Mario Bunge, en su libro "Las pseudociencias ¡vaya timo!" (Ed. Laetoli, 2010), escribe:
-"...todos los estudiantes de económicas y empresariales deben estudiar microeconomía neoclásica. Sin embargo, es improbable que usen dicha teoría para abordar algún problema económico de la vida real.
La razón de tal inutilidad es que algunos de los postulados de esa teoría son abiertamente irreales, otros excesivamente difusos y difícilmente comprobables.
En efecto, la teoría supone que todos los actores del mercado son libres, mutuamente independientes, perfectamente bien informados, igualmente poderosos, inmunes a la política y completamente "racionales", es decir, capaces de elegir la opción que con mayor probabilidad maximizará la utilidad esperada.
Pero el mercado real está poblado de individuos y empresas que poseen una información imperfecta y, lejos de ser completamente libres, pertenecen a redes sociales o a monopolios." (pag. 59)
- "Los hombres prácticos, que se creen libres de toda influencia intelectual, son por lo general esclavos de algún economista difunto (cita de Keynes) y la alumna favorita de Keynes, Dame Joan Robinson, señaló que estas ideas, a su vez, responden a intereses creados.
La grave crisis económica que comenzó en septiembre de 2008 y tomó por sorpresa a todo el mundo... suscita la pregunta de si las ideas que guiaron a esos supuestos expertos son realmente científicas o, por el contrario, un revoltijo de semiciencia y pseudociencia." (pag. 210)
-"... la economía neoclásica se ha convertido en una pseudociencia más, pero se trata de una pseudociencia que se oculta detrás de una fachada matemática, lo cual intimida al analfabeto matemático." (pag. 124)
-"... muchos de los premios Nobel de economía (premios del Banco de Suecia) se otorgan a inventores de modelos matemáticos que no tienen ningún reflejo en la realidad económica, de entrada porque ignoran la producción y la política, o se otorgan a diseñadores de políticas económicas que perjudican a los pobres." (pag. 55)
-"... la mayoría de los libros de texto de economía son coherentes. Sin embargo, están tan alejados de la realidad económica que los hombres de negocios y los diseñadores de políticas sólo utilizan algunas porciones de ellos." (pag. 213)
-"... falacias de los economistas:
-todos los recursos naturales son inagotables.
-todos los humanos son egoístas.
-todos los humanos son racionales.
-todo acto y empresa económicos pueden predecirse por leyes históricas o matemáticas.
-la propiedad privada es ilimitada y sagrada mientras que la propiedad pública debe ser siempre limitada y escasa.
-los medios de producción (y los transportes y las finanzas) deben estar en manos privadas.
-la economía solamente puede existir en un sistema de mercado como el capitalismo, ese mercado es independiente de la política y de la cultura y se autorregula por sus propias leyes internas.
-todo mercado siempre tiende hacia un equilibrio de demanda y de oferta.
-el mejor sistema político es el que posee el mercado más libre y con lo mínimos impuestos,
-el mercado debe poder crecer sin límites.
-los economistas no tienen obligaciones morales,
-el Estado debe promover el comercio." (pag. 212)
-son falacias porque los hombres no son racionales sino impulsivos, las condiciones ambientales cambian y nadie sabe si podrá devolver el préstamo que ha pedido.
Los economistas funcionan calculando no por leyes matemáticas sino a ojo de buen cubero, en la realidad. No se obtiene el rendimiento máximo de una acción económica porque no se puede predecir qué va a pasar con esa acción económica. El Estado puede expropiar terreno privado y además la civilización, para Bunge, ha progresado gracias a los servicios públicos. La empresa privada significa a menudo empresas de armas, de tabaco, de drogas. Hay otros tipos de mercados como las familias, el trueque, las cooperativas.
El Estado debe proteger a las empresas contra su propia incompetencia, contra la competencia salvaje y contra las OPAS. La economía no puede existir independientemente de la cultura, especialmente de la tecnológica. Los mercados no se autorregulan porque siempre están sufriendo expansiones y depresiones.
La ley de la demanda es desvirtuada porque las grandes industrias de cada país están en manos de unos pocos monopolios. No se alcanza nunca un equilibrio económico espontáneo sino que hay constantemente subidas y bajadas, sobreabundancia y escasez. Las grandes empresas reciben muchos subsidios. (ver pág. 213 a 216)
-"En resumen, las ideas centrales de la microeconomía clásica son conceptualmente vagas e imposibles de poner a prueba, dos características de la pseudociencia." (pag. 214)
-"... los presupuestos y principios de la filosofía económica ortodoxa no están empíricamente confirmados ni moralmente justificados, además de lo cual esta filosofía es responsable, en gran medida, de la crisis económica de 2008." (pág. 217)
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