En una carta abierta, 16 líderes empresariales proponen una contribución especial, porque el déficit y la deuda "amenazan" al país y a Europa.
El llamamiento del multimillonario Warren Buffet a aumentar los impuestos para los más ricos ha calado en Francia, donde un grupo de 16 grandes fortunas emula el ejemplo estadounidense. En una tribuna publicada ayer en la web del semanal Nouvel Observateur, algunas de las mayores fortunas de Francia, entre ellos la mujer más rica del país y propietaria de L'Oréal, Liliane Bettencourt, piden la creación de una "contribución excepcional" para los más adinerados, como ayuda para enfrentar la tremenda crisis que afecta tanto a Francia como a Europa. El Gobierno, que prepara nuevas medidas de austeridad que anunciará hoy, está de hecho analizando la creación de una imposición extraordinaria para el 1% de personas más ricas del país.
"Deseamos que se instaure una contribución excepcional que afectaría a los contribuyentes franceses más favorecidos", empiezan el llamamiento, redactado por el semanal y aprobado por los firmantes, la gran mayoría presidentes de grandes empresas. Entre ellos se encuentran los de L'Oréal, Jean-Paul Agon; de Total, Christophe de Margerie; de Société Générale, Frédéric Oudéa, y de PSA Peugeot Citroën, Philippe Varin. "Somos conscientes de habernos beneficiado plenamente de un modelo francés y de un entorno europeo a los que estamos vinculados y que deseamos seguir preservando", añaden.El grupo justifica la creación de esta medida excepcional por el contexto actual, "en el que el déficit de las finanzas públicas y las perspectivas de empeoramientode la deuda del Estado amenazan el futuro de Francia y de Europa". Dado que "el Gobierno pide a todos un esfuerzo de solidaridad, nos parece necesario contribuir", explica la nota, de apenas un par de párrafos.
La crisis de la deuda ha golpeado de pleno a la segunda economía de la zona euro, que se ha convertido en el centro de todas las especulaciones en las últimas semanas. El Gobierno prepara de hecho nuevas medidas de ahorro para cumplir con sus compromisos de reducción del déficit, que debería anunciar hoy. Una de ellas podría ser precisamente la instauración de un impuesto para las grandes fortunas.
Millonarios franceses a favor de la subida de impuestos a las rentas más altas
- Liliane Bettencourt, (88 años) accionista mayoritaria del grupo de cosmética L'Oreal. Capitalización bursátil: 47.822 millones de euros. Fortuna personal: 16 millones.
- Frédéric Oudéa, (48 años) director general del banco Société Générale. Capitalización bursatil: 16.220 millones de euros. Fortuna personal: 2,9 millones de euros.
- Stéphane Richard, (50 años) director general de France Telecom. Capitalización bursatil: 34.117 millones de euros. Fortuna personal: 1,7 millones.
- Philippe Varin, (59 años) presidente de PSA Peugeot-Citroën. Capitalización bursátil: 4.372 millones de euros. Fortuna personal: 3,3 millones.
El texto del Nouvel Observateur no da ninguna cifra de imposición concreta, y se limita a indicar que el impuesto sería calculado en "proporciones razonables" para evitar la huida de capital y la evasión fiscal. Sin embargo, Gilles Carrez, el encargado del presupuesto ante la Asamblea Nacional del partido presidencial, la conservadora Unión por un Movimiento Popular, ya ha propuesto la creación de una tasa excepcional de entre el 1% y el 2% sobre los ingresos de los contribuyentes que declaran más de un millón de euros por año, lo cual apenas supone el 0,01% de la población.
Según los estudios de los economistas Thomas Piketry, Camille Landais y Emmanuel Saez, el sistema fiscal actual, debido a la gran cantidad de desgravaciones, es tal que el 50% de la población más modesta paga en torno a un 45% de impuestos en Francia, cuando los 500.000 más adinerados apenas contribuyen con un 35%.
Con este llamamiento, el grupo sigue el ejemplo marcado por el inversor y filántropo estadounidense Warren Buffet en su tribuna publicada la semana pasada en The New York Times, en la que pedía un cambio del sistema de imposición demasiado generoso con los más ricos. En Francia, Michel Lévy, dirigente de Publicis, fue el primero en secundar la iniciativa con un artículo de opinión publicado por el diario Le Monde, en la que se expresaba en su calidad de presidente de la Asociación Francesa de Empresas Privadas, un club muy exclusivo de las grandes sociedades del país.
Otras personalidades, como el empresario y compañero sentimental del fallecido Yves Saint-Laurent, Pierre Bergé; el presidente de BNP Paribas, Michel Pébereau, y el de Virgin Mobile, Geoffroy Roux de Bézieux, también han manifestado su disposición a aceptar este tributo. Además del llamamiento, el semanal publica la opinión de otros empresarios que, sin llegar a firmar el texto, ven la iniciativa con buenos ojos, como Henri de Castries, presidente de AXA, el propio Pébereau o Bertrand Puech y Patrich Thomas, gerentes de Hermès. El País, 24 de agosto de 2011.
Insuficiente? otras opiniones.
miércoles, 24 de agosto de 2011
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