza, le prestaré toda la resistencia que caracteriza a un general; y si la suerte de las armas le es favorable, sólo entrará en la ciudad del Cap cuando esté reducida a cenizas, y aún sobre esas cenizas lo seguiré combatiendo… [13]
Al día siguiente, el general Leclerc bombardeó la ciudad, matando a mujeres y niños. El general Christophe procedió entonces a la evacuación y, fiel a su promesa, redujo la localidad en cenizas. Cuando Toussaint Louverture se enteró de que el general bonapartista Rochambeau masacró a los soldados de Fort-Liberté el 4 de febrero, le mandó una misiva que contenía un juramento: “Combatiré hasta la muerte para vengar […] a esos bravos soldados”. [14] El libertador lanzó un llamado a la resistencia a todos sus hombres y los exhortó a luchar hasta las últimas consecuencias.
Bonaparte decidió mandar a los dos hijos de Toussaint Louverture, Placide e Isaac, que estudiaban en Francia desde 1796, acompañados de su preceptor Coisnon, entonces director del Liceo Colonial, para transmitir un correo personal a su padre. Cuando Coisnon le informó de las intenciones favorables del Primer Cónsul hacia él, el líder negro expresó su sorpresa:
Si las intenciones del gobierno fuesen pacíficas y buenas hacia mí y hacia quienes contribuyeron a la felicidad de la cual gozaba la colonia, el general Leclerc entonces no siguió ni ejecutó las órdenes que recibió, ya que desembarcó en la isla como un enemigo […]. Según la conducta de este general, yo no podía tener ninguna confianza en él [15]
El general Leclerc sembró “en su camino estrago, muerte y desolación”, mientras que había prometido en su proclama “traer la paz y la felicidad”. [16] Los generales Rochambeau, Kerverseau y Desfourneaux se comportaron como “los tiranos más encarnizados de la libertad de los negros y de los hombres de color”. Rochambeau se convirtió incluso en “el destructor de los hombres de color y de los negros”. [17]
En un correo enviado a Bonaparte en febrero de 1802, Toussaint Louverture expresó su indignación. Asentó primero su autoridad recordándole que el nombramiento de Leclerc como capitán general no era “reconocido por la Constitución de Santo Domingo”. Las fuerzas enviadas “ propaga[ba]n por todas partes la matanza y la devastación”. “¿Con qué derecho quieren exterminar, a sangre y fuego, a un pueblo ordinario pero inocente?” preguntó. ¿Acaso se trataba de la aspiración a la independencia? “¿Por qué no? Los Estados Unidos de América hicieron como nosotros y con la asistencia del gobierno francés lograron consolidar su libertad”. ¿Acaso se trataba de su autoridad? “El cargo elevado que ocupo no es mi decisión, imperiosas circunstancias me han ubicado allí contra mi voluntad”. Recordó luego las realidades de la isla:
Vivo en esta desgraciada isla víctima del furor de los facciosos. Mi fama, mi color, me dieron cierta influencia sobre el pueblo que vive aquí y fui, casi con voz unánime, llamado a la autoridad. Ahogué la sedición, apacigüé la revuelta, restablecí la tranquilidad, hice suceder el buen orden a la anarquía y finalmente di al pueblo la paz y una constitución. Ciudadano Cónsul, ¿acaso sus pretensiones están fundadas en títulos más legítimos? Si el pueblo no goza aquí de toda la libertad que encontramos bajo otros gobiernos, hay que buscar las causas en su manera de vivir, en su ignorancia y en la barbarie inseparable de la esclavitud. El gobierno que establecí era el único que podía convenir a estos desgraciados apenas emancipados del yugo opresor: deja, en varios lugares, espacio para el despotismo, no lo podríamos negar; pero la Constitución de Francia, esta parte más ilustrada de Europa, ¿acaso está totalmente exenta de estos inconvenientes? Si treinta millones de franceses encuentran, como lo escucho decir, su felicidad y su seguridad en la Revolución del 18 Brumaime, no se me debería envidiar el amor y la confianza de los pobres negros, mis compatriotas. La posteridad decidirá si fuimos obedecidos por afecto, apatía o temor. [18]
Lejos de presentarse como un subordinado, Toussaint Louverture impuso una relación de igual a igual al Primer Cónsul, rechazó sus intentos de corrupción y asumió su conducta y sus actos como líder de Santo Domingo:
Usted me pregunta si deseo consideración, honores, riquezas. Sí, quizá. Pero no quiero conseguirlos por medio de usted. Mi consideración depende del respeto de mis compatriotas, mis honores de su afecto, mi fortuna de su fidelidad. ¿Acaso me hablan de mi engrandecimiento personal con la esperanza de llevarme a traicionar la causa que he abrazado? Usted debería aprender a juzgar a los demás a través de usted mismo. Si el monarca, que sabe que tiene derechos sobre el trono en el cual usted está sentado, le ordenara que usted lo abandonase, ¿qué respondería? El poder que poseo fue tan legítimamente conquistado como el suyo y sólo la voz unánime del pueblo de Santo Domingo puede forzarme a abandonarlo. No está cimentado en la sangre. Los hombres crueles cuyas persecuciones detuve han reconocido mi clemencia. Si he alejado de esta isla a algunos espíritus turbulentos que pretendían mantener el fuego de la guerra civil su crimen fue primero constatado por un tribunal competente y finalmente confesado por ellos mismos. [19]
Tras intentar sobornar en vano a los oficiales bajo las órdenes de Toussaint Louverture, frente a la resistencia del pueblo de Santo Domingo, el general Leclerc decidió finalmente mandar a un mediador. El Patriota expresó su circunspección:
El general sólo me anunció su misión desembarcando por todas partes con mano armada. Tomó por asalto el Fuerte Dauphin y bombardeó Saint-Marc. No debo olvidar que llevo una espada. ¿Por qué motivo se me declara una guerra tan injusta como impolítica? ¿Acaso porque liberé a mi país de la plaga del extranjero? ¿Acaso porque he establecido el orden y la justicia? Si el general Leclerc desea francamente la paz, que pare la marcha de sus tropas. [20]
Luego, enfatizando sus “más grandes sospechas sobre la pureza de las intenciones” del general Leclerc, agregó: “¿Cómo fiarse de un hombre que trajo consigo a un ejército numeroso y barcos desembarcando tropas sobre todos los puntos de la colonia sin prevenir al primer jefe de la isla?”. [21]
En efecto, Napoleón Bonaparte había reconocido a Toussaint Louverture como el único Libertador de Santo Domingo:
Nos complace reconocer y proclamar los servicios rendidos al pueblo francés. Si su bandera ondula sobre Santo Domingo, se lo debe a usted y a los valientes negros. Llamado por sus talentos y la fuerza de las circunstancias al primer mando, usted destruyó la guerra civil, puso freno a las persecuciones de algunos hombres fanáticos… Las circunstancias en las que usted se encontró, rodeado por todas partes de enemigos, sin que la Metrópoli pudiera socorrerlo o alimentarlo, habían hecho legítimos los artículos de su constitución que ya podrían no serlo más; pero hoy será usted el primero en rendir homenaje a la soberanía de la nación que lo cuenta a usted entre sus más ilustres ciudadanos, por los servicios que usted rindió y por los talentos y la fuerza de carácter de los cuales lo dotó la naturaleza. [22]
Si en el correo oficial la expresión de gratitud por los servicios rendidos a la República era notable, en la realidad, Bonaparte, en vez de tratar a Toussaint Louverture con la estima debida a sus méritos, mandó a 23.000 de sus mejores soldados para encadenarlo y retomar posesión de la isla.
Frente a la invasión francesa, Toussaint Louverture encendió las alarmas y exhortó al pueblo negro a resistir al opresor. Desplegó todos sus talentos y multiplicó los esfuerzos para contrarrestar los ataques de las tropas napoleónicas. Desencadenó una guerra de guerrilla contra el opresor colonial, aplicando la política de la tierra quemada. Sus hombres, galvanizados por el ejemplo de abnegación dado por el líder, opusieron una feroz resistencia. [23]
Notas:
[1] Conjonction, Bulletin de l’Institut français d’Haïti, número 211, p. 28.
[2] Conseil Constitutionnel, Constitution du 22 Frimaire An VIII. https://www.conseil-constitutionnel.fr/les-constitutions-dans-l-histoire/constitution-du-22-frimaire-an-viii (sitio consultado el 4 de mayo de 2019).
[3] République d’Haïti, Constitution du 3 juillet 1801, Université de Perpignan. http://mjp.univ-perp.fr/constit/ht1801.htm (sitio consultado el 4 de mayo de 2019).
[4] Charles Malo, Histoire d’Haïti (île de Saint-Domingue) depuis sa découverte jusqu’en 1824, Paris, Louis Janet & Ponthieu, 1825, p. 461.
[5] Napoléon Bonaparte, Mémoires de Napoléon, Paris, Bibliothèque historique et militaire, 1842, Tomo sexto, p. 326.
[6] Dumas Malone, Jefferson, the President, First terme 1801-1805, Little, Brown, 1970, p. 252.
[7] Napoléon Bonaparte, Correspondance de Napoléon 1er, “Au Citoyen Talleyrand”, 13 de noviembre de 1801, n°5863, Tomo séptimo, París, Plon/Dumaine, 1861, p. 320.
[8] Napoléon Bonaparte, « Courrier au Général Toussaint Louverture », 18 de noviembre de 1801, Société de l’Histoire des colonies françaises, Lettres du Général Leclerc, Commandant en Chef de l’Armée de Saint-Domingue en 1802, París, 1937, p. 307. https://www.persee.fr/doc/sfhom_1961-8166_1937_edc_6_1 (sitio consultado el 4 de mayo de 2019).
[9] Beaubrun Ardouin, Etudes sur l’histoire d’Haïti, Paris, Dezobry & Magdelaine lib. Editeurs, 1853, Tomo cuarto, p. 476.
[10] Toussaint Louverture, Mémoires du Général Toussaint Louverture, op.cit., p. 40.
[11] Ibid.
[12] Thomas Madiou, Histoire d’Haïti, Tome II, 1799-1803, Port-au-Prince, Editions Henri Deschamps, 1989, p. 171.
[13] Toussaint Louverture, Mémoires du Général Toussaint Louverture, op. cit., p 41.
[14] Ibid. , p. 46.
[15] Ibid. , p. 51
[16] Ibid. , p. 110, 112.
[17] Ibid., p. 113
[18] Débarquement de la flotte française à Saint-Domingue , París, Tiger, sin fecha, p. 25-29.
[19] Ibid.
[20] Toussaint Louverture, Mémoires du Général Toussaint Louverture, op. cit., p. 113.
[21] Ibid.
[22] Napoléon Ier, Correspondance de Napoléon Ier, París, Henri Plon & J. Dumaine, 1866, Tomo séptimo, p. 322.
[23] Antoine Marie Thérèse Métral & Isaac Toussaint Louverture, Histoire de l’expédition des Français à Saint-Domingue, París, Fanjat Ainé Libraire-Editeur & Antoine Augustin Renouard, 1825, p. 243-51.
Doctor en Estudios Ibéricos y Latinoamericanos de la Universidad Paris Sorbonne-Paris IV, Salim Lamrani es profesor titular de la Universidad de La Reunión, especialista de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos. Su último libro se titula Cuba, ¡palabra a la defensa!, Hondarribia, Editorial Hiru, 2016. http://www.tiendaeditorialhiru.com/informe/336-cuba-palabra-a-la-defensa.html Facebook: https://www.facebook.com/SalimLamraniOfficiel
Fuente original:
Rebelión
SEGUNDA PARTE
1. La unificación de la isla y la instauración del poder
La parte española de la isla había pasado a ser francesa el 22 de julio de 1795 con la firma del Tratado de Bale. Pero la República, que consagraba todos sus esfuerzos al advenimiento de la Revolución y a los sobresaltos procedentes de la traición termidoriana y del asesinato de Robespierre, no había tomado todavía posesión del territorio. Ése se encontraba aún bajo el control de un gobernador español. El 26 de enero de 1801, Toussaint Louverture decidió proceder a la unificación territorial y, mediante sus esfuerzos, logró instaurar la paz civil en la isla. Se incitó a los colonos que habían huido tras la Revolución Louverturista a que regresaran para brindar su concurso al desarrollo de la isla. [1]
La Asamblea Central de Santo Domingo, bajo la autoridad de Toussaint Louverture, adoptó una constitución el 2 de julio de 1801 que ofrecía una importante autonomía a la isla, emancipándola de la tutela de Francia pero sin romper definitivamente el lazo con la potencia colonial. Se basaba en el artículo de la Constitución francesa de 1799 que estipulaba que “el régimen de las colonias francesas se determina[ba] mediante leyes especiales”. El líder revolucionario fue nombrado gobernador vitalicio de Santo Domingo. [2]
La Constitución de 1801 era obra de progreso. El artículo 3 ponía fin a la esclavitud: “No puede haber esclavos en este territorio, se abole la servidumbre para siempre. Todos los hombres nacen, viven y mueren libres y franceses”. Santo Domingo se convirtió así en el primer territorio del Nuevo Mundo en abolir la esclavitud. El Artículo 4 proclamaba la eliminación de los obstáculos erigidos por el sistema segregacionista en el mercado laboral: “Todo hombre, cual fuere su color, es admisible para todos los empleos”. Finalmente, el artículo 5 consagraba la igualdad entre todos los habitantes de la isla: “No hay otra distinción que la de las virtudes y talentos ni otra superioridad que la que la ley otorga en el ejercicio de un cargo público. La ley es igual para todos, sea cuando castigue, sea cuando proteja”. La Asamblea Central, si no tenía la iniciativa legislativa, disponía del poder de adoptar o rechazar las propuestas de ley formuladas por el gobernador. Las decisiones de los tribunales eran soberanas y no dependían del poder ejecutivo, el cual no podía dictar ninguna amnistía. Se proclamaba el Estado de derecho con la prohibición de todo arresto no motivado por la ley y no realizado por un funcionario jurado (artículo 64). [3]
Toussaint Louverture, fiel a la República Francesa, sometió la Constitución a Napoleón Bonaparte, el cual se encontraba en el poder desde el golpe de Estado del 18 Brumaire (9 de noviembre de 1799). Mientras tanto, pregonó la reconciliación entre todas las categorías étnicas, llamó a la concordia a todos los habitantes de la isla para edificar un futuro próspero para Santo Domingo. Cuando el gobernador se enteró de que su sobrino adoptivo, el general de división Moïse, se comportaba como un déspota y oprimía a la población blanca y mestiza, poniendo el peligro el precario equilibrio de la nueva sociedad, lo mandó fusilar. [4]
El Espartaco Negro, tal era su apodo conquistado durante la lucha por la libertad, se dedicó a la construcción de la isla y al desarrollo de su economía, para permitir que sus habitantes accedieran a una existencia digna. Se puso el énfasis en la agricultura y la edificación de infraestructuras. Florecieron escuelas en todo el territorio para permitir la emancipación de los habitantes mediante la educación. Hubo poco espacio para las protestas y el descontento y se implementaron las medidas con mano firme. Los excesos se sancionaron con autoridad, a veces de modo cruel y exagerado, particularmente en el campo. El propio Napoleón reconoció la calidad “del orden de trabajo establecido por Toussaint, que ya estaba coronado de éxito”. [5]
2. La expedición de Bonaparte contra Santo Domingo
Napoleón Bonaparte, mediante su golpe de Estado del 18 Brumaine, aniquiló la República y cavó el sepulcro de los valores de la Revolución Francesa. La guerra contra Gran Bretaña, que se había reanudado en 1798 cuando las monarquías europeas unidas atacaron a Francia, finalizó con la firma del Tratado de Amiens en octubre de 1801. Rodeado de una casta de pudientes nostálgica de la época colonial, el cónsul Bonaparte decidió mandar a su cuñado, el general Victor-Emmanuel Leclerc, a la cabeza de imponentes tropas, para aplastar la Revolución de Santo Domingo. En un acto de negación de los ideales revolucionarios, cimentados en la primera máxima de la República que afirmaba que “los hombres nacen y permanecen libres e iguales en derecho”, el Primer Cónsul decidió restablecer la esclavitud para 500.000 habitantes. Thomas Jefferson, Presidente de Estados Unidos, apoyó con entusiasmo la iniciativa: “Nada sería más fácil para nosotros que suministrar a su ejército y su flota con todo lo que necesitase y reducir así a Toussaint al hambre”. [6] En una misiva a Talleyrant, su Ministro de Relaciones Exteriores, con fecha del 13 de noviembre de 1801, Bonaparte le hizo partícipe de su decisión de “destruir en Santo Domingo al gobierno de los negros”. [7] Una expedición de 23.000 hombres aguerridos por las guerras napoleónicas abandonó Francia el 14 de diciembre de 1801 para apoderarse de la isla y eliminar a Toussaint Louverture.
En un correo enviado a Toussaint Louverture, Napoleón le informó de su intención de retomar el control de la isla, recordándole las fuerzas en presencia: “Le enviamos al ciudadano Leclerc, nuestro cuñado, en calidad de Capitán General, como primer magistrado de la colonia. Está acompañado de fuerzas suficientes para hacer respetar la soberanía del pueblo francés”. [8] La respuesta del gobernador de Santo Domingo fue cortés. El representante de Francia sería recibido con “el respeto de la piedad filial”. Pero le recordó que la libertad conquistada mediante la lucha sería defendida con la misma pugnacidad: “Soy un soldado, no temo a los hombres, sólo temo a Dios; si hay que morir, moriré como un soldado de honor que no tiene nada que reprocharse”. [9]
El 5 de febrero de 1802, el general Leclerc desembarcó en Cap cual conquistador y exigió del comandante de la ciudad, Henri Christophe, una rendición lisa y llana y en caso contrario “la ira de la República lo devorará como el fuego devora sus cañas secas”. [10] Lejos de intimidar al oficial de Toussaint Louverture, ése le transmitió el siguiente mensaje al invasor: “Entonces piensan que somos esclavos; dígale al general Leclerc que los europeos caminarán aquí sólo sobre un montón de cenizas, y que les quemará la tierra”. Anunció entonces el desencadenamiento de una operación de resistencia: “Las proclamas que usted trae respiran el despotismo y la tiranía. Voy a pedirles a mis soldados que presten juramento de apoyar la libertad arriesgando su vida”. [11]
Cuando recibió la misiva del general Christophe, el expedicionario Leclerc lanzó un ultimátum al oficial negro: “Le advierto de que si hoy no me entrega los fuertes Poclet y Bel-Air y todas las baterías de la costa, mañana al amanecer, desembarcarán quince mil hombres”. [12] El oficial haitiano no se dejó impresionar y reiteró su fidelidad “al gobernador general Toussaint Louverture, mi jefe inmediato, de quien tengo los poderes de los cuales me visto”. Le informó de que sólo recibía órdenes de su gobernador:
Hasta que reciba su respuesta, no le puedo permitir que desembarque. Si dispone de la fuerza con la cual me amenaza, le prestaré toda la resistencia que caracteriza a un general; y si la suerte de las armas le es favorable, sólo entrará en la ciudad del Cap cuando esté reducida a cenizas, y aún sobre esas cenizas lo seguiré combatiendo… [13]
Al día siguiente, el general Leclerc bombardeó la ciudad, matando a mujeres y niños. El general Christophe procedió entonces a la evacuación y, fiel a su promesa, redujo la localidad en cenizas. Cuando Toussaint Louverture se enteró de que el general bonapartista Rochambeau masacró a los soldados de Fort-Liberté el 4 de febrero, le mandó una misiva que contenía un juramento: “Combatiré hasta la muerte para vengar […] a esos bravos soldados”. [14] El libertador lanzó un llamado a la resistencia a todos sus hombres y los exhortó a luchar hasta las últimas consecuencias.
Bonaparte decidió mandar a los dos hijos de Toussaint Louverture, Placide e Isaac, que estudiaban en Francia desde 1796, acompañados de su preceptor Coisnon, entonces director del Liceo Colonial, para transmitir un correo personal a su padre. Cuando Coisnon le informó de las intenciones favorables del Primer Cónsul hacia él, el líder negro expresó su sorpresa:
Si las intenciones del gobierno fuesen pacíficas y buenas hacia mí y hacia quienes contribuyeron a la felicidad de la cual gozaba la colonia, el general Leclerc entonces no siguió ni ejecutó las órdenes que recibió, ya que desembarcó en la isla como un enemigo […]. Según la conducta de este general, yo no podía tener ninguna confianza en él [15]
El general Leclerc sembró “en su camino estrago, muerte y desolación”, mientras que había prometido en su proclama “traer la paz y la felicidad”. [16] Los generales Rochambeau, Kerverseau y Desfourneaux se comportaron como “los tiranos más encarnizados de la libertad de los negros y de los hombres de color”. Rochambeau se convirtió incluso en “el destructor de los hombres de color y de los negros”. [17]
En un correo enviado a Bonaparte en febrero de 1802, Toussaint Louverture expresó su indignación. Asentó primero su autoridad recordándole que el nombramiento de Leclerc como capitán general no era “reconocido por la Constitución de Santo Domingo”. Las fuerzas enviadas “ propaga[ba]n por todas partes la matanza y la devastación”. “¿Con qué derecho quieren exterminar, a sangre y fuego, a un pueblo ordinario pero inocente?” preguntó. ¿Acaso se trataba de la aspiración a la independencia? “¿Por qué no? Los Estados Unidos de América hicieron como nosotros y con la asistencia del gobierno francés lograron consolidar su libertad”. ¿Acaso se trataba de su autoridad? “El cargo elevado que ocupo no es mi decisión, imperiosas circunstancias me han ubicado allí contra mi voluntad”. Recordó luego las realidades de la isla:
Vivo en esta desgraciada isla víctima del furor de los facciosos. Mi fama, mi color, me dieron cierta influencia sobre el pueblo que vive aquí y fui, casi con voz unánime, llamado a la autoridad. Ahogué la sedición, apacigüé la revuelta, restablecí la tranquilidad, hice suceder el buen orden a la anarquía y finalmente di al pueblo la paz y una constitución. Ciudadano Cónsul, ¿acaso sus pretensiones están fundadas en títulos más legítimos? Si el pueblo no goza aquí de toda la libertad que encontramos bajo otros gobiernos, hay que buscar las causas en su manera de vivir, en su ignorancia y en la barbarie inseparable de la esclavitud. El gobierno que establecí era el único que podía convenir a estos desgraciados apenas emancipados del yugo opresor: deja, en varios lugares, espacio para el despotismo, no lo podríamos negar; pero la Constitución de Francia, esta parte más ilustrada de Europa, ¿acaso está totalmente exenta de estos inconvenientes? Si treinta millones de franceses encuentran, como lo escucho decir, su felicidad y su seguridad en la Revolución del 18 Brumaime, no se me debería envidiar el amor y la confianza de los pobres negros, mis compatriotas. La posteridad decidirá si fuimos obedecidos por afecto, apatía o temor. [18]
Lejos de presentarse como un subordinado, Toussaint Louverture impuso una relación de igual a igual al Primer Cónsul, rechazó sus intentos de corrupción y asumió su conducta y sus actos como líder de Santo Domingo:
Usted me pregunta si deseo consideración, honores, riquezas. Sí, quizá. Pero no quiero conseguirlos por medio de usted. Mi consideración depende del respeto de mis compatriotas, mis honores de su afecto, mi fortuna de su fidelidad. ¿Acaso me hablan de mi engrandecimiento personal con la esperanza de llevarme a traicionar la causa que he abrazado? Usted debería aprender a juzgar a los demás a través de usted mismo. Si el monarca, que sabe que tiene derechos sobre el trono en el cual usted está sentado, le ordenara que usted lo abandonase, ¿qué respondería? El poder que poseo fue tan legítimamente conquistado como el suyo y sólo la voz unánime del pueblo de Santo Domingo puede forzarme a abandonarlo. No está cimentado en la sangre. Los hombres crueles cuyas persecuciones detuve han reconocido mi clemencia. Si he alejado de esta isla a algunos espíritus turbulentos que pretendían mantener el fuego de la guerra civil su crimen fue primero constatado por un tribunal competente y finalmente confesado por ellos mismos. [19]
Tras intentar sobornar en vano a los oficiales bajo las órdenes de Toussaint Louverture, frente a la resistencia del pueblo de Santo Domingo, el general Leclerc decidió finalmente mandar a un mediador. El Patriota expresó su circunspección:
El general sólo me anunció su misión desembarcando por todas partes con mano armada. Tomó por asalto el Fuerte Dauphin y bombardeó Saint-Marc. No debo olvidar que llevo una espada. ¿Por qué motivo se me declara una guerra tan injusta como impolítica? ¿Acaso porque liberé a mi país de la plaga del extranjero? ¿Acaso porque he establecido el orden y la justicia? Si el general Leclerc desea francamente la paz, que pare la marcha de sus tropas. [20]
Luego, enfatizando sus “más grandes sospechas sobre la pureza de las intenciones” del general Leclerc, agregó: “¿Cómo fiarse de un hombre que trajo consigo a un ejército numeroso y barcos desembarcando tropas sobre todos los puntos de la colonia sin prevenir al primer jefe de la isla?”. [21]
En efecto, Napoleón Bonaparte había reconocido a Toussaint Louverture como el único Libertador de Santo Domingo:
Nos complace reconocer y proclamar los servicios rendidos al pueblo francés. Si su bandera ondula sobre Santo Domingo, se lo debe a usted y a los valientes negros. Llamado por sus talentos y la fuerza de las circunstancias al primer mando, usted destruyó la guerra civil, puso freno a las persecuciones de algunos hombres fanáticos… Las circunstancias en las que usted se encontró, rodeado por todas partes de enemigos, sin que la Metrópoli pudiera socorrerlo o alimentarlo, habían hecho legítimos los artículos de su constitución que ya podrían no serlo más; pero hoy será usted el primero en rendir homenaje a la soberanía de la nación que lo cuenta a usted entre sus más ilustres ciudadanos, por los servicios que usted rindió y por los talentos y la fuerza de carácter de los cuales lo dotó la naturaleza. [22]
Si en el correo oficial la expresión de gratitud por los servicios rendidos a la República era notable, en la realidad, Bonaparte, en vez de tratar a Toussaint Louverture con la estima debida a sus méritos, mandó a 23.000 de sus mejores soldados para encadenarlo y retomar posesión de la isla.
Frente a la invasión francesa, Toussaint Louverture encendió las alarmas y exhortó al pueblo negro a resistir al opresor. Desplegó todos sus talentos y multiplicó los esfuerzos para contrarrestar los ataques de las tropas napoleónicas. Desencadenó una guerra de guerrilla contra el opresor colonial, aplicando la política de la tierra quemada. Sus hombres, galvanizados por el ejemplo de abnegación dado por el líder, opusieron una feroz resistencia. [23]
Notas:
[1] Conjonction, Bulletin de l’Institut français d’Haïti, número 211, p. 28.
[2] Conseil Constitutionnel, Constitution du 22 Frimaire An VIII. https://www.conseil-constitutionnel.fr/les-constitutions-dans-l-histoire/constitution-du-22-frimaire-an-viii (sitio consultado el 4 de mayo de 2019).
[3] République d’Haïti, Constitution du 3 juillet 1801, Université de Perpignan. http://mjp.univ-perp.fr/constit/ht1801.htm (sitio consultado el 4 de mayo de 2019).
[4] Charles Malo, Histoire d’Haïti (île de Saint-Domingue) depuis sa découverte jusqu’en 1824, Paris, Louis Janet & Ponthieu, 1825, p. 461.
[5] Napoléon Bonaparte, Mémoires de Napoléon, Paris, Bibliothèque historique et militaire, 1842, Tomo sexto, p. 326.
[6] Dumas Malone, Jefferson, the President, First terme 1801-1805, Little, Brown, 1970, p. 252.
[7] Napoléon Bonaparte, Correspondance de Napoléon 1er, “Au Citoyen Talleyrand”, 13 de noviembre de 1801, n°5863, Tomo séptimo, París, Plon/Dumaine, 1861, p. 320.
[8] Napoléon Bonaparte, « Courrier au Général Toussaint Louverture », 18 de noviembre de 1801, Société de l’Histoire des colonies françaises, Lettres du Général Leclerc, Commandant en Chef de l’Armée de Saint-Domingue en 1802, París, 1937, p. 307. https://www.persee.fr/doc/sfhom_1961-8166_1937_edc_6_1 (sitio consultado el 4 de mayo de 2019).
[9] Beaubrun Ardouin, Etudes sur l’histoire d’Haïti, Paris, Dezobry & Magdelaine lib. Editeurs, 1853, Tomo cuarto, p. 476.
[10] Toussaint Louverture, Mémoires du Général Toussaint Louverture, op.cit., p. 40.
[11] Ibid.
[12] Thomas Madiou, Histoire d’Haïti, Tome II, 1799-1803, Port-au-Prince, Editions Henri Deschamps, 1989, p. 171.
[13] Toussaint Louverture, Mémoires du Général Toussaint Louverture, op. cit., p 41.
[14] Ibid. , p. 46.
[15] Ibid. , p. 51
[16] Ibid. , p. 110, 112.
[17] Ibid., p. 113
[18] Débarquement de la flotte française à Saint-Domingue , París, Tiger, sin fecha, p. 25-29.
[19] Ibid.
[20] Toussaint Louverture, Mémoires du Général Toussaint Louverture, op. cit., p. 113.
[21] Ibid.
[22] Napoléon Ier, Correspondance de Napoléon Ier, París, Henri Plon & J. Dumaine, 1866, Tomo séptimo, p. 322.
[23] Antoine Marie Thérèse Métral & Isaac Toussaint Louverture, Histoire de l’expédition des Français à Saint-Domingue, París, Fanjat Ainé Libraire-Editeur & Antoine Augustin Renouard, 1825, p. 243-51.
Doctor en Estudios Ibéricos y Latinoamericanos de la Universidad Paris Sorbonne-Paris IV, Salim Lamrani es profesor titular de la Universidad de La Reunión, especialista de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos. Su último libro se titula Cuba, ¡palabra a la defensa!, Hondarribia, Editorial Hiru, 2016. http://www.tiendaeditorialhiru.com/informe/336-cuba-palabra-a-la-defensa.html Facebook: https://www.facebook.com/SalimLamraniOfficiel
Fuente original:
50 verdades sobre Gabriel García Márquez
El escritor colombiano, genio del realismo mágico, cuyos escritos marcaron para siempre la historia literaria universal, falleció en México el 17 de abril de 2014 a los 87 años.
Nacido el 6 de marzo de 1927 en Aracataca, departamento de Magdalena, Colombia, en el seno de una familia modesta de 16 hijos, Gabriel José de la Concordia García Márquez, apodado Gabo, es sin duda uno de los más grandes escritores latinoamericanos.
Poco después, en 1929, sus padres Gabriel Eligio García y Luisa Santiaga Márquez Iguarán se ven obligados a mudarse a Barranquilla por razones profesionales. Los abuelos maternos se encargan entonces de criar al pequeño Gabriel.
Su abuelo, el coronel Nicolás Ricardo Márquez Mejía, apodado Papalelo, veterano de la Guerra de los Mil Días –conflicto fratricida que enfrentó al Partido Liberal con el Partido Nacional entre 1899 y 1902–, excelente cuentista, tiene una gran influencia sobre él y se convierte en el “cordón umbilical con la historia y la realidad”. Progresista, se rebeló contra la Masacre de las Bananeras en diciembre de 1929, cuando el ejército colombiano mató a más de 1.000 obreros agrícolas en huelga de la United Fruit Company, tras las amenazas de Washington de mandar a sus propias tropas para proteger los intereses de la multinacional. El coronel cuenta esa tragedia a su nieto. También le hace descubrir los tesoros del diccionario. “Es difícil olvidar a un abuelo así”, confesará García Márquez.
Su abuela, Tranquilina Iguarán Cotes, a la que el joven Gabriel apodaba cariñosamente “abuela Mina”, es una mujer “mujer imaginativa y supersticiosa”. Lo apasiona también con sus historias y relatos extraordinarios, así como con su manera de contarlos. Su prima se convierte en fuente de inspiración. “Yo, desde que nací, sabía que iba a ser escritor. Quería ser escritor. Tenía la voluntad, la disposición, el ánimo y la aptitud para ser escritor. Nunca pensé que podía ser otra cosa. Nunca pensé que de esto pudiera vivir. Estaba dispuesto a morirme de hambre pero para ser escritor”.
Cuando muere su abuelo en 1936, el joven Gabriel, con nueve años, se reúne con sus padres en Sucre. Lo mandan a un internado en Barranquilla, situado a orillas del río Magdalena, y luego al colegio de jesuitas San José en 1940. Consigue una beca y realiza sus estudios secundarios en el Liceo Nacional de Zipaquirá, ubicado a una hora de Bogotá.
En 1947 inicia la carrera de Derecho en la Universidad Nacional de Colombia, en Bogotá y se dedica a la lectura. Devora a Ernest Hemingway, James Joyce, Virginia Woolf y sobre todo a William Faulkner, su “maestro”. Franz Kafka lo impacta también con su libro La metamorfosis, que será la fuente de inspiración de su primer cuento. Se apasiona también por los clásicos de la tragedia griega como Edipo Rey de Sófocles.
El movimiento poético Piedra y Cielo, que nació en 1939, marca profundamente al joven García Márquez. Confesaría más tarde: “La verdad es que si no hubiera sido por Piedra y Cielo, no estoy muy seguro de haberme convertido en [buen] escritor. Allí no sólo aprendí un sistema de metaforizar, sino lo que es más decisivo, un entusiasmo y una novelería por la poesía que añoro cada día más y que me produce una inmensa nostalgia”.
Inspirándose en los relatos de su abuela, decide lanzarse a la escritura y publica su primer cuento, La tercera resignación, en el diario El Espectador, el 13 de septiembre de 1947.
El 9 de abril de 1948, Gabriel García Márquez se encuentra en la vorágine del Bogotazo, una sangrienta explosión social que sigue al asesinato del carismático líder político socialista Jorge Eliécer Gaitán. Se cierra la Universidad y las llamas destruyen la pensión donde estaba alojado. Decide entonces matricularse en la Universidad de Cartagena.
Después de dos años de estudios de Derecho, abandona la Universidad para dedicarse a su otra gran pasión: el periodismo. “Cuando inicié el tercero [año de Derecho] ya no me interesaba porque estaba totalmente deslumbrado, totalmente tomado por la literatura y el periodismo”. Entre 1948 y 1952, trabaja como reportero en los diarios El Universal y luego El Heraldo en Barranquilla. “Yo llegué al periodismo porque […] el asunto era de contar cosas. […] Hay que considerarlo como un género literario”, subrayaría.
En 1954, regresa a Bogotá donde el diario El Espectador lo contrata como reportero y crítico de cine. En 1955, García Márquez revela la verdad sobre la tragedia de buque de guerra A.R.C. Caldas. Publica una serie de catorce crónicas al respecto, basadas en las conversaciones con Luis Alejandro Velasco, un marino que sobrevivió al drama que costó la vida a siete personas caídas al mar. García Márquez no sólo demuestra todo su talento de escritor y de relator sino que además hace trizas la versión oficial del naufragio según la cual la tragedia se debió a las malas condiciones climáticas. En realidad, el puente del buque estaba sobrecargado de mercancías de contrabando (equipos electrodomésticos traídos de Estados Unidos) y la ruptura de un cable echó a ocho hombres al mar. La revelación del escándalo suscita la ira del régimen militar y García Márquez es enviado a Europa como corresponsal para escapar de las represalias. En 1970, esta historia se publicaría bajo el título Relato de un naufragio.
Antes de viajar a Europa, Gabriel García Márquez publica en 1955 su primera novela, La hojarasca, que la crítica saluda pero resulta un fracaso comercial. Para esta novela, “la más sincera y espontánea”, en la que evoca por primera vez ese pueblo imaginario llamado Macondo, el joven escritor no recibe “ni un céntimo por regalías”.
García Márquez visita varios países de Europa occidental y del mundo socialista y publica varios reportajes en El Espectador.
El escritor colombiano se instala luego en París en 1957. Su estancia en la capital francesa tiene una importancia trascendental: “Lo que fue importante para mí en París es la perspectiva que me dio de América Latina. Allá no dejé de ser Caribe, pero un Caribe que se dio cuenta cuál era su cultura”. En la capital francesa, cuna de la Revolución, empieza su compromiso político: “Prescindí de todos los compromisos que tenía con la literatura y me centré en el compromiso político”. Gracias a su amigo Nicolás Guillén, poeta cubano, se interesa por la Revolución Cubana de Fidel Castro que sacude el yugo de la dictadura militar de Fulgencio Batista.
En París, Gabriel García Márquez vive en condiciones económicas precarias y se ve obligado a “comer las sobras de un cajón de basuras”. En plena guerra de Argelia, frecuenta a los independentistas del Frente de Liberación Nacional. Incluso lo arrestó y golpeó la policía francesa que lo confundió con un “rebelde argelino”.
En diciembre de 1957, García Márquez consigue un puesto en el diario Momento, en Caracas. Un mes después es testigo directo de la sublevación popular contra el dictador venezolano Marcos Pérez Jiménez, quien se refugia en República Dominicana. En mayo de 1958, es nombrado redactor de Venezuela Gráfica.
En 1958, se casa con Mercedes Barcha, a quien conoce desde su época de estudiante y a quien ama con pasión. Lo acompañaría a lo largo de su vida. Explica el secreto de su éxito matrimonial: “hay tres vidas: la vida pública, la vida privada y la vida secreta. En todas han existido las mujeres. Me entiendo mejor con las mujeres que con los hombres. Hay una clave matrimonial importante: las mujeres dicen que los problemas se resuelven con el diálogo. Es al revés: problema que se dialoga termina en pleito con seguridad. Hay que hacer confianza y hay que olvidarlo y seguir pa’lante”.
En 1959, tras el triunfo de la Revolución Cubana, participa en la fundación de la agencia Prensa Latina y se convierte en su corresponsal en Bogotá. En 1961, es nombrado corresponsal en Nueva York y se instala allí con la familia. Pero tras sufrir intimidaciones por parte de las autoridades y amenazas por parte de los exiliados cubanos se ve obligado a abandonar Estados Unidos.
Gabriel García Márquez viaja a México con su familia, “sin nombre y sin un clavo en el bolsillo”. Pasaría una gran parte de su vida en la capital mexicana. En 1962, su novela, La mala hora, consigue el Premio de la Academia Colombiana de Letras.
Gabriel García Márquez también es un apasionado del cine: “llegué a tenerle tanto amor al cine que pensé en hacer cine por lo mismo que hice novela y cuento y por lo mismo que hice periodismo: era otra manera de contar la vida”. Siguió estudios de cine en el Centro Sperimentale di Cinematografia de Roma, con el cubano Julio García Espinosa y el argentino Fernando Birri, los futuros creadores del Nuevo Cine Latinoamericano. Lo impacta el neorrealismo italiano y colabora con Cesare Zavattini. Escribió guiones para varias de sus obras. Su primer cortometraje, La langosta azul, se realizó en 1954. A partir de 1963, se consagra al séptimo arte y redacta numerosos guiones como El gallo de oro de Roberto Gavaldón en 1964, En este pueblo no hay ladrones de Alberto Isaac en 1965, Tiempo de morir de Arturo Ripstein en 1966, que recibe el primer premio en el Festival Internacional del Film de Cartagena, Pasty, mi amor de Manuel Michel en 1968, Presagio de Luis Alcoriza en 1974, entre otros.
Gabriel García Márquez crearía también la Fundación del Nuevo Cine Latinoamericano en 1986, cuya sede se encuentra en La Habana, y presidiría la institución hasta su muerte. Ese mismo año funda la Escuela Internacional de Cine y Televisión en San Antonio de Los Baños en Cuba, que sería una referencia mundial. Gran admirador de Woody Allen, colabora también a menudo con la televisión.
En 1967, tras más de un año dedicado completamente a la escritura, lo que lo hunde en la precariedad económica, García Márquez publica la obra maestra que haría de él uno de los más grandes escritores latinoamericanos. Cien años de soledad se publica en junio de 1967 en Buenos Aires. El éxito es inmediato. El libro, que revela el realismo mágico en todo su esplendor, se traduce a más de 40 idiomas y se venden más de 30 millones de ejemplares. Consigue numerosos premios internacionales y el escritor colombiano logra una fama planetaria. Pablo Neruda declara su admiración por la obra: “Es la mayor revelación en lengua española desde el Quijote de Cervantes”. Por su parte, William Kennedy lo califica de “primer libro desde el Génesis cuya lectura es indispensable a toda la humanidad”.
La problemática de la soledad marcaría la obra de Gabriel García Márquez. El autor colombiano se expresó al respecto: “Creo que es un problema que todo el mundo tiene. Toda persona tiene su propia forma y los medios de expresar la misma. La sensación impregna la labor de tantos escritores”. García Márquez hace de la soledad el tema de su discurso en la entrega del Premio Nobel de Literatura bajo el título La soledad de América Latina: “La interpretación de nuestra realidad a través de los patrones, no los nuestros, sólo sirve para hacernos cada vez más desconocidos, cada vez menos libres, cada vez más solitarios”.
Gabriel García Márquez viaja a través del mundo y traba amistad con Fidel Castro, líder de la Revolución Cubana, por el cual nunca escondería su admiración. Esa amistad duraría décadas: “Realmente lo que consolidó esa amistad fueron los libros. Descubrí que es tan buen lector como yo, antes de publicar un libro, le traigo los originales. Señala contradicciones, anacronismos, inconsistencias que se les pasan a los profesionales porque es un lector muy minucioso. Los libros reflejan muy bien la amplitud de sus gustos. Es un lector voraz. Nadie se explica cómo le alcanza el tiempo ni de qué método se sirve para leer tanto y con tanta rapidez, aunque él insiste en que no tiene ninguno en especial. Muchas veces se ha llevado un libro en la madrugada y a la mañana siguiente lo comenta. Su visión de América Latina en el porvenir es la misma de Bolívar y Martí, una comunidad integral y autónoma, capaz de mover el destino del mundo. Éste es el Fidel Castro que creo conocer: Un hombre de costumbres austeras e ilusiones insaciables, con una educación formal a la antigua, de palabras cautelosas y modales tenues e incapaz de concebir ninguna idea que no sea descomunal”. A lo largo de su vida, Gabriel García Márquez viajaría regularmente a Cuba.
Esta amistad con Fidel Castro y sus ideas progresistas suscitan la hostilidad de Estados Unidos que lo declara persona non grata y le prohíbe la entrada en su territorio a partir de 1961. Habrá que esperar la elección de Bill Clinton, gran admirador del escritor colombiano, para que se levante esa prohibición. García Márquez tejería también una relación amistosa sólida con el presidente de Estados Unidos.
Gabriel García Márquez siempre afirmó sus opiniones políticas progresistas. Las asumió públicamente: “[Mis detractores han] hecho constantes esfuerzos por dividir mi personalidad: de un lado el escritor que ellos no vacilan en calificar de genial y del otro lado el comunista feroz […]. Cometen un error de principio: soy un hombre indivisible, y mi posición política obedece a la misma ideología con que escribo mis libros”. Declararía también: “ Yo sigo creyendo que el socialismo es una posibilidad real, que es la buena solución para América Latina”.
De 1967 a 1975, Gabriel García Márquez reside en Barcelona la mayor parte del tiempo y se inspira de la figura del dictador venezolano Juan Vicente Gómez para redactar El otoño del patriarca. En España, el escritor colombiano se relaciona con numerosos intelectuales progresistas opuestos a la dictadura del general Franco.
En 1974, con varios intelectuales y periodistas, Gabriel García Márquez funda la revista Alternativa en Colombia que durará hasta 1980. El escritor publica artículos políticos sobre la Revolución de los Claveles en Portugal, se interesa por la Revolución Sandinista, denuncia la dictadura de Pinochet y expresa su apoyo a la Revolución Cubana.
En 1981, aprovecha una visita oficial de Fidel Castro a Colombia para regresar a su país. No obstante, el ejército y el presidente Julio César Turbay Ayala lo acusan de financiar a la guerrilla M619. Alertado por unos amigos de su inminente arresto, logra asilo político en México. Agradecido, dirá al respecto: “ No hay mejor servicio de inteligencia que la amistad”.
En 1982, Gabriel García Márquez es el primer colombiano que consigue el Premio Nobel de Literatura “por sus novelas e historias cortas, en las que lo fantástico y lo real son combinados en un tranquilo mundo de imaginación rica, reflejando la vida y los conflictos de un continente”.
En su discurso de aceptación, Gabriel García Márquez denuncia la trágica realidad política y social latinoamericana: “Hace once años, uno de los poetas insignes de nuestro tiempo, el chileno Pablo Neruda, iluminó este ámbito con su palabra. En las buenas conciencias de Europa, y a veces también en las malas, han irrumpido desde entonces con más ímpetu que nunca las noticias fantasmales de la América Latina, esa patria inmensa de hombres alucinados y mujeres históricas, cuya terquedad sin fin se confunde con la leyenda. No hemos tenido un instante de sosiego. Un Presidente prometeico atrincherado en su palacio en llamas murió peleando solo contra todo un ejército, y dos desastres aéreos sospechosos y nunca esclarecidos segaron la vida de otro de corazón generoso, y la de un militar demócrata que había restaurado la dignidad de su pueblo.
En este lapso ha habido 5 guerras y 17 golpes de Estado, y surgió un dictador luciferino que en el nombre de Dios lleva a cabo el primer etnocidio de América Latina en nuestro tiempo. Mientras tanto 20 millones de niños latinoamericanos morían antes de cumplir dos años, que son más de cuantos han nacido en Europa occidental desde 1970. Los desaparecidos por motivos de la represión son casi 120.000, que es como si hoy no se supiera dónde están todos los habitantes de la ciudad de Upsala. Numerosas mujeres arrestadas encinta dieron a luz en cárceles argentinas, pero aún se ignora el paradero y la identidad de sus hijos, que fueron dados en adopción clandestina o internados en orfanatos por las autoridades militares. Por no querer que las cosas siguieran así han muerto cerca de 200.000 mujeres y hombres en todo el continente, y más de 100.000 perecieron en tres pequeños y voluntariosos países de la América Central, Nicaragua, El Salvador y Guatemala.
Si esto fuera en los Estados Unidos, la cifra proporcional sería de 1.600.000 mil muertes violentas en cuatro años. De Chile, país de tradiciones hospitalarias, ha huido un millón de personas: el 10 % de su población. El Uruguay, una nación minúscula de dos millones y medio de habitantes que se consideraba como el país más civilizado del continente, ha perdido en el destierro a uno de cada cinco ciudadanos.
La guerra civil en El Salvador ha causado desde 1979 casi un refugiado cada 20 minutos. El país que se pudiera hacer con todos los exiliados y emigrados forzosos de América latina, tendría una población más numerosa que Noruega. Me atrevo a pensar que es esta realidad descomunal, y no sólo su expresión literaria, la que este año ha merecido la atención de la Academia Sueca de la Letras […].¿Por qué la originalidad que se nos admite sin reservas en la literatura se nos niega con toda clase de suspicacias en nuestras tentativas tan difíciles de cambio social? ¿Por qué pensar que la justicia social que los europeos de avanzada tratan de imponer en sus países no puede ser también un objetivo latinoamericano con métodos distintos en condiciones diferentes?”
En 1985, García Márquez publica El amor en los tiempos del cólera, inspirado de la historia de sus padres: “La única diferencia es que mis padres se casaron. Y tan pronto como se casaron, ya no eran interesantes como figuras literarias”.
Cuatro años después, en 1989, el escritor colombiano publica El General en su laberinto, una obra magistral sobre la figura más emblemática de América Latina, el Libertador Simón Bolívar.
En 1994, García Márquez crea la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano en Cartagena de Indias, con el objetivo de formar a los jóvenes estudiantes y crear un nuevo tipo de periodismo más cercano a las realidades sociales de los pueblos.
En 1994, Gabriel García Márquez desempeña un papel clave en el restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Colombia y Cuba, rotas en 1981.
En 1996, el Premio Nobel publica Noticia de un secuestro en que cuenta la trágica realidad colombiana marcada por la violencia y los secuestros. La violencia es también uno de los temas recurrentes en la obra de García Márquez.
Profundamente afectado por el sangriento conflicto civil que golpea a Colombia desde hace más de medio siglo, Gabriel García Márquez desempeñó el papel de mediador varias veces en las conversaciones de paz entre los movimientos de guerrilla y el poder central, particularmente bajo los gobiernos de Belisario Betancourt y Andrés Pastrana. “Llevo conspirando por la paz en Colombia casi desde que nací”, recordaba.
En 1997, mientras Cuba es víctima de una ola de atentados terroristas que orquestó el exilio cubano basado en Florida, Fidel Castro encarga a Gabriel García Márquez entregar un mensaje secreto a Bill Clinton sobre la actuación de esos grupúsculos violentos. Cuba había logrado recoger la información necesaria gracias a unos agentes infiltrados en Miami. El escritor colombiano relata este episodio: “En mis conversaciones con Fidel Castro le mencioné la posibilidad de entrevistarme con el presidente Clinton. De allí surgió la idea de que Fidel le mandara un mensaje confidencial sobre un siniestro plan terrorista que Cuba acababa de descubrir”.
En 1999, un cáncer linfático afecta a Gabriel García Márquez. Temiendo no tener tiempo de terminar sus memorias y dos libros de cuentos, el autor se aísla y se dedica únicamente a la escritura: “Reduje al mínimo las relaciones con mis amigos, desconecté el teléfono, cancelé los viajes y toda clase de compromisos pendientes y futuros, y me encerré a escribir todos los días sin interrupción desde las ocho de la mañana hasta las dos de la tarde”.
En 2002, García Márquez publica Vivir para contarla, el primer tomo de sus memorias: “Empieza con la vida de mis abuelos maternos y los amores de mi padre y mi madre a principios del siglo, y termina en 1955 cuando publiqué mi primer libro, La hojarasca, hasta viajar a Europa como corresponsal de El Espectador ”.
En 2004, el escritor colombiano publica su última novela Memorias de mis puntas tristes.
En 2006, con numerosos intelectuales latinoamericanos, Gabriel García Márquez firma la “Proclamación de Panamá”, que reclama la independencia de Puerto Rico.
Gabriel García Márquez siempre rechazó el uso de un estilo bien preciso en su escritura. Según él, es el tema del libro lo que determina el estilo: “En cada libro intento tomar un camino diferente. Uno no elige el estilo. Los críticos construyen teorías alrededor de esto y ven cosas que yo no había visto. Respondo solamente a nuestro estilo de vida, la vida del Caribe”.
El escritor también expresó sus reservas sobre la interpretación de sus obras por los estudiosos: “[Los críticos], en general, con una investidura de pontífices, y sin darse cuenta que una novela como Cien años de soledad carece por completo de seriedad y está llena de señas a los amigos más íntimos, señas que sólo ellos pueden descubrir, asumen la responsabilidad de descifrar todas las adivinanzas del libro corriendo el riesgo de decir grandes tonterías”.
Con el guatemalteco Miguel Ángel Asturias, está considerado el genio del género literario llamado “realismo mágico”, que asocia elementos fantásticos y realidad cotidiana. Pero García Márquez se reivindica primero y ante todo un escritor realista: “No hay en mis novelas una línea que no esté basada en la realidad. La primera condición del realismo mágico, como su nombre lo indica, es que sea un hecho rigurosamente cierto que, sin embargo, parece fantástico. en América Latina la literatura, la ficción, la novela, es más fácil de hacer creer que la realidad”.
Gabriel García Márquez recibió una multitud de premios y distinciones en el mundo entero. Además del Premio Nobel de Literatura, recibió el Premio Rómulo Gallegos, la Legión de Honor francesa, el Águila Azteca de México y fue nombrado Doctor Honoris Causa por varias universidades, entre ellas la prestigiosa Universidad de Princetown.
Gabriel García Márquez es la principal figura del “boom latinoamericano” que incluye a escritores como Jorge Luis Borges, Julio Cortázar, Carlos Fuentes o Mario Vargas Llosa.
Sus libros se han traducido a decenas de idiomas. En total se han vendido más de 50 millones de ejemplares.
Gabriel García Márquez es también un amante de la música, su “vicio favorito”. Ha confesado que “ la música [l]e ha gustado más que la literatura”.
Gabriel García Márquez quedará en la historia probablemente como el escritor más universal del siglo XX. Fue un intelectual preocupado por la suerte de los más humildes, que siempre reivindicó sus raíces populares: “Toda mi formación es a base de la cultura popular. Lo que me ha sustentado, me conmueve y me motiva es la cultura popular”.
*Doctor en Estudios Ibéricos y Latinoamericanos de la Universidad Paris Sorbonne-Paris IV, Salim Lamrani es profesor titular de la Universidad de La Reunión y periodista, especialista de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos. Su último libro se titula Cuba, ¡palabra a la defensa!, Hondarribia, Editorial Hiru, 2016.
http://www.tiendaeditorialhiru.com/informe/336-cuba-palabra-a-la-defensa.html
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Nacido el 6 de marzo de 1927 en Aracataca, departamento de Magdalena, Colombia, en el seno de una familia modesta de 16 hijos, Gabriel José de la Concordia García Márquez, apodado Gabo, es sin duda uno de los más grandes escritores latinoamericanos.
Poco después, en 1929, sus padres Gabriel Eligio García y Luisa Santiaga Márquez Iguarán se ven obligados a mudarse a Barranquilla por razones profesionales. Los abuelos maternos se encargan entonces de criar al pequeño Gabriel.
Su abuelo, el coronel Nicolás Ricardo Márquez Mejía, apodado Papalelo, veterano de la Guerra de los Mil Días –conflicto fratricida que enfrentó al Partido Liberal con el Partido Nacional entre 1899 y 1902–, excelente cuentista, tiene una gran influencia sobre él y se convierte en el “cordón umbilical con la historia y la realidad”. Progresista, se rebeló contra la Masacre de las Bananeras en diciembre de 1929, cuando el ejército colombiano mató a más de 1.000 obreros agrícolas en huelga de la United Fruit Company, tras las amenazas de Washington de mandar a sus propias tropas para proteger los intereses de la multinacional. El coronel cuenta esa tragedia a su nieto. También le hace descubrir los tesoros del diccionario. “Es difícil olvidar a un abuelo así”, confesará García Márquez.
Su abuela, Tranquilina Iguarán Cotes, a la que el joven Gabriel apodaba cariñosamente “abuela Mina”, es una mujer “mujer imaginativa y supersticiosa”. Lo apasiona también con sus historias y relatos extraordinarios, así como con su manera de contarlos. Su prima se convierte en fuente de inspiración. “Yo, desde que nací, sabía que iba a ser escritor. Quería ser escritor. Tenía la voluntad, la disposición, el ánimo y la aptitud para ser escritor. Nunca pensé que podía ser otra cosa. Nunca pensé que de esto pudiera vivir. Estaba dispuesto a morirme de hambre pero para ser escritor”.
Cuando muere su abuelo en 1936, el joven Gabriel, con nueve años, se reúne con sus padres en Sucre. Lo mandan a un internado en Barranquilla, situado a orillas del río Magdalena, y luego al colegio de jesuitas San José en 1940. Consigue una beca y realiza sus estudios secundarios en el Liceo Nacional de Zipaquirá, ubicado a una hora de Bogotá.
En 1947 inicia la carrera de Derecho en la Universidad Nacional de Colombia, en Bogotá y se dedica a la lectura. Devora a Ernest Hemingway, James Joyce, Virginia Woolf y sobre todo a William Faulkner, su “maestro”. Franz Kafka lo impacta también con su libro La metamorfosis, que será la fuente de inspiración de su primer cuento. Se apasiona también por los clásicos de la tragedia griega como Edipo Rey de Sófocles.
El movimiento poético Piedra y Cielo, que nació en 1939, marca profundamente al joven García Márquez. Confesaría más tarde: “La verdad es que si no hubiera sido por Piedra y Cielo, no estoy muy seguro de haberme convertido en [buen] escritor. Allí no sólo aprendí un sistema de metaforizar, sino lo que es más decisivo, un entusiasmo y una novelería por la poesía que añoro cada día más y que me produce una inmensa nostalgia”.
Inspirándose en los relatos de su abuela, decide lanzarse a la escritura y publica su primer cuento, La tercera resignación, en el diario El Espectador, el 13 de septiembre de 1947.
El 9 de abril de 1948, Gabriel García Márquez se encuentra en la vorágine del Bogotazo, una sangrienta explosión social que sigue al asesinato del carismático líder político socialista Jorge Eliécer Gaitán. Se cierra la Universidad y las llamas destruyen la pensión donde estaba alojado. Decide entonces matricularse en la Universidad de Cartagena.
Después de dos años de estudios de Derecho, abandona la Universidad para dedicarse a su otra gran pasión: el periodismo. “Cuando inicié el tercero [año de Derecho] ya no me interesaba porque estaba totalmente deslumbrado, totalmente tomado por la literatura y el periodismo”. Entre 1948 y 1952, trabaja como reportero en los diarios El Universal y luego El Heraldo en Barranquilla. “Yo llegué al periodismo porque […] el asunto era de contar cosas. […] Hay que considerarlo como un género literario”, subrayaría.
En 1954, regresa a Bogotá donde el diario El Espectador lo contrata como reportero y crítico de cine. En 1955, García Márquez revela la verdad sobre la tragedia de buque de guerra A.R.C. Caldas. Publica una serie de catorce crónicas al respecto, basadas en las conversaciones con Luis Alejandro Velasco, un marino que sobrevivió al drama que costó la vida a siete personas caídas al mar. García Márquez no sólo demuestra todo su talento de escritor y de relator sino que además hace trizas la versión oficial del naufragio según la cual la tragedia se debió a las malas condiciones climáticas. En realidad, el puente del buque estaba sobrecargado de mercancías de contrabando (equipos electrodomésticos traídos de Estados Unidos) y la ruptura de un cable echó a ocho hombres al mar. La revelación del escándalo suscita la ira del régimen militar y García Márquez es enviado a Europa como corresponsal para escapar de las represalias. En 1970, esta historia se publicaría bajo el título Relato de un naufragio.
Antes de viajar a Europa, Gabriel García Márquez publica en 1955 su primera novela, La hojarasca, que la crítica saluda pero resulta un fracaso comercial. Para esta novela, “la más sincera y espontánea”, en la que evoca por primera vez ese pueblo imaginario llamado Macondo, el joven escritor no recibe “ni un céntimo por regalías”.
García Márquez visita varios países de Europa occidental y del mundo socialista y publica varios reportajes en El Espectador.
El escritor colombiano se instala luego en París en 1957. Su estancia en la capital francesa tiene una importancia trascendental: “Lo que fue importante para mí en París es la perspectiva que me dio de América Latina. Allá no dejé de ser Caribe, pero un Caribe que se dio cuenta cuál era su cultura”. En la capital francesa, cuna de la Revolución, empieza su compromiso político: “Prescindí de todos los compromisos que tenía con la literatura y me centré en el compromiso político”. Gracias a su amigo Nicolás Guillén, poeta cubano, se interesa por la Revolución Cubana de Fidel Castro que sacude el yugo de la dictadura militar de Fulgencio Batista.
En París, Gabriel García Márquez vive en condiciones económicas precarias y se ve obligado a “comer las sobras de un cajón de basuras”. En plena guerra de Argelia, frecuenta a los independentistas del Frente de Liberación Nacional. Incluso lo arrestó y golpeó la policía francesa que lo confundió con un “rebelde argelino”.
En diciembre de 1957, García Márquez consigue un puesto en el diario Momento, en Caracas. Un mes después es testigo directo de la sublevación popular contra el dictador venezolano Marcos Pérez Jiménez, quien se refugia en República Dominicana. En mayo de 1958, es nombrado redactor de Venezuela Gráfica.
En 1958, se casa con Mercedes Barcha, a quien conoce desde su época de estudiante y a quien ama con pasión. Lo acompañaría a lo largo de su vida. Explica el secreto de su éxito matrimonial: “hay tres vidas: la vida pública, la vida privada y la vida secreta. En todas han existido las mujeres. Me entiendo mejor con las mujeres que con los hombres. Hay una clave matrimonial importante: las mujeres dicen que los problemas se resuelven con el diálogo. Es al revés: problema que se dialoga termina en pleito con seguridad. Hay que hacer confianza y hay que olvidarlo y seguir pa’lante”.
En 1959, tras el triunfo de la Revolución Cubana, participa en la fundación de la agencia Prensa Latina y se convierte en su corresponsal en Bogotá. En 1961, es nombrado corresponsal en Nueva York y se instala allí con la familia. Pero tras sufrir intimidaciones por parte de las autoridades y amenazas por parte de los exiliados cubanos se ve obligado a abandonar Estados Unidos.
Gabriel García Márquez viaja a México con su familia, “sin nombre y sin un clavo en el bolsillo”. Pasaría una gran parte de su vida en la capital mexicana. En 1962, su novela, La mala hora, consigue el Premio de la Academia Colombiana de Letras.
Gabriel García Márquez también es un apasionado del cine: “llegué a tenerle tanto amor al cine que pensé en hacer cine por lo mismo que hice novela y cuento y por lo mismo que hice periodismo: era otra manera de contar la vida”. Siguió estudios de cine en el Centro Sperimentale di Cinematografia de Roma, con el cubano Julio García Espinosa y el argentino Fernando Birri, los futuros creadores del Nuevo Cine Latinoamericano. Lo impacta el neorrealismo italiano y colabora con Cesare Zavattini. Escribió guiones para varias de sus obras. Su primer cortometraje, La langosta azul, se realizó en 1954. A partir de 1963, se consagra al séptimo arte y redacta numerosos guiones como El gallo de oro de Roberto Gavaldón en 1964, En este pueblo no hay ladrones de Alberto Isaac en 1965, Tiempo de morir de Arturo Ripstein en 1966, que recibe el primer premio en el Festival Internacional del Film de Cartagena, Pasty, mi amor de Manuel Michel en 1968, Presagio de Luis Alcoriza en 1974, entre otros.
Gabriel García Márquez crearía también la Fundación del Nuevo Cine Latinoamericano en 1986, cuya sede se encuentra en La Habana, y presidiría la institución hasta su muerte. Ese mismo año funda la Escuela Internacional de Cine y Televisión en San Antonio de Los Baños en Cuba, que sería una referencia mundial. Gran admirador de Woody Allen, colabora también a menudo con la televisión.
En 1967, tras más de un año dedicado completamente a la escritura, lo que lo hunde en la precariedad económica, García Márquez publica la obra maestra que haría de él uno de los más grandes escritores latinoamericanos. Cien años de soledad se publica en junio de 1967 en Buenos Aires. El éxito es inmediato. El libro, que revela el realismo mágico en todo su esplendor, se traduce a más de 40 idiomas y se venden más de 30 millones de ejemplares. Consigue numerosos premios internacionales y el escritor colombiano logra una fama planetaria. Pablo Neruda declara su admiración por la obra: “Es la mayor revelación en lengua española desde el Quijote de Cervantes”. Por su parte, William Kennedy lo califica de “primer libro desde el Génesis cuya lectura es indispensable a toda la humanidad”.
La problemática de la soledad marcaría la obra de Gabriel García Márquez. El autor colombiano se expresó al respecto: “Creo que es un problema que todo el mundo tiene. Toda persona tiene su propia forma y los medios de expresar la misma. La sensación impregna la labor de tantos escritores”. García Márquez hace de la soledad el tema de su discurso en la entrega del Premio Nobel de Literatura bajo el título La soledad de América Latina: “La interpretación de nuestra realidad a través de los patrones, no los nuestros, sólo sirve para hacernos cada vez más desconocidos, cada vez menos libres, cada vez más solitarios”.
Gabriel García Márquez viaja a través del mundo y traba amistad con Fidel Castro, líder de la Revolución Cubana, por el cual nunca escondería su admiración. Esa amistad duraría décadas: “Realmente lo que consolidó esa amistad fueron los libros. Descubrí que es tan buen lector como yo, antes de publicar un libro, le traigo los originales. Señala contradicciones, anacronismos, inconsistencias que se les pasan a los profesionales porque es un lector muy minucioso. Los libros reflejan muy bien la amplitud de sus gustos. Es un lector voraz. Nadie se explica cómo le alcanza el tiempo ni de qué método se sirve para leer tanto y con tanta rapidez, aunque él insiste en que no tiene ninguno en especial. Muchas veces se ha llevado un libro en la madrugada y a la mañana siguiente lo comenta. Su visión de América Latina en el porvenir es la misma de Bolívar y Martí, una comunidad integral y autónoma, capaz de mover el destino del mundo. Éste es el Fidel Castro que creo conocer: Un hombre de costumbres austeras e ilusiones insaciables, con una educación formal a la antigua, de palabras cautelosas y modales tenues e incapaz de concebir ninguna idea que no sea descomunal”. A lo largo de su vida, Gabriel García Márquez viajaría regularmente a Cuba.
Esta amistad con Fidel Castro y sus ideas progresistas suscitan la hostilidad de Estados Unidos que lo declara persona non grata y le prohíbe la entrada en su territorio a partir de 1961. Habrá que esperar la elección de Bill Clinton, gran admirador del escritor colombiano, para que se levante esa prohibición. García Márquez tejería también una relación amistosa sólida con el presidente de Estados Unidos.
Gabriel García Márquez siempre afirmó sus opiniones políticas progresistas. Las asumió públicamente: “[Mis detractores han] hecho constantes esfuerzos por dividir mi personalidad: de un lado el escritor que ellos no vacilan en calificar de genial y del otro lado el comunista feroz […]. Cometen un error de principio: soy un hombre indivisible, y mi posición política obedece a la misma ideología con que escribo mis libros”. Declararía también: “ Yo sigo creyendo que el socialismo es una posibilidad real, que es la buena solución para América Latina”.
De 1967 a 1975, Gabriel García Márquez reside en Barcelona la mayor parte del tiempo y se inspira de la figura del dictador venezolano Juan Vicente Gómez para redactar El otoño del patriarca. En España, el escritor colombiano se relaciona con numerosos intelectuales progresistas opuestos a la dictadura del general Franco.
En 1974, con varios intelectuales y periodistas, Gabriel García Márquez funda la revista Alternativa en Colombia que durará hasta 1980. El escritor publica artículos políticos sobre la Revolución de los Claveles en Portugal, se interesa por la Revolución Sandinista, denuncia la dictadura de Pinochet y expresa su apoyo a la Revolución Cubana.
En 1981, aprovecha una visita oficial de Fidel Castro a Colombia para regresar a su país. No obstante, el ejército y el presidente Julio César Turbay Ayala lo acusan de financiar a la guerrilla M619. Alertado por unos amigos de su inminente arresto, logra asilo político en México. Agradecido, dirá al respecto: “ No hay mejor servicio de inteligencia que la amistad”.
En 1982, Gabriel García Márquez es el primer colombiano que consigue el Premio Nobel de Literatura “por sus novelas e historias cortas, en las que lo fantástico y lo real son combinados en un tranquilo mundo de imaginación rica, reflejando la vida y los conflictos de un continente”.
En su discurso de aceptación, Gabriel García Márquez denuncia la trágica realidad política y social latinoamericana: “Hace once años, uno de los poetas insignes de nuestro tiempo, el chileno Pablo Neruda, iluminó este ámbito con su palabra. En las buenas conciencias de Europa, y a veces también en las malas, han irrumpido desde entonces con más ímpetu que nunca las noticias fantasmales de la América Latina, esa patria inmensa de hombres alucinados y mujeres históricas, cuya terquedad sin fin se confunde con la leyenda. No hemos tenido un instante de sosiego. Un Presidente prometeico atrincherado en su palacio en llamas murió peleando solo contra todo un ejército, y dos desastres aéreos sospechosos y nunca esclarecidos segaron la vida de otro de corazón generoso, y la de un militar demócrata que había restaurado la dignidad de su pueblo.
En este lapso ha habido 5 guerras y 17 golpes de Estado, y surgió un dictador luciferino que en el nombre de Dios lleva a cabo el primer etnocidio de América Latina en nuestro tiempo. Mientras tanto 20 millones de niños latinoamericanos morían antes de cumplir dos años, que son más de cuantos han nacido en Europa occidental desde 1970. Los desaparecidos por motivos de la represión son casi 120.000, que es como si hoy no se supiera dónde están todos los habitantes de la ciudad de Upsala. Numerosas mujeres arrestadas encinta dieron a luz en cárceles argentinas, pero aún se ignora el paradero y la identidad de sus hijos, que fueron dados en adopción clandestina o internados en orfanatos por las autoridades militares. Por no querer que las cosas siguieran así han muerto cerca de 200.000 mujeres y hombres en todo el continente, y más de 100.000 perecieron en tres pequeños y voluntariosos países de la América Central, Nicaragua, El Salvador y Guatemala.
Si esto fuera en los Estados Unidos, la cifra proporcional sería de 1.600.000 mil muertes violentas en cuatro años. De Chile, país de tradiciones hospitalarias, ha huido un millón de personas: el 10 % de su población. El Uruguay, una nación minúscula de dos millones y medio de habitantes que se consideraba como el país más civilizado del continente, ha perdido en el destierro a uno de cada cinco ciudadanos.
La guerra civil en El Salvador ha causado desde 1979 casi un refugiado cada 20 minutos. El país que se pudiera hacer con todos los exiliados y emigrados forzosos de América latina, tendría una población más numerosa que Noruega. Me atrevo a pensar que es esta realidad descomunal, y no sólo su expresión literaria, la que este año ha merecido la atención de la Academia Sueca de la Letras […].¿Por qué la originalidad que se nos admite sin reservas en la literatura se nos niega con toda clase de suspicacias en nuestras tentativas tan difíciles de cambio social? ¿Por qué pensar que la justicia social que los europeos de avanzada tratan de imponer en sus países no puede ser también un objetivo latinoamericano con métodos distintos en condiciones diferentes?”
En 1985, García Márquez publica El amor en los tiempos del cólera, inspirado de la historia de sus padres: “La única diferencia es que mis padres se casaron. Y tan pronto como se casaron, ya no eran interesantes como figuras literarias”.
Cuatro años después, en 1989, el escritor colombiano publica El General en su laberinto, una obra magistral sobre la figura más emblemática de América Latina, el Libertador Simón Bolívar.
En 1994, García Márquez crea la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano en Cartagena de Indias, con el objetivo de formar a los jóvenes estudiantes y crear un nuevo tipo de periodismo más cercano a las realidades sociales de los pueblos.
En 1994, Gabriel García Márquez desempeña un papel clave en el restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Colombia y Cuba, rotas en 1981.
En 1996, el Premio Nobel publica Noticia de un secuestro en que cuenta la trágica realidad colombiana marcada por la violencia y los secuestros. La violencia es también uno de los temas recurrentes en la obra de García Márquez.
Profundamente afectado por el sangriento conflicto civil que golpea a Colombia desde hace más de medio siglo, Gabriel García Márquez desempeñó el papel de mediador varias veces en las conversaciones de paz entre los movimientos de guerrilla y el poder central, particularmente bajo los gobiernos de Belisario Betancourt y Andrés Pastrana. “Llevo conspirando por la paz en Colombia casi desde que nací”, recordaba.
En 1997, mientras Cuba es víctima de una ola de atentados terroristas que orquestó el exilio cubano basado en Florida, Fidel Castro encarga a Gabriel García Márquez entregar un mensaje secreto a Bill Clinton sobre la actuación de esos grupúsculos violentos. Cuba había logrado recoger la información necesaria gracias a unos agentes infiltrados en Miami. El escritor colombiano relata este episodio: “En mis conversaciones con Fidel Castro le mencioné la posibilidad de entrevistarme con el presidente Clinton. De allí surgió la idea de que Fidel le mandara un mensaje confidencial sobre un siniestro plan terrorista que Cuba acababa de descubrir”.
En 1999, un cáncer linfático afecta a Gabriel García Márquez. Temiendo no tener tiempo de terminar sus memorias y dos libros de cuentos, el autor se aísla y se dedica únicamente a la escritura: “Reduje al mínimo las relaciones con mis amigos, desconecté el teléfono, cancelé los viajes y toda clase de compromisos pendientes y futuros, y me encerré a escribir todos los días sin interrupción desde las ocho de la mañana hasta las dos de la tarde”.
En 2002, García Márquez publica Vivir para contarla, el primer tomo de sus memorias: “Empieza con la vida de mis abuelos maternos y los amores de mi padre y mi madre a principios del siglo, y termina en 1955 cuando publiqué mi primer libro, La hojarasca, hasta viajar a Europa como corresponsal de El Espectador ”.
En 2004, el escritor colombiano publica su última novela Memorias de mis puntas tristes.
En 2006, con numerosos intelectuales latinoamericanos, Gabriel García Márquez firma la “Proclamación de Panamá”, que reclama la independencia de Puerto Rico.
Gabriel García Márquez siempre rechazó el uso de un estilo bien preciso en su escritura. Según él, es el tema del libro lo que determina el estilo: “En cada libro intento tomar un camino diferente. Uno no elige el estilo. Los críticos construyen teorías alrededor de esto y ven cosas que yo no había visto. Respondo solamente a nuestro estilo de vida, la vida del Caribe”.
El escritor también expresó sus reservas sobre la interpretación de sus obras por los estudiosos: “[Los críticos], en general, con una investidura de pontífices, y sin darse cuenta que una novela como Cien años de soledad carece por completo de seriedad y está llena de señas a los amigos más íntimos, señas que sólo ellos pueden descubrir, asumen la responsabilidad de descifrar todas las adivinanzas del libro corriendo el riesgo de decir grandes tonterías”.
Con el guatemalteco Miguel Ángel Asturias, está considerado el genio del género literario llamado “realismo mágico”, que asocia elementos fantásticos y realidad cotidiana. Pero García Márquez se reivindica primero y ante todo un escritor realista: “No hay en mis novelas una línea que no esté basada en la realidad. La primera condición del realismo mágico, como su nombre lo indica, es que sea un hecho rigurosamente cierto que, sin embargo, parece fantástico. en América Latina la literatura, la ficción, la novela, es más fácil de hacer creer que la realidad”.
Gabriel García Márquez recibió una multitud de premios y distinciones en el mundo entero. Además del Premio Nobel de Literatura, recibió el Premio Rómulo Gallegos, la Legión de Honor francesa, el Águila Azteca de México y fue nombrado Doctor Honoris Causa por varias universidades, entre ellas la prestigiosa Universidad de Princetown.
Gabriel García Márquez es la principal figura del “boom latinoamericano” que incluye a escritores como Jorge Luis Borges, Julio Cortázar, Carlos Fuentes o Mario Vargas Llosa.
Sus libros se han traducido a decenas de idiomas. En total se han vendido más de 50 millones de ejemplares.
Gabriel García Márquez es también un amante de la música, su “vicio favorito”. Ha confesado que “ la música [l]e ha gustado más que la literatura”.
Gabriel García Márquez quedará en la historia probablemente como el escritor más universal del siglo XX. Fue un intelectual preocupado por la suerte de los más humildes, que siempre reivindicó sus raíces populares: “Toda mi formación es a base de la cultura popular. Lo que me ha sustentado, me conmueve y me motiva es la cultura popular”.
*Doctor en Estudios Ibéricos y Latinoamericanos de la Universidad Paris Sorbonne-Paris IV, Salim Lamrani es profesor titular de la Universidad de La Reunión y periodista, especialista de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos. Su último libro se titula Cuba, ¡palabra a la defensa!, Hondarribia, Editorial Hiru, 2016.
http://www.tiendaeditorialhiru.com/informe/336-cuba-palabra-a-la-defensa.html
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Paul Vergès y el internacionalismo del Partido Comunista Reunionés
Salim Lamrani
Rebelión
Introducción
Fundado en 1959, año del triunfo de la Revolución Cubana liderada por Fidel Castro, el Partido Comunista Reunionés de Paul Vergès tuvo desde sus tiempos iniciales una vocación internacionalista. Si el objetivo principal es reivindicar el derecho de los reunioneses a la dignidad, el PCR siempre ha mantenido un lazo muy fuerte con los pueblos en lucha por su emancipación. Modesto por su tamaño e influencia, procedente de una minúscula isla perdida en medio del océano Índico, el PCR se ha destacado en cambio por su solidaridad inquebrantable con las causas nobles y jamás ha transigido sobre los principios de fraternidad, generosidad con los humildes de la tierra.
¿Cuáles fueron las grandes causas de la humanidad que apoyó el PCR desde su fundación? ¿En qué zonas geográficas se expresó su solidaridad internacionalista? ¿De qué modo contribuyó a esas luchas? ¿Cuáles fueron las grandes personalidades revolucionarias del siglo XX que conoció Paul Vergès como secretario del PCR? Preguntas a las cuales este artículo aspira a contestar.
El PCR, en nombre del principio de solidaridad entre las luchas, brindó un apoyo constante a los pueblos en lucha en la zona del océano Índico, sea en Sudáfrica o en las islas Chagos. Paul Vergès desempeñó también un papel importante en la solidaridad internacionalista con Vietnam, atacado por el imperialismo estadounidense, exhortando a las dos grandes potencias, la URSS y China, a que pusieran de lado sus diferendos para apoyar la causa de la emancipación que lideró Ho-Chi-Minh. Por fin, el PCR expresó una fidelidad constante a la lucha del pueblo cubano por la preservación de su independencia, símbolo de la aspiración de los desheredados a una vida mejor.
Solidaridad en el océano Índico
El Partido Comunista Reunionés expresó primero su solidaridad internacionalista en su zona geográfica apoyando dos grandes causas: el derecho del pueblo de Chagos a vivir en su tierra natal y la lucha contra el apartheid en Sudáfrica.
Chagos
El archipiélago de Chagos es un conjunto de 65 islas principales de una superficie de alrededor de 60 kilómetros cuadrados, situado al norte del océano Índico, entre África e Indonesia, a unos 2.000 km de La Reunión, entre las cuales la más importante es Diego García (44 km2). Como Isla Reunión, Chagos fue una colonia francesa de poblamiento a partir de 1783. En 1814, tras las guerras napoleónicas y la firma del Tratado de París, Chagos –así como todas las demás islas del océano Índico menos La Reunión– pasan bajo corona británica. En 1903 el archipiélago es integrado a la colonia de Isla Mauricio. En 1965, Chagos es separado de Isla Mauricio, que conseguiría su independencia en 1968, y se convierte en el territorio británico del océano Índico. El archipiélago entonces se pobló con unos dos mil habitantes, en su mayoría descendientes de esclavos originarios de Madagascar y de Mozambique y de trabajadores procedentes de la India.
Por su posición estratégica, en el marco de la Guerra Fría, Estados Unidos decide instalar en 1966 una base militar en la isla de Diego García, la más importante que tiene Washington en el exterior, por una duración total de 70 años (50 años + 20 años). Para ello, y de acuerdo con el Gobierno británico, todos los habitantes de Chagos son arbitrariamente deportados a Isla Mauricio y a Seychelles entre 1966 y 1973, sin posibilidad de regreso, en violación de los artículos 9, 13 y 17 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948. Según el artículo 9, “nadie podrá ser arbitrariamente detenido, preso ni desterrado”. El artículo 13 estipula que “toda persona tiene derecho a salir de cualquier país, incluso del propio, y a regresar a su país”. Por fin, el artículo 17 recuerda que “nadie será privado arbitrariamente de su propiedad”. [1]
El PCR, en virtud de sus principios fundadores de solidaridad internacionalista, expresó su apoyo a la lucha del pueblo de Chagos desde los primeros momentos. En 1989, Paul Vergès, entonces alcalde de la ciudad de Le Port, acogió la primera conferencia internacional sobre la lucha del pueblo de Chagos por el respeto de sus derechos fundamentales. Las autoridades decidieron nombrar la principal avenida de la ciudad “Avenida Chagos”, en homenaje a la lucha de un pueblo considerado hermano según la historia, la geografía y por las aspiraciones a la dignidad.
Olivier Bancoult, presidente del Grupo Refugiados Chagos, rindió tributo a la memoria de Paul Vergès y recordó el apoyo indefectible del PCR a la causa de su pueblo:
“Nos sentimos honrados de que la causa de Chagos formase parte de sus grandes combates. Haber tenido a Paul Vergès a nuestro lado en nuestra lucha por el respeto de nuestros derechos fundamentales fue un privilegio y una gran fuente de inspiración. Fue un verdadero guía, casi un padre, que nos ayudó en nuestras primeras batallas. Recuerdo que durante su mandato como presidente del Consejo Regional entre 1998 y 2010, nos invitó aquí, al Consejo Regional, y nos alentó a que diéramos una dimensión internacional a la lucha de Chagos, a que lleváramos nuestra voz al mundo. Nuestra primera conferencia internacional tuvo lugar aquí, en la ciudad de Le Port, en La Reunión, en 1989, y fue también Paul Vergès el primero en alentar la creación del Comité Solidaridad Chagos-La Reunión. [2]
Hoy el pueblo de Chagos, con 10.000 miembros, aspira todavía a la justicia. Maurice Gironcel, secretario general del PCR, reafirmó en febrero de 2017, con ocasión del IX Congreso del partido, el apoyo de los herederos de Paul Vergès a la causa de Chagos. [3]
La lucha contra el apartheid en Sudáfrica
El PCR también se comprometió de modo resuelto y concreto al lado del pueblo surafricano en la lucha contra el régimen racista de Pretoria y el apartheid. No obstante, el contexto era hostil a la expresión de cualquier solidaridad. En efecto, el Gobierno francés brindaba su apoyo a Pretoria. Existía una línea aérea entre La Reunión y Sudáfrica y el régimen supremacista también tenía una representación diplomática en la isla. Por otra parte el apartheid tenía un grupo de amistad en el Senado francés presidido por Georges Repiquet, un reunionés. Por su parte Paul Vergès, a contrapié del poder dominante y denunciando la complicidad de la Francia institucional con los verdugos de Pretoria, lanzó en La Reunión la consigna “Liberen a Mandela”, símbolo de la resistencia a la opresión, y brindó un apoyo político y material a la lucha contra la segregación racial. [4]
En 1985 el PCR organizó una inmensa manifestación contra el régimen del apartheid y en apoyo a la lucha de los surafricanos por la libertad que reunió a miles de personas. La exigencia era triple: boicot a los productos surafricanos vendidos en La Reunión, cierre de la línea aérea entre Saint-Denis y Johannesburgo y cierre del consulado surafricano.
Como diputado europeo, Paul Vergès encabezó una delegación de parlamentarios y organizó una misión de investigación en Sudáfrica estrangulada por el régimen del apartheid. Marcado por las injusticias que observó allí, el grupo parlamentario publicó un informe denunciando las exacciones cometidas contra la mayoría de los surafricanos, víctimas del sistema segregacionista. Tras la publicación del informe, la Unión Europea decidió restringir sus relaciones diplomáticas con Pretoria.
Durante el centenario de la fundación del Congreso Nacional Africano en enero de 2012, ningún partido político europeo fue invitado a las celebraciones. En cambio el PCR ocupó un lugar de honor al lado de las otras delegaciones, ilustrando así el reconocimiento del pueblo surafricano por la solidaridad activa de los reunioneses.
Apoyo activo a la lucha del pueblo vietnamita
Vietnam fue también una de las grandes causas que defendió el PCR. Esta nación que aspiraba a la plena independencia fue víctima de una guerra implacable de 1965 a 1973 que llevó Estados Unidos, opuesto a la emancipación del pueblo vietnamita. En el espacio de ocho años, se lanzaron más bombas sobre el norte de Vietnam que el total de bombas lanzadas durante toda la Primera y la Segunda Guerras Mundiales. La resistencia popular que lideró Ho-Chi-Minh suscitó una solidaridad internacional, a la cual contribuyó Paul Vergès.
Paul Vergès sentía respeto y admiración por los pueblos de la URSS, su revolución y sus progresos sociales y tenía lazos políticos fuertes con sus dirigentes. En cambio no vacilaba en expresar su oposición cuando consideraba que se violaban los principios y valores internacionalistas. Así, en 1968, condenó la invasión de Praga por la URSS, la calificó de “error trágico” y votó en contra de una moción que presentó el Partido Comunista de la URSS en 1969 durante un congreso que reunió a los partidos progresistas del mundo. En plena crisis entre la Unión Soviética y China, el líder del PCR lanzó un llamado a las dos grandes potencias, exhortándolas a dejar de lado sus diferendos, recordándoles que la gran prioridad era la lucha del pueblo vietnamita contra el imperialismo estadounidense. Paul Vergès se reuniría con Mao Ze Dong en octubre de 1961 durante un viaje a China, echando las bases de lazos duraderos entre el Partido Comunista Chino y el PCR. Paul Vergès también conocería a Ho-Chi-Minh y tejería relaciones con Vietnam.
Fidelidad a Cuba socialista
La Revolución Cubana fue una fuente de inspiración para todos los pueblos que luchaban por su emancipación. En La Reunión, la influencia de las ideas de progreso que vehiculó el proceso liderado por Fidel Castro marcó al PCR. Paul Vergès expresó con elocuencia su admiración por la lucha del pueblo cubano por la dignidad: “Cuba, ejemplo en América Latina de lo que puede hacer un pueblo que toma sus responsabilidades entre sus manos. Es para nosotros otra razón de confianza en nuestra propia victoria en el futuro”. [5]
La Habana siguió con atención el combate del PCR por la igualdad. Los dirigentes cubanos sabían quién era Paul Vergès. Así, con ocasión del XX aniversario del triunfo de la Revolución Cubana en enero de 1979, el Partido Comunista de Cuba invitó al secretario general del PCR a La Habana, el cual, fue recibido con todos los honores. Fidel Castro hizo el esfuerzo para reunirse con Paul Vergès durante un encuentro que duró varias horas.
Los grandes logros de la Revolución Cubana, particularmente la protección social brindada a los más vulnerables, marcó al PCR. Un extracto del diario Témoignages de 1979 expresó ese sentimiento:
“En Cuba ya no hay niños abandonados en las calles. Desaparecieron los limpiabotas, los mendigos. Los niños son reyes. Gozan de buena salud, van a la escuela y a los centros de recreo o están con sus familiares y ya no el temen al futuro. Las mujeres tienen derecho al trabajo, a la palabra, a la libertad. Un Código de la familia las protege a ellas y a sus hijos”. [6]
Paul Vergès pensaba en una posible aplicación en La Reunión de algunas medidas del modelo cubano, particularmente en el campo social. La isla del océano Índico presentaba en aquella época todas las características socioeconómicas de una sociedad del Tercer Mundo. Así, según el Instituto Nacional de Estadística y Estudios Económicos francés (INSEE), en 1970, el ingreso por habitante era inferior a 300 euros, o sea apenas un 17% del nivel nacional. [7] El PCR se sintió impresionado particularmente por el éxito de Cuba en la lucha contra el analfabetismo, que en 1961 se convirtió en el primer territorio del continente en erradicar esta plaga. Hoy La Reunión cuenta con más de 120.000 analfabetos sobre una población de 840.000 habitantes, o sea cerca del 25% de los habitantes entre 16 y 65 años, cuando Cuba resolvió este problema hace más de medio siglo.
Conclusión
El internacionalismo solidario con los pueblos del Sur en lucha por su emancipación fue un valor fundamental que cultivaron Paul Vergès y el PCR. En su tiempo José Martí, Héroe Nacional Cubano, expresó la máxima siguiente: “Patria es Humanidad”. Desde 1959 la Revolución Cubana ha hecho de este principio el pilar de su política exterior. En Isla Reunión el PCR, bajo la égida de Paul Vergès, a su manera y en el límite de sus recursos, ha expresado la solidaridad de los reunioneses con las mujeres y los hombres del planeta que reivindican su derecho inalienable a la autodeterminación, a la paz y a la dignidad.
Notas:
[1] Naciones Unidas, «Déclaration universelle des droits de l’homme», 10 de diciembre de 1948. http://www.un.org/fr/universal-declaration-human-rights/ (sitio consultado el 7 de febrero de 2017).
[2] Olivier Bancoult, «Hommage à Paul Vergès de la part d’Olivier Bancoult et des Chagossiens», Témoignages, 14 de noviembre de 2016. http://www.temoignages.re/politique/actualites/hommage-a-paul-verges-de-la-part-d-olivier-bancoult-et-des-chagossiens,88134 (sitio consultado el 7 de febrero de 2017).
[3] Maurice Gironcel, «Discours de clôture du IX Congrès du Parti Communiste Réunionnais», 5 de febrero de 2017.
[4] Manuel Marchal, «La Réunion-Afrique du Sud : l’amitié repose sur la solidarité des luttes», Témoignages, 9 de diciembre de 2013. http://www.temoignages.re/culture/hommage/la-reunion-afrique-du-sud-l-amitie-repose-sur-la-solidarite-des-luttes,72885 (sitio consultado el 8 de febrero de 2017).
[5] Témoignages, «La Révolution d’un peuple et son triomphe : des raisons de confiance dans notre propre victoire», 21 de enero de 1979. http://www.temoignages.re/politique/actualites/paul-verges-rencontre-fidel-castro,88283 (sitio consultado el 10 de febrero de 2017).
[6] Ibid.
[7] Institut national de la statistique et des études économiques, «La départementalisation de La Réunion», 4 de octubre de 2016. https://www.insee.fr/fr/statistiques/2128996#titre-bloc-28 (sitio consultado el 10 de febrero de 2017).
*Doctor en Estudios Ibéricos y Latinoamericanos de la Universidad Paris Sorbonne-Paris IV, Salim Lamrani es profesor titular de la Universidad de La Reunión y periodista, especialista de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos. Su último libro se titula Cuba, ¡palabra a la defensa!, Hondarribia, Editorial Hiru, 2016. http://www.tiendaeditorialhiru.com/informe/336-cuba-palabra-a-la-defensa.html Facebook: https://www.facebook.com/SalimLamraniOfficiel
miércoles, 19 de junio de 2019
_- Entrevista a Noam Chomsky "El arresto de Assange es escandaloso por el alcance extraterritorial de EEUU"
_- Amy Goodman
Democracy Now!
Chomsky afirma que el caso de Assange es similar al de Lula da Silva, "el preso político más importante del mundo", y que su objetivo es silenciarlo
Los abogados de Julian Assange prometen luchar contra la posible extradición del fundador de WikiLeaks a Estados Unidos tras su detención en Londres. La policía británica sacó de la embajada de Ecuador a Assange a la fuerza, donde estuvo asilado casi siete años. El jueves 11 de abril, Amy Goodman de Democracy Now! habló con Noam Chomsky de la detención de Assange, de WikiLeaks y del poder estadounidense.
Amy Goodman: Esto es Democracy Now! soy Amy Goodman, desde Boston. Durante nuestra charla con Noam Chomsky le pregunté su opinión sobre el arresto de Julian Assange.
Noam Chomsky: El arresto de Assange es escandaloso por varios motivos. Uno de ellos es lo relacionado con los intentos de los gobiernos… y no solo del Gobierno de Estados Unidos. El Gobierno británico está cooperando. Ecuador, por supuesto, está ahora cooperando. Suecia cooperó en el pasado. Me refiero a los intentos por silenciar a un periodista que estaba publicando información que las personas en el poder no querían que se difundiese. Eso es básicamente lo que ha sucedido. WikiLeaks estaba publicando información sobre las personas que están en el poder y que la gente debería conocer. A las personas en el poder no le gusta eso, así que tenemos que silenciarlo. Este tipo de cosas, este tipo de escándalos, son algo común, desafortunadamente.
Podemos ver otro ejemplo justo al lado de Ecuador, en Brasil, donde los acontecimientos que han tenido lugar son extremadamente importantes. Brasil es el país más importante de América Latina y uno de los más importantes del mundo. Durante el gobierno de Lula, a principios de este milenio, Brasil fue tal vez el país más respetado del mundo. Bajo el liderazgo de Lula da Silva fue la voz del Sur Global. Fíjense en lo que pasó. Hubo un golpe de Estado, un golpe ‘suave’, para eliminar los efectos del Partido de los Trabajadores. Eso fue lo que el Banco Mundial describió —no lo digo yo, lo dijo el Banco Mundial— como la «década de oro» de la historia de Brasil, en la que se logró una reducción radical de la pobreza, una extensión masiva de la inclusión de poblaciones marginadas, que conforman una gran parte de la población —la población afrobrasileña, la población indígena— fueron integrados en la sociedad, lo que produjo un sentimiento de dignidad y esperanza en la población. Eso no podía ser tolerado.
Después de que Lula dejara la presidencia, tuvo lugar una especie de «golpe suave», no voy a explicar los detalles, pero el último movimiento, ocurrido el pasado septiembre, fue encarcelar a Lula da Silva, el líder en las encuestas, la figura más popular de Brasil, quien iba a ser, con casi absoluta seguridad, el ganador de las próximas elecciones, y fue encarcelado en confinamiento solitario, esencialmente sentenciado a muerte, 25 años de cárcel, teniendo prohibido leer la prensa o libros y, lo que es más importante, teniendo prohibido realizar declaraciones públicas, a diferencia de los asesinos en masa en el corredor de la muerte. Todo esto para silenciar a la persona que era el probable ganador de las elecciones. Lula es el preso político más importante del mundo ¿Han escuchado algo al respecto?
Bueno, Assange es un caso similar: tenemos que silenciar esta voz. Si retrocedemos en la historia, algunas personas recordarán cuando el Gobierno fascista de Mussolini encarceló a Antonio Gramsci. El fiscal dijo: «Tenemos que silenciar esta voz durante 20 años. No podemos dejar que hable». Eso mismo ocurre con Assange y con Lula. Hay otros casos. Esta es una parte del escándalo.
La otra es el alcance extraterritorial de Estados Unidos, el cual es impactante. ¿Por qué debería tener Estados Unidos u otro… ningún otro Estado podría hacerlo, pero ¿por qué debería tener Estados Unidos el poder de controlar lo que hacen otras personas en otras partes del mundo? Es una situación descabellada. Es algo constante. Ni siquiera nos damos cuenta de ello. Al menos no es algo de lo que se hable.
Es similar al tema de los acuerdos comerciales con China. ¿Cuál es el objetivo de los acuerdos comerciales? Son un intento por impedir el desarrollo económico de China. Eso es exactamente lo que son. Ahora bien, China tiene un modelo de desarrollo. Al Gobierno de Trump no le gusta. Por lo tanto, vamos a debilitarlo. Pregúntese lo siguiente: ¿Qué pasaría si China no respetara las reglas que Estados Unidos está tratando de imponer? China, por ejemplo… cuando Boeing o Microsoft o alguna otra empresa importante invierte en China, China quiere tener algo de control sobre el carácter de esa inversión. Quieren cierto grado de transferencia de tecnología. Deberían obtener algún beneficio de la tecnología. ¿Hay algo malo en eso? Así se desarrolló Estados Unidos, robando —lo que nosotros llamamos robar— tecnología de Inglaterra. Así es como Inglaterra se desarrolló, robando tecnología de países más avanzados: India, los Países Bajos, e incluso Irlanda. Así es como todos los países desarrollados han alcanzado la etapa de desarrollo avanzado. Si a Boeing y Microsoft no les gustan esos acuerdos, pueden decidir no invertir en China. Nadie les está apuntando con un arma en la cabeza. Si hubiera alguien que realmente creyera en el capitalismo, debería ser libres de llegar al acuerdo que quisieran con China. Si eso incluye transferencia de tecnología, está bien. Estados Unidos quiere bloquear eso, para que China no pueda desarrollarse.
Analicemos los llamados «derechos sobre la propiedad intelectual», los exorbitantes derechos de patente para medicamentos, para Windows, por ejemplo. Microsoft tiene el monopolio de los sistemas operativos, a través de la Organización Mundial del Comercio. Supongamos que China no los respeta. ¿Quién se beneficiaría y quién perdería? Bueno, lo cierto es que los consumidores en Estados Unidos se beneficiarían. Eso significaría que obtendrían medicamentos más baratos. Significaría que cuando compran una computadora no estarían obligados a utilizar Windows. Podrían utilizar un sistema operativo mejor. Bill Gates tendría un poco menos dinero. Las corporaciones farmacéuticas no serían tan ricas como son, serían un poco menos ricas. Pero los consumidores se beneficiarían. ¿Hay algo malo en eso? ¿Hay algún problema con eso?
Bueno, uno podría preguntarse: ¿Qué hay detrás de todas estas discusiones y negociaciones? Esto es cierto en todos los ámbitos. En casi cualquier problema que elija, uno podría preguntarse: ¿Por qué se acepta esto? En este caso concreto, ¿por qué es aceptable que Estados Unidos tenga el poder de siquiera iniciar una petición para extraditar a alguien cuyo delito es exponer ante la sociedad información que las personas en el poder no quieren que la sociedad vea? Eso es básicamente lo que está pasando.
Fuente:
http://www.eldiario.es/internacional/VIDEO-Chomsky-arresto-Assange-escandaloso_0_909559801.html
Democracy Now!
Chomsky afirma que el caso de Assange es similar al de Lula da Silva, "el preso político más importante del mundo", y que su objetivo es silenciarlo
Los abogados de Julian Assange prometen luchar contra la posible extradición del fundador de WikiLeaks a Estados Unidos tras su detención en Londres. La policía británica sacó de la embajada de Ecuador a Assange a la fuerza, donde estuvo asilado casi siete años. El jueves 11 de abril, Amy Goodman de Democracy Now! habló con Noam Chomsky de la detención de Assange, de WikiLeaks y del poder estadounidense.
Amy Goodman: Esto es Democracy Now! soy Amy Goodman, desde Boston. Durante nuestra charla con Noam Chomsky le pregunté su opinión sobre el arresto de Julian Assange.
Noam Chomsky: El arresto de Assange es escandaloso por varios motivos. Uno de ellos es lo relacionado con los intentos de los gobiernos… y no solo del Gobierno de Estados Unidos. El Gobierno británico está cooperando. Ecuador, por supuesto, está ahora cooperando. Suecia cooperó en el pasado. Me refiero a los intentos por silenciar a un periodista que estaba publicando información que las personas en el poder no querían que se difundiese. Eso es básicamente lo que ha sucedido. WikiLeaks estaba publicando información sobre las personas que están en el poder y que la gente debería conocer. A las personas en el poder no le gusta eso, así que tenemos que silenciarlo. Este tipo de cosas, este tipo de escándalos, son algo común, desafortunadamente.
Podemos ver otro ejemplo justo al lado de Ecuador, en Brasil, donde los acontecimientos que han tenido lugar son extremadamente importantes. Brasil es el país más importante de América Latina y uno de los más importantes del mundo. Durante el gobierno de Lula, a principios de este milenio, Brasil fue tal vez el país más respetado del mundo. Bajo el liderazgo de Lula da Silva fue la voz del Sur Global. Fíjense en lo que pasó. Hubo un golpe de Estado, un golpe ‘suave’, para eliminar los efectos del Partido de los Trabajadores. Eso fue lo que el Banco Mundial describió —no lo digo yo, lo dijo el Banco Mundial— como la «década de oro» de la historia de Brasil, en la que se logró una reducción radical de la pobreza, una extensión masiva de la inclusión de poblaciones marginadas, que conforman una gran parte de la población —la población afrobrasileña, la población indígena— fueron integrados en la sociedad, lo que produjo un sentimiento de dignidad y esperanza en la población. Eso no podía ser tolerado.
Después de que Lula dejara la presidencia, tuvo lugar una especie de «golpe suave», no voy a explicar los detalles, pero el último movimiento, ocurrido el pasado septiembre, fue encarcelar a Lula da Silva, el líder en las encuestas, la figura más popular de Brasil, quien iba a ser, con casi absoluta seguridad, el ganador de las próximas elecciones, y fue encarcelado en confinamiento solitario, esencialmente sentenciado a muerte, 25 años de cárcel, teniendo prohibido leer la prensa o libros y, lo que es más importante, teniendo prohibido realizar declaraciones públicas, a diferencia de los asesinos en masa en el corredor de la muerte. Todo esto para silenciar a la persona que era el probable ganador de las elecciones. Lula es el preso político más importante del mundo ¿Han escuchado algo al respecto?
Bueno, Assange es un caso similar: tenemos que silenciar esta voz. Si retrocedemos en la historia, algunas personas recordarán cuando el Gobierno fascista de Mussolini encarceló a Antonio Gramsci. El fiscal dijo: «Tenemos que silenciar esta voz durante 20 años. No podemos dejar que hable». Eso mismo ocurre con Assange y con Lula. Hay otros casos. Esta es una parte del escándalo.
La otra es el alcance extraterritorial de Estados Unidos, el cual es impactante. ¿Por qué debería tener Estados Unidos u otro… ningún otro Estado podría hacerlo, pero ¿por qué debería tener Estados Unidos el poder de controlar lo que hacen otras personas en otras partes del mundo? Es una situación descabellada. Es algo constante. Ni siquiera nos damos cuenta de ello. Al menos no es algo de lo que se hable.
Es similar al tema de los acuerdos comerciales con China. ¿Cuál es el objetivo de los acuerdos comerciales? Son un intento por impedir el desarrollo económico de China. Eso es exactamente lo que son. Ahora bien, China tiene un modelo de desarrollo. Al Gobierno de Trump no le gusta. Por lo tanto, vamos a debilitarlo. Pregúntese lo siguiente: ¿Qué pasaría si China no respetara las reglas que Estados Unidos está tratando de imponer? China, por ejemplo… cuando Boeing o Microsoft o alguna otra empresa importante invierte en China, China quiere tener algo de control sobre el carácter de esa inversión. Quieren cierto grado de transferencia de tecnología. Deberían obtener algún beneficio de la tecnología. ¿Hay algo malo en eso? Así se desarrolló Estados Unidos, robando —lo que nosotros llamamos robar— tecnología de Inglaterra. Así es como Inglaterra se desarrolló, robando tecnología de países más avanzados: India, los Países Bajos, e incluso Irlanda. Así es como todos los países desarrollados han alcanzado la etapa de desarrollo avanzado. Si a Boeing y Microsoft no les gustan esos acuerdos, pueden decidir no invertir en China. Nadie les está apuntando con un arma en la cabeza. Si hubiera alguien que realmente creyera en el capitalismo, debería ser libres de llegar al acuerdo que quisieran con China. Si eso incluye transferencia de tecnología, está bien. Estados Unidos quiere bloquear eso, para que China no pueda desarrollarse.
Analicemos los llamados «derechos sobre la propiedad intelectual», los exorbitantes derechos de patente para medicamentos, para Windows, por ejemplo. Microsoft tiene el monopolio de los sistemas operativos, a través de la Organización Mundial del Comercio. Supongamos que China no los respeta. ¿Quién se beneficiaría y quién perdería? Bueno, lo cierto es que los consumidores en Estados Unidos se beneficiarían. Eso significaría que obtendrían medicamentos más baratos. Significaría que cuando compran una computadora no estarían obligados a utilizar Windows. Podrían utilizar un sistema operativo mejor. Bill Gates tendría un poco menos dinero. Las corporaciones farmacéuticas no serían tan ricas como son, serían un poco menos ricas. Pero los consumidores se beneficiarían. ¿Hay algo malo en eso? ¿Hay algún problema con eso?
Bueno, uno podría preguntarse: ¿Qué hay detrás de todas estas discusiones y negociaciones? Esto es cierto en todos los ámbitos. En casi cualquier problema que elija, uno podría preguntarse: ¿Por qué se acepta esto? En este caso concreto, ¿por qué es aceptable que Estados Unidos tenga el poder de siquiera iniciar una petición para extraditar a alguien cuyo delito es exponer ante la sociedad información que las personas en el poder no quieren que la sociedad vea? Eso es básicamente lo que está pasando.
Fuente:
http://www.eldiario.es/internacional/VIDEO-Chomsky-arresto-Assange-escandaloso_0_909559801.html
Cronología del ‘caso Assange’
martes, 18 de junio de 2019
_- ¿Hablamos de prostitución libre, de libre mercado, de economía liberal? Riverita y Arrimadas junto a toda esa trupe canalla de timadores y manipuladores mentirosos, de asesorados por "relaciones públicas" un montaje a base de "marketing político" eso es vuestro llamado partido, como si las personas fuesen objetos a comprar y vender... Como en los tiempos de la esclavitud y servidumbre. Con vuestro "feminismo liberal", al que no aceptan las feministas, y del que vosotros os lamentáis hipócritamente, cínicos canallas... habéis venido a mentir y confundir, a timar a nuestro pueblo, a hacer retroceder el mundo a tiempos peores, al anterior a la Revolución Francesa, en nombre de la LIBERTAD. No se puede ser más canalla.
_- Aquí tenéis un ejemplo de vuestros "principios" y engaños despóticos, la llamada
OPERACIÓN CARIOCA, lo muestra con diáfana claridad a que nivel de trato se puede llegar,...
“Ustedes no son nada. Les pego un tiro, las entierro en una gruta y nadie pregunta”.
La instructora del mayor caso (no el único) sobre proxenetismo en España describe el "terror" de las víctimas en los clubes de Lugo. Y hay cientos de ellos por toda España.
Esta crónica es una pequeña parte de la verdad sobre la prostitución y la trata de blancas.
Los crímenes, la explotación, los abusos, las palizas, el mal trato y las injusticias que se dan cotidianamente en ese sórdido mundo de explotación de seres humanos... Y encima hay quien se permite hablar de libertad de mercados...
El juzgado guarda un fúnebre dibujo infantil pintado por la hija del "tipo más duro de Lugo". Durante la instrucción del caso Carioca, la mayor causa contra el proxenetismo que ha habido en España (275 tomos), la niña explicó que su pintura representaba a "una chica enterrada". La pequeña vivió durante un tiempo en el Queen's, uno de los dos prostíbulos de su padre, José Manuel García Adán, y allí jugaba entre las mujeres víctimas, los clientes y los agentes del orden que supuestamente tejían la red corrupta que blindaba al proxeneta. Algunos de estos funcionarios de los cuerpos de seguridad habían estado en la vida de la cría desde el principio, tanto que hasta aparecen como invitados en el vídeo de su gran fiesta de bautizo, que forma parte de las pruebas del sumario.
Adán "se había granjeado la amistad de varios funcionarios policiales y miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado", afirma en el auto de transformación en procedimiento abreviado Pilar de Lara, titular del Juzgado de Instrucción 1 de Lugo. "Algunos eran asiduos a sus clubes", Queen's y La Colina, y esto "coartaba la voluntad de las mujeres prostituidas a la hora de interponer cualquier denuncia". A lo largo de un centenar de folios, el escrito judicial desmonta la propuesta de las fiscales del caso, que a finales del año pasado defendieron librar del banquillo a todos los agentes imputados en una de las principales piezas de la causa. Tras una década de investigación, el auto de De Lara es uno de los últimos antes de que el asunto caiga en manos de la Audiencia Provincial para su juicio y posiblemente también uno de los postreros antes de la marcha de la magistrada. A falta de resolver un recurso de la juez, el Consejo General del Poder Judicial ha acordado apartarla de su plaza y de sus casos por lo que considera que son "retrasos injustificados" en la instrucción de las mayores causas anticorrupción de Galicia, que están a su cargo.
La magistrada mantiene las imputaciones, además de para los proxenetas, para un policía local que cree que era socio del negocio del Queen's; para otro municipal del que sospecha que suministraba munición al jefe de la trama; y para un agente nacional investigado por colaborar supuestamente desde el aeropuerto de Barajas al tráfico ilegal de personas.
Entre unos 370 testigos de la Carioca que relataron en el juzgado sus vivencias, Y.C. declara que cuando acudió a la comisaría a denunciar que Adán le había pegado una paliza y le había puesto una pistola en la cabeza, se encontró con que el jefe de la trama había llegado antes y "los policías se negaron" a recogerle a ella la denuncia. S.F.O., otra de las trabajadoras de los clubes, reproduce en otra parte del sumario la amenaza con la que supuestamente el proxeneta imponía su ley y les recordaba su indefensión: "¿Quiénes son ustedes? Nadie, ustedes no son nada. Si les pasa algo, ¿quién va a preguntar por ustedes? Nadie. Yo les pego un tiro y las llevo a enterrar a una gruta y nadie pregunta", narraba esta mujer traída de Latinoamérica, utilizando en su declaración pronombres de cortesía más propios de su país de origen que de un burdel donde, según De Lara, las mujeres "trabajaban en régimen de auténtica esclavitud".
Patrocinador del fútbol de los policías
Según la magistrada, Adán "las sometía a un régimen de control absoluto", "amenazándolas, gritándoles, insultándolas y agrediéndolas", "en un extremado clima de violencia". En los primeros registros le fueron incautadas cinco pistolas y abundante munición. Buena parte de los proyectiles aparecieron escondidos en el pozo del Queen's. El proxeneta, pendiente de los juicios de la Carioca pero ya en prisión por violencia de género contra su esposa, "exhibía armas y hacía gala del poder que ostentaba", "presumía de sus magnificas relaciones" con policías y guardias civiles, a los que invitaba a sexo y copas. Incluso "patrocinaba un equipo de fútbol" formado por agentes, y así "desmotivaba por completo a las mujeres" a la hora de denunciar el "absoluto clima de presión, sometimiento, intimidación y terror" que reinaba.
"Muchas fueron agredidas o amenazadas por Adán", que solía "hacer prácticas de tiro sobre la parte de atrás del club, en la zona del gallinero, del pozo y en una furgoneta", recuerda De Lara. Algunas declaran que "las humillaba lanzando el dinero por los aires para que se agacharan a recogerlo", o que las llamaba "putas fracasadas", "vacas gordas", “sinvergüenzas”. E.P. asegura que presenció "cómo Adán se subió a la mesa del comedor, se quitó su pantalón, se quedó en calzoncillos y tiró al suelo un montón de billetes". "Allí había más de 2.000 euros y gritó: 'quien me la chupe, se queda con el dinero", cuenta la testigo.
Después de una noche que ella recuerda como terrorífica, Y.C. comunicó al jefe su intención de abandonar el club y él, recoge el último auto, "reaccionó de forma violenta". La chica dice que la llamó "muerta de hambre" y que la "agredió brutalmente", la "golpeó", la "agarró por el pelo", la "arrastró por el suelo" y siguió pegándole hasta que "pudo ponerse en pie". Entonces, Adán ordenó a un empleado que "fuera a buscar la pistola que tenía guardada en la oficina": "José, búscame la 38, que le voy a dar a esta, que a los huevos mismos va a quedar". Luego le puso la pistola en la cabeza: "Te voy a matar". S.F.O. describe también un momento en que fue encañonada por el dueño del Queen's con un arma "que sacó del cinturón": "Mira lo que te puede pasar", asegura que le dijo el hombre entre risas, al comprobar que a ella le "temblaban las piernas". Otras veces les pegó "puñetazos" y "patadas" a ella y a una amiga. La mujer explica que después Adán "cogió sus cosas, las tiró a la calle" y la amenazó de muerte si denunciaba.
E.P. narra cómo un día el cabecilla de esta supuesta mafia de proxenetismo "lanzó un cuchillo desde la puerta de entrada al salón hasta la puerta del baño", y allí "quedó clavado" después de pasarle a ella "como a cuatro centímetros de la cabeza". En otro episodio de "cólera" distinto, Adán la golpeó, la arrastró afuera "cogiéndola por los pelos", le siguió pegando y le gritó: "Quédate fuera, puta, que si vuelves a entrar te mato". La víctima tuvo que acudir al hospital. Dice que allí le preguntaron a qué se debían las heridas, un corte en el labio y hematomas "por todo el cuerpo". Y que mintió por miedo: sostuvo ante el médico que se había "caído por las escaleras".
En otra pieza de la Carioca pendiente de juicio, Adán supuestamente obliga a abortar a una chica de 18 años que no quería hacerlo, en una intervención sin anestesia y con la máquina de aspirado de la clínica atascada. El niño no podía llegar a nacer porque su existencia podría complicar la vida del supuesto padre, un conocido empresario local que gastaba miles de euros en el club.
Tanto Adán como, sobre todo, su encargado, José Manuel Pulleiro Núñez, aprovechándose del miedo, la soledad, el aislamiento y la vulnerabilidad y debilidad de las mujeres, mantenían relaciones sexuales con ellas, especialmente con las que llegaban nuevas a los establecimientos", afirma la magistrada de Lugo. "Numerosas declaraciones ponen en evidencia cómo Pulleiro solía 'catar' o 'probar' a las jóvenes", continúa en su auto, e incluso "no cobraba la suma diaria de 43 euros" en concepto de alojamiento "ni imponía multas a las que mantenían relaciones sexuales con él". "Entre los amigos lo llamaban El Semental", detalló en su declaración un allegado: "Le gustaban sobre todo las brasileñas y colombianas"; "todas acababan acostándose con él".
En el Queen's y en La Colina "existía un consumo generalizado de drogas, particularmente cocaína, que facilitaba el propio dueño". Muchas mujeres esnifaban "para soportar las duras condiciones laborales", dice el escrito judicial. "Adán conseguía engancharlas, y garantizar la permanencia en sus locales, tanto de las mujeres como de los clientes, mayoritariamente reconocidos empresarios" entre los que alguno "llegó a gastar más de 4.000 euros en una sola noche".
LA JUEZ OFRECE A LA XUNTA PERSONARSE COMO ACUSACIÓN POR LA LEY DE VIOLENCIA DE GÉNERO S. R. P.
En el auto, De Lara ofrece a la Xunta de Galicia personarse como acusación en virtud de la ley gallega de violencia de género. Recuerda al Gobierno de Alberto Núñez Feijóo, además, que, en 2009 en el Queen's ejercía una menor. La muchacha fue localizada durante una redada pero "inexplicablemente", en palabras de la juez, ni los policías ni los funcionarios de Extranjería "detectaron" la falsedad de su pasaporte, con un año de nacimiento ficticio, sobrescrito por ella misma a bolígrafo. Más tarde la niña, con 17 años, ejerció en otro burdel lucense. Pero las fiscales decidieron exculpar, en otra pieza del sumario, al dueño de este segundo negocio, famoso entre la clientela por las supuestas facilidades que daba para practicar sexo sin condón.
Las mujeres llegaban, sobre todo, del Estado brasileño de Goiás, con una deuda contraída de entre 3.000 y 4.000 euros, en viajes orquestados por la trama con operadores del país americano. Los investigadores lograron identificar a más de 40 chicas que entraron así en España, muchas, supuestamente, con la instrucción específica de acceder por la puerta 16 del aeropuerto de Barajas, donde la magistrada sostiene que había un policía nacional conchabado al que mantiene imputado en este auto. Uno de los contactos que gestionaban los viajes de las mujeres desde Brasil llegó a recibir 89.682 euros en 84 operaciones de envío de dinero de la red lucense. Ya en los clubes, las trabajadoras tenían que saldar sus deudas ejerciendo la prostitución. Según la juez, ocurrió varias veces que, tras el viaje, alguna de las mujeres escapaba y la amiga que quedaba bajo el control de Adán y Pulleiro era obligada a asumir el precio y pagar el doble.
Fuente:
https://elpais.com/sociedad/2019/06/16/actualidad/1560702688_907602.html?rel=lom
OPERACIÓN CARIOCA, lo muestra con diáfana claridad a que nivel de trato se puede llegar,...
“Ustedes no son nada. Les pego un tiro, las entierro en una gruta y nadie pregunta”.
La instructora del mayor caso (no el único) sobre proxenetismo en España describe el "terror" de las víctimas en los clubes de Lugo. Y hay cientos de ellos por toda España.
Esta crónica es una pequeña parte de la verdad sobre la prostitución y la trata de blancas.
Los crímenes, la explotación, los abusos, las palizas, el mal trato y las injusticias que se dan cotidianamente en ese sórdido mundo de explotación de seres humanos... Y encima hay quien se permite hablar de libertad de mercados...
El juzgado guarda un fúnebre dibujo infantil pintado por la hija del "tipo más duro de Lugo". Durante la instrucción del caso Carioca, la mayor causa contra el proxenetismo que ha habido en España (275 tomos), la niña explicó que su pintura representaba a "una chica enterrada". La pequeña vivió durante un tiempo en el Queen's, uno de los dos prostíbulos de su padre, José Manuel García Adán, y allí jugaba entre las mujeres víctimas, los clientes y los agentes del orden que supuestamente tejían la red corrupta que blindaba al proxeneta. Algunos de estos funcionarios de los cuerpos de seguridad habían estado en la vida de la cría desde el principio, tanto que hasta aparecen como invitados en el vídeo de su gran fiesta de bautizo, que forma parte de las pruebas del sumario.
Adán "se había granjeado la amistad de varios funcionarios policiales y miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado", afirma en el auto de transformación en procedimiento abreviado Pilar de Lara, titular del Juzgado de Instrucción 1 de Lugo. "Algunos eran asiduos a sus clubes", Queen's y La Colina, y esto "coartaba la voluntad de las mujeres prostituidas a la hora de interponer cualquier denuncia". A lo largo de un centenar de folios, el escrito judicial desmonta la propuesta de las fiscales del caso, que a finales del año pasado defendieron librar del banquillo a todos los agentes imputados en una de las principales piezas de la causa. Tras una década de investigación, el auto de De Lara es uno de los últimos antes de que el asunto caiga en manos de la Audiencia Provincial para su juicio y posiblemente también uno de los postreros antes de la marcha de la magistrada. A falta de resolver un recurso de la juez, el Consejo General del Poder Judicial ha acordado apartarla de su plaza y de sus casos por lo que considera que son "retrasos injustificados" en la instrucción de las mayores causas anticorrupción de Galicia, que están a su cargo.
La magistrada mantiene las imputaciones, además de para los proxenetas, para un policía local que cree que era socio del negocio del Queen's; para otro municipal del que sospecha que suministraba munición al jefe de la trama; y para un agente nacional investigado por colaborar supuestamente desde el aeropuerto de Barajas al tráfico ilegal de personas.
Entre unos 370 testigos de la Carioca que relataron en el juzgado sus vivencias, Y.C. declara que cuando acudió a la comisaría a denunciar que Adán le había pegado una paliza y le había puesto una pistola en la cabeza, se encontró con que el jefe de la trama había llegado antes y "los policías se negaron" a recogerle a ella la denuncia. S.F.O., otra de las trabajadoras de los clubes, reproduce en otra parte del sumario la amenaza con la que supuestamente el proxeneta imponía su ley y les recordaba su indefensión: "¿Quiénes son ustedes? Nadie, ustedes no son nada. Si les pasa algo, ¿quién va a preguntar por ustedes? Nadie. Yo les pego un tiro y las llevo a enterrar a una gruta y nadie pregunta", narraba esta mujer traída de Latinoamérica, utilizando en su declaración pronombres de cortesía más propios de su país de origen que de un burdel donde, según De Lara, las mujeres "trabajaban en régimen de auténtica esclavitud".
Patrocinador del fútbol de los policías
Según la magistrada, Adán "las sometía a un régimen de control absoluto", "amenazándolas, gritándoles, insultándolas y agrediéndolas", "en un extremado clima de violencia". En los primeros registros le fueron incautadas cinco pistolas y abundante munición. Buena parte de los proyectiles aparecieron escondidos en el pozo del Queen's. El proxeneta, pendiente de los juicios de la Carioca pero ya en prisión por violencia de género contra su esposa, "exhibía armas y hacía gala del poder que ostentaba", "presumía de sus magnificas relaciones" con policías y guardias civiles, a los que invitaba a sexo y copas. Incluso "patrocinaba un equipo de fútbol" formado por agentes, y así "desmotivaba por completo a las mujeres" a la hora de denunciar el "absoluto clima de presión, sometimiento, intimidación y terror" que reinaba.
"Muchas fueron agredidas o amenazadas por Adán", que solía "hacer prácticas de tiro sobre la parte de atrás del club, en la zona del gallinero, del pozo y en una furgoneta", recuerda De Lara. Algunas declaran que "las humillaba lanzando el dinero por los aires para que se agacharan a recogerlo", o que las llamaba "putas fracasadas", "vacas gordas", “sinvergüenzas”. E.P. asegura que presenció "cómo Adán se subió a la mesa del comedor, se quitó su pantalón, se quedó en calzoncillos y tiró al suelo un montón de billetes". "Allí había más de 2.000 euros y gritó: 'quien me la chupe, se queda con el dinero", cuenta la testigo.
Después de una noche que ella recuerda como terrorífica, Y.C. comunicó al jefe su intención de abandonar el club y él, recoge el último auto, "reaccionó de forma violenta". La chica dice que la llamó "muerta de hambre" y que la "agredió brutalmente", la "golpeó", la "agarró por el pelo", la "arrastró por el suelo" y siguió pegándole hasta que "pudo ponerse en pie". Entonces, Adán ordenó a un empleado que "fuera a buscar la pistola que tenía guardada en la oficina": "José, búscame la 38, que le voy a dar a esta, que a los huevos mismos va a quedar". Luego le puso la pistola en la cabeza: "Te voy a matar". S.F.O. describe también un momento en que fue encañonada por el dueño del Queen's con un arma "que sacó del cinturón": "Mira lo que te puede pasar", asegura que le dijo el hombre entre risas, al comprobar que a ella le "temblaban las piernas". Otras veces les pegó "puñetazos" y "patadas" a ella y a una amiga. La mujer explica que después Adán "cogió sus cosas, las tiró a la calle" y la amenazó de muerte si denunciaba.
E.P. narra cómo un día el cabecilla de esta supuesta mafia de proxenetismo "lanzó un cuchillo desde la puerta de entrada al salón hasta la puerta del baño", y allí "quedó clavado" después de pasarle a ella "como a cuatro centímetros de la cabeza". En otro episodio de "cólera" distinto, Adán la golpeó, la arrastró afuera "cogiéndola por los pelos", le siguió pegando y le gritó: "Quédate fuera, puta, que si vuelves a entrar te mato". La víctima tuvo que acudir al hospital. Dice que allí le preguntaron a qué se debían las heridas, un corte en el labio y hematomas "por todo el cuerpo". Y que mintió por miedo: sostuvo ante el médico que se había "caído por las escaleras".
En otra pieza de la Carioca pendiente de juicio, Adán supuestamente obliga a abortar a una chica de 18 años que no quería hacerlo, en una intervención sin anestesia y con la máquina de aspirado de la clínica atascada. El niño no podía llegar a nacer porque su existencia podría complicar la vida del supuesto padre, un conocido empresario local que gastaba miles de euros en el club.
Tanto Adán como, sobre todo, su encargado, José Manuel Pulleiro Núñez, aprovechándose del miedo, la soledad, el aislamiento y la vulnerabilidad y debilidad de las mujeres, mantenían relaciones sexuales con ellas, especialmente con las que llegaban nuevas a los establecimientos", afirma la magistrada de Lugo. "Numerosas declaraciones ponen en evidencia cómo Pulleiro solía 'catar' o 'probar' a las jóvenes", continúa en su auto, e incluso "no cobraba la suma diaria de 43 euros" en concepto de alojamiento "ni imponía multas a las que mantenían relaciones sexuales con él". "Entre los amigos lo llamaban El Semental", detalló en su declaración un allegado: "Le gustaban sobre todo las brasileñas y colombianas"; "todas acababan acostándose con él".
En el Queen's y en La Colina "existía un consumo generalizado de drogas, particularmente cocaína, que facilitaba el propio dueño". Muchas mujeres esnifaban "para soportar las duras condiciones laborales", dice el escrito judicial. "Adán conseguía engancharlas, y garantizar la permanencia en sus locales, tanto de las mujeres como de los clientes, mayoritariamente reconocidos empresarios" entre los que alguno "llegó a gastar más de 4.000 euros en una sola noche".
LA JUEZ OFRECE A LA XUNTA PERSONARSE COMO ACUSACIÓN POR LA LEY DE VIOLENCIA DE GÉNERO S. R. P.
En el auto, De Lara ofrece a la Xunta de Galicia personarse como acusación en virtud de la ley gallega de violencia de género. Recuerda al Gobierno de Alberto Núñez Feijóo, además, que, en 2009 en el Queen's ejercía una menor. La muchacha fue localizada durante una redada pero "inexplicablemente", en palabras de la juez, ni los policías ni los funcionarios de Extranjería "detectaron" la falsedad de su pasaporte, con un año de nacimiento ficticio, sobrescrito por ella misma a bolígrafo. Más tarde la niña, con 17 años, ejerció en otro burdel lucense. Pero las fiscales decidieron exculpar, en otra pieza del sumario, al dueño de este segundo negocio, famoso entre la clientela por las supuestas facilidades que daba para practicar sexo sin condón.
Las mujeres llegaban, sobre todo, del Estado brasileño de Goiás, con una deuda contraída de entre 3.000 y 4.000 euros, en viajes orquestados por la trama con operadores del país americano. Los investigadores lograron identificar a más de 40 chicas que entraron así en España, muchas, supuestamente, con la instrucción específica de acceder por la puerta 16 del aeropuerto de Barajas, donde la magistrada sostiene que había un policía nacional conchabado al que mantiene imputado en este auto. Uno de los contactos que gestionaban los viajes de las mujeres desde Brasil llegó a recibir 89.682 euros en 84 operaciones de envío de dinero de la red lucense. Ya en los clubes, las trabajadoras tenían que saldar sus deudas ejerciendo la prostitución. Según la juez, ocurrió varias veces que, tras el viaje, alguna de las mujeres escapaba y la amiga que quedaba bajo el control de Adán y Pulleiro era obligada a asumir el precio y pagar el doble.
Fuente:
https://elpais.com/sociedad/2019/06/16/actualidad/1560702688_907602.html?rel=lom
Etiquetas:
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lunes, 17 de junio de 2019
_- Ella también. Rosa Montero
_- Einstein obligó a firmar a su primera esposa un contrato humillante. Quemó sus cartas y jamás mencionó la aportación que hizo a su trabajo
LA LECTURA de la reciente novela de Nativel Preciado, El Nobel y la corista, en donde hace un genial retrato del Einstein mujeriego, me ha hecho recordar la perturbadora historia de Mileva Marić, la física y matemática serbia que fue la primera esposa del científico. Mileva y Einstein se conocieron en 1896 en el Instituto Politécnico de Zúrich, del que eran alumnos. Ella tenía 21 años; él, 17. Fue un amor a primera vista. Mileva había mostrado desde niña tanto talento que su padre decidió darle la mejor educación. Para comprender hasta qué punto esta actitud era rompedora, baste decir que el padre tuvo que pedir un permiso especial para que su hija pudiera estudiar Física y Matemáticas, dos carreras solo para varones. Era un mundo que les negaba todo a las mujeres.
Mileva y Albert empezaron a vivir y trabajar juntos, pese a la furibunda oposición de la madre de él. Que su amado la defendiera frente a su propia madre debió de crear en la joven un sentimiento de gratitud inacabable. Y así, cuando el profesor Weber admitió a Mileva para el doctorado, después de haber rechazado a Albert porque no le consideraba preparado, ella supeditó su aceptación a la inclusión de Einstein. Mileva, mejor matemática que él, revisaba los errores de su amante; sus correcciones abundan en los apuntes de Albert:
“Ella resuelve mis problemas matemáticos”.
A la joven le obsesionaba encontrar un fundamento matemático para la transformación de la materia en energía; compartió con Albert esta fascinación (las cartas se conservan) y a Einstein le pareció interesante la idea de su pareja. En 1900 terminaron un primer artículo sobre la capilaridad; era un trabajo conjunto (“le di una copia [al profesor Jung] de nuestro artículo”, escribió Einstein), aunque solo lo firmó él. ¿Por qué? Porque una firma de mujer desacreditaba el trabajo. Porque Mileva quería que Einstein triunfara para que se casara con ella (él había dicho que hasta que no pudiera mantenerla económicamente no lo haría). Por la patológica gratitud, dependencia psicológica y enfermiza humildad que el machismo inocula.
Y entonces comenzó, insidiosamente, la desgracia. En 1901, Mileva fue a Serbia a dar a luz secretamente a una niña de la que no volvió a saberse nada: quizá acabara en un orfanato. Poco después Einstein consiguió un empleo como perito en la Oficina de Patentes de Berna y, ya con un sueldo, se casaron. Según varios testimonios, mientras Albert trabajaba sus ocho horas al día, Mileva escribía postulados que luego debatía con él por las noches. Además cuidaba de la casa y del primer hijo, Hans Albert. “Seré muy feliz (…) cuando concluyamos victoriosamente nuestro trabajo sobre el movimiento relativo” (carta de Einstein a Mileva). En 1905 aparecieron en los Anales de la Física los tres (5) cruciales artículos de Einstein firmados solo por él, aunque hay un testimonio escrito del director de los Anales, el físico Joffe, diciendo que vio los textos con la firma de Einstein-Marić.
Y la desgracia engordó. Tuvieron un segundo hijo, aquejado de esquizofrenia; Einstein se hizo famoso, se enamoró de su prima, quiso dejar a Mileva y ella se aferró enfermizamente a él. Comenzó entonces (hasta la separación en 1914) un maltrato psicológico atroz; hay un contrato que Einstein obligó a firmar a su mujer, un texto humillante de esclavitud. Pero siendo ese contrato aberrante, aún me parece peor lo que el Nobel hizo con el legado de Mileva: quemó sus cartas, no mencionó jamás su aportación, solo la citó en una línea de su autobiografía. Los agentes de Einstein intentaron borrar todo rastro de Marić; se apropiaron sin permiso de cartas de la familia y las hicieron desaparecer. También desapareció la tesis doctoral que Mileva presentó en 1901 en la Politécnica y que, según testimonios, consistía en el desarrollo de la teoría de la relatividad. No estoy diciendo que Einstein no fuera un gran científico: digo que ella también lo era. Pero él se empeñó en borrarla, y lo consiguió hasta 1986, cuando, tras la muerte de su hijo Hans Albert, se encontró una caja llena de cartas que tuvieron grandes repercusiones científicas. Pese a ello, Mileva sigue aplastada bajo el rutilante mito de Einstein. Así de mezquinas y de trágicas son las consecuencias del sexismo.
A LECTURA de la reciente novela de Nativel Preciado, El Nobel y la corista, en donde hace un genial retrato del Einstein mujeriego, me ha hecho recordar la perturbadora historia de Mileva Marić, la física y matemática serbia que fue la primera esposa del científico. Mileva y Einstein se conocieron en 1896 en el Instituto Politécnico de Zúrich, del que eran alumnos. Ella tenía 21 años; él, 17. Fue un amor a primera vista. Mileva había mostrado desde niña tanto talento que su padre decidió darle la mejor educación. Para comprender hasta qué punto esta actitud era rompedora, baste decir que el padre tuvo que pedir un permiso especial para que su hija pudiera estudiar Física y Matemáticas, dos carreras solo para varones. Era un mundo que les negaba todo a las mujeres.
Mileva y Albert empezaron a vivir y trabajar juntos, pese a la furibunda oposición de la madre de él. Que su amado la defendiera frente a su propia madre debió de crear en la joven un sentimiento de gratitud inacabable. Y así, cuando el profesor Weber admitió a Mileva para el doctorado, después de haber rechazado a Albert porque no le consideraba preparado, ella supeditó su aceptación a la inclusión de Einstein. Mileva, mejor matemática que él, revisaba los errores de su amante; sus correcciones abundan en los apuntes de Albert: “Ella resuelve mis problemas matemáticos”. A la joven le obsesionaba encontrar un fundamento matemático para la transformación de la materia en energía; compartió con Albert esta fascinación (las cartas se conservan) y a Einstein le pareció interesante la idea de su pareja. En 1900 terminaron un primer artículo sobre la capilaridad; era un trabajo conjunto (“le di una copia [al profesor Jung] de nuestro artículo”, escribió Einstein), aunque solo lo firmó él. ¿Por qué? Porque una firma de mujer desacreditaba el trabajo. Porque Mileva quería que Einstein triunfara para que se casara con ella (él había dicho que hasta que no pudiera mantenerla económicamente no lo haría). Por la patológica gratitud, dependencia psicológica y enfermiza humildad que el machismo inocula.
Y entonces comenzó, insidiosamente, la desgracia. En 1901, Mileva fue a Serbia a dar a luz secretamente a una niña de la que no volvió a saberse nada: quizá acabara en un orfanato. Poco después Einstein consiguió un empleo como perito en la Oficina de Patentes de Berna y, ya con un sueldo, se casaron. Según varios testimonios, mientras Albert trabajaba sus ocho horas al día * (10 horas 6 días a la semana y sin vacaciones, olvidamos o borran nuestra historia, las luchas y muertes que costaron conseguir las 8 horas, 1919 por primera vez en España en algunas fábricas de armas del estado), Mileva escribía postulados que luego debatía con él por las noches. Además cuidaba de la casa y del primer hijo, Hans Albert. “Seré muy feliz (…) cuando concluyamos victoriosamente nuestro trabajo sobre el movimiento relativo” (carta de Einstein a Mileva). En 1905 aparecieron en los Anales de la Física los tres cruciales artículos de Einstein firmados solo por él, aunque hay un testimonio escrito del director de los Anales, el físico Joffe, diciendo que vio los textos con la firma de Einstein-Marić.
Y la desgracia engordó. Tuvieron un segundo hijo, aquejado de esquizofrenia; Einstein se hizo famoso, se enamoró de su prima, quiso dejar a Mileva y ella se aferró enfermizamente a él. Comenzó entonces (hasta la separación en 1914) un maltrato psicológico atroz; hay un contrato que Einstein obligó a firmar a su mujer, un texto humillante de esclavitud. Pero siendo ese contrato aberrante, aún me parece peor lo que el Nobel hizo con el legado de Mileva: quemó sus cartas, no mencionó jamás su aportación, solo la citó en una línea de su autobiografía. Los agentes de Einstein intentaron borrar todo rastro de Marić; se apropiaron sin permiso de cartas de la familia y las hicieron desaparecer. También desapareció la tesis doctoral que Mileva presentó en 1901 en la Politécnica y que, según testimonios, consistía en el desarrollo de la teoría de la relatividad. No estoy diciendo que Einstein no fuera un gran científico: digo que ella también lo era. Pero él se empeñó en borrarla, y lo consiguió hasta 1986, cuando, tras la muerte de su hijo Hans Albert, se encontró una caja llena de cartas que tuvieron grandes repercusiones científicas. Pese a ello, Mileva sigue aplastada bajo el rutilante mito de Einstein. Así de mezquinas y de trágicas son las consecuencias del sexismo.
https://www.blogger.com/blogger.g?blogID=1197417193044529487#editor/target=post;postID=2850497986454802561
*En esa fecha en la Oficina de Patentes Suizas, se trabajaba 10 horas al día, 6 días a la semana. Y se podían considerar privilegiados, trabajar 12 horas era muy normal, y de sol a sol en el campo, con trabajo nocturno también para niños y mujeres incluso embarazadas, sin vacaciones. Qué fácilmente olvidamos la historia del movimiento obrero. El 1 de mayo se instituyó para pedir las 8 horas de trabajo y costó muchas luchas y muertes. Y sospecho que el olvido no es algo casual, la derecha niega el progreso humano y no solo lo niega sino que trabaja y conspira para volver atrás, a los tiempos de la esclavitud y servidumbre. Ello lo convierten en el llamado sentido común y la cultura hegemónica o dominante, "siempre ha sido así". No es el caso con Rosa Montero, pero se ha dado como normal las 8 horas... En un tiempo que no lo era. Hasta 1919, después de grandes huelgas, no comenzó a trabajarse 8 horas en España, en las fábricas militares como la Fábrica de Artillería de Sevilla (donde mi abuelo paterno Francisco Peña fue maestro), La Pirotecnia Militar de Sevilla (donde mi abuelo materno, José Vela Gutiérrez, fue maestro) o la Fábrica Militar de Armas de Trubia en Asturias (donde fue maestro mi tío abuelo José Peña Gordo).
Más, https://elpais.com/elpais/2019/06/21/eps/1561117075_895780.html
LA LECTURA de la reciente novela de Nativel Preciado, El Nobel y la corista, en donde hace un genial retrato del Einstein mujeriego, me ha hecho recordar la perturbadora historia de Mileva Marić, la física y matemática serbia que fue la primera esposa del científico. Mileva y Einstein se conocieron en 1896 en el Instituto Politécnico de Zúrich, del que eran alumnos. Ella tenía 21 años; él, 17. Fue un amor a primera vista. Mileva había mostrado desde niña tanto talento que su padre decidió darle la mejor educación. Para comprender hasta qué punto esta actitud era rompedora, baste decir que el padre tuvo que pedir un permiso especial para que su hija pudiera estudiar Física y Matemáticas, dos carreras solo para varones. Era un mundo que les negaba todo a las mujeres.
Mileva y Albert empezaron a vivir y trabajar juntos, pese a la furibunda oposición de la madre de él. Que su amado la defendiera frente a su propia madre debió de crear en la joven un sentimiento de gratitud inacabable. Y así, cuando el profesor Weber admitió a Mileva para el doctorado, después de haber rechazado a Albert porque no le consideraba preparado, ella supeditó su aceptación a la inclusión de Einstein. Mileva, mejor matemática que él, revisaba los errores de su amante; sus correcciones abundan en los apuntes de Albert:
“Ella resuelve mis problemas matemáticos”.
A la joven le obsesionaba encontrar un fundamento matemático para la transformación de la materia en energía; compartió con Albert esta fascinación (las cartas se conservan) y a Einstein le pareció interesante la idea de su pareja. En 1900 terminaron un primer artículo sobre la capilaridad; era un trabajo conjunto (“le di una copia [al profesor Jung] de nuestro artículo”, escribió Einstein), aunque solo lo firmó él. ¿Por qué? Porque una firma de mujer desacreditaba el trabajo. Porque Mileva quería que Einstein triunfara para que se casara con ella (él había dicho que hasta que no pudiera mantenerla económicamente no lo haría). Por la patológica gratitud, dependencia psicológica y enfermiza humildad que el machismo inocula.
Y entonces comenzó, insidiosamente, la desgracia. En 1901, Mileva fue a Serbia a dar a luz secretamente a una niña de la que no volvió a saberse nada: quizá acabara en un orfanato. Poco después Einstein consiguió un empleo como perito en la Oficina de Patentes de Berna y, ya con un sueldo, se casaron. Según varios testimonios, mientras Albert trabajaba sus ocho horas al día, Mileva escribía postulados que luego debatía con él por las noches. Además cuidaba de la casa y del primer hijo, Hans Albert. “Seré muy feliz (…) cuando concluyamos victoriosamente nuestro trabajo sobre el movimiento relativo” (carta de Einstein a Mileva). En 1905 aparecieron en los Anales de la Física los tres (5) cruciales artículos de Einstein firmados solo por él, aunque hay un testimonio escrito del director de los Anales, el físico Joffe, diciendo que vio los textos con la firma de Einstein-Marić.
Y la desgracia engordó. Tuvieron un segundo hijo, aquejado de esquizofrenia; Einstein se hizo famoso, se enamoró de su prima, quiso dejar a Mileva y ella se aferró enfermizamente a él. Comenzó entonces (hasta la separación en 1914) un maltrato psicológico atroz; hay un contrato que Einstein obligó a firmar a su mujer, un texto humillante de esclavitud. Pero siendo ese contrato aberrante, aún me parece peor lo que el Nobel hizo con el legado de Mileva: quemó sus cartas, no mencionó jamás su aportación, solo la citó en una línea de su autobiografía. Los agentes de Einstein intentaron borrar todo rastro de Marić; se apropiaron sin permiso de cartas de la familia y las hicieron desaparecer. También desapareció la tesis doctoral que Mileva presentó en 1901 en la Politécnica y que, según testimonios, consistía en el desarrollo de la teoría de la relatividad. No estoy diciendo que Einstein no fuera un gran científico: digo que ella también lo era. Pero él se empeñó en borrarla, y lo consiguió hasta 1986, cuando, tras la muerte de su hijo Hans Albert, se encontró una caja llena de cartas que tuvieron grandes repercusiones científicas. Pese a ello, Mileva sigue aplastada bajo el rutilante mito de Einstein. Así de mezquinas y de trágicas son las consecuencias del sexismo.
A LECTURA de la reciente novela de Nativel Preciado, El Nobel y la corista, en donde hace un genial retrato del Einstein mujeriego, me ha hecho recordar la perturbadora historia de Mileva Marić, la física y matemática serbia que fue la primera esposa del científico. Mileva y Einstein se conocieron en 1896 en el Instituto Politécnico de Zúrich, del que eran alumnos. Ella tenía 21 años; él, 17. Fue un amor a primera vista. Mileva había mostrado desde niña tanto talento que su padre decidió darle la mejor educación. Para comprender hasta qué punto esta actitud era rompedora, baste decir que el padre tuvo que pedir un permiso especial para que su hija pudiera estudiar Física y Matemáticas, dos carreras solo para varones. Era un mundo que les negaba todo a las mujeres.
Mileva y Albert empezaron a vivir y trabajar juntos, pese a la furibunda oposición de la madre de él. Que su amado la defendiera frente a su propia madre debió de crear en la joven un sentimiento de gratitud inacabable. Y así, cuando el profesor Weber admitió a Mileva para el doctorado, después de haber rechazado a Albert porque no le consideraba preparado, ella supeditó su aceptación a la inclusión de Einstein. Mileva, mejor matemática que él, revisaba los errores de su amante; sus correcciones abundan en los apuntes de Albert: “Ella resuelve mis problemas matemáticos”. A la joven le obsesionaba encontrar un fundamento matemático para la transformación de la materia en energía; compartió con Albert esta fascinación (las cartas se conservan) y a Einstein le pareció interesante la idea de su pareja. En 1900 terminaron un primer artículo sobre la capilaridad; era un trabajo conjunto (“le di una copia [al profesor Jung] de nuestro artículo”, escribió Einstein), aunque solo lo firmó él. ¿Por qué? Porque una firma de mujer desacreditaba el trabajo. Porque Mileva quería que Einstein triunfara para que se casara con ella (él había dicho que hasta que no pudiera mantenerla económicamente no lo haría). Por la patológica gratitud, dependencia psicológica y enfermiza humildad que el machismo inocula.
Y entonces comenzó, insidiosamente, la desgracia. En 1901, Mileva fue a Serbia a dar a luz secretamente a una niña de la que no volvió a saberse nada: quizá acabara en un orfanato. Poco después Einstein consiguió un empleo como perito en la Oficina de Patentes de Berna y, ya con un sueldo, se casaron. Según varios testimonios, mientras Albert trabajaba sus ocho horas al día * (10 horas 6 días a la semana y sin vacaciones, olvidamos o borran nuestra historia, las luchas y muertes que costaron conseguir las 8 horas, 1919 por primera vez en España en algunas fábricas de armas del estado), Mileva escribía postulados que luego debatía con él por las noches. Además cuidaba de la casa y del primer hijo, Hans Albert. “Seré muy feliz (…) cuando concluyamos victoriosamente nuestro trabajo sobre el movimiento relativo” (carta de Einstein a Mileva). En 1905 aparecieron en los Anales de la Física los tres cruciales artículos de Einstein firmados solo por él, aunque hay un testimonio escrito del director de los Anales, el físico Joffe, diciendo que vio los textos con la firma de Einstein-Marić.
Y la desgracia engordó. Tuvieron un segundo hijo, aquejado de esquizofrenia; Einstein se hizo famoso, se enamoró de su prima, quiso dejar a Mileva y ella se aferró enfermizamente a él. Comenzó entonces (hasta la separación en 1914) un maltrato psicológico atroz; hay un contrato que Einstein obligó a firmar a su mujer, un texto humillante de esclavitud. Pero siendo ese contrato aberrante, aún me parece peor lo que el Nobel hizo con el legado de Mileva: quemó sus cartas, no mencionó jamás su aportación, solo la citó en una línea de su autobiografía. Los agentes de Einstein intentaron borrar todo rastro de Marić; se apropiaron sin permiso de cartas de la familia y las hicieron desaparecer. También desapareció la tesis doctoral que Mileva presentó en 1901 en la Politécnica y que, según testimonios, consistía en el desarrollo de la teoría de la relatividad. No estoy diciendo que Einstein no fuera un gran científico: digo que ella también lo era. Pero él se empeñó en borrarla, y lo consiguió hasta 1986, cuando, tras la muerte de su hijo Hans Albert, se encontró una caja llena de cartas que tuvieron grandes repercusiones científicas. Pese a ello, Mileva sigue aplastada bajo el rutilante mito de Einstein. Así de mezquinas y de trágicas son las consecuencias del sexismo.
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*En esa fecha en la Oficina de Patentes Suizas, se trabajaba 10 horas al día, 6 días a la semana. Y se podían considerar privilegiados, trabajar 12 horas era muy normal, y de sol a sol en el campo, con trabajo nocturno también para niños y mujeres incluso embarazadas, sin vacaciones. Qué fácilmente olvidamos la historia del movimiento obrero. El 1 de mayo se instituyó para pedir las 8 horas de trabajo y costó muchas luchas y muertes. Y sospecho que el olvido no es algo casual, la derecha niega el progreso humano y no solo lo niega sino que trabaja y conspira para volver atrás, a los tiempos de la esclavitud y servidumbre. Ello lo convierten en el llamado sentido común y la cultura hegemónica o dominante, "siempre ha sido así". No es el caso con Rosa Montero, pero se ha dado como normal las 8 horas... En un tiempo que no lo era. Hasta 1919, después de grandes huelgas, no comenzó a trabajarse 8 horas en España, en las fábricas militares como la Fábrica de Artillería de Sevilla (donde mi abuelo paterno Francisco Peña fue maestro), La Pirotecnia Militar de Sevilla (donde mi abuelo materno, José Vela Gutiérrez, fue maestro) o la Fábrica Militar de Armas de Trubia en Asturias (donde fue maestro mi tío abuelo José Peña Gordo).
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domingo, 16 de junio de 2019
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