martes, 16 de agosto de 2011

Ante la crisis la caridad no debe sustituir a los derechos asistenciales

Los servicios sociales están disminuyendo cuando más ciudadanos los necesitan - Cientos de casos se derivan hacia organizaciones benéficas - Los expertos alertan de que así se rompe el pacto social
Los profesionales de los servicios sociales públicos se lamentan con frecuencia de que este pilar del Estado de bienestar es la cenicienta entre los cuatro existentes -con las pensiones, la educación y la sanidad-. La crisis les está dando la razón con abundancia, porque justo en estos años en que se redoblan las carencias, los que temían pasan a ser pobres y los que ya lo eran cruzan la raya de la exclusión; en momentos en que el desempleo vacía la nevera y muestra su cara más amarga a los jóvenes que no completaron estudios; cuando las aguas se vuelven turbulentas en aquellos hogares reunidos de nuevo por el impago de hipotecas... Justo ahora, los servicios sociales están pasando más hambre que nadie.
"Se puede decir que los están dejando en los huesos, en su estructura más básica, y encima hay una tendencia a devolverlos al asistencialismo, más propio de la antigua beneficencia que de un derecho público consagrado", critica Ana Lima, presidenta del Consejo de Trabajadores Sociales.
Se refiere, por un lado a la escasez de presupuestos, los que destina el Gobierno han disminuido en nueve millones y los convenios que mantenían las comunidades y los Ayuntamientos con empresas para la atención de las muchas necesidades sociales "están reduciéndose o, directamente, no se renuevan", afirma Lima. "Es fácil que todo eso ocurra porque no hay una ley estatal, ni comunitarias, que los garantice: son solo convenios que se firman en épocas de vacas gordas, pero que se echan abajo en situación deficitaria", dice. En paralelo, asistimos a "una visión asistencialista, paliativa, un parcheo aquí y allá, donde surge la necesidad. Eso es más propio de la labor, encomiable, que desarrollan las organizaciones benéficas privadas, pero los servicios sociales son mucho más que eso", afirma Lima.
Para empezar, son un derecho, no una simple ayuda caritativa, por tanto, tratan de alejar el estigma de aquellos que solicitan este apoyo en momentos de carencias. Cuando Nuria (no quiere apellidos) decidió que la familia no debía seguir sosteniendo su precaria situación económica acudió a la asistente social en busca de una renta básica de inserción. "Al principio no me hacía mucha gracia, la verdad, me daba la impresión de que estaba pidiendo limosna, mendigando, pero pensé, -y mis hermanos me convencieron-, que si existían estos organismos, y si estaban para eso... Aunque bueno, sigue sin hacerme gracia, yo lo que quiero es trabajar y decir, 'esto me lo he ganado'. Lo otro, quieras que no, me lo dan. Ya sé que también es con mis impuestos, pero...".
Los servicios sociales, además, abordan cada caso de una manera integral, o tratan de hacerlo. Conseguir una renta de inserción, que ronda entre 400 o 500 euros, según los casos y las comunidades autónomas, requiere algo más que pasar por una débil situación económica. "Mi hija y yo nos hemos comprometido a acudir a las oficinas de empleo siempre que nos llamen. Aunque ella está en la universidad, gracias a las becas, siempre puede trabajar en fines de semana o en vacaciones, algo que sea compatible con los estudios", dice esta zaragozana. Los servicios sociales le ayudan también a redactar currículos, preparar entrevistas de trabajo... "Y ahora, en septiembre, empezarán los cursillos formativos: puedo elegir, pero tengo que hacer alguno de ellos", señala.
"La reducción del gasto público social está afectando negativamente al bienestar y la calidad de vida de grandes sectores de la ciudadanía. Estos recortes no pueden ser sustituidos por acciones benéficas de carácter caritativo. Estas organizaciones no tienen ni los recursos ni las infraestructuras para suplir los servicios públicos que están siendo eliminados. Es volver al siglo XIX, cuando ya estamos en el siglo XXI", critica Vicenç Navarro, catedrático de Políticas Públicas de la Universidad Pompeu Fabra.
"Lo que es indignante es que se diga que España no tiene los fondos para mantener o incluso expandir el gasto público social cuando los datos muestran que el gasto público social es mucho más bajo que el que le corresponde por su nivel de riqueza económica. El PIB per cápita de España es el 94% del promedio de la UE de los 15. Y en cambio, el gasto público social por habitante es solo el 74% del promedio de esos países. Si fuera el 94% nos gastaríamos 66.000 millones de euros más de lo que nos gastamos en nuestro Estado de bienestar", explica Navarro. Cree que los recursos existen "pero el Estado no los recoge porque teme enfrentarse con los grupos financieros, económicos y clases sociales adineradas que no contribuyen a las arcas del Estado como lo hacen sus homólogos en la UE de los 15", critica...
¿Justifica una situación de crisis, por más feroz que esta sea, el adelgazamiento de los servicios sociales o más bien debería ser al contrario?
"Para volver a la beneficencia, por más que alguien lo pretendiera, se necesitaría cambiar la Constitución. El artículo 1, el 10 y el 41 consagran la dignidad personal y la protección social de la ciudadanía como derecho fundamental. La beneficencia pública entra en contradicción con un Estado social de Derecho", dice Patrocinio de las Heras, que fue en los ochenta responsable de Acción Social, del Instituto Nacional de Acción Social y del Inserso." ,,, Leer todo en El País. Más aquí.


lunes, 15 de agosto de 2011

¿Déficits a largo plazo? No hay tal problema.

Standard & Poor’s no degradó la calificación del sistema político de estadounidense. No degradó la calificación del mercado de valores. Degradó la calificación de los bonos y de las letras del Tesoro de los EEUU, y lo hizo después de que el Congreso hubiera descartado cualquier posibilidad, por pequeña que fuera, del menor aplazamiento en los pagos. Así pues, resulta instructivo que, en la apertura de mercados del día siguiente, los inversores salieran masivamente de los valores en bolsa para recalar en el puerto seguro de los bonos y las letras del Tesoro estadounidense. Rara vez ha sido tan presta y apabullantemente en evidencia la estupidez...

De un lado, están quienes profesan el aborrecimiento de todo déficit con el argumento de que el sector productivo privado crecerá, lo que absorberá con creces todos los efectos de los recortes públicos. Este es un atractivo punto de vista dieciochesco que puede encontrarse en Adam Smith y refleja la época en que los campesinos y los pequeños artesanos eran objeto de predación por parte de señores, reyes y recaudadores de impuestos. El único problema es que las cosas han cambiado mucho desde que Adam Smith publicó en 1776 su Riqueza de las naciones.

La otra fuerza ne presencia son los liberales de izquierda que andaban deseperados hace dos años para que el Congreso aprobara un paquete de estímulos a corto plazo y que, a trueque de eso, se mostraban dispuestos a admitir que había un “problema a largo plazo de reducción del déficit”. En qué exactamente consista ese problema –¿suplantación pública de la actividad económica privada? ¿Inflación? ¿Altos tipos de interés a largo plazo?—, es cosa que raramente se especifica, si es que alguna vez se hace, porque nada de eso resulta ni remotamente plausible con una tasa de desempleo superior al 9% y con deflación por sobreendeudamiento y los tipos de interés por los suelos que vemos ahora. Hecha, empero, la concesión por motivos de retórica y equilibrio políticos, quedan atrapados en ella. Paul Krugman es un ejemplo señero: tan recientemente como el pasado 6 de agosto, escribía en su blog:

“América tiene un problema fiscal a largo plazo generado por la combinación de los costes crecientes de la sanidad que van con una población envejecida y la falta de voluntad política para aumentar los impuestos con que pagar los programas sociales de que disponemos. No encaramos este problema, y pasarán cosas graves.”

Dos cosas hay que observar aquí. Primera: Krugman no dice en qué consisten las “cosas graves”. Segundo: no menciona los tipos de interés ni menciona en ningún caso lo que pasa con la ratio deuda/PIB si los tipos se mantienen. (Respuesta: la proporción deuda/PIB tiende a estabilizarse, y no pasa nada más, como he mostrado en un trabajo que puede verse pulsando este enlace.) Y entonces da todo su peso a la presión que, a fines del presente año, se ejercerá a favor de los recortes en la Seguridad Social, Medicare y Mediaid que se aplazado este agosto. Unos recortes a los que, sin duda, Krugman se opone.
La perversa naturaleza del acuerdo sobre el techo de deuda obligará al Pentágono a entrar en liza a favor de recortes en la Seguridad Social, Medicare y Medicaid. Y eso será así, aun cuando los recortes que afectarán al Pentágono si el Congreso no aprueba las recomendaciones del nuevo “supercomité” sean más bien engañosos. Parece obvio que los Republicanos, lo mismo que la Casa Blanca, entienden esa dinámica perfectamente, razón por la cual el conejo de los recortes en el gasto de defensa salió de la chistera del acuerdo del techo de deuda en el último minuto. Como de costumbre, los progresistas que por unos momentos creyeron en una victoria aquí de los Demócratas fueron timados.

¿Qué hay, pues, que hacer? No es este momento para formular políticas capaces, por ejemplo, de crear empleo, construir infraestructuras públicas o lidiar con el cambio climático. Nada de eso puede hacerse, hasta que cambien las ideas. Y el primer cambio debe venir del cuestionamiento y el rechazo de todo este sinsentido que viene oyéndose sobre los déficits presupuestarios a largo plazo, la bancarrota o la insolvencia nacional y la “responsabilidad fiscal”. El único propósito de toda esta campaña propagandística es la paralización del Estado –incluida la actividad regulatoria y la de los tribunales de justicia— y deshacer las conquistas históricas de la Seguridad Social, Medicare y Medicaid. La defensa de esos programas exitosos, eficaces –y sí, sostenibles— se ha vuelto harto más difícil, acaso imposible. Pero es necesario hacerla, y hasta el final.

James K. Galbraith es profesor de economía en la Lyndon B. Johnson School of Public Affairs, de la University of Texas-Austin. Hijo del llorado economista canadiense John K. Galbraith, ocupó anteriormente varios puestos en el Congreso de los Estados Unidos, incluida la dirección ejecutiva del Joint Economic Committee.
Leer todo el artículo en Sin Permiso


sábado, 13 de agosto de 2011

Portugal. Cuando las barbas de tu vecino... ¿el espejo de lo que hará el PP?

Fotos de Lisboa
Los portugueses se desayunaron ayer con un inesperado y amargo aperitivo: una brutal subida del IVA en productos esenciales para las familias y las pequeñas y medianas empresas. El gas y la electricidad pasarán de tener un IVA del 6% al 23%, casi cuatro veces más (un aumento del 283%), a partir de octubre, pese a que el compromiso asumido en mayo con la troika formada por el Fondo Monetario Internacional (FMI), la Unión Europea y el Banco Central Europeo (BCE) para la concesión de un rescate de 78.000 millones de euros contemplaba una subida menos onerosa, y para en enero de 2012.
La medida, que llega apenas diez semanas después de las elecciones generales que desalojaron del poder al socialista José Sócrates, no figuraba en el programa electoral del conservador Pedro Passos Coelho.
El encargado de anunciarla fue el ministro de Finanzas, Vítor Louçã Rabaça Gaspar, defensor del neoliberalismo a ultranza y en la barricada opuesta a la de su pariente y también profesor de economía, Francisco Louçã, líder del Bloco de Esquerda (BE), uno de los primeros dirigentes en condenar la gestión de su primo-hermano.
En Portugal, un 18% de la población vive por debajo de la línea de la pobreza, según el estándar de la UE, con un salario mínimo de 450 euros o inferior, en el caso de las jubilaciones o subsidios de desempleo. El aumento elevará el gasto promedio en electricidad y gas un 16%, según cálculos del diario económico lisboeta Jornal de Negócios.
Es la tercera vez, desde que asumió el cargo el pasado 23 de junio, que el primer ministro anuncia medidas que contradicen su campaña electoral. Passos Coelho cortó a la mitad el tradicional aguinaldo navideño o trigésimo sueldo y encareció los transportes entre un 15% y un 23%, escudándose en que se detectó un déficit del 6,3% del PIB, en lugar del 5,9% calculado inicialmente.
Otro aspecto que marcó la campaña de Passos Coelho fue su crítica a Sócrates por no recortar el gasto público. Prometió reducirlo sustancialmente en lugar de subir impuestos. Oposición, sindicatos y patronales coinciden en que los sucesivos anuncios de Gaspar no recortan el aparato del Estado y se limitan a bajar salarios y elevar tasas...
El diputado socialista João Galamba calificó la medida de “extremadamente injusta”, dijo que “no era exigida” por la troika y aseguró que provocará menos consumo y más recesión. “Es algo muy significativo para el presupuesto de las familias y para la actividad económica”, precisó.
Albano Nunes, del comunista PCP, sostuvo que las medidas anunciadas “se dirigen a los mismos de siempre. El aumento del IVA para la electricidad y el gas significará que cerca de 400 millones de euros al año serán robados de los bolsillos de los portugueses”...
La Central General de Trabajadores de Portugal (CGTP) advirtió en un comunicado de que las subidas de impuestos “tendrán efectos recesivos en un contexto internacional en el que las exportaciones dependen de la demanda externa”...
La propia patronal, la Confederación de la Industria Portuguesa (CIP), deploró las medidas...
Para el profesor de economía Mario Gomes Olivares, cercano a la línea de Passos Coelho, la derecha ahora en el poder “comenzó en un breve espacio de tiempo a mostrar sus intenciones profundas: eliminar radicalmente parte del Estado Social, bajar los salarios y desarmar las empresas estatales vitales que dan estabilidad a la economía”, indicó a Público.
Se trata, en su opinión, de “un proyecto ultra liberal, equivalente al conjunto de reformas que algunas dictaduras sudamericanas llevaron a cabo en las décadas de los setenta y ochenta, sólo que aquí se hace de forma gradual”.
http://www.publico.es/internacional/391224/portugal-cuadruplica-los-impuestos-del-gas-y-la-luz (Foto del pueblo de pescadores de Ericeira)

viernes, 12 de agosto de 2011

Hannah y Yago con Chispa


Sanlúcar de Barrameda

Como cada año por estas fechas, Sanlúcar de Barrameda nos deleita con sus carreras de caballos en la playa, sus tapas en Balbino -las sin igual tortilla de camarones está entre lo mejor- en Barbiana -su aliño de papas (patatas) con melva y aceite de oliva, insuperable-, en el Estanco-Bar de la calle La Bolsa -jamón o mejillones- o en el bar El Bigote en Bajo Guía, para el pescado, que también tiene en el Colorao su opción más económica. Y tantos y tantos otros todos únicos y de excelente relación calidad-precio.

O simplemente pasear por sus calles, por la orilla del mar o visitar y comprar en su Plaza de Abastos, con eso ya está justificado un viaje a Sanlúcar de Barrameda, el pueblo más sevillano de Cádiz o el más gaditano de Sevilla.

Si bien para muchos, y creo que son los que llevan razón; Sanlúcar es Sanlúcar, sencillamente una ciudad con personalidad propia, con una luz bellísima, una historia riquísima e importantisima, (véase el palacio de Medina Sidonia, con su archivo histórico y biblioteca fundamental y única relacionada con el ducado y América, el actual Ayuntamiento, El Castillo de Guzmán, los jardines ducales, etc.) sus vinos de manzanilla, únicos en el mundo y que no saben en ninguna parte como allí. Y, sobre todo, sus pescadores, agricultores, sus productos del mar o del campo y huertas, sus habitantes, su gente única, especial. Eso sólo lo sabe el que ha vivido o veraneado allí.

jueves, 11 de agosto de 2011

Hay que acabar con el terrorismo financiero

La extraordinaria subida de la prima de riesgo española y de otros países aún más cercanos al corazón de la vieja Europa nos pone al borde del límite de lo que la ciudadanía no debería consentir.
Nada ha cambiado en España en los últimos días –salvo la celebración de nuevas subastas de deuda pública, claro está– que haya podido dar a entender a “los mercados” que la situación de nuestra economía es peor que hace unas semanas y que, por tanto, justifique una subida en el tipo de interés que debamos que pagar para financiarnos. Se trata, tan solo, de nuevas operaciones de casino que apuestan sobre seguro, provocando ellas mismas los resultados que más les convienen a inversores que, por supuesto, no albergan ninguna preocupación acerca de lo que suceda en la economía real, en la vida de la gente, sino en cómo mejorar sus posiciones de apuesta para ganar más dinero.
Cuando los bancos que habían provocado la crisis que estamos viviendo necesitaron financiación, los gobiernos y el Banco Central Europeo no dudaron en acudir en su auxilio, en una ocasiones, porque decían que eran “demasiado grandes para dejarlos caer” y, en otras, porque había que “salvar al sistema financiero”. En ello se gastaron varios billones de euros; más de 800.000 millones sólo en Alemania y Francia...
Tratar de hacer frente a una situación que el propio presidente de la Junta de Andalucía calificó de “terrorismo financiero” cediendo a la extorsión, como está haciendo el Gobierno socialista, es algo peor que una simple ingenuidad. Las reformas que ha llevado a cabo sólo han servido para debilitar aún más la capacidad de generación de empleo e ingreso de nuestra economía y, al frenar la recuperación y el crecimiento de la actividad, terminarán encareciendo aún más la deuda pública a medio y largo plazo, convirtiéndose esta dinámica en un círculo vicioso que lleve a la ruina a los propios estados, a sus servicios públicos esenciales y, por ende, a toda la ciudadanía.
Leer todo aquí.
Juan Torres López, Comité Científico de ATTAC España., Carlos Martínez García, Promotora Estatal de Mesas de Convergencia. Francisco Jurado, Democracia Real Ya
Leer a Javier Cercas sobre el mismo tema.

El sistema sanitario es sostenible: Las grandes empresas defraudan más de 42.700 millones de euros al año

El fraude total, de cerca de 60.000 millones de euros, es similar al presupuesto de la sanidad pública
Las grandes fortunas y grandes empresas evadieron al fisco 42.711 millones de euros en 2010, esto es, un 71,8% del total del fraude en España, lo que además supone triplicar el fraude de pymes y autónomos, según el informe de 'Lucha Contra el Fraude Fiscal en la Agencia Tributaria' elaborado por los Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha).
En concreto, las pymes y autónomos sumaron un fraude fiscal que rondó los 16.261 millones de euros. El fraude fiscal de particulares, como plusvalías, arrendamientos, rentas del trabajo o del capital, se situó alrededor de 1.543 millones de euros anuales. Así pues, el fraude total ascendería a 59.515 millones de euros, el doble del fraude laboral, cifrado en torno a los 30.000 millones.
Dado que las tres cuartas partes de la evasión fiscal se localiza en las 41.582 empresas de mayor tamaño, el secretario general de Gestha, José María Mollinedo, consideró que existe "consonancia" con las cantidades de billetes de 500 y 200 euros.
"La responsabilidad social y la participación de las grandes empresas en el esfuerzo fiscal colectivo para superar la crisis económica debería ser mayor que en la actualidad", reclamó Mollinedo.
En este sentido, el responsable de los Técnicos de Hacienda recordó que aunque el tipo general del Impuesto de Sociedades es del 30% para las grandes empresas y del 25% para las pymes, el tipo efectivo es finalmente inferior para las compañías de mayor tamaño. Casi cinco puntos menos que las microempresas
Según los últimos datos disponibles, correspondientes al ejercicio 2008, las microempresas que facturaron entre 6.000 y 60.000 euros tributaron a un tipo efectivo del 23,9%, mientras que las empresas que ingresaron entre 6 y 12 millones de euros lo hicieron al 21,2%, dos puntos y medio menos.
Por su parte, Gestha calcula que las corporaciones empresariales que facturaron más de 180 millones tributaron al 19,5%, es decir cuatro puntos y medio puntos menos que las microempresas.
Asimismo, el colectivo instó a la Agencia Tributaria a realizar un "mayor esfuerzo" para detectar y combatir posibles irregularidades entre las grandes compañías.
"Desde hace muchos años se ha puesto la lupa sobre las rentas del trabajo, de los autónomos y de las microempresas en lugar de perseguir las grandes bolsas de fraude", lamentó Gestha en un comunicado.
Fuente: http://www.casmadrid.org/index.php?idsecc=noticias&id=2722&titulo=NOTICIAS


miércoles, 10 de agosto de 2011

Hiroshima y Nagasaki

En el día de ayer Japón conmemoró el aniversario del, desde un punto de vista cualitativo, mayor crimen de guerra de la historia, esto es, el bombardeo atómico de las dos ciudades japonesas Hiroshima y Nagasaki durante la II Guerra Mundial. La pretensión de los agresores fue la destrucción total, la destrucción de todo vestigio de vida humana, animal o vegetal, y también la destrucción de bienes e infraestructuras ciudadanas como si nunca el ser humano hubiera habitado allí. 

Los japoneses han digerido igual que cada año su dolor y el Gobierno japonés ha hecho un llamamiento sobre el peligro de la energía nuclear, como equiparando la crisis nuclear recientemente padecida con la incalificable agresión sufrida en aquellos días por las dos ciudades mártires... MANUEL LICERAS RUIZ, El País, 10/08/2011. Más aquí.

...El general Dwight D. Eisenhower describe cómo reaccionó cuando el secretario de Guerra Henry L. Stimson le dijo que se utilizaría la bomba atómica:

“Durante su enumeración de los hechos relevantes, fui consciente de un sentido de depresión y por lo tanto le expresé mis graves dudas, primero sobre la base de mi creencia de que Japón ya estaba derrotado y que el lanzamiento de la bomba era totalmente innecesario, y segundo porque pensaba que nuestro país debía evitar el choque a la opinión pública mundial por el uso de un arma cuyo empleo, pensaba, ya no era indispensable como una medida para salvar vidas estadounidenses”.

En otra declaración pública, el hombre que después llegó a ser presidente de EE.UU. fue directo: “No era necesario atacarlos con esa cosa horrible”.

El general Curtis LeMay, el duro “halcón” de la Fuerza Aérea del Ejército, también se desanimó. Poco después de los bombardeos declaró en público: “La guerra habría terminado en dos semanas… La bomba atómica no tuvo nada que ver en absoluto con el final de la guerra.”

El almirante de la Flota, Chester W. Nimitz, comandante de la Flota del Pacífico, hizo la siguiente declaración: “Los japoneses, en realidad, ya habían pedido la paz… La bomba atómica no jugó ninguna parte decisiva, desde un punto de vista puramente militar, en la derrota de Japón.”

Señalé anteriormente el informe que hizo el general Sir Hastings Ismay, jefe de Estado Mayor del ministro británico de Defensa, al primer ministro Churchill de que “si Rusia entrara a la guerra contra Japón, los japoneses probablemente desearían salirse bajo casi cualquier condición que no fuera el destronamiento del Emperador”. Al oír que el ensayo atómico fue exitoso, la reacción privada de Ismay fue de “repulsión”. 

Poco antes de su muerte, el general George C. Marshall defendió quedamente la decisión, pero en general consta que dijo repetidamente que no fue una decisión militar, sino más bien política. Aún más importante, mucho antes del uso de las bombas atómicas, documentos contemporáneos muestran que Marshall sentía que “esas armas podrían usarse primero contra objetivos militares propiamente tales como una gran instalación naval y si no se derivaba un resultado total como efecto, pensaba que deberíamos determinar una cantidad de grandes áreas manufactureras donde se pudiera advertir a la gente de que se fuera, diciendo a los japoneses que nos proponíamos destruir esos centros…”

Como sugiere el documento sobre los puntos de vista de Marshall, resulta que la cuestión de si el uso de la bomba atómica era justificado no tiene que ver con si eran posibles otras opciones y si se informó a los máximos dirigentes al respecto. También tiene que ver con que si había que usar las bombas contra un objetivo en su mayoría civil o contra un objetivo estrictamente militar, que, de hecho era la alternativa explícita ya que, aunque había tropas japonesas en las ciudades, ni Hiroshima ni Nagasaki se consideraban vitales desde el punto de vista militar de los planificadores estadounidenses. (Es uno de los motivos por los que ninguna de ellas había sido fuertemente bombardeada hasta ese momento de la guerra.) Además, la selección de objetivos apuntaba explícitamente a instalaciones no militares rodeadas por casas de trabajadores. Esto nos ofrece una perspectiva más profunda de dos dirigentes militares más, igualmente conservadores

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Hiroshima after the Atomic Bomb (3 of 5) by Harbert F Austin Jr in Japan

Muchos años después el presidente Richard Nixon recordó que:
“El [general Douglas] MacArthur me habló una vez de modo muy elocuente al respecto, caminando por su apartamento en el Waldorf. Pensaba que era una tragedia haber utilizado la bomba. MacArthur creía que se deberían aplicar las mismas restricciones a las armas atómicas que a las armas convencionales, que el objetivo militar debería representar siempre un daño limitado a no combatientes… MacArthur, vea, era soldado. Creía en el uso de la fuerza solo contra objetivos militares, y es por eso que todo el asunto nuclear lo disgustaba.”

Aunque se podría citar a muchos otros, aquí tenemos, finalmente, la declaración de otro conservador, un hombre que era amigo cercano del presidente Truman, su Jefe de Gabinete (así como el del presidente Roosevelt), y el almirante de cinco estrellas que presidió reuniones del Estado Mayor Combinado de EE.UU. y el Reino Unido durante la guerra –

William D. Leahy:

“El uso de esa arma bárbara en Hiroshima y Nagasaki no sirvió de ninguna ayuda material en nuestra guerra contra Japón. Los japoneses ya estaban derrotados y prestos a rendirse… Al ser los primeros en utilizarla… adoptamos un estándar ético común a los bárbaros de la era del oscurantismo. No me enseñaron a hacer la guerra de esa manera, y no se pueden ganar guerras destruyendo a mujeres y niños”.

Gar Alperovitz, profesor Lionel R. Bauman de economía política en la Universidad de Maryland y cofundador de Democracy Collaborative, es historiador y economista. Es autor, recientemente, de America Beyond Capitalism y (con Lew Daly) de Unjust Deserts. Su trabajo sobre la historia de la decisión de utilizar las armas atómicas contra Hiroshima y Nagasaki cubre más de cuatro décadas; su libro de 1995 The Decision to Use the Atomic Bomb sigue siendo uno de los relatos definitivos sobre las acciones y motivaciones de EE.UU. en el último y trágico capítulo de la Segunda Guerra Mundial.

Fuente: http://www.counterpunch.org/alperovitz08052011.html

El triunfo del resentimiento. El personaje de Belén Esteban

El personaje de Belén Esteban simboliza la victoria de una engañosa sentimentalidad capitalista que promueve un consumismo de emociones banalizadas, de mercadillo, de usar y tirar. Un populismo de corte fascistoide.
Hace ya unos cuantos meses publicaba Josep Ramoneda en estas mismas páginas un artículo (La construcción cultural del fascismo, EL PAÍS, 17 de noviembre de 2010) en el que analizaba el lugar y la función ideológico-política que, a su juicio, desempeña en la esfera pública un personaje tan popular de nuestra televisión como Belén Esteban, a la que, resumiendo un tanto abruptamente el texto, el autor veía como la encarnación de un populismo fascistoide que, lejos de representar y dar voz a las clases populares, como los promotores del personaje gustan de proclamar, las enardece para que sigan calladas...
Lo primero que me llamó la atención fue el carácter no sé si decir agrio o avinagrado del personaje. Belén Esteban es alguien que, en lo sustancial, siempre cuenta desgracias. El tamaño de las mismas varía, como no podría ser de otra manera, pero lo significativo es que tiene permanentemente a disposición del espectador un amplio surtido de ellas: ...
también en ocasiones -menos abundantes en número, pero no por ello carentes de importancia- Belén Esteban se alegra por algo...
resulta llamativo que en las escasas oportunidades en las que protagoniza una noticia gozosa, de inmediato aprovecha la situación para pasarle su alegría por la cara a alguien, ... "para que se entere...",... lo que para esta mujer parece constituir el más genuino motivo de alegría es precisamente el mal ajeno...
dicho juego, más allá de llevar inscrito en el dorso la fecha de caducidad, tiene sobre todo mucho de siniestro. Lo acabamos de apuntar: es un secreto a voces el futuro de juguete roto que, de manera inexorable, aguarda al personaje... cuando el mecanismo del juguete se pare de forma definitiva, quien ha hecho lema y bandera de su falta de compasión y de piedad, de su absoluta carencia de empatía (como diría un autoayudólogo), no podrá implorar para sí compasión ni piedad alguna...
Además del populismo fascistoide, señalado por Josep Ramoneda, el personaje de Belén Esteban simboliza el triunfo de la sentimentalidad capitalista, que no solo promueve un consumismo de emociones banalizadas, de mercadillo, de usar y tirar, sino que, sobre todo, introduce en el ámbito de los sentimientos la misma lógica competitiva, feroz, de descarnada lucha por la vida, que rige ya en todos los demás ámbitos de nuestra realidad. Con la cuota de crueldad que ello comporta: quien ha alardeado sin el menor recato de vender su vida, con toda probabilidad no tendrá a quien acudir cuando su vida no venda... Leer todo aquí en El País. Artículo de Manuel Cruz. Catedrático de Filosofía Contemporánea en la Universidad de Barcelona. Fue premio Espasa de Ensayo 2010, por su libro Amo, luego existo. (Foto del autor en el Hotel Ayre de Oviedo, diseñado por Calatrava)


martes, 9 de agosto de 2011

Salarios y productividad

Dice José Manuel García-Margallo, en La suerte del César y la suerte del Imperio (EL PAÍS, 19-7-2011), que uno de los desequilibrios typical Spanish que se incubó en los años de bonanza económica fue el de "unos costes laborales siempre por encima de la productividad".
Pues bien, si los costes laborales fuesen igual a la productividad, toda la producción iría destinada al pago de salarios y nada iría para el capital. Entonces, ¿qué significado pueden tener unos costes laborales por encima de la productividad? Ninguno, un absurdo.
Quizá lo que quería decir el señor García-Margallo, y se ha expresado mal, es que los costes laborales han crecido por encima de la productividad. Lo que no es el caso, porque es un hecho manifiesto que en los últimos años, y de forma continuada, se ha producido en España una redistribución de la renta a favor del capital y en contra del trabajo, que es lo mismo que decir que los salarios españoles han crecido por debajo de la productividad.
También podría haber ocurrido -aunque no creo que sea el caso- que se hubiera omitido el término "marginal" y lo que quiere decir el autor del artículo de marras es que, en la economía española, los salarios siempre han estado por encima de la productividad marginal, en cuyo caso les interesaría a las empresas reducir aún más su demanda de trabajo para de ese modo incrementar sus beneficios. JOSé ANTONIO POZO MAQUEDA, Madrid, El País, 08/08/2011 (Foto del autor, Centro Niemeyer, Avilés, Asturias.)

lunes, 8 de agosto de 2011

La prima está en riesgo, ¿qué hacemos con mi prima?

Seguro que más o menos todos ustedes estarán enterados de lo que es la prima (de riesgo quiero decir), ¿ah, no?, pues yo tampoco. Esto es la economía, poderoso Don Dinero. No es lo mío, no solo porque no tenga un duro de sobra, menos un euro y, porque si lo tuviera, de seguro seguiría sin saber lo de la prima de riesgo. Lo que sí sé y nadie me lo puede negar, es que mi prima está en riesgo que no es lo mismo, pero es lo más que me interesa. Por dos razones de puro orgullo personal: porque es mi prima, y porque conozco muchas personas que están en riesgo y eso... atañe a mi digna conciencia, que supera mi ignorancia en cuanto a lo estético y ético de la prima de riesgo. Pero adentrémonos, en la medida que podamos “al grano del meollo”. Como decía, mi prima, la que he elevado -alabada!, a mi vecina Talía ya sangre de mi sangre por ley de amor divino, está en riesgo porque está en paro, o sea, sin sueldo; ocasionalmente (se que no es una solución), la invito a pollo hormonado, que no horneado. Mi prima está en riesgo porque ya no paga la hipoteca (dice que la da hipo), y claro, el banco poderoso Don Dinero la dice: paga!, y déjate de boberías que “no vienen a cuento”; a nosotros que nos importa el pollo adulterado que te comiste, ni tu hipo... Y la insisten, paga y calla!, si no te llega, haz dieta de agua por las mañanas, para el almuerzo que adelgaza y también para la cena, así no morirás de infarto: ¡paga!. Pero claro no sólo de agua vive el hombre, y mi prima que es una mujer tampoco. Por eso mi prima está en riesgo. Y para que mi vecina prima querida y otros ciudadanos no estén en riesgo, yo propongo no pagar la prima, para que mi prima, tu prima, nuestras primas puedan tener trabajo y así comer frijoles o arroz con habichuelas y pollo de corral, caracoles de la huerta murciana, por ejemplo, y poder pagar la hipoteca sin que se cuelgue el hipo de su garganta.

También hay otras medidas que yo creo bastantes fáciles, de justicia: Al igual que desmantelaron la industria vasca, catalana, gallega, asturiana, andaluza, etc., mandando a la calle a miles de trabajadores sin ningún rubor cuanto menos pudor. Podrían, digo yo, empezar a desmantelar los ejércitos parásitos del sistema, que no producen nada y además de vagos, muchos de ellos son malos de maleantes. Sólo uno, de estos ejércitos -“civil”-, se lleva anualmente millones de euros de nuestros impuestos para sus arcas empresariales de la divina providencia. Así, claro está... la prima, mi prima, está en riesgo. En vez de recomendarles “orar por nosotros” , y pagarles los servicios prestados, ofrézcanles algo cuanto menos productivo: Desbrozar y limpiar montes, caminos y carreteras, brigadas para apagar fuegos, que todos los veranos hay cuantiosos sobre todo furtivos, estarían de lo más feliz junto a las llamas que todo purifican, y verían el infierno en verdad gratuito. Tremendo riesgo, el de mi prima digo! Para que mi prima y otras primas no sufran tremendo riesgo, propongo eliminar todos los ejércitos de uno y otro lado del río, (algo es algo!), y evitaríamos el riesgo de todas las primas recuperando el fondo perdido, millones de euros al año, la tasa más alta del PNB de los presupuestos estatales.
Según consejo del manual ideológico de estado, legado por el presidente del Consejo de Ministros (1897) Cánovas del Castillo que propagó en los medios de la época en respuesta a las luchas y huelgas del momento: “La pobreza , señores, es signo de estupidez”,- hay que acabar con ella, digo!
¿Por ello, quizá, el gobierno actual (“de turno”, por supuesto) invierte millones de euros hasta lograr hacer de cada uno de nosotros un polvorín andante, para resolver lo de la prima?.
Los poderosos del mundo animados en la exterminación humana invierten en alimento y aliento podrido por nuestra calidad de vida, miles de millones de dólares anuales en armamento, y todo por acabar de una vez (y poder vivir en paz, dicen) con la mujer, el hambre y el hombre. Al loro!, la prima, la nuestra, corre un grave riesgo. Dicen!, que del amor, nació la vida. ¿A que esperamos?
“Los gobiernos firman pactos de no agresión
hombre pequeño escribe tu testamento”
P.D.

domingo, 7 de agosto de 2011

Viaje por el norte de España

El primer lugar de nuestro viaje fue Baiona y ahí se debe probar, aparte de mariscos y pescados, la baionesa el pastel de hojaldre y cabellos de ángel. En una pastelería del paseo marítimo cerca del embarcadero están buenísimas.

El siguiente destino después de pasar por Villalba y probar sus capones, Oviedo y ahí estuvimos entre muchas buenas, en Auseva. Pastelería. Dulce y Salado. Avda de Galicia, 11- Tlf 985 23 45 60. Oviedo. Totalmente recomendable, todo estaba bueno. Para conocer el sabor asturiano, sin el cual no se conoce un país, degustar las empanadas de hojaldres; de atún, de bacalao, de verduras, todas buenísimas, por el suave hojaldre y el relleno guisado en su punto exacto.
Si,  además, se pasa uno por casa Gerardo, en Prendes (Ver mapa)  a 11 km de Gijón, por la antigua carretera nacional, AS-19, Km 9, para probar su inigualable fabada y su arroz con leche, se va uno con la alegría de haber conocido a un extraordinario país, este de Asturias. Previamente habíamos visitado Cudilleros, puerto pesquero y preciosos paisajes, gentes aún mejor, si fuese posible mejorar a tan sin par naturaleza,... Posteriormente visitamos a Santa Maria del Naranco y San Miguel de Lillo en las afuera de Oviedo, por la mañana con una luz preciosa que embellecían, aún más, ambos monumentos de una belleza emocionante. Desde el monte el paisaje de la ciudad se divisaba iluminado por una luz acariciante que doraba la ciudad en aquella reluciente mañana de agosto.

En Bilbao, ciudad limpia y que parece nueva visitamos el Gugenheim donde comimos en su bar cafetería, absolutamente recomendable, aunque ha cambiado de dirección de cocina, no lo lleva Martín Berasategui al que íbamos buscando, pero los platos del menú eran magnificos, un bacalao y una merluza, igualmente las entradas y los postres eran un homenaje para el paladar, sin olvidar el vino de Rioja. Si podéis acercaros, no dejéis de probarlo. En general todas las tapas (pinchos) son extraordinarias, las tortillas suelen ser unas delicias. Recomiendo cenar tapeando y entenderéis por qué el País Vasco es como es, único y magnífico. Si, además, tenéis la oportunidad de encontrar una oferta de habitación en el H. Carlton, sede del gobierno Vasco durante la República, con un balcón a la plaza de Federico Moyua, la estancia será inolvidable. Si os gusta la pastelería, que también dice muchísimo de la cultura de su gente, en Martina de Zuricalday, Pastelería desde 1830. Bilbao. Dr. Areilza, 38- tlf 94 427 18 88, www.facebook.com/martinazuricaldaybilbao, encontraréis unos magníficos de hojaldres con crema finísima. Y atención, todos los martes, día del cliente, cuesta todo el 50%, desde dos horas antes había cola.

Iselma, yemas de  Avila, pastelería. Pl. de Sta. Teresa, 6. Tlf 920 211 170.
También La Tahona, panadería y pastelería, con unas trenzas con relleno de nueces, que saben a gloria.

En el sur.
La Merced. Casa Guerrero. Calle Ancha, 72. Tlf 956 360 377. Sanlucar de Barrameda. (Cádiz)
Hacen muchos tipos de dulces, entre mis preferidos están las tortas de polvorón, los cortadillos de cidra (cabello de ángel) y, sobre todo, la que llaman Masa Real, un dulce con cabellos de ángel que está delicioso.
La Campana, Sierpes, 1. Sevilla. Una gran pastelería.

viernes, 5 de agosto de 2011

Rajoy no expone lo que hará si gobierna, ni su programa de medidas concretas. Oculta celosamente su agenda electoral. ¿Tiene el PP una agenda oculta?

Mariano Rajoy -que prefiere esperar a que el tiempo ponga las cosas en su sitio a forzar los cambios- implica que se prodigue poco a la hora de hacer anuncios de futuro. El candidato popular a la presidencia ha ido contando con un cuenta gotas sus propuestas. Pero estas son algunas de las que ha avanzado él o sus colaboradores en la campaña, aunque aseguran que aún no están en disposición de avanzar medidas concretas, sino en fase de reflexión:
Plan de Choque
Los populares planean un plan de choque para recuperar la confianza del mercado, crear empleo y propiciar inversiones, que les llevará a recortar los presupuestos del Estado y de las comunidades autónomas, según explicó Rajoy a la agencia Reuters en una entrevista el pasado 19 de julio. El PP cuenta con que esas medidas provoquen el descontento social y están preparados para afrontar un primer año de Gobierno de protestas en la calle. 
Los populares pretenden profundizar en las reformas del mercado laboral que ya inició el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, con el fin de crear empleo: proponen establecer un contrato único flexible que facilite la contratación, así como bajar los impuestos a las pequeñas y medianas empresas.
La bajada de los impuestos es una de las señas de identidad del PP y Rajoy ya ha anunciado que recuperará la deducción por adquisición de vivienda, pese a que los expertos señalan que contribuyó a la burbuja inmobiliaria; también plantea bajar el Impuesto de Valor Añadido (IVA) a los servicios de hostelería y transporte de personas.
El PP "espera evitar los recortes en la sanidad y educación públicas y en el sistema de pensiones", pero llevará la austeridad al extremo, con la reducción de altos cargos en la Administración. Eso sí, los populares han avanzado que no prevén recortes masivos de puestos en el sector público. 
En materia de servicios públicos, los populares han abogado por abaratar costes y una mayor participación de la gestión privada.

¿Nos representan las Cortes?

Existe un amplio consenso en los establishments políticos y mediáticos españoles de que la democracia representativa ha estado funcionando bien en España desde 1978. De sus escritos y proclamas se deduce que perciben a las Cortes Españolas como representativas de la población española y, como tal, sus decisiones responden a la voluntad popular expresada a través del proceso electoral.
Pero hay indicadores de que esta percepción no es ampliamente compartida. Uno de ellos es la notable simpatía, reflejada en las encuestas populares, que ha despertado entre la población española el eslogan “no nos representan” utilizado por el Movimiento 15-M para definir a la clase política dominante, que según las mismas encuestas es el tercer gran problema que tiene la sociedad española. Estos indicadores parecen cuestionar su representatividad

Es importante subrayar que la crítica a la democracia española en estos casos procede, no de la derecha antidemocrática, sino de un movimiento (15-M) y de sectores bastante extensos de la población que encuentran la democracia existente en España dramáticamente limitada y muy poco representativa, exigiendo reformas para que mejore su representatividad. Y la simpatía que están despertando las propuestas razonables y populares del Movimiento 15-M (como adoptar un sistema auténticamente proporcional) refleja un malestar que, por mucho que se intente ignorar o marginar, está ahí: la democracia española es poco representativa, y ello se debe a que fue diseñada precisamente para que su representatividad fuera limitada

La Ley Electoral actual fue inicialmente diseñada por el Consejo Nacional del Movimiento (durante la dictadura), que aceptó su disolución a condición de que la nueva Ley Electoral fuera sesgada para favorecer a las fuerzas conservadoras. Un elemento clave para ello fue escoger la provincia como unidad básica del sistema electoral, con cuatro parlamentarios por provincia como base. Más tarde, estos cuatro pasaron a dos, pero aun así la ley conservó el sesgo que favoreció a las zonas tradicionalmente conservadoras, a costa de las zonas históricamente progresistas. Así, un votante en las primeras zonas tenía, y continúa teniendo, nada menos que 3,5 veces más peso para elegir un miembro de las Cortes que una persona que vive en las segundas zonas. Y el propósito de ello lo dijo muy claro José María de Areilza, ministro de Asuntos Exteriores del primer Gobierno de la monarquía, cuando señaló que la comisión encargada de redactar las bases de la Ley Electoral “tenía un gran temor a que los trabajadores se desmandaran y dominaran la representatividad de las Cámaras. El sufragio igualitario les preocupaba y querían poner limitaciones a la igualdad numérica con trucos de toda especie”. Añadía José María de Areilza que “todo estaba preparado para que la derecha no perdiera poder”

El gran temor de las derechas, como han reconocido también Herrero de Miñón, uno de los arquitectos del sistema electoral, y Calvo Sotelo, el expresidente del Gobierno, era que la clase trabajadora, supuestamente liderada por el Partido Comunista, tuviera una elevada representación en el nuevo Parlamento. Tales sesgos no fueron corregidos en la ley de 1987, y ello como consecuencia de que el aparato del PSOE se beneficiaba del bipartidismo de la Ley Electoral, que le favoreció como aparato, permitiéndole más escaños aún cuando el bipartidismo resultante debilitara a todas las izquierdas, obstaculizando con ello el desarrollo de su propio programa electoral. Es sorprendente que el Partido Comunista aceptara aquella ley, pues, como bien señaló el catedrático Soler Tura, que había sido miembro de la dirección del PSUC (el Partido Comunista de Catalunya), aquella ley “supuso el descalabro del Partido Comunista”, pues supuso un enorme obstáculo para que su fuerza electoral quedara plasmada en el Parlamento. En las últimas elecciones legislativas, IU, la tercera fuerza política del país (sucesora de aquel partido) sacó sólo dos diputados. Si hubiera habido un sistema auténticamente representativo (en el que el peso de cada ciudadano en configurar la gobernanza del país hubiera sido el mismo), IU hubiera obtenido 13 diputados, que, sumados a los que hubiera tenido el PSOE en tal sistema, 153, habrían obtenido la mayoría, mientras que las derechas hubieran tenido 157 escaños en lugar de los 172 que obtuvieron. En realidad, IU habría obtenido muchos más de 13 diputados, pues su escasa incidencia, resultado de su escaso número en las Cortes, ha sido un factor determinante de su declive. De ser auténticamente proporcional desde el principio de la democracia, IU y las otras izquierdas habrían tenido mucho mayor peso en la vida nacional

El PSOE, sin embargo, antepuso sus intereses de aparato frente a los deseos de sus votantes, pues estos, y sus militantes, indicaban que preferían que el PSOE se aliara con IU antes que con las derechas nacionalistas, CiU y PNV, que ha sido lo que el PSOE ha hecho con mayor frecuencia. En realidad, en la mayoría de las elecciones durante el periodo democrático (1982, 1986, 1989, 1993, 1996 y 2004), los votos a los partidos de izquierdas han sido muchos más (de 2.677.061 en 1982 a 1.486.896 en 2008) que los votos a los partidos de derechas. Sin embargo, las izquierdas no han conseguido mayorías parlamentarias, excepto en periodos limitados (1982-1992). Y el partido gobernante, PSOE, se ha aliado más con las derechas que con las izquierdas. El sistema electoral español es de los menos proporcionales existentes en los países democráticos y, como consecuencia, existe un desfase muy marcado entre el voto popular y la distribución de escaños en España. De ahí su limitada representatividad. Una consecuencia de ello es que el Estado del bienestar español sea el menos financiado de la UE-15. Vicenç Navarro. Público

Nueva York, refugio de sobrevivientes de tortura

"No sabes si la niñera o el hombre que se sienta a tu lado en el metro han sido torturados", indica el doctor Asher Aladyem, jefe de psiquiatría del Programa para supervivientes de tortura del Hospital Bellevue de Nueva York.
"Esta ciudad se ha convertido en el hogar de miles de personas que huyeron de sus países y tienen historias muy interesantes que contar", afirma el psiquiatra mientras observa un dibujo del Dalai Lama que le ha hecho uno de sus pacientes tibetanos.
El Bellevue es el hospital público más antiguo de los Estados Unidos y forma parte de la red de hospitales universitarios de la New York University (NYU).
Está situado en la Primera Avenida y su entrada principal, por la que circulan diariamente cientos de personas con los vestidos regionales de sus países de origen, recuerda la sede de las Naciones Unidas.
El hospital creó el programa para supervivientes de tortura en 1995 para ofrecer de forma totalmente gratuita terapias físicas y psicológicas, y asesoramiento legal y económico a pacientes que habían huido de países que no respetan los derechos humanos.
Desde entonces el programa ha tratado a miles de pacientes.
El programa del Bellevue es el único de estas características impulsado por un hospital del país. También es el único que ha diseñado terapias específicas para refugiados homosexuales y transexuales.
Se calcula que en Estados Unidos viven 500.000 supervivientes de tortura. Nueva York concentra entre 75.000 y 90.000 supervivientes.
Guantánamo
Asher Aladyem, psiquiatra del Hospital Bellevue de Nueva York.
"No se ha demostrado que (la tortura) sirva para prevenir un ataque terrorista"
En estos momentos el programa ayuda a 700 supervivientes de torturas procedentes de 70 países. Más de la mitad de los pacientes proceden de África y una cuarta parte de Asia. El resto ha huido de países de Europa del Este, América Latina, los países de la antigua órbita soviética y Oriente Medio.
Algunos pacientes necesitan cirugía plástica, como un monje tibetano a quien las autoridades chinas quemaron la mano para impedir que pintara carteles de protesta contra el gobierno o una joven bosnia con la cara desfigurada.
Otros necesitan un informe médico que certifique la tortura, como una madre y una hija egipcias que habían sufrido una mutilación genital. Otros necesitan atención psiquiátrica para superar sus problemas de ansiedad; pesadillas, fobias, dolores de cabeza y síntomas de estrés post-traumático.
Otros huyeron a Nueva York para no tener que esconder su homosexualidad, como un intelectual iraquí o un joven indio. Dos mujeres de América Latina (Venezuela y Nicaragua) se fueron de sus países porque recibían amenazas e insultos tras haberse sometido a una operación de cambio de sexo.
El programa también tiene pacientes que denuncian torturas en Estados Unidos. Los médicos del Bellevue han tratado a los prisioneros de Guantánamo y han impartido cursos de preparación psicológica para sus abogados.
También han tratado a un grupo de jóvenes iraquíes que fueron detenidos por error y encarcelados en Abu Ghraib. El gobierno de Estados Unidos les pagó el viaje a Nueva York para que pudieran ser atendidos por el hospital.
"La tortura pone en riesgo la seguridad nacional y proporciona una falsa sensación de seguridad; no se ha demostrado que sirva para prevenir un ataque terrorista", afirma el doctor Aladyem: "Sería mucho más efectivo crear una normativa transparente y concreta para los interrogatorios, hacer un seguimiento y medir los resultados".
Superación
Adib Yousif, refugiado sudanés
"Es muy importante que los pacientes aprendan a transformar su rabia y enfado en energía productiva que les ayude a construir una vida que les llene"
Adib Yousif, de 37 años, es paciente del programa desde 2009. Nació y creció en Yuldo, un pueblo situado en las montañas volcánicas de Yebel Marrá, en Darfur, donde fundó una organización para el desarrollo social de Sudán.
"Con mi cámara documenté asesinatos y violaciones de hombres, mujeres y niños, y la destrucción de pueblos enteros", explica. Tras varias detenciones (la última cuando ya había embarcado en un avión de una compañía aérea egipcia para volar a El Cairo) y tres intentos de asesinato por parte del gobierno de Sudán consiguió huir a Uganda, llegar hasta Kenia y de allí a Egipto donde obtuvo un visado para entrar a Estados Unidos.
"Poder ser paciente del programa de supervivientes de tortura fue lo mejor que me pudo pasar; no solo me curaron sino que además me ayudaron a encontrar una casa y me han dado apoyo legal", afirma: "Eso me dio fuerzas para luchar, conseguir asilo político y hacer un master en Estudios Internacionales".
Como otros pacientes del programa Yousif apuesta por la reconciliación y no cree en la venganza: "Quiero estudiar un doctorado y trabajar para conseguir la paz en mi país; una paz que solo se conseguirá si en el proceso participamos todos; también aquellos que quisieron matarnos".
La mayoría de participantes aprenden a vivir con su pasado y a construir un futuro mejor.
"Es muy importante que los pacientes aprendan a transformar su rabia y enfado en energía productiva que les ayude a construir una vida que les llene", explica el doctor Aladyem.
"Admiro su capacidad de lucha, su instinto de superación y su fuerza ante la adversidad, me dan mucha fuerza; y aunque yo soy el doctor y los trato, también he aprendido mucho de ellos, al final del día no sé quien ayuda a quien".
Fuente: http://www.bbc.co.uk/mundo/noticias/2011/08/110803_eeuu_tortura_nueva_york_fp.shtml

jueves, 4 de agosto de 2011

¿Por qué no reformar los mercados?

Algunas actividades que se atribuyen al 15-M han promovido ya discusión en los medios políticos y periodísticos, en los que se habla como si indignados en este país estuvieran solo los jóvenes que han hecho acampadas en las plazas públicas y se manifestaron ante edificios oficiales.
Pero el problema es bastante más grave: aunque todavía no se manifiesta en la calle, la indignación está igualmente viva en gran parte de los afiliados de los partidos políticos existentes, personas que han votado, que no acaban de entender la política que hacen sus dirigentes, pero que han perdido confianza en ellos aunque se resisten a romper con los partidos que han guiado desde siempre su vida. Y la razón es lógica: la crisis y la política que la UE está imponiendo a los Gobiernos elegidos que, por ejemplo en España, se empeña en que los trabajadores y las clases medias acepten unas condiciones tan indignas de vida, que ni el franquismo pudo perpetuar.
Todo empieza con la política de intentar resolver la crisis arañando en los recursos de los trabajadores y las clases medias y las arcas semivacías de los Estados, las cantidades necesarias para reponer las deudas de los bancos contraídas por la irresponsabilidad y la falta de sus ejecutivos, que ellos sí nadan en la riqueza.
De golpe, el porvenir que se ofrece a los ciudadanos es la liquidación del Estado de bienestar, la sanidad pública gratuita, la educación pública, las pensiones, el derecho al descanso. Es decir la vuelta a las condiciones de vida del siglo XIX anulando el progreso alcanzado en más de 100 años de lucha y que han sido la base de la democracia moderna.
Y por el momento, un desempleo brutal que afecta ya gravemente también a aquellos que aún tienen un trabajo que conservar cediendo a las exigencias de los empresarios; la puesta en cuestión de progresos como la negociación colectiva, la reducción de salarios; la precariedad de los empleos; la disminución del sueldo de los funcionarios y la reducción de su número; y los desahucios; la falta de crédito para las empresas, etcétera.
Todo esto es la causa de que la indignación cunda incluso dentro de los partidos que se disputan el poder y hace que el 15-M no sea más que la superficie de un oculto iceberg, que puede hacerse insostenible.
El caso es que llevamos un tiempo largo aplicando esa política y que la situación empeora cada día más; que se nos amenaza cada día con más austeridad, más recortes, más sacrificios, por Gobiernos que se han puesto a disposición de los mercados, vale decir, del capital financiero, los mismos que deberían estar purgando sus castigoscomo responsables de la crisis.Figuras importantes de la ciencia económica están ya lanzando advertencias.
José Borrell, político y economista español, desde su Observatorio del Instituto de Estudios Europeos de Florencia escribía en El Siglo: "Pero los planes de rigor impuestos por los mercados financieros y los otros países del euro a los Estados con fuertes déficits y endeudamiento público están provocando una contestación social cada vez mayor... y porque no dan los resultados que de ellos se esperaban, los déficits no se reducen y el ratio de endeudamiento con respecto al PIB aumenta porque esas medidas han acabado de matar el crecimiento".
Muchos comentaristas, economistas y políticos, están llamando la atención sobre el peligro de las políticas que los "mercados" están imponiendo a Europa y advierten que va a ser imposible que obtengan resultados. Los bancos están pidiendo lo imposible.
En nuestro país las reformas y ajustes que nos ha impuesto Europa han sido un fracaso, aunque otra cosa digan los dirigentes políticos. Todas las medidas tomadas disminuyendo los ingresos de los ciudadanos no han disminuido el paro. El "éxito" que se adjudica el Gobierno y se ha convertido en su objetivo fundamental es que todavía no nos hayan "rescatado". Pero ¡a qué precio! Y la marcha de la crisis, su agravación en otros países europeos, ¿hasta cuándo va a evitar nuestro rescate? ... El capitalismo podría provocar grandes catástrofes si no se reforma. Hoy, esa es la cuestión. Leer todo en El País.
SANTIAGO CARRILLO, El País, 04/08/2011

15-M y ciudadanía. La ola que no cesa

El desinterés habitual de los medios informativos convencionales por lo que en la sociedad española se mueve aparte de la política partidista, ha llevado a analistas y tertulianos a presentar la emergencia del movimiento del 15-M como una inesperada irrupción surgida de la nada. No ha sido menos insólita dicha aparición para el establishment político. Sin embargo, los gritos en favor de una “democracia radical” o “ciudadana” suenan a melodía familiar.
Tienen muchos y variados antecedentes en la historia presente: desde la democracia de base del movimiento ciudadano entre 1975 y 1979, a las manifestaciones contra la invasión de Iraq en 2003, cuando el “No a la Guerra” se acompañó del –hoy trending topic– “lo llaman democracia y no lo es”.
A pesar de la retórica del progreso liberal-democrático, una constante de la movilización social en España durante los últimos 35 años ha sido la exigencia de una mayor participación ciudadana en el debate público y en la vida política. No es casualidad que el movimiento de los indignados se inscriba en un contexto de reinterpretación crítica del proceso de sustitución del Franquismo. En esta relectura de un pasado brillante hasta ayer, muchos ven en las imperfecciones de aquella “obra de ingeniería política” el origen de los déficits participativos del actual sistema representativo. Síntoma de que hoy en día comienzan a desempolvarse con fuerza algunas de las opciones de construcción democrática desde abajo, presentes en la lucha final contra el Franquismo pero enterradas por el consenso y el discurso triunfalista de la Transición. Parece necesario recordar que el de la dictadura protagonizado por el desafío de miles de españoles en la calle, abrió el paso a una democratización posteriormente monopolizada por los partidos políticos. De derecha a izquierda, éstos desmovilizaron a sus seguidores para autoerigirse en los únicos árbitros legítimos del cambio.
La necesidad de consolidar aquella balbuciente democracia a la europea consagró el mantenimiento del orden sobre la participación ciudadana. Desde entonces ésta quedó reducida a las formas más limitadas del liberalismo parlamentario y de la actividad electoralista. No extraña, por tanto, que las estrechas formas de representatividad ciudadana de nuestra joven democracia siempre hayan sido diana de las diversas oleadas de contestación social sucedidas desde finales de los años ‘70 –la campaña contra la OTAN, el movimiento de insumisión al servicio militar, las movilizaciones por los desastres ecológicos, las concentraciones del 13M de 2004, etc.–. En el trasfondo de estas protestas siempre latió el malestar de amplios sectores sociales ante el encumbramiento de la opaca política de salón que rige nuestras vidas. La historia de este país durante las últimas cuatro décadas no se ha caracterizado tanto por la pasividad de la sociedad civil como por la ausencia de efectivos canales de participación democrática. Desde la Transición, las elites políticas se han dedicado a proteger su poder de los vientos hostiles de la calle. Han cerrado las ventanas de partidos, sindicatos e instituciones para protegerse del torbellino de la “política por otros medios”. Quizás por eso desde las alturas tantos temen al 15M, porque los “perroflautas” y “antisistema” que discuten en las ‘demoplazas’ no están dispuestos a volver a la sana tarea privada de buscar trabajo y dejar el poder en manos de los “expertos” de siempre. Óscar J. Martín García, Investigador del Instituto de Historia del CSIC
Fuente: http://www.diagonalperiodico.net/15M-y-ciudadania-La-ola-que-no.html
Aquí, Manifiesto por el desalojo. La Policía carga contra los manifestantes.

Ya son 85 los ambulatorios que cerrarán en Catalunya

El alcance de los recortes del Govern de la Generalitat es cada vez mayor. El número de ambulatorios y centros de atención primaria (CAP) que este verano se verán afectados por el cierre o la reducción horaria va en aumento y finalmente serán 165. Aunque el Govern ofrece información con cuentagotas y aún no ha facilitado el listado definitivo, fuentes del Departamento de Salut confirmaron ayer a Público que un total de 85 puntos de atención primaria de Catalunya cerrarán durante el mes de agosto. Y muchos de ellos no volverán a abrir a partir de septiembre.

Al cierre de estos centros se suma la reducción horaria en otros 80, lo que significa que el 15% de la atención primaria sufre algún tipo de alteración este verano. Así, de los 1.215 puntos de atención que hay en Catalunya 375 CAP y 840 ambulatorios un total de 165 sufrirán algún tipo de alteración. Ya sea por cierre total o bien por la disminución del tiempo de consulta, muchos vecinos deberán desplazarse hasta 30 kilómetros para ser atendidos en el centro más cercano. Agosto será mal mes para ponerse enfermo...Leer más en Público. (foto del autor, vista de Coimbra, Portugal)

Entrevista a Robert Scheer, periodista y editor de "Los Angeles Times". “Obama es una gran decepción”

El ex periodista y editor de Los Angeles Times Robert Scheer publicó su último libro, The Great American Stickup (El Gran Robo Americano), en el cual se señala a los demócratas de Bill Clinton como los grandes responsables por la crisis económica que sacude a Estados Unidos. Sin embargo, lejos de eximir al presidente de toda culpa, el periodista no duda en calificar el manejo de Barack Obama de la crisis como desastroso, y se arrepiente de haber escrito columnas en su favor. En su libro, deja en evidencia a un presidente que incumplió promesas con respecto a la desregulación económica
–Reagan no fue capaz de revertir las regulaciones del New Deal que Roosevelt diseñó para evitar que caigamos en otra depresión. Pero cuando Clinton entró en funciones, trajo a uno de los peces gordos de Wall Street, Robert Rubin, y para tener a Wall Street de su lado, fueron a por lo que denominaban la onerosa regulación financiera. Y Clinton se dedicó a ello y trajo a Lawrence Summers como secretario del Tesoro, uno de los asesores económicos más importantes. Luego Clinton hizo algo clave que fue lo que más influyó en la crisis que estamos viviendo y fue dar de baja el acta de la Modernización de Commodities Futuros. Esto es la fuente de nuestros problemas en lo que hace a la crisis de las hipotecas, ya que de ahí vinieron las inversiones tóxicas conocidas como derivados. Y como resultado tuvimos esta ola de préstamos para hipotecas irresponsable. Los bancos ya no se preocupaban como en los viejos tiempos por saber si se podrían hacer las devoluciones, porque no iban a mantener esa hipoteca por 30 años como antes. Lo iban a terminar vendiendo, y esa corrida del mercado yo la llamo la burbuja Clinton, y es lo que persiste hasta nuestros días. Creo que su administración tiene la mayor responsabilidad y por eso hay una amenaza de estancamiento para esta década al estilo de Japón. En vez de darle dinero a Wall Street, que es lo que Obama hace, se debería haber dado una moratoria para que la gente pueda quedarse en sus casas y no abandonarlas por las hipotecas que no pueden pagar, ya que las hipotecas ahora valen más que las propias casas, por eso se ven obligados a dejar de pagar e irse. Por eso tampoco hay demanda. Y esto no sólo afecta a la gente en problemas con su propia casa, lo cual es una historia trágica ya de por sí. Sino incluso, si alguien realizó todos los pagos correspondientes, si se ejecutan una casa o dos en ese barrio, eso arrastra a todos. Lo triste de Obama es que yo lo apoyaba, escribí muchas columnas definiéndolo como la gran esperanza, pero resultó ser una gran decepción. En mi libro publico un discurso que Obama dio en 2008, cuando era candidato. Allí dijo que la crisis económica se debía a la desregulación financiera que hubo en gestiones anteriores. Y luego, misteriosamente –o no tanto, teniendo en cuenta que Wall Street se convirtió en su principal contribuyente de campaña– acudió a quienes hicieron esto y les dijo: “Bueno, muchachos, arreglen esto”. Y no lo han hecho. Sólo se han ocupado de atender las necesidades de Wall Street.
–Usted dijo que Obama debería haber otorgado una moratoria para todas las bancarrotas y no lo hizo. ¿Qué debería hacer ahora?
–Debería impulsar a las cortes de bancarrota que tienen el poder para forzar a los bancos a que reajusten estas hipotecas. Moratorias de dos o tres años. Eso se debería hacer cuando se atraviesa una crisis como ésta. Obama podría impulsar una regulación y legislar para que las cortes de bancarrota no dejen esto al libre arbitrio. Recuerden que el Congreso cambió las leyes para afectar a los consumidores, y para hacerles más difícil declararse en bancarrota. Hay un enorme dolor en todo el país porque los ahorros de toda la vida de la gente, su sentido de valor y su sueño estaban atados a sus familias. Cuando se pierde esa casa se pierden el orgullo, la jubilación y mandar a tus hijos a la escuela. Los sueños de los norteamericanos están atados a esas casas.
–¿Cómo ayudar a los que no tienen hogar?
–Una de mis frustraciones con respecto a los demócratas que apoyaron esta desregulación es que dijeron que así ayudarían a las minorías a conseguir hogar. Seguro, muchos de ellos la consiguieron, pero perdieron sus ahorros. Ahora están en problemas. No pueden sostener esos hogares y se les ejecutan las hipotecas. Por lo cual, si mantenemos a la gente en sus casas estamos ayudando a los trabajadores y a los pobres. No es para beneficiar a los ricos. Ellos tienen el papel de bandidos en este mercado. Pero además, si no podemos poner un freno a las ejecuciones de las casas, no podremos volver a la demanda de consumo y no podremos recuperar puestos de trabajo. Es muy triste conocer las historias de la gente que invirtió toda su vida en brindarle protección a su familia. Gente que limpiaba oficinas para que sus hijos vivieran en mejores barrios. Y que hicieron todo lo que tenían que hacer y de repente perdieron todo.
–¿Usted siente que Obama hizo algo distinto por la economía?
–No. Obama fue un desastre. Y lo digo como alguien que se involucró financieramente en la campaña. Aún recibo esos mails de la campaña de Obama diciendo “Estamos ganando”. Pero fue un desastre. Lo peor de todo es que los que nos hicieron esto no son aquellos a los que a nosotros, los demócratas, nos gusta atacar. No fueron los republicanos de derecha. Fueron nuestros amigos, dejemos eso en claro. Cuando me refiero a la burbuja Clinton lo digo muy en serio. Gente que se hacía llamar liberal demócrata, pero que recibía grandes premios por detrás. Se salieron con la suya, como la gente de Citigroup. Y estos bonos eran intercambiados en el mercado de acciones, pero como agencias con apoyo del gobierno.
Sigue la entrevista en, Fuente: http://www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/4-173658-2011-08-03.html

martes, 2 de agosto de 2011

El presidente Obama se rinde

Están preparando un trato para aumentar el techo de la deuda federal de EE.UU. Si se aprueba, muchos comentaristas declararán que se ha evitado el desastre. Pero se equivocarán.
Porque el trato en sí, considerando la información disponible, es un desastre, y no solo para el presidente Obama y su partido. Dañará una economía que ya está deprimida; probablemente empeorará, no mejorará, el problema del déficit de EE.UU. a largo plazo; y lo más importante, al demostrar que la extorsión pura funciona sin un coste político, llevará lejos a EE.UU. por el camino al estatus de una república bananera.
Comencemos con la economía. Ya tenemos una economía profundamente deprimida. Es casi seguro que seguiremos teniendo una economía deprimida durante todo el próximo año. Y probablemente también tendremos una economía deprimida durante 2013, si no más lejos.
Lo peor que se puede hacer en estas circunstancias es reducir los gastos del gobierno, ya que eso deprimirá aún más la economía. No escuchéis a los que invocan el cuento de hadas de la confianza y afirman que la acción dura en el presupuesto dará seguridades a las empresas y a los consumidores llevándoles a gastar más. No es así cómo funciona, como confirman numerosos estudios de los antecedentes históricos.
Por cierto, la reducción de los gastos mientras la economía está deprimida ni siquiera ayudará a mejorar en mucho la situación presupuestaria y podría empeorarla. Por una parte, los tipos de interés sobre los préstamos federales ya son muy bajos, de modo que los recortes en gastos harán poco por reducir futuros costes de intereses. Por otra parte, debilitar la economía ahora solo dañará sus perspectivas a largo plazo, lo que por su parte reducirá los futuros ingresos. De modo que los que demandan recortes en los gastos ahora son cómo doctores medievales que trataban a los enfermos sangrándolos, y así los enfermaban aún más.
Y luego tenemos los términos conocidos del trato, que corresponden a una abyecta rendición por parte del presidente. Primero, habrá grandes recortes en los gastos sin un aumento en ingresos. Luego, un panel hará recomendaciones para una mayor reducción del déficit, y si esas recomendaciones no se aceptan habrá más recortes en los gastos.
Los republicanos tendrán supuestamente un incentivo para hacer concesiones la próxima vez, porque los gastos de defensa estarán entre las áreas recortadas. Pero el Partido Republicano acaba de demostrar su disposición a arriesgar el colapso financiero a menos que consiga todo lo que sus miembros más extremos quieren. ¿Por qué esperar que sean más razonables en la próxima vuelta?
De hecho los republicanos seguramente se sentirán envalentonados por la forma en que Obama se repliega permanentemente ante sus amenazas. Se rindió en diciembre pasado prolongando los recortes tributarios de Bush; se rindió en la primavera cuando lo amenazaron con cerrar el gobierno; y ha vuelto a rendirse a escala grandiosa ante la brutal extorsión por el techo de la deuda. Tal vez sea solo yo, pero veo un modelo en estos hechos.
¿Tenía una alternativa esta vez el presidente? Sí.
Ante todo podía, y debería, haber exigido un aumento del techo de la deuda en diciembre. Cuando le preguntaron por qué no lo hizo, respondió que estaba seguro de que los republicanos actuarían responsablemente.
E incluso ahora el gobierno de Obama podría haber recurrido a maniobras legales para soslayar el techo de la deuda, utilizando una de varias opciones. En circunstancias normales habría sido un paso extremo. Pero ante la realidad de lo que está sucediendo, es decir una burda extorsión por parte de un partido que, después de todo, solo controla una cámara del Congreso, habría sido totalmente justificable.
Por lo menos el señor Obama podría haber utilizado la posibilidad de una carrera final legal para fortalecer su posición en la negociación. En su lugar, sin embargo, excluyó todas esas opciones desde el comienzo.
¿Pero habría preocupado a los mercados la adopción de una posición dura? Probablemente no. De hecho, si yo fuera un inversionista me sentiría reconfortado, no desalentado por una demostración de que el presidente está preparado y dispuesto a enfrentar un chantaje por parte de extremistas de derecha. En su lugar, prefirió demostrar lo contrario.
No me malentiendan, lo que estamos presenciando es una catástrofe a múltiples niveles.
Es, claro está, una catástrofe política para los demócratas, quienes hace solo unas pocas semanas parecían haber derrotado a los republicanos en su plan de desmantelar Medicare; ahora Obama lo ha tirado todo a la basura. Y el daño no ha terminado: habrá más puntos de estrangulamiento en los que los republicanos podrán amenazar con crear una crisis a menos que el presidente se rinda, y ahora pueden actuar con la confiada expectativa en que lo haga.
A largo plazo, sin embargo, los demócratas no serán los únicos perdedores. Lo que acaban de lograr los republicanos pone en cuestión todo nuestro sistema de gobierno. Después de todo, ¿cómo puede funcionar la democracia estadounidense si cualquiera de los partidos, totalmente dispuesto a ser implacable, a amenazar la seguridad económica de la nación, logra dictar la política? Y la respuesta es: tal vez no puede hacerlo. New York Times –

El PP y la austeridad

El 29 de julio de 2011 se han anunciado elecciones generales para el 20-N, y Mariano Rajoy, en su primer discurso tras el anuncio, nos ha asegurado que no habrá recortes sociales si llega a ser presidente, pero poco ha hablado de los que están realizando los presidentes autonómicos de su partido en las comunidades. Como ejemplo reciente, el que acaban de firmar Lucía Figar y Esperanza Aguirre, consejera de Educación y presidenta, respectivamente, de la Comunidad de Madrid, al fijar las tasas para el curso escolar 2011-2012 en las escuelas infantiles, y omitir la reducción del 50% en las cuotas de escolarización a las que hasta ahora teníamos derecho las familias numerosas. Espero que modifiquen y no supriman estas pequeñas ayudas que tanto suponen para la maltrecha economía familiar en época de crisis. Cristóbal Borrás Rexach - Torremolinos, Málaga - 02/08/2011

Acabo de leer que Camps, como expresidente de la Generalitat Valenciana, aparte de pasar a ocupar un cargo vitalicio - y parece que más bien honorario porque su voto no cuenta- en el Consejo Jurídico Consultivo de la comunidad, va a tener su propia oficina con dos empleados, eso sí, eventuales, para asesorarle y derecho a usar un coche oficial con conductor. Me pregunto qué necesidad tiene de dos asesores el señor Camps, en la actualidad ciudadano de a pie como todos, y por qué va a tener a su disposición un coche oficial cuando su partido está denunciando excesos en el uso del parque móvil y cuando otras autonomías, como la balear, tienen a más de 30 conductores mano sobre mano por el recorte de los nuevos gestores a un sobredimensionado parque móvil. Coche, conductor y dos empleados a cargo del contribuyente. ¡Qué despilfarro! ¡Qué magnífica oportunidad de dar ejemplo de austeridad pierde el PP al mantener estos privilegios. Tomás Antón Serrano. Madrid. Cartas al director de El País.

Portugal reprivatiza un banco por 40 millones tras sanearlo con 2.400

La venta del Banco Portugués de Negócios a una entidad angoleña cuesta al país el 1,4% del PIB - Los nuevos dueños cerrarán el 30% de las oficinas

El Gobierno portugués ha cerrado la reprivatización del Banco Portugués de Negócios (BPN). La operación pone fin a una complicada y ruinosa operación financiera, que ha costado al Estado 2.400 millones de euros, el equivalente al 1,4% del PIB. El nuevo propietario es el Banco Internacional de Crédito (BIC), de mayoría angoleña. Pagará 40 millones de euros, casi una quinta parte del precio de 180 millones, fijado inicialmente en el decreto-ley de reprivatización, en agosto de 2010. La venta del BPN es una de las medidas del programa de austeridad acordado con la troika internacional a cambio de un préstamo de 78.000 millones de euros.


El precio podrá subir ligeramente si en los próximos cinco años el banco obtiene un resultado operacional superior a 60 millones de euros. En este caso, tendrá que pagar al Estado el 20% del excedente. La operación del BPN ha sido un dolor de cabeza constante para el Gobierno, que hasta el último día ha tenido que inyectar dinero. Concretamente, 550 millones de euros de recapitalización antes de ejecutar la venta, más las indemnizaciones de una buena parte de la mitad de los 1.580 empleados que perderán el trabajo. Los nuevos dueños cerrarán el 30% de las 213 oficinas que tiene en todo el país...

Dentro del paquete de medidas de ajuste, ayer entraron en vigor las nuevas tarifas de los transportes públicos, que tendrán un gran impacto en las clases populares. Los sindicatos y organizaciones de usuarios anuncian diversas acciones de protesta. Con un 15% de aumento medio, la subida llega hasta el 25% en algunos casos, como en la línea de tren a Sintra. "No somos nosotros los causantes de que el país esté en la ruina, fueron ellos", se quejaba una joven pasajera. Con el aumento de tarifas, los portugueses gastarán 26 millones más de aquí a final de año. El ministro de Economía, Álvaro Santos Pereira, sostiene que la reestructuración del transporte exige el aumento de tarifas.
Leer toda la noticia en El País.
(foto del Hotel Carlton, Bilbao. Edificio histórico, sede del Gobierno Vasco 1936-39)