El debate político quedó planteado en los siguientes términos: ¿Sería capaz el PP de llenar las 12.000 localidades de la plaza de toros de Valencia, tal como hizo recientemente el líder del PSOE, Pedro Sánchez? ¿Podría el partido conservador revalidar la “exhibición de músculo” en un feudo afín desde hace 25 años? La plaza prácticamente se llenó (el Partido Popular habilitó 2.000 localidades añadidas), aunque con claros en los sectores y muchos huecos en la gradería más alta. Zanjada la cuestión, los discursos depararon pocas sorpresas: alegría desatada por la “recuperación” económica; pavor ante posibles tripartitos o cuatripartitos “progresistas”; anticatalanismo y apelaciones al regionalismo (“todos juntos somos España”, proclamó Rita Barberá); caluroso apoyo del presidente del Gobierno a los líderes locales; y, sobre todo, ninguna alusión al desempleo, la corrupción, el despilfarro y los recortes.
El ambiente no era de plena euforia (hace cuatro años, la multitud rugía dos horas antes del mitin en una plaza abarrotada: “¡Za-pa-tero di-mi-sión!”). La larga espera de ayer (la plaza abrió sus puertas mucho antes de las 19,30 horas) fue agitada por un animador, que citaba los municipios de donde aterrizaron simpatizantes y afiliados: Manises, Alzira, Sueca, Nules, Calp, Benicarló, Vinarós, Xirivella, Altura, Algemesí, Elche, Aspe… La postal evocaba tiempos antañones. Para no decaer en el aburrimiento (el listado resultaba interminable), la organización preparó música discotequera y temas pegadizos: “Torero”, “la bomba”, “Me sube la bilirrubina” y el pasodoble español…
Senyeras con la franja azul, banderas de España y otras con la gaviota escenificaban la unidad, concretada en un grito de guerra: “¿Quién va a ganar? ¡El Partido Popular!” Era la consigna, repetida por un público mayoritariamente de edad avanzada, y que había decorado la grada con pancartas entusiásticas (“Trabajar, Hacer, Crecer”; “Alberto President”; “Tots per una gran Comunitat”…). Un enorme dispositivo policial en la entrada de la plaza, calles aledañas y bocanas del metro garantizaba esta unanimidad: hubo identificaciones y a personas con distintivos de la PAH se les impidió acceder al mitin.
“No nos presentamos con las manos vacías”, afirmó Mariano Rajoy, quien cerró con su intervención el acto (después de los parlamentos de Rita Barberá y Alberto Fabra). Con esta frase ambigua, quiso introducir la retahíla de logros económicos y “recuperación” de la crisis que han preñado su discurso de campaña. “Somos el país que más crece de Europa y el que más empleo genera. ¿Quién nos lo iba a decir en 2012?, cuando España era el enfermo de la Unión Europea y se destruían 1.400 empleos al día; ¿Quién habla hoy de salida del euro, “rescate financiero”, quiebra del sistema de pensiones o una prima de riesgo desbocada?”, se preguntó el presidente del ejecutivo. Además, “el PP se ha convertido en el refugio del sentido común y de la cordura”.
Las palabras de Rajoy fueron precedidas de un vídeo espectacular sobre la “marca” España: un país exportador por excelencia, con empresas líderes en el mundo, el mayor número de playas “azules” del hemisferio norte, con el tercer patrimonio de la humanidad, el segundo país en reservas de la biosfera y líderes en innovación con proyectos en los cinco continentes (el AVE La Meca-Medina, el Canal de Panamá, el Metro de Riad…). Tal es el panorama que, informa el vídeo, “el 82% de quienes visitan nuestro país, repiten”.
Sin embargo, la EPA del primer trimestre de 2015 cifra en 5.444.600 personas el número de parados; el número de hogares con todos sus miembros en desempleo aumentó en 27.300 personas sobre el trimestre anterior, y asciende ya a 1.793.600 familias. Además, los salarios de un tercio de los españoles se sitúan por debajo del salario mínimo interprofesional. Según Intermón-Oxfam, España es el segundo país más desigual de Europa, tras Letonia (el 1% más rico de la población española, según la misma fuente, concentra mayor riqueza que el 70% más pobre). La pobreza energética, según la Asociación de Ciencias Ambientales, afecta a 7 millones de personas (el 17% de los hogares españoles).
El mismo día que la Fiscalía Provincial de Valencia abriera las diligencias de investigación penal por el denominado “RitaLeaks” (466 facturas desveladas por Compromís, relacionadas con gastos de representación de Alcaldía que suponen 278.000 euros en comidas, hoteles y viajes en la presente legislatura), el presidente del Gobierno se refería durante el mitin a la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, en estos términos: “Voy a decir lo que creo y lo que siento: Rita es la mejor alcaldesa que merece Valencia, la mujer que ha liderado la transformación de la ciudad desde 1991; desde que Rita es alcaldesa, Valencia ha dado un salto adelante como ninguna ciudad europea”.
Pero el Ayuntamiento capitaneado por Barberá adeuda al estado –en concreto al ICO- 400 millones de euros por la Copa América (la alcaldesa ha asociado su gestión también a otros “grandes eventos”, como la Fórmula 1, que ha costado unos 300 millones de euros a los valencianos). El consistorio es, además, el tercero en endeudamiento del país (en torno a 870 millones de euros de deuda), tras Madrid y Barcelona. No aludió Rajoy a la querencia de la alcaldesa por los bolsos caros: su nombre apareció, dentro de la “trama” Gürtel, relacionado con el regalo de bolsos de la marca Louis Vuitton; un testigo del caso Emarsa afirmó haberle llevado a Rita Barberá (como regalo) dos bolsos de Loewe.
De tono populista y talante autoritario, la dirigente del PP se ha caracterizado por un escaso respeto por el patrimonio: ha insistido hasta el último día de la legislatura en ampliar la avenida de Blasco Ibáñez hasta el mar, lo que implica la demolición de 1.651 viviendas en un barrio –el Cabanyal- declarado Bien de Interés Cultural (BIC). De momento paralizado, el Plan General promovido por el PP planteaba la reclasificación de 415 hectáreas de huerta, lo que permitiría construir unas 17.000 viviendas y diferentes infraestructuras.
Sobre Alberto Fabra, quien aterrizó a la presidencia de Generalitat en julio de 2011 (tras la dimisión de Francisco Camps), el presidente del Gobierno no se ha mostrado neutral: “Alberto Fabra llegó en los peores momentos de la crisis, cuando muchos se hubieran echado atrás; y entonces es donde puede verse a un buen gobernante; lo cierto es que Alberto no se arrugó y, como siempre ocurre en la vida, el esfuerzo y la dedicación rinde frutos”. Más aún, “las exportaciones valencianas van como un tiro, el turismo bate todos los registros, repunta el consumo… y la Comunidad Valenciana está a la cabeza”. Según Rajoy, en los dos últimos años de legislatura “hemos creado un millón de puestos de trabajo”. Y ha agregado en tono mitinero: “este partido –el PP-no se ha hecho en media hora, no somos una pandilla ni el producto de una tertulia o un plató de televisión”…
Los partidos de la oposición a Fabra en las Cortes Valencianas y las organizaciones sociales no comparten las impresiones de Rajoy. Los familiares de las víctimas del accidente de Metro del 3 de julio de 2006, que se saldó con 43 muertos y 47 heridos, han criticado el menosprecio del Consell. En noviembre de 2013, Alberto Fabra resolvió cerrar Radiotelevisió Valenciana, que acumulaba una deuda de más de 1.200 millones de euros (Canal 9 subvencionó y patrocinó a clubes de fútbol con cerca de 400 millones de euros). A finales de 2014, el País Valenciano encabezaba la ratio de deuda pública por comunidades autónomas (37,90% respecto al PIB). EUPV-IU ha denunciado que entre 2009 y 2013 el País Valenciano ha liderado los recortes en inversión educativa (28,2%) en el conjunto del estado. STEPV hizo público, a partir de cifras oficiales, que al menos 14.000 menores valencianos comenzaron el curso 2014-2015 en “barracones”.
EUPV-IU también ha criticado que, ya en 2009, el País Valenciano era una de las autonomías con menor gasto sanitario por habitante (en el periodo 2009-2013 se redujo además un 20,4%). Comisiones Obreras cifra la reducción de la plantilla sanitaria, entre 2012 y junio de 2014, en 1.035 profesionales. Con Alberto Fabra, asegura EUPV-IU, no sólo ha aumentado el número de personas desempleadas, sino que la tasa de riesgo de pobreza afecta al 31,7% de la población. Añade la formación de izquierdas que el número de desahucios en el País Valenciano, en la presente legislatura, supera los 40.000. Y ninguna mención en el mitin a la ristra de casos de supuesta corrupción: Gürtel, Blasco, Cotino, Emarsa, Imelsa, Calatrava, Sonia Castedo y Enrique Oriz, Carlos Fabra, Terra Mítica, Valmor…
Enric Llopis
Fuente: aquí.
sábado, 23 de mayo de 2015
El presidente del Gobierno afirma que el PP “no se presenta a las elecciones con las manos vacías”. Rajoy omite el paro, los recortes y la corrupción en el mitin de la plaza de toros de Valencia. (Habría que habría que recordarle; ¡¡no!! se presentan con las manos y, sobre todo, con los bolsillos llenos de sobres con "sobre sueldos". Mientras han convertido a más españoles en pobres, miseros y sin hogar que nunca en los 30 últimos años)
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