sábado, 21 de diciembre de 2019

LA HISTORIA RIMA. La dictadura de Franco para estudiantes Julián Casanovacontacta@infolibre.es @CasanovaHistory

LA HISTORIA RIMA
La dictadura de Franco para estudiantes

Julián Casanovacontacta@infolibre.es @CasanovaHistory

Han pasado cuarenta y cuatro años desde la muerte de Franco. Su dictadura forma parte de la historia. Es un tema de estudio consolidado en los proyectos de investigación universitarios, en congresos y publicaciones científicas y en algunos programas de enseñanza que se imparten en los centros de enseñanza Secundaria. Pero es también objeto de controversia política y de discusión pública, de mentiras y propaganda, utilizado como instrumento de opinión e insulto frente a la investigación y el conocimiento históricos.

Más de cuatro décadas después de su final, y sacados ya los restos de Franco del Valle de los Caídos, propongo aquí una información básica, de historiador especializado y comprometido con la indagación rigurosa y fiel a las fuentes, para transmitir en los centros de enseñanza a los estudiantes.

Más de cuatro décadas después de su final, y sacados ya los restos de Franco del Valle de los Caídos, propongo aquí una información básica, de historiador especializado y comprometido con la indagación rigurosa y fiel a las fuentes, para transmitir en los centros de enseñanza a los estudiantes.

1. LA DICTADURA DE FRANCO EN EUROPA:
-El general Francisco Franco comenzó el asalto al poder con una sublevación militar en julio de 1936 contra la Segunda República y lo culminó en abril de 1939, tras la victoria en una guerra civil de casi mil días.

Cuando acabó la guerra civil española, más de la mitad de los 28 Estados europeos estaban dominados por dictaduras con poderes absolutos, que no dependían de mandatos constitucionales ni de elecciones democráticas. Excepto en el caso de la Unión Soviética de Stalin, todas esas dictaduras procedían del firmamento político de la ultraderecha.

Mientras Franco consolidaba su dictadura tras el triunfo en la guerra civil, lo que los españoles llamamos posguerra, la Segunda Guerra Mundial trastocaba de forma radical el mapa de Europa que había salido de la de 1914-1918. Entre 1939 y 1941, siete dictaduras derechistas de Europa del Este cayeron bajo el dominio directo de Alemania o Italia: Polonia, Albania, Yugoslavia, Grecia, Lituania, Letonia y Estonia. En el mismo período, siete democracias fueron desmanteladas: Checoslovaquia, Noruega, Dinamarca, Holanda, Bélgica, Luxemburgo y Francia.

El general Francisco Franco y su dictadura no eran, por lo tanto, una excepción en aquella Europa de sistemas políticos autoritarios, totalitarios o fascistas.

Tras el final de la Segunda Guerra Mundial en 1945, las dictaduras derechistas, que habían sido dominantes desde los años veinte, desaparecieron de Europa, salvo en Portugal y España. Francisco Franco y Antonio Oliveira de Salazar fueron los únicos dictadores que, como no intervinieron oficialmente en la Segunda Guerra Mundial, pudieron seguir en el poder tras ella. Esa es una gran diferencia entre las dictaduras de Europa del Este, destruidas por la guerra, y las de la Península Ibérica; y entre Franco y Salazar y todos esos dictadores, fascistas o no, que fueron ejecutados o huyeron a otros países tras 1945.

Franco se libró de ese final, aunque la intervención italiana y alemana había sido decisiva para su triunfo en la guerra y conquista del poder y aunque el fervor del sector más fascista de su dictadura por la causa nazi se había manifestado, pese a la no beligerancia oficial española, en la creación en 1941 de la División Azul, por la que pasaron cerca de 47.000 hombres que lucharon contra el comunismo en el frente ruso.

Muertos Hitler y Mussolini, Franco siguió treinta años más. Vista desde esta perspectiva comparada, el rasgo distintivo de la historia de España en el siglo XX fue la larga duración de la dictadura de Franco después de la Segunda Guerra Mundial, una dictadura fascista en sus orígenes que se perpetuó en la Europa occidental democrática. No fue un paréntesis, sino el elemento central que dominó el escenario de forma absoluta durante esas tres décadas.

2. ¿CÓMO DEFINIR LA DICTADURA DE FRANCO?
La larga duración de la dictadura, casi cuatro décadas, hace muy difícil identificarla con un solo adjetivo y obliga, si se quiere comprender históricamente, a prestar atención a sus dimensiones cronológicas y a su evolución dentro del cambiante contexto internacional. La dictadura de Franco coincidió con un escenario de cambio histórico acelerado con profundas transformaciones: crisis mundial de los años treinta; Segunda Guerra Mundial; Guerra Fría durante la segunda mitad de los años cuarenta y los cincuenta; fase de expansión económica y desarrollo en la década de los sesenta; y período de recesión económica durante la primera mitad de los setenta. Comenzó con Hitler dominando Europa y acabó cuando los Estados Unidos habían sido derrotados en la guerra de Vietnam.

En su período inicial de consolidación coincidió con la era del fascismo en Europa, iniciado en Italia en los años veinte y radicalizado en Alemania en los años treinta. La intervención fascista y nazi había sido decisiva para la victoria de Franco en la guerra y la dictadura de Franco comenzó desde abril de 1939 un proceso de fascistización, interrumpido por la derrota de las potencias del Eje en la Segunda Guerra Mundial. A partir de ese momento, y tras superar desafíos de resistencia interna e internacionales, Franco se perpetuó en el poder durante la edad de oro de las democracias occidentales.

Tras la caída de los fascismos en Europa, la defensa del catolicismo como un componente básico de la historia de España sirvió a la dictadura de pantalla en ese período crucial para su supervivencia. Militares, falangistas, carlistas y la Iglesia aportaron sus ideas y símbolos a la nueva España, aunque el discurso nacional-católico acabó, a partir de 1945, dominando. El Ejército, la Falange y la Iglesia representaban a esos vencedores y de ellos salieron el alto personal dirigente, el sistema de poder local y los fieles siervos de la Administración.

En lo que todos estuvieron de acuerdo, sin embargo, fue en el culto rendido al general Franco. Desde octubre de 1936, obispos, sacerdotes y religiosos comenzaron a tratar a Franco como un enviado de Dios para poner orden en la “ciudad terrenal”. Acabada la guerra, el “insigne, victorioso y amado Caudillo” fue rodeado de una aureola heroico-mesiánica que le equiparaba a los santos más grandes de la historia. Aparecían por todas partes estatuas, bustos, poesías, estampas, hagiografías. La imagen de Franco como militar salvador y redentor era cuidadosamente tratada e idealizada en el “Noticiario Español” (NO-DO). Su retrato presidió durante los casi cuarenta años de dictadura las aulas, oficinas, establecimientos públicos y se repetía en sellos, monedas y billetes. Y como ninguna legitimidad podía ser superior a la que procedía de la potestad divina, Franco fue “Caudillo de España por la gracia de Dios”.

Fue, en suma, una dictadura de origen fascista, con presencia importante de valores militares y católicos, donde el orden, el caudillaje y la religión desempeñaron un papel fundamental.

3. VENCEDORES Y VENCIDOS
Tras el final oficial de la guerra, el 1 de abril de 1939, la destrucción del vencido se convirtió en prioridad absoluta. Comenzó en ese momento un período de ejecuciones masivas, y de cárcel y tortura para miles de hombres y mujeres, especialmente en aquellas provincias conquistadas por el ejército de Franco en los tres últimos meses de la guerra.

A finales de 1939 y durante 1940 las fuentes oficiales daban más de 270.000 reclusos, una cifra que descendió de forma continua en los dos años siguientes debido a las numerosas ejecuciones y a los miles de muertos por enfermedad y desnutrición. Al menos 50.000 personas fueron ejecutadas entre 1939 y 1946. “La retirada”, como se conoció al gran exilio de 1939, llevó a Francia a unos 450.000 refugiados en el primer trimestre de ese año, de los cuales 170.000 eran mujeres, niños y ancianos. Unos 200.000 volvieron en los meses siguientes, para continuar su calvario en las cárceles de la dictadura franquista.

España vivió a partir de abril de 1939 la paz de Franco, las consecuencias de la guerra y de quienes la causaron. España quedó dividida entre vencedores y vencidos. Para recordar siempre su victoria en la guerra, para que nadie olvidara sus orígenes, la dictadura de Franco llenó de lugares de memoria el suelo español, con un culto obsesivo al recuerdo de los caídos, que era el culto a la nación, a la patria, a la verdadera España frente a la anti-España, una manera de unir con lazos de sangre a las familias y amigos de los mártires frente a la memoria oculta de los vencidos, cuyos restos quedaron abandonados en cunetas, cementerios y fosas comunes.

El proyecto reformista de la República y todo lo que esa forma de gobierno significaba fue barrido y esparcido por las tumbas de miles de ciudadanos; y el movimiento obrero, sus organizaciones y su cultura, resultaron sistemáticamente eliminados en un proceso más violento y duradero que el sufrido por otros movimientos europeos de resistencia al fascismo.

La paz de Franco, que mantuvo el estado de guerra hasta abril de 1948, transformó la sociedad, destruyó familias enteras, rompiendo las básicas redes de solidaridad social, e impregnó la vida diaria de miedo, de prácticas coercitivas y de castigo. La amenaza de ser perseguido, humillado, la necesidad de disponer de avales y buenos informes para sobrevivir, podía alcanzar a cualquiera que no acreditara una adhesión inquebrantable al Movimiento o un pasado limpio de pecado republicano.

Con el paso del tiempo, la violencia y la represión cambiaron de cara, la dictadura evolucionó, “dulcificó” sus métodos y, sin el acoso exterior, pudo descansar, ofrecer un rostro más amable. Pero la dictadura nunca renunció a la guerra civil como acto fundacional, que recordó una y otra vez para preservar la unidad de esa amplia coalición de vencedores y para seguir humillando a los vencidos. La represión fue una útil inversión que Franco supo administrar hasta el final. Porque Franco murió matando. Pocas semanas antes de su muerte, ordenó la ejecución de cinco supuestos terroristas, tres del FRAP y 2 de ETA. Para dejar bien claro qué tipo de dictadura había sido la suya, desde la victoria en la Guerra Civil hasta el último suspiro en noviembre de 1975.

​​​​​​​4. ¿POR QUÉ LA DICTADURA DURÓ TANTO TIEMPO?
Al tratar de identificar las causas de esa larga duración, siempre sale, en primer lugar, por orden de aparición en la historia, la represión y la cultura excluyente, ultranacionalista, que dominaron la sociedad española desde la victoria en la guerra a la muerte de Franco. El mantenimiento de ese escenario de violencia, miedo y vigilancia durante tanto tiempo resulta incomprensible si no se tiene en cuenta el papel fundamental del Ejército, del ejército de Franco, construido en medio de una guerra civil y de una posguerra victoriosa, que garantizó en todo momento la continuidad de la dictadura, porque unido en torno a su Caudillo y al recuerdo del 18 de julio no presentó fisuras.

Franco y su ejército debieron también adaptarse a los cambios en la situación internacional. La situación internacional fue muy propicia para el franquismo, desde sus orígenes hasta el final. En 1939, derrotada la República, el clima internacional tan favorable a los fascismos contribuyó a consolidar la violenta contrarrevolución iniciada ya con la ayuda inestimable de esos mismos fascismos desde el golpe de julio de 1936. Muertos Hitler y Mussolini, a las potencias democráticas vencedoras en la Segunda Guerra Mundial les importó muy poco que allá por el sur de Europa, en un país de segunda fila que nada contaba en la política exterior de aquellos años, se perpetuara un dictador sembrando el terror e incumpliendo las normas más elementales del llamado “derecho internacional”. En palabras de un alto diplomático británico, la España de Franco “sólo es un peligro y una desgracia para ella misma”.

Conforme avanzaba la Guerra Fría, como Franco era un aliado fiable en la contienda mundial contra la Unión Soviética, no se ejerció sobre su dictadura una presión irresistible para que se "democratizase". Franco y su régimen fueron, así, gradualmente rehabilitados, algo que se confirmó plenamente con los Acuerdos con Estados Unidos firmados el 26 de septiembre de 1953, la firma del Concordato con el Vaticano el 27 de agosto de aquel mismo año y el ingreso de España en la ONU en diciembre de 1955.

Sin intervención exterior, con un ejército unido y con un apoyo unánime, salvo en los últimos años, de la Iglesia católica, en su labor educativa y de control social, la dictadura de Franco estaba destinada a durar, aunque las dictaduras no se sostienen sólo en las fuerzas armadas o en la represión. Para sobrevivir y durar, necesitan bases sociales y la dictadura de Franco, salida de una guerra civil, no fue en ese aspecto una excepción.

Los apoyos del franquismo fueron amplios, más allá de toda la gente de orden que se sumó a la sublevación en julio de 1936 y estuvo siempre agradecida a Franco por la victoria. Salvo los más reprimidos, perseguidos y silenciados, a los que la dictadura excluyó y nunca tuvo en cuenta, el resto de esa España que había estado en el bando de los vencidos se adaptó, gradualmente y con el paso de los años, con apatía, miedo y apoyo pasivo, a un régimen que defendía el orden, la autoridad, la concepción tradicional de la familia, los sentimientos españolistas, la hostilidad beligerante contra el comunismo y un inflexible conservadurismo católico.

Los cambios producidos por las políticas desarrollistas, a partir del Plan de Estabilización de 1959, aconsejado por el Fondo Monetario Internacional, y de la llegada de los tecnócratas del Opus Dei al Gobierno, ampliaron y transformaron sus bases sociales. El crecimiento económico fue presentado como la consecuencia directa de la paz de Franco, en una campaña orquestada por Manuel Fraga desde el Ministerio de Información y Turismo y plasmada en la celebración en 1964 de los XXV Años de Paz, que llegó hasta el pueblo más pequeño de España.

Esos “buenos” años del desarrollismo, opuestos a la posguerra, la autarquía y el hambre, alimentaron la idea, sostenida todavía en la actualidad por la derecha política, de que Franco fue un modernizador que habría dado a España una prosperidad sin precedentes. Resulta difícil creer y demostrar, sin embargo, que un general que, junto con sus compañeros de armas, provocó una guerra civil, con efectos desastrosos, y se mantuvo en el poder absoluto y de forma violenta durante casi cuatro décadas, fuera un modernizador o un salvador de la patria frente al comunismo y la revolución.

Más de una generación de españoles creció y vivió bajo el dominio de Franco, sin ninguna experiencia directa de derechos o procesos democráticos. Ese gobierno autoritario tan prolongado tuvo efectos profundos en las estructuras políticas, en la sociedad civil, en los valores individuales y en los comportamientos de los diferentes grupos sociales. En 1945, Europa occidental dejó atrás treinta años de guerras, revoluciones, fascismos y violencia. Pero España se perdió durante otras tres décadas ese tren de la ciudadanía, de los derechos civiles y sociales y del Estado de bienestar.

El principal responsable de que eso fuera así, Francisco Franco, ayudado por sus compañeros de armas y apoyado casi hasta el final por amplios sectores de la población española, se empeñó en llevar un camino diferente al de las democracias occidentales. Y durante años y años, muchos españoles defendieron y aceptaron estar organizados, y obligar a quienes no lo quisieran estar, conforme a estrictas reglas autoritarias.

Con propaganda y memorias divididas, esos trágicos sucesos del pasado han proyectado su larga sombra sobre el presente democrático y, frente a ella, necesitamos miradas libres y rigurosas, que atiendan al conocimiento y a las diversas investigaciones que los historiadores hemos proporcionado en los últimos años. Conocimiento, enseñanza y transmisión y divulgación precisa de la historia. Más allá de las mentiras.
                                                        _______________________ 

Julián Casanova es catedrático de Historia Contemporánea de la Universidad de Zaragoza e investigador del Institute for Advanced Study de Princeton

3 consejos para los padres de niños quisquillosos a la hora de comer

Puede ser un momento de frustración y hasta desesperación.

Quieres que tu niño o niña se alimente bien, tratas todos los trucos y persuasiones posibles, pero no hay caso.

No quieren probar ni un trocito de esa verdura, fruta o alimento que has preparado.

¿Qué más puedes hacer?

Investigadores del Hospital de Niños de Filadelfia y de la Universidad de Pensilvania en Estados Unidos aseguran tener una respuesta a esa pregunta.

Ambos centros realizaron un estudio en el que los propios padres fueron entrenados para convertirse en "terapeutas" de sus niños. Y los resultados, según aseguran los investigadores, "cambiaron la vida de las familias".

El estudio se centró en poco más de 20 familias y en casos extremos, pero los investigadores afirman que las técnicas usadas son aplicables a una gran variedad de casos de niños que se niegan a probar o comer alimentos nuevos.

El estudio tuvo lugar en la Clínica de Niños Quisquillosos para Comer (Picky Eaters Clinic) en el Hospital de Filadelfia y fue dirigido por la psicóloga clínica Katherine Dahlsgaard.

La experta compartió con BBC Mundo tres consejos que los padres pueden seguir para ayudar a sus niños a aceptar nuevos alimentos.

Qué es un "niño quisquilloso" Comencemos por una definición: ¿cuándo se considera a un niño "quisquilloso para comer"?

"Eso es subjetivo. Muchos niños pasan por fases normales en su desarrollo cuando son muy pequeños, con uno o dos o tres años, antes de ir a la escuela, en que son más quisquillosos e incluso neófobos, es decir, resistentes a probar algo nuevo", explicó Dahlsgaard.

No llamaría a estos niños quisquillosos y alentaría a los padres a continuar ofreciéndoles alimentos nuevos. Puede tomar hasta 15 veces o más intentos antes de que un niño acepte algo nuevo".

Dahlsgaard señaló que un "verdadero quisquilloso" es típicamente un niño mayor, ya en el jardín o la escuela, que es muy inflexible con la comida, que se niega rotundamente a probar algo y hasta se muestra afligido si los padres insisten.

Los niños quisquillosos suelen ser niños que comen snacks o meriendas todo el tiempo y cuando se sientan a la mesa no tienen mucha hambre, agregó la experta.

"Yo trabajo con padres para enseñarles que no deben sentirse culpables si no lo permiten a sus hijos comer snacks antes del almuerzo o la cena".

La psicóloga señaló que los niños quisquillosos y sus padres pueden ser blanco de todo tipo de comentarios negativos.

"A los niños les llaman tercos o malcriados o mimados y todo el mundo se siente con derecho a dar consejos que no ayudan como: '¡Oblígalo a que coma!'"

"Pero muchos de los niños quisquillosos tienen hermanos que comen normalmente. Los padres son los mismos, así que culpar a los padres es injusto y no ayuda", agregó

"Y también sabemos que en algunos casos puede haber un componente genético que influye en la sensibilidad a cosas que te dan asco".

Sea como sea el caso, Dahslgaard tiene tres recomendaciones principales para los padres de niños quisquillosos con la comida.

1. Establecer expectativas claras
Esto significa, por ejemplo, decir a un niño: "Probarás y tragarás tres pedacitos de una comida nueva o no preferida" durante la cena o almuerzo, o en una hora predeterminada de merienda.

"Yo les enseño a los padres a que se den a sí mismos el permiso de fijar esas expectativas claras. Algunos padres creen que si lo hacen, sus hijos sufrirán o acabarán con algún desorden alimenticio. Pero muchas investigaciones muestran que eso no es cierto", afirmó Dahlsgaard.

"Yo les recuerdo a los padres que ellos insisten todo el tiempo a sus hijos que hagan cosas que no quieren, como por ejemplo, que se cepillen los dientes, que vayan a la cama, que acepten ser vacunados, y eso es considerado ser buenos padres".

2. No tener miedo de ofrecer recompensas
Para Dahlsgaard no hay nada de malo en dar recompensas a los niños cuando cumplen la expectativa fijada. Y ofrecer comentarios positivos cuando lo hacen.

"Y si tu hijo no cumple con la expectativa, no tengas miedo de no dar una recompensa. Estas mostrándole que puede tener confianza en que tú cumples tu palabra".

Dahlsgaard relató que la recompensa más popular suele ser "tiempo de pantalla", es decir, ver algo en la televisión o una tableta.

En el estudio, si los niños no cumplían con la expectativa de probar algo "era su propia opción y simplemente no tenían tiempo de pantalla esa noche".

De acuerdo a la experta, los niños aprendieron muy pronto que sus padres cumplirían su palabra.

3. Ignorar los gestos de asco
Cambiar comportamientos lleva tiempo, pero eventualmente las pequeñas victorias llevan a victorias mayores, señaló Dahlsgaard.

"En nuestras sesiones hacemos mucho juego de roles. Fingimos situaciones para que los padres aprendan a mantenerse calmados y optimistas aún cuando sus niños lloran, gritan o salen corriendo de la mesa".

"Los padres en ese caso simplemente dicen, 'está bien, sé que lo harás mañana'".

Clínica de los Niños Quisquillosos para Comer entrené a los padres a mostrar una actitud neutral ante las expresiones de asco. Esas reacciones suelen ser una respuesta natural a probar algo nuevo, pero desaparecen cuando el alimento se vuelve familiar".

En el estudio, los padres asisten a sesiones de grupo en que se apoyan entre sí.

"Los padres aplaudieron por ejemplo a una mamá y papá cuyo niño armó un escándalo porque no quería probar un trocito de aguacate o palta. Ellos se mantuvieron calmados y, al otro día, el niño lo comió".

El desafío de la flexibilidad Otra técnica útil según Dahlsgaard es introducir variedad, comenzando por las comidas favoritas.

Por ejemplo, si a un niño le gusta comer tostadas, sus padres pueden cortarlas en filas largas en lugar de cuadraditos.

A esta opción le llamamos el 'desafío de la flexibilidad', es decir, presentar una comida que les gusta pero de una forma novedosa".

¿Y qué consejo daría Dahlsgaard a los padres de niños que prefieren ir a la cama con hambre antes que probar una verdura nueva?

"Yo sugeriría a los padres que expongan al niño a muchas más verduras, en el desayuno, almuerzo, cena, merienda", dijo.

"También que dibujen en un papel una tabla en la que el niño pueda ver que gana estrellitas cada vez que come algo nuevo", continuó.

"¡Y que tengan muuucha paciencia!".

5 ideas sencillas para que tus niños elijan comer alimentos saludables


viernes, 20 de diciembre de 2019

Educación: el polémico estudio que afirma que niños más atractivos sacan mejores notas

Es posibles que los niños y niñas más agraciados físicamente saquen mejores notas?

Eso es lo que asegura un reciente estudio llevado a cabo por economistas estadounidenses, que concluyó que los estudiantes más atractivos no solo obtienen mejores resultados académicos sino que también permanecen más tiempo escolarizados.

El economista Daniel S. Hamermesh, de la neoyorquina Universidad de Barnard, y dos colegas de otras dos universidades de EE.UU. llegaron a esta conclusión tras estudiar la amplia información incluida en el informe estadounidense "Atención temprana a los niños y desarrollo en la juventud", que sistematizó los datos de 1.300 niños edades entre 6 meses y 15 años de edad.

Para su investigación también utilizaron el informe británico "Estudio del desarrollo de la niñez en Reino Unido", que contiene una cronología de la vida de 17.000 niños británicos nacidos en una sola semana en 1958.

Una de las preguntas que surge al leer las conclusiones preliminares del estudio publicadas por el Buró Nacional de Investigación Económica de Estados Unidos es cómo midieron los expertos el nivel de atractivo de los estudiantes.

Cómo determinar quién es lindo y quién no? Diseñar una forma de medir la belleza es todo un desafío. Quizás por eso los autores decidieron confiar en las clasificaciones ya incluidas en los estudios que utilizaron para su investigación.

En el caso del informe estadounidense, la apariencia de los sujetos fue evaluada por un panel de al menos 10 jóvenes que miraron segmentos de videos de las entrevistas que ofrecieron los niños durante la investigación. Los evaluadores podían dar una calificación de 1 (no atractivo) a 5 (muy atractivo o lindo).

En el estudio inglés fueron los maestros los que ofrecieron una de las siguientes categorías a los menores: atractivo, no atractivo, con una "característica anormal" o "mal nutrido, desaliñado y sucio".

Los niños evaluados como atractivos en ambos estudios demostraron tener mejores resultados académico que sus compañeros clasificados como menos atractivos, aunque los autores controlaron la influencia de otras variables como el origen étnico, el género, la educación y los ingresos de los padres.

La Dra. Judith Kleine Staarman, profesora de Educación de la Universidad de Exeter (Inglaterra) y especialista en los procesos de aprendizaje, advierte que el estudio relaciona los resultados académicos con el aspecto físico de los niños, pero que esto es solo una correlación y no se puede interpretar como causal.

Lo que intenta explicar es que no por lucir más atractivos las personas son más inteligentes. Pero entonces, ¿por qué se produce esta correlación?

¿Culpa de los profesores? Hamermesh y sus colegas utilizaron la gran cantidad de datos disponibles para probar diferentes teorías. Encontraron evidencia de que los profesores suelen tener una mejor relación con estudiantes más atractivos, lo cual pudiera explicar la brecha entre unos y otros.

También concluyeron que los que fueron clasificados como no atractivos en algún grado, eran más proclives a reportar ser víctimas de acoso por parte de sus compañeros, lo cual afecta el rendimiento académico.

Además, vieron que se reportan menos casos de problemas de comportamiento entre los estudiantes más agraciados.

Así, los datos demuestran que los más "lindos" son más proclives a terminar sus estudios y a tener resultados positivos consistentes en lectura y matemática.

De hecho, el estudio de Hamermesh confirma que aquellos cuya apariencia "está un punto por arriba del promedio" logran mantenerse en la escuela cinco meses más que los compañeros que tienen una apariencia considerada promedio.

Judith Kleine considera que este estudio deja muchas preguntas sin respuesta. "El informe no explica claramente por qué está sucediendo esta correlación entre apariencia y desempeño académico".

No obstante, no desestima la importancia de los prejuicios que tienen los profesores.

Seguramente, uno tiene preferencias subconscientes, incluso yo, que estoy tan alerta sobre esto, pero le pasa a todo el mundo".

El estudio estadounidense ofrece luz también sobre otras investigaciones que afirman que las personas atractivas ganan más dinero que las que no lo son.

Estas revelaciones podrían ayudar a comprender por qué, ya que de acuerdo a los resultados de esta investigación, los más "atractivos", incluso siendo niños, suelen tener mejores experiencias educativas y mantienen un mejor rendimiento académico.

Esto podría significar que al llegar a la adultez las personas consideradas más atractivas tienen una posición más ventajosa para enfrentarse a la vida profesional.

Lea el informe completo en inglés aquí.

BBC y El País

https://lasideas.es/6-juegos-para-aumentar-el-autoestima-de-los-ninos/

jueves, 19 de diciembre de 2019

Los cirujanos cardiovasculares aconsejan revisar el uso de ‘stents’ en la mayor arteria del corazón. Una filtración a la BBC revela que el estudio de referencia sobre el tratamiento omitió datos sobre la seguridad de los dispositivos.

La Sociedad Europea de Cirugía Torácico-Cardiovascular (EACTS, en sus siglas en inglés) ha retirado su apoyo al tratamiento más utilizado para un tipo de dolencia del corazón tras la publicación por la BBC de unos datos que cuestionan la seguridad en estas intervenciones de los stents, unos pequeños muelles usados para desobstruir las arterias del corazón. La controversia afecta a los pacientes que reciben tratamiento para la enfermedad significativa del tronco común de la arteria coronaria izquierda, que ocluye parcialmente la circulación por la mayor arteria que lleva sangre al corazón. Estos son unos 1.500 al año en España, según las sociedades científicas consultadas. El uso de stents en otras indicaciones no está cuestionado.

El tratamiento de primera elección hasta 2018 era una operación quirúrgica a corazón abierto para aplicar una desviación coronaria (bypass). La publicación dos años antes de un estudio que concluía que con un stent se obtenían resultados similares llevó a modificar las guías clínicas en Europa. Estas, elaboradas por la EACTS y la Sociedad Europea de Cardiología (ESC, en sus siglas en inglés), pasaron a recomendar ambas intervenciones.

El ensayo clínico que llevó a dar este paso, llamado Excel, fue publicado por la prestigiosa revista The New England Journal of Medicine y estaba financiado por Abbott, uno de los mayores fabricantes de stents

La investigación del programa Newsnight de la BBC revela que los autores del estudio utilizaron una forma inusual de contabilizar las complicaciones sufridas por los 2.000 pacientes incluidos en el ensayo, la mitad de los cuales fueron sometidos a un bypass, mientras que a la otra mitad se le implantó un stent. Esta fórmula omitía que aquellos con un stent tenían un 80% más de posibilidades de sufrir un infarto grave y padecían una mayor mortalidad.

“Utilizaron un valor compuesto que sumaba los casos de fallecimiento e infartos”, explican fuentes de la EACTS. “Pero la definición de infarto no era la que habitualmente utilizamos, sino una muy estricta que incluía incluso alteraciones de enzimas sin relevancia clínica que suelen producirse en las operaciones de bypass. De esta forma, el total de complicaciones parecía similar, cuando en realidad los datos concretos de infartos graves y muertes eran desfavorables para los stents”, añaden estas fuentes.

Estos datos son los que reveló hace una semana la BBC y provocaron una tormenta inmediata en la clase médica. En un duro comunicado, la EACTS mostró su “gran preocupación” porque “parece que se han ocultado algunos resultados del ensayo Excel y algunos pacientes han recibido por ello consejos médicos erróneos”. “El consejo de la EACTS ha decidido por unanimidad retirar de forma inmediata nuestro apoyo [...] a las guías clínicas”, sigue la sociedad científica. “Si los nuevos datos son correctos, la recomendación vigente no es segura”, concluye.

La reacción de la ESC, cuyos asociados son quienes implantan los stents, ha sido menos contundente y sigue apoyando “las actuales recomendaciones”, según otro comunicado. “Hemos sido informados de que puede haber nuevos hallazgos” del ensayo Excel “que no habían sido incluidos en la publicación original o compartidos con nosotros. Esperamos revisar estos datos con nuestros colegas cirujanos, junto a los nuevos datos publicados este año, para valorar su relevancia”, concluye la ESC.

“Reelaborar las guías clínicas” Ángel Cequier, presidente de la Sociedad Española de Cardiología, considera que la polémica es “una discusión técnica y estadística”. “Tenemos que analizar los datos ahora discutidos y deberemos reelaborar las guías clínicas. Pero es un debate que se ha trasladado fuera del ámbito médico y puede alarmar a la población, cuando en realidad estos son dispositivos con muchos usos, que cada año salvan muchas vidas y han demostrado su eficacia y seguridad”, afirma.

En una respuesta por escrito, Abbott afirma que financió el ensayo Excel, pero que este fue “diseñado para ser liderado y desarrollado enteramente desde la comunidad académica de cirujanos cardiacos y cardiólogos” sin intervención de la compañía. “El desarrollo de los protocolos, la ejecución del estudio, su seguimiento, el análisis de los datos y su interpretación ha estado en manos de investigadores independientes”, reitera la compañía.

Los editores de The New England Journal of Medicine también defienden, en una respuesta escrita a este diario, que “el artículo describe de forma adecuada los hallazgos del ensayo clínico”.

UNA INVESTIGACIÓN ENVUELTA EN RECELOS Y DIMISIONES
Los datos revelados sobre el ensayo Excel han hecho aflorar un conflicto larvado en relación con el estudio. “Los autores utilizaron una forma inusual de definir infarto de miocardio, pero aseguraron que publicarían también los datos referentes a la definición más convencional” y grave de esta dolencia, recoge la BBC.

Estos datos, sin embargo, no se han hecho públicos hasta ahora. Mientras las guías clínicas estaban en fase de elaboración, el consejo asesor del ensayo clínico mostró por escrito sus recelos “sobre la mayor mortalidad entre los pacientes a los que les había sido implantado un stent”, según mensajes de correo electrónico consultados por la cadena británica.

Una de las figuras médicas que han participado en el ensayo, David Taggart, de la Universidad de Oxford, renunció a sus responsabilidades. Explicó a la BBC que “no tenía otra opción” ya que el artículo no “daba la suficiente importancia a los datos de mortalidad del estudio”.

https://elpais.com/sociedad/2019/12/16/actualidad/1576528839_409230.html

miércoles, 18 de diciembre de 2019

_- La fosa donde enterraban a menores y embarazadas, la feroz represión de Queipo en Écija.

_- María Serrano
Público.es

Desde menores a jóvenes embarazadas y niños se encontraban dentro de esta fosa que albergaba en 1937 más de doscientos fusilados. En 2020, será de nuevo abierta para terminar de identificar lo que allí ocurrió.

Cuenta la arqueóloga Carmen Romero Paredes que “las unidades militares desplegadas por Queipo se iban expandiendo por las distintos pueblos de la provincia de Sevilla”. Y cómo el primer pueblo en caer después de la capital andaluza fue Écija, el mismo 18 de julio. Sin piedad, aplicando el bando de guerra, la represión más feroz en Écija se llevaría por delante a más de quinientos vecinos al formar parte de una maniquea limpieza de inocentes. Una huella que quedó para siempre en este pueblo. “Aquella eliminación directa con ejecuciones inmediatas” en el primer verano de la guerra civil no fue olvidada por ningún vecino.

La historiadora de la Universidad de Córdoba Carmen Jiménez Aguilera cuenta a Público que “el mismo día 18 se lee el bando de guerra en la plaza del Salón y allí mismo muere el primer ecijano”. Su nombre, José Pérez Jiménez, alias El Hormiguita. Jornalero de profesión. “Solo en el primer momento de la lectura, este hombre respondió con un viva la república, a lo que los militares respondieron con un tiro certero y directo que acabó con su vida”. Esa fue la carta de presentación de los golpistas en Écija nada más sublevarse. Juan Tamarit Martell, alcalde republicano también se personaría frente a la guarnición golpista en la noche del 18 de julio. Un mes después, su cuerpo se encuentra cosido a balazos frente a las tapias del cementerio, el 13 de agosto de 1936.

Pero la represión no solo se extendía por la corporación local y los políticos, sino que acompañó durante toda la dictadura a los familiares de estos. La hermana de Juan Tamarit Martell sufrió en plena posguerra un consejo de guerra, por denuncia de un vecino de Écija al que insultó en un autobús por haber asesinado a su hermano. Carmen destaca a Público que, al ser su marido falangista, el juez militar le impuso un arresto domiciliario por un breve tiempo y finalmente fue absuelta.

Pero, ¿cómo continuaría esa represión bien entrada la guerra para los vecinos ecijanos? Carmen Jiménez apunta a Público que hay muchas anécdotas e historias sin dar a conocer que muestran la extrema vigilancia a la que eran sometidos cada uno de los vecinos, ya casi acabada la guerra. Como la de María Rejano, una joven vecina que una tarde de febrero de 1939 fue al cine a ver una película y la Guardia Civil se dio cuenta de que no levantó el brazo cuando se proyectaba la imagen del Generalísimo y sonaba el himno nacional en el cine Cervantes. “Su vacilación a la hora de levantar el brazo, pues no sabemos si es que no lo levantó o no lo hizo con suficiente vehemencia, fue reflejado en un informe del cuerpo de investigación”. La joven recibió una multa de 15 pesetas, una importante fortuna para la época, “teniendo en cuenta que un kilo de pan podía costar en aquellos años de la posguerra entre los 50 y 90 céntimos”.

Desde el verano de 1936 hasta febrero de 1937 fueron fusiladas en Écija más de 200 personas. Jiménez destaca a Público que “esta cifra sigue creciendo, pues hay muchas víctimas de la represión franquista en Écija de las que no hay ningún registro documental”. Matar a más de 200 personas, que sepamos a día de hoy, “son muchas, demasiadas personas”. Y es que, tal y como destaca Jiménez Aguilera, “el golpe en Écija nació matando y sólo hubo un bando, el vencedor”.

En la cifra global de represaliados se puede hablar de 500 ecijanos como víctimas de la represión ejercida por el franquismo. “En este conteo tenemos incluidos fusilados, represaliados económicos (incautación de bienes y tribunal de responsabilidades políticas), los que sufrieron la cárcel o aquellos que fueron juzgados por tribunales militares”. Muchos de los ecijanos que fueron condenados por consejos de guerra serían juzgados una vez terminada la guerra civil. Otros huyeron y después de tres años volvieron y serían encarcelados.

El conocimiento de aquel horror y la primera exhumación en 1982
La voluntad de los familias ecijanas fue lo que permitió conocer los cuerpos y la atrocidad de aquella represión. “Doscientas familias ecijanas tenían un familiar en esa fosa. Son los primeros pasos de nuestra democracia, hay lugares en los que se estaba haciendo también, y ellos pensaron que porqué no”, apunta la investigadora.

Se recogió dinero, los trabajos se hicieron por suscripción popular, cada uno aportó lo que pudo. En la mayoría de los casos fueron los familiares los que donaron el dinero.

A pesar de las escasas técnicas arqueológicas de la época, se pudo crear un mausoleo donde recogieron y depositaron de forma artesanal los restos de todos los fusilados. Un proyecto donde fueron contabilizados, según los registros de la época, 635 cuerpos.

Treinta y siete años después de aquella exhumación, se ha pedido financiación al Ministerio de Justicia para realizar un “estudio antropológico de los huesos y análisis de ADN, es decir, una identificación de los mismos”. A día de hoy, todavía no han dado comienzo, e, igualmente, tampoco se ha realizado recogida de muestras de ADN a ningún familiar, a la espera de que se ejecuten los plazos para el inicio del proyecto en 2020.

Menores fusilados y hermanos con tan solo 14 y 16 años
Jiménez Aguilera señala que existen casos sangrantes y documentados dentro de aquella fosa de Écija, como dos hermanos menores en el momento de su fusilamiento. “Un familiar nos contó, en este caso una mujer, como sus dos hermanos de 16 y 14 años fueron fusilados. Ella era una niña de apenas 7 u 8 años. Unos falangistas vinieron a por el hermano mayor y el otro más chico se empeñó en acompañarlo. Ella también se fue detrás de ellos y vio cómo los ataban; intentó continuar hasta el cementerio como pudo”.

También está la historia de los médicos Carlos Ballesteros y Juan Jiménez García, y el hijo de este, practicante, Juan Jiménez Tovar, que fueron detenidos juntos y fusilados posteriormente pocos días después del golpe. El hijo fue el único que quedó vivo tras el fusilamiento y murió aquella noche desangrado mientras llamaba a su madre. La ejecución fue perpetrada por el jefe de Falange del municipio sevillano.

Hay muchos ejemplos de ensañamiento con otros menores. Jiménez señala el caso del cantinero de la Casa del Pueblo, detenido y fusilado poco después. Su hijo mayor, miembro del Partido Comunista fue detenido, pero no fusilado, a cambio de salvarle la vida. “Con sorna, le dicen que va a enterrar él a sus compañeros. Lo ponen a cavar en la fosa, a presenciar los fusilamientos y a enterrar, como le dijeron, a sus compañeros”. Su otro hermano, de apenas 14 años, quedaría traumatizado de por vida. “Aunque sabía leer y escribir, nunca más volvió a firmar un documento”. La hermana de este, Encarna, contaba a Carmen cómo “temblaba al ver a la Guardia Civil y sólo acertaba a firmar con el sello y el dedo”.

Sobre los fusilamientos a mujeres jóvenes, destaca que “muchos testimonios cuentan que hubo un fusilamiento sólo de mujeres, todas ellas muy jóvenes, incluso puede que algunas de ellas no fuesen más que unas niñas”. Las fuentes orales apunta cómo las mataron y las dejaron expuestas varios días a las puertas de un convento, el de Santa Inés, todas ellas con un escapulario sobre la boca.

En cuanto a las mujeres embarazadas, hay testimonios que afirman que de los cuerpos exhumados en 1982 en la fosa había mujeres embarazadas y algunos niños pequeños. “No hay ningún rastro documental de esto, no tenemos información, no hay un documento que lo corrobore. Con el trabajo que se va a realizar y la identificación de los restos, podremos confirmar o desmentir este dato en esta investigación que será definitiva”, concluye la historiadora.

Fuente:
http://www.publico.es/politica/queipo-ecija-fosa-enterraban-menores-embarazadas-feroz-represion-queipo-ecija.html

martes, 17 de diciembre de 2019

Un paseo con el joven Einstein por Zúrich, la ciudad del tiempo. Desprejuiciada y abierta, la ciudad suiza se convirtió en una meca científica para el gran físico teórico.

Albert Einstein junto a su compañera de estudios y pareja, la matemática Mileva Marić, en 1912.

¿Cuánto mide un minuto? En un lugar destacado de Zúrich, 46 centímetros. El reloj de San Pedro, que los zuriqueses presumen que es el mayor reloj mural del mundo, prodiga el tiempo desde el centro de la ciudad. Sus números dorados brillan sobre el gris de una torre de un gótico austero. 46 centímetros es justo la distancia que dibuja la aguja de su minutero cada 60 segundos.

Ahora sabemos que el tiempo es relativo, pero cuando Albert Einstein llegó a Zúrich, en 1895, el tiempo y el espacio, la masa y la energía, todavía eran conceptos absolutos. Einstein tiene apenas 16 años y se ha desplazado a la ciudad suiza en tren desde su Alemania natal. Se cuela bajo las faldas de Mater Helvetica, una escultura encaramada en el dintel de la entrada de la estación, como si se encomendara a ella antes de dar un paso hacia la Bahnhofstrasse: la gran vía burguesa trazada en el siglo XIII que hoy jalonan tiendas de lujo.

Aquel viaje en tren le cambiará la vida al joven Einstein, pero, con todo, no fue el más importante de su aún corta existencia. Sin moverse del sitio, solo con su imaginación, Albert ya había llegado mucho más lejos, y mucho más rápido: aquel joven judío a quien su familia tiene por atolondrado se había planteado cómo sería viajar junto a un rayo de luz. A la larga, un viaje y otro, el real en tren hasta Suiza y el imaginario, pondrán patas arriba la física newtoniana. Pero en 1895 las motivaciones de Einstein son más mundanas. Quiere dejar atrás su adolescencia en Baviera y le puede el pavor a hacer el servicio militar en Alemania.

El siglo XIX está dando sus últimas boqueadas y los viejos científicos aún no terminan de desprenderse de la creencia en el éter como medio que usa la luz para transmitirse. El debate científico se libra en laboratorios polvorientos donde titilan las lámparas de gas. En comparación con ese ambiente casposo, qué flamantes le resultan a Albert los laboratorios que el magnate Siemens había pagado para el Polytechnikum de Zúrich. Sumando premios Nobel hasta los 21 actuales, el Politécnico se convertirá años después en uno de los centros de investigación más afamados del mundo bajo tres iniciales: ETH. Einstein, tras un primer rechazo, logra matricularse en sus clases.

La atmósfera que el joven respira en las calles de Zúrich tampoco tiene mucho que ver con la de las ciudades alemanas donde ha crecido. En el aire de Suiza palpita algo industrioso y civil, y se le hace patente el contraste con el militarismo prusiano. Albert opta por ser apátrida: renuncia a la nacionalidad alemana y aspira, ahorrando 20 francos al mes, a convertirse algún día en ciudadano helvético. Es fácil imaginar al chaval extranjero perdiéndose por el Lindenhof, el barrio que siglos atrás coronó un templo a Júpiter, hijo del dios del tiempo. Quizá buscará a menudo la cima suave de la colina a través de cuestas y plazuelas plagadas de fuentes para plantarse ante la torre enorme del reloj de San Pedro, el de los minutos en centímetros, el de las distancias medibles en minutos. Adentrándose luego en un callejón abierto junto a la iglesia, es posible que sin saberlo pisara los restos de las termas de la Turicum romana (si se pronuncia ese nombre latino durante más de mil años, se termina diciendo Zúrich).

De niño, sus familiares acusaron que tardaba demasiado en aprender a hablar y quizá por eso a Albert se le ha quedado la costumbre de ensayar sus frases en voz alta. Aun siendo distante, guasón y huraño, no le hace ascos a mezclarse entre el gentío que toma café. Aún está abierto, aunque con una decoración bien cambiada, el café Metropol, un refugio a lo belle époque donde se reúne en tertulia con sus amigos escasos pero sinceros del Politécnico. No falla a los encuentros el fiel Marcel Grossmann, apoyo en el armazón matemático de las teorías de Einstein y a quien también deberá el puesto de trabajo en la famosa Oficina de Patentes de Berna, el escenario de su annus mirabilis de 1905, adonde llegará tras recibir rechazos de acá y de allá.

Entre un paisanaje sobre todo masculino, a Einstein le llama la atención una compañera culta, inteligente y tenaz. Mileva Marić es la única chica que se sienta en su clase del Politécnico. Al principio a Albert la joven serbia le resulta fea, pero comienza a hablar con ella, a cartearse. Intercambian referencias científicas como una antesala pudorosa del afecto. Se entienden. Les apasionan las fronteras de la física. Ambos son extranjeros por voluntad propia en una ciudad que los acoge de buen grado.

Las murallas medievales de Zúrich han ido cayendo desde mediados del siglo XIX por orden de los liberales gobernantes del cantón. Esa merecida fama aperturista se extiende a los huidos por las represiones de toda Europa y se constata al llegar a la ciudad. Hay algo sorprendentemente ácrata en el frío corazón de los fabricantes de relojes. Una fisura contestataria en los zuriqueses, a pesar de ser adoradores del método, el engranaje, la puntualidad y los seguros. En realidad así es también Albert: está convencido de que la naturaleza se rige por un orden definido —Dios y los dados— y le asustarán las incertidumbres que generará su hipótesis de la onda corpúsculo, pero, a la vez, es reacio ante cualquier autoridad y verdad revelada. Para dar rienda suelta a sus inquietudes, pocas ciudades hay mejores que Zúrich, una ciudad con solera de levantisca desde la Edad Media. La revolución de los gremios del siglo XIV ya había puesto contra las cuerdas el poder de la nobleza y de los monasterios. En la ciudad manda lo empírico, el sentido práctico, la falta de prejuicios, y de ella se beneficiarán también Mileva y otras mujeres pioneras de la ciencia: la Universidad de Zúrich fue una de las primeras en abrir sus puertas al sexo femenino.

En sus calles, sin la atadura de un contrato, Albert y Mileva vivirán su pasión lúcidos y libres. En casa de ella recala él cada vez que pierda las llaves, y bien sabe el atolondrado Einstein que no serán pocas ocasiones. Entre despiste y despiste, los jóvenes engendran a una niña, Lisserl. El embarazo impide a Mileva diplomarse en el Politécnico. La pequeña nace en 1902 en Serbia, y puede que Albert no llegase nunca a conocerla: se cree que la pequeña murió un año después.

Pero antes de que la muerte de la niña los sacuda, mucho tiempo antes de que se divorcien pactando que el dinero de un futuro Nobel será para Mileva, los dos jóvenes estudiantes deciden saltarse las clases y escapan al Üetliberg, el monte-mirador que domina la ciudad y ofrece vistas amplias sobre su lago.

Discuten asuntos tan poco románticos como la teoría electromagnética de la luz. A sus pies se extiende un caserío que alterna edificios antiguos y modernos, una especie de capricho de marquetería en el que conviven las sedes de los antiguos gremios de artesanos con las de los nuevos centros científicos. Destacan las construcciones que albergan el Politécnico y la Universidad de Zúrich, pero también una nueva estructura imponente que surge de entre las casas antiguas como una tenia gigante. Es el observatorio astronómico que Gustav Gull ha ubicado en una de las partes más antiguas de la ciudad. El arquitecto se plantea derruir para siempre el viejo barrio de Schipfe, el cargadero del puerto. Por suerte, la falta de fondos congela el proyecto y sus calles aún ofrecen hoy un refugio pintoresco a quienes huyen del tedio del lujo y el antiglamour de las empresas de seguros.

En esa primera estancia en la ciudad, Albert Einstein pasará solo cuatro años, que acaban porque tras graduarse en el Politécnico no consigue trabajo académico, y es el único licenciado de su sección al que nadie se lo ofrece. Ya aupado por la fama de gran científico, volverá a Zúrich para ser primero profesor asociado, en 1909, y luego profesor de física teórica en su alma mater, de 1912 a 1914. Para vivir escogerá siempre barrios no muy alejados de los centros académicos y repartirá su vida en seis casas que aún se conservan.

Los lustrosos laboratorios Siemens no fueron imprescindibles para Albert. Si no hubiera sido en Zúrich o en Berna, su maravilla genial se habría obrado en otro sitio pero, a pesar de que su imaginación no precisara de instrumentos materiales, sí que encontró estímulo en los imponentes relojes de las torres de Suiza.

Entre reflexión y reflexión, ha llegado la hora de tomar un café helado. Albert y Mileva bajan desde el monte Üetliberg hasta la confluencia de los dos ríos de la ciudad, en el mismo sitio donde un irlandés de apellido Joyce escribirá su única obra de teatro, titulada oportunamente Exiliados. No muy lejos de ahí, el dadaísta Hugo Ball desterrará la razón del arte en su Cabaret Voltaire, Carl Gustav Jung fundará su Club de la Psicología y Lenin calentará motores en su exilio justo antes de partir a Rusia. Aunque todos ellos caminarán por las mismas calles en distintos años, entre lagos, cafés populosos y el relativo rigor de los relojes, en Zúrich cada uno inaugurará el siglo XX a su manera.

https://elpais.com/politica/2019/11/28/sepa_usted/1574944884_710299.html

https://elpais.com/elpais/2019/09/05/opinion/1567703341_398603.html?rel=str_articulo#1575908575776

https://elpais.com/elpais/2019/08/06/opinion/1565095557_591796.html?rel=str_articulo#1575911417540

Todos no

La insistencia de Casado y Gamarra en erigirse en apóstoles de todo el pueblo español no sólo es una patrimonialización ilegítima. Es también una manipulación grosera de la auténtica realidad de este país

Señor Casado, señora Gamarra: todos no. No todos los españoles estamos escandalizados por la negociación entre el PSOE y ERC. No en todos los hogares españoles se vive ese diálogo como una traición. No todos estamos deseando un gobierno de concentración nacional. Ustedes lo saben, porque han perdido las elecciones. Si llevaran razón, no sólo las habrían ganado. Si llevaran razón, Rajoy aún estaría en La Moncloa. Su insistencia en erigirse en apóstoles de todos los habitantes de este país no sólo es una patrimonialización ilegítima. Es una manipulación interesada de la realidad. Señor Casado, señora Gamarra, permítanme que me ponga como ejemplo. Hasta donde yo sé, no tengo una sola gota de sangre que no sea española. Nadie, ustedes tampoco, es más español que yo, pero mi concepto del patriotismo pasa por impedir a cualquier precio que la ultraderecha alcance la más ínfima parcela de poder. Eso, para mí, es amar a España. Y en la medida en que los republicanos independentistas catalanes, que de momento también son españoles, garanticen la estabilidad de un gobierno de progreso, que trabaje por el bienestar de la gente, los recibiré con los brazos abiertos. Tal vez les parezca extraño, pero nos han pasado cosas más raras. Aunque ustedes son más jóvenes que yo, seguramente saben que, en 1978, cinco diputados de AP, el partido del que nació el que ustedes dirigen en la actualidad, votaron en contra de la misma Constitución que ahora esgrimen como estandarte. Todos tenemos derecho a cultivar nuestras contradicciones, ni más ni menos que a preservar nuestra identidad. Por eso les pido por favor que se acuerden de mí cuando sientan la tentación de volver a hablar de todos los españoles. No lo hagan. Dejen de mentir.

Almudena Grandes, El País

https://elpais.com/elpais/2019/12/15/opinion/1576425530_470416.html?prod=REGCRART&o=cerrado&event_log=fa&event_log=fa

lunes, 16 de diciembre de 2019

Inventos que son más antiguos de lo que pensábamos (I) La desfibrilador, el microondas o la fibra de carbono se basan en hallazgos anteriores al siglo XX .

Algunos de los ingenios que usamos cada día tienen su origen en descubrimientos o patentes más antiguas de lo que podría parecer. La fibra de carbono, los desfibriladores y el aire acondicionado se deben a descubrimientos logrados mucho tiempo antes de que fueran patentados o explotados para los usos actuales.

La electricidad en el corazón de los perros y el desfibrilador
Un estudio concluyó que en los últimos años se han salvado unas 1.700 vidas anuales en EE UU por el uso del desfibrilador en personas en parada cardiaca antes de que las atiendan los servicios de emergencia. En los años 40, un cirujano, Claude Beck, aplicó descargas sobre el pecho de un joven paciente al que acababa de operar y que había sufrido un paro cardiaco. Su corazón volvió a latir.

Años más tarde, en 1965, el médico irlandés Frank Pantridge creó el desfibrilador portátil. Pero en la base del invento está un descubrimiento que se remonta a 1899. Dos médicos de la Universidad de Ginebra (Suiza), Jean-Louis Prévost y Federico Batelli, demostraron en perros adultos que una descarga eléctrica podía revertir las fibrilaciones ventriculares (contracciones desordenadas y débiles del corazón) que derivaban necesariamente en la muerte del animal.

El microondas deriva del radar y de un tentempié derretido
En la Feria Mundial de Chicago de 1933 la casa Westinghouse mostró cómo un transmisor de radio en onda corta de 10 kilovatios era capaz de cocinar filetes y patatas, pero la hazaña no pasó de la curiosidad. En aquella década varios países desarrollaron por su lado sistemas de detección basados en radar, un descubrimiento que, a su vez, deriva de los de los experimentos de Heinrich Hertz a finales del siglo XIX para mostrar que las ondas de radio rebotaban en los objetos metálicos.

La posibilidad de usar microondas para cocinar comida volvió a surgir, por azar, en 1945. Un técnico estadounidense que apenas contaba con estudios básicos, Percy Spencer, trabajaba en la prueba de un magnetrón (un aparato que convierte la electricidad en energía electromagnética en forma de microondas) en las instalaciones de Raytheon Corporation y al pasar cerca del aparato se dio cuenta de que un pequeño tentempié que llevaba en el bolsillo se había derretido. Luego repitió la experiencia con semillas de maíz y un huevo que explotó ante sus narices. Spencer no se benefició económicamente del descubrimiento, pero sí su empresa: Raytheon se lanzó a la producción de los primeros hornos microondas (que llamó, precisamente, Radaranges) solo un año más tarde, en 1946. Un relato reproducido por doquier afirmaba que el tentempié era una barra de chocolate, pero en una entrevista de la revista Popular Mechanics y otra de Business Insider a su nieto, este aseguró que más bien sería una barra de cacahuetes con caramelo, a las que su abuelo era muy aficionado.

La fibra de carbono es hija de las bombillas
El físico y químico Joseph Swan buscaba un filamento para su lámpara incandescente (aunque la fama se la terminara llevando Edison, Swan se le adelantó unos años) y usó filamentos de papel carbonizado en la década de 1860. Edison hizo algo parecido: usó un filamento de fibra de carbono para iluminar las primeras bombillas incandescentes, pero cogió hilos de algodón y astillas de bambú, les dio forma de filamento y las sometió a altas temperaturas. El resultado: una fibra carbonizada.

El tungsteno desplazó pronto a la fibra de carbono como material de los filamentos (aunque se siguió usando en algunas lámparas para uso naval, porque aguantaba mejor las vibraciones provocadas por las olas). La resistencia y la ligereza del material lo hicieron competir, muchos años más tarde, con el acero y el aluminio, y por así empezó a usarse para la fabricación desde aviones a coches de carreras y raquetas de tenis.

https://elpais.com/politica/2019/12/02/sepa_usted/1575284606_084299.html?rel=lom

domingo, 15 de diciembre de 2019

El hermano de la joven que acogió al embajador británico: “Hoy nos cuesta ayudar a los demás” Alfonso Arnáiz evoca la memoria de Lourdes, fallecida hace años de esclerosis múltiple, cuya historia de solidaridad se ha hecho viral

Lourdes Arnáiz siempre ofreció lo poco que tenía hasta que la esclerosis múltiple se la llevó antes de tiempo, con 32 años. Su memoria sigue perenne en quien la conoció toda la vida, como su hermano Alfonso, y entre quien apenas coincidió cinco días con ella, suficientes para hacerla inolvidable. Hugh Elliott, actual embajador del Reino Unido en España, llegó a Burgos en 1984 sin la bicicleta sobre la que recorría Europa con apenas 19 años. Lourdes, de su misma edad, le dio cobijo y alimento, sin conocerlo, hasta que llegó la bici. Jamás volvieron a verse, pero su historia se ha hecho viral 35 años después.

El diplomático retornó a Burgos la semana pasada, recordó esta vivencia y trató de localizar a su benefactora. El alcance de sus vídeos en redes sociales pronto superó sus expectativas, con miles de personas preguntándose por Lourdes. Así fue como Alfonso, de 63 años, supo que su hermana, fallecida en 1997, fue la buena samaritana en cuestión.

Este arquitecto técnico muestra este domingo en una cafetería de Burgos dos fotos de su hermana: morena, de pelo rizado y mirada profunda que posa ante la playa en un viaje a Gran Canaria. Lo hace mientras relata, con temple y cierta emoción, que Rosa, una antigua amiga de la solidaria joven, le informó de la búsqueda de Elliott. Todo encajaba: el embajador citaba a un canadiense que sirvió de nexo para conocer a Lourdes. Alfonso desconocía que la pequeña de los cuatro hijos de un matrimonio burgalés emigrado a Gipuzkoa se carteaba con el norteamericano, pero comprende que no le dijera nada. Qué hermanos no tienen secretos, se plantea. Rosa sí lo sabía y lo escribió en Twitter. El diplomático lo leyó y movió cielo y tierra para dar con Alfonso.

Arnáiz tenía entonces 29 años, trabajaba en Segovia y regresaba a Burgos los fines de semana. Aunque admite que no identificaba físicamente a Hugh, hablando con él este viernes constató la veracidad de la historia: “La clave fue que recordaba el vino que yo tenía, mi dirección y el cumpleaños de Lourdes”. El caldo es un Rioja llamado Paternina banda azul, que aún degusta el embajador 35 años después; el ciclista arribó a las tierras del Cid sin su Babieca de aluminio el 9 de septiembre de 1984 y se marchó el 14. Dos días después su anfitriona cumplió 20 años.

Cuando el embajador, que rememora la simpatía y las habilidades culinarias de Lourdes, supo del fallecimiento de su benefactora no desistió en conocer a Alfonso, quien agradece la invitación de Elliott para verse en Madrid. Pero lo que más abriga el frío que aún siente al recordar a su hermana es la iniciativa solidaria del diplomático: una campaña para sensibilizar sobre una enfermedad que paralizó a Lourdes Arnáiz los dos últimos años de su vida y le impidió cumplir su sueño de terminar Filología inglesa y viajar por Europa. Hay personas que unen incluso cuando se van.

El milagro póstumo de Lourdes fue la gran reacción popular recordando anécdotas solidarias. Estas historias humanas han vuelto a emocionar a Alfonso, que perdió a su madre hace unos días. “Se me ponen los pelos de punta”, afirma. Estos casos lo animaron a mostrarse para visibilizar una enfermedad que padecen 47.000 españoles. Eso sí, declina aparecer en las fotografías porque quiere pasar desapercibido. Su hija, de 17 años, tiene casi la misma edad que su tía cuando acogió al prójimo necesitado. “Se le cayeron las lágrimas cuando vio los vídeos del embajador y supo que su tía había sido tan buena con él”, explica sonriente Arnáiz sobre la adolescente, con quien dice hablar de todo para no ser un “padre antigualla”.

La solidaridad es un valor que Alfonso ensalza con sus palabras, manos y gestos faciales detrás de las gafas. Él sabe lo que es precisar ayuda en el extranjero. Así se vio en un viaje al polo norte en coche cuando el automóvil se estropeó y tuvo que defenderse con su escaso inglés en Copenhague. El mecánico carecía de la pieza necesaria para el arreglo, pero le ofreció “un apaño” para al menos llegar a España. El apaño le duró tres años.

El burgalés siente que los tiempos han cambiado y que ese gesto de su hermana hoy sería más difícil de encontrar. “¿Quién haría ahora autoestop?”, se pregunta. “A la gente le cuesta más darse a los demás”. Pese a ello, recalca la “humanidad” y la “solidaridad” de Hugh Elliott 35 años después de aquella estancia de cinco días. Por supuesto, sostiene, que le parecería bien que su joven hija acogiese también a quien lo necesitara. Lourdes estaría orgullosa.

 https://elpais.com/politica/2019/12/09/actualidad/1575889475_586084.html?rel=lom

sábado, 14 de diciembre de 2019

Entrevista al cineasta Ken Loach "La gente aún valora la honradez"

Manuel Ligero
La Marea

El director británico vuelve con una obra estremecedora sobre el trabajo precario, Sorry We Missed You

Es imposible mejorar la descripción que Graham Fuller, redactor de la revista Interview, hizo en su día de Ken Loach: “Es un hombre espontáneamente modesto. De hecho, es un oxímoron andante: un director de cine que, aparentemente, carece de ego. (…) De los innumerables cineastas que han hablado delante de mi grabadora durante años, Loach ha sido el menos director, el menos interesado en dotar a la profesión de una relevancia cósmica”. Los periodistas nos empeñamos en abordarlo con expresiones como “en su obra es importante esto” o “en sus películas se habla de aquello”. El maestro inglés nos corrige con dulzura antes de contestar: “No es ‘mi’ película. También es de Paul Laverty [su guionista de cabecera] y de Rebecca O’Brien [la productora]. Es un trabajo de equipo”. Quien así habla tiene dos Palmas de Oro de Cannes en su despacho y ha firmado algunas de las películas más conmovedoras de los últimos 30 años. Títulos que reflejan la vida de la clase obrera más desfavorecida aunando ternura, humor y drama: Riff-Raff, Lloviendo piedras, Ladybird Ladybird, Mi nombre es Joe, Buscando a Eric, Yo, Daniel Blake… La lista es abrumadora.

Loach acudió a San Sebastián para presentar Sorry We Missed You, una obra estremecedora sobre el “trabajo precario”; así lo expresa él, en castellano, guiñando un ojo para que apreciemos su esfuerzo por definir el tema con precisión en nuestro idioma. “El mundo cambia y siempre surgen nuevas formas de explotación. Esta forma de trabajar es absolutamente nueva y nadie había contado antes el efecto que tiene sobre las familias”. Su último filme narra la historia de un matrimonio aplastado por la carga laboral. Él conduce una furgoneta de reparto y ella es cuidadora a domicilio: ayuda, limpia y alimenta a personas que no pueden moverse por sí mismas y de la tercera edad. Sus hijos crecen solos porque ellos pasan por casa exclusivamente para dormir. Es la historia, en resumen, de una familia que se descompone. ¿Es política? Sí, claro, no podía ser de otra forma. Pero Fuller, nuevamente, lo expresa mejor: “La principal preocupación de Loach, pese a que su trabajo está arraigado en la lucha política, no es ni la retórica ni la ideología, sino la gente”.

¿Cómo describiría su acercamiento a esta gente? ¿Es piedad? ¿Rabia por sus condiciones de vida? ¿Es amor?

Es complejo, porque no se trata solo de mis sentimientos. Ya he dicho que la película es un trabajo de equipo. Lo primero es el respeto, eso lo compartimos todos. Pero yo, si tuviera que definirlo con una sola palabra, diría “solidaridad”.

Prefiere hablar de autenticidad antes que de realismo. Los personajes de todas sus películas también demuestran una gran solidaridad entre ellos. ¿Eso también es auténtico? ¿Tiene una base real?

Diría que sí. Apoyarnos mutuamente es algo natural. Siempre hay algunos egoístas, claro, pero lo más normal es echarle una mano al prójimo.

¿Y eso no está en crisis también?

No lo creo, aunque es cierto que la gente de mi generación ha visto otro tipo de sociedad. Cineastas como Mike Leigh o como yo, que crecimos en los años 40 y 50, justo después de la guerra, vimos que por entonces había un sentimiento muy fuerte de comunidad. La gente trataba de crear una sociedad mejor en torno al bien común. A la siguiente generación, la que creció en la época de Margaret Thatcher, no se la educó en los beneficios de trabajar por el bien común sino en los valores del éxito privado. El estado de ánimo era muy diferente. Se pasó del “vamos a trabajar juntos” al “preocúpate por ti mismo, busca el éxito, sé un emprendedor”.

Y de ahí se pasó a esa trampa llamada «economía colaborativa».

Que es perfecta para el empleador y una desgracia para la clase trabajadora. Porque el patrón ya no necesita un encargado que le diga a la plantilla qué es lo que tiene que hacer y que la vigile minuto a minuto. Se controlan a sí mismos por medio de una aplicación. Y además no tienen vacaciones pagadas ni protección sanitaria en caso de enfermedad. Es un desastre.

¿De dónde viene su interés por contar las dificultades de la clase trabajadora?

Bueno, la mayoría de nosotros somos trabajadores, pero dentro de este grupo hay gente que está peor: los trabajadores pobres, que son muy vulnerables y tienen que luchar mucho para poder sobrevivir. Me interesan esas vidas. Luego está el afán por cambiar este estado de cosas, que es algo que debe ocurrir desde abajo, por parte de la propia clase obrera. Los burgueses no van a regalarnos nada. Y la tercera razón es porque cuentan los mejores chistes.

Hay una escena en la película en la que el padre riñe a su hijo adolescente diciéndole: “Nosotros no robamos”. Y eso es un orgullo viniendo de una familia humilde de clase trabajadora. ¿Cree que el neoliberalismo está cambiando de alguna manera este código moral?

No lo creo. Siempre hay un elemento criminal en todos los estratos sociales, empezando por Donald Trump y yendo hacia abajo. La sociedad económica no tiene moral. Se basa simplemente en la explotación y en el acaparamiento: un grupo de propietarios se lo queda todo y los otros lo pierden todo. Pero creo que la gente, en general, aún se precia de ser honesta. Valora la honradez. Entre la burguesía, en cambio, no creo que la ética sea una de sus grandes cualidades. Saben que robar directamente no está bien, pero no tienen ningún reparo en apropiarse de los recursos naturales de un país. Por supuesto, ellos no lo llaman robar. Lo llaman comercio.

Sorry We Missed You habla de los estragos que este sistema laboral produce en la familia. ¿Esto tiene arreglo?

Lo que un sistema económico debería ofrecer es seguridad. Seguridad frente al paro, seguridad en los ingresos, seguridad para tener un hogar, para tener una educación, seguridad cuando estás enfermo, cuando eres mayor… Si tenemos eso, la familia tendría tiempo para cuidar de sus relaciones, que es lo que falta cuando el padre y la madre trabajan 10 o 12 horas al día. Con esa seguridad, cuando ya tienes cubiertas tus necesidades básicas, puedes preocuparte por el vecino, puedes ser generoso con el inmigrante. Si no tienes esa seguridad, te encierras en ti mismo. Para ser generoso hay que sentirse fuerte. Y esta generosidad hacia tus hijos, tus vecinos, tu comunidad, es un buen entorno en el que vivir.

¿Piensa en una audiencia específica cuando rueda sus películas?

Realmente no. El principal compromiso es con la historia y con los personajes, a los que hay que retratar con la mayor autenticidad posible. Hay que llegar a la misma piel, que es muy diferente si se trata de un trabajador o de un burgués. Eso se ve incluso en el físico. Sus cuerpos están moldeados de forma diferente. Mueven las manos de forma diferente. El idioma que hablan es diferente. Hasta su mirada es diferente. A la hora de componer ese retrato no cedo ni un ápice.

El enemigo está entre nosotros

Desde los años ochenta, Loach tiene una fijación, una espina clavada: los líderes sindicales que traicionaron a los trabajadores en aquella época, en las minas, en los puertos, en las fábricas, haciendo triunfar a la postre el modelo thatcheriano. Quizás por eso en sus películas no suele criticar a los peces gordos, porque eso sería demasiado obvio, sino a los mandos intermedios, a los lacayos, a los trabajadores que venden a sus propios compañeros. En nuestros días, el modelo de explotación se ha refinado. O mejor dicho, se ha retorcido, como puede verse en la empresa de reparto que aparece en Sorry We Missed You : “Ahí hay un encargado, que no es el dueño de la empresa, que dice ‘cuidar’ a sus trabajadores dándoles más y más trabajo. ‘Yo cuido de ti y de tu familia porque te hago ser más eficiente’, les dice. Cree que los defiende, paradójicamente, imponiéndoles un régimen draconiano. Y a través de él vemos cómo ahora el trabajo se puede abrir o cerrar, como un grifo, lo que es magnífico para el negocio, porque evita los contratos y elimina los derechos laborales. Así son más competitivos, lo que atraerá más trabajo, y cree que eso es bueno. En realidad no protege a los trabajadores, los destruye. Esa es la contradicción del libre mercado”.

El interés de Loach por la división de la clase trabajadora tiene, sin duda, un capítulo de oro en Tierra y libertad (1995). “Cuando hicimos esa película –explica– hablamos de la división de la izquierda durante la Guerra Civil española y del enorme peaje que tuvo que pagar por aquello.No nos propusimos hacer una película contra el fascismo porque ¿quién era fascista en los años 90? Nadie. En aquel momento no podíamos prever el actual renacimiento de la ultraderecha. Pero ahora sí se podría hacer una película antifascista para recordarle a la gente lo que es eso. Quizá la ultraderecha de hoy no sea exactamente fascista, pero utiliza una técnica similar: dividir a la clase trabajadora y enarbolar prejuicios simplistas”.

¿Boris Johnson juega en esa liga?

En cierto sentido parece el tonto útil de la ultraderecha, pero creo que no lo es. Presenta una fachada bufonesca pero tiene una idea muy clara de lo que quiere hacer: vender Gran Bretaña a los Estados Unidos. Bajaría los impuestos a cambio de dejar entrar a las empresas norteamericanas de seguros. Todos los servicios se empobrecerían y el trabajo sería más barato y más precario. Johnson es un personaje complejo. Es mucho más listo de lo que parece. En otras circunstancias sería incluso interesante.

A su favor cuenta con que la izquierda británica también parece dividida.

Eso no es cierto. Es la impresión que quieren dar los medios. La BBC, por ejemplo, es descaradamente hostil a Corbyn. Incluso la línea editorial de The Guardian es anti Corbyn. El Partido Laborista ahora mismo está muy unido en torno a su líder. Pude verlo en la reciente conferencia que tuvo lugar en Brighton. Tienen un plan espléndido para acabar con la precariedad y para recuperar los servicios básicos privatizados: agua, electricidad, transporte… Y este plan tiene una gran aceptación popular. Solo hay divergencias en un tema: el Brexit. Por eso los medios no hablan de otra cosa.

La censura económica

Durante los años ochenta, Ken Loach decidió tener un papel más activo en la oposición a las políticas de Margaret Thatcher y cambió la ficción por los documentales. En ellos mostraba la descomposición de la lucha sindical de los mineros y los trabajadores siderúrgicos. Todos fueron sistemáticamente censurados por la Independent Broadcasting Autorithy. Incluso la obra de teatro Perdition, de Jim Allen [su colaborador durante 15 años en la tele británica y guionista de Tierra y libertad ], que Loach estaba dirigiendo en aquel tiempo, fue retirada del cartel un día antes del estreno. Encontró cerradas todas las puertas. Solo pudo recuperar su carrera a partir de 1990, tras el éxito de Agenda oculta , que versaba sobre Irlanda del Norte y fue financiada con dinero estadounidense.

Al recordar aquellas dificultades ve un paralelismo entre aquel director silenciado que fue y la imposibilidad de los jóvenes cineastas de hoy para sacar sus proyectos adelante, especialmente si se trata de hacer películas de corte social. “La gente que decide qué películas se hacen, es decir, los productores, las distribuidoras y las televisiones, ninguno de ellos quiere hacer películas radicales. Y es lógico: son parte del sistema”, explica Loach. “A la hora de elegir prefieren una comedia romántica o una película de superhéroes. Conozco montones de jóvenes a los que les encantaría contar este tipo de historias sociales pero no encuentran financiación. Yo tuve mucha suerte cuando empecé en televisión [en 1963]. Podíamos hacer ficción contemporánea con bastante libertad. Si yo empezara a trabajar hoy, no me darían esa oportunidad. Ahora la tele es un vehículo para el espectáculo y está muy controlada. Hay una enorme burocracia, con un montón de filtros: jefes, desarrolladores de proyecto, productores, directores de área, directores de canales… Y todos tienen una opinión. Todo el mundo quiere meter la cuchara en un guiso que no es el suyo. Cuando mi generación empezó a trabajar, esa gente no existía. Tuvimos suerte, nos hicimos un pequeño renombre y como no nos ha ido del todo mal, siguen dándonos dinero. Pero si empezara ahora sería imposible”.

Y a su edad, 83 años, ni siquiera se atreve a hablar de su próximo proyecto: “No sé si volveré a rodar otra película. Hablar de hacer una película es fácil, pero hacerla es algo muy duro”.

Fuente:

https://www.lamarea.com/2019/11/07/ken-loach-la-gente-aun-valora-la-honradez/

viernes, 13 de diciembre de 2019

Fraude masivo a la Seguridad Social de las trabajadoras de hogar y cuidados. Esta vez el sistema no ha conseguido tapar sus vergüenzas

Isabel Otxoa
Viento Sur

El 31 de octubre pasado, el Boletín oficial del País Vasco publicaba el nuevo Decreto sobre ayudas a la conciliación, que terminaba con la exclusión de las trabajadoras de hogar de las prestaciones que el gobierno vasco da a la gente trabajadora durante las excedencias y reducciones de jornada por cuidado. Cuando en mayo de 2017 EHBildu y Elkarrekin Podemos intentaron que el Parlamento Vasco obligase al gobierno a suprimir una discriminación que venía del año 2007, la alianza PNV, PSE y PP lo impidió, aprobando a cambio exigir al gobierno de Madrid la ratificación del Convenio 189 de la OIT.

¿Cuántas trabajadoras se han quedado sin la prestación? Imposible calcularlo, es lo que ocurre cuando no perteneces al área protegida del mercado laboral. Como no lo intentas, no generas el agravio, y tu problema no existe. Lo interesante de este caso es que había que conocer el Estatuto de los Trabajadores para detectar la discriminación, porque la palabra trabajadora o empleada de hogar no aparecía en la norma excluyente, aparecía el artículo 2.1.b)., que era nombrar discretamente lo mismo.

Algo similar sucedió con la norma estatal que obligaba a registrar la jornada laboral, de 8 de marzo de 2019. El Ministerio de Trabajo divulgó una guía explicativa, según la cual quedaban fuera de la nueva obligación relaciones laborales especiales y otros sectores que tienen su propia regulación sobre jornadas especiales de trabajo. En este contexto, se nombraban grupos: quedaban fuera transportistas, personal de alta dirección, personal laboral de cooperativas… Luego aparecía un etcétera que seguramente se refería a las trabajadoras de hogar, sin citarlas.

La discriminación institucional oculta alcanza este año cotas desconocidas, con la actuación de la Dirección General de la Seguridad Social. En 2019, el salario mínimo por 40 horas subió a 900€ en catorce pagas, lo que significa 1.050€ al mes si se prorratean las pagas extras. La medida se comentó durante tiempo en los medios de comunicación, se hicieron previsiones apocalípticas sobre su impacto en el conjunto de la economía… pero hubo un silencio atronador sobre las consecuencias en el trabajo asalariado de hogar y cuidados. El mínimo nuevo de 1.050€ para las 40 horas y los 7,04€ por cada hora de más, suponía incrementar en un 22,3% salarios que se costean con los sueldos, las pensiones, o los patrimonios de las familias empleadoras. Verdaderamente, un problema para quienes no tuviesen un alto poder económico.

Lo suyo era que el Estado social y democrático de derecho hubiese puesto en marcha una campaña de la Inspección de Trabajo para controlar la efectividad de la subida, pero lo que hizo fue lo contrario: dio la espalda al incremento del salario mínimo, y no actualizó las cotizaciones de acuerdo a nuevas bases, según correspondía.

Y aquí llegamos a lo sencillo que ha resultado defraudar los derechos de las trabajadoras: casi nunca reciben nómina y además están sujetas a un Sistema Especial que disocia salario real y base de cotización. Así, las interesadas no han sido conscientes del problema hasta fechas recientes.

La cotización de hogar se realiza de acuerdo a tramos de salario. En 2019, las que están a tiempo completo debían haber quedado incluidas en el tramo 7, cotizando por una base de 1.050€, los estuviesen cobrando o no, esto es indiferente. Pero la Tesorería de la Seguridad Social, en una actuación claramente ilegal, no actualizó sus bases, lo que hubiese supuesto incrementar las cuotas a pagar por la parte empleadora. Les aplicó los salarios de años anteriores con lo que en 2019 muchos miles de mujeres que trabajan 40 y más horas aparecen en el tramo 6, cotizando por una base de 877€.

La Tesorería no necesitaba conocer los salarios que se estaban cobrando: nadie puede cotizar por debajo de lo que le corresponde ganar, lo cobre o no verdaderamente. Lo que debió hacer, y no quiso, fue aplicar sin más la nueva base de 1.050 a los contratos que sabía que eran a tiempo completo, porque así aparecían en su base de datos. Y además, luego debió investigar los casos de salarios superiores al mínimo, para aplicarles una base superior.

En Junio pasado, 34 organizaciones de trabajadoras de hogar y otras entidades de apoyo a sus derechos, se dirigieron a la Dirección General de la Seguridad Social explicando el problema (que es más amplio y tremendo, estoy simplificando). Como lo que ha pasado es innegable, nos agradecen la aportación, pero ni se reúnen con las organizaciones ni explican las medidas concretas que van a tomar para resolverlo. En septiembre, hemos reiterado la solicitud de reunión y se ha repetido la negativa, según se dice, en razón del momento político.

No vamos a dejar este asunto de la mano. Lo vamos a mantener vivo hasta conseguir una solución colectiva a un problema colectivo. Esta vez no tenemos enfrente una parte empleadora que no quiere cumplir, ni el principio de la inviolabilidad del domicilio que impide supuestamente conocer lo que ocurre en la relación laboral de hogar.

Lo que tenemos enfrente es la política de cargar sobre las mujeres el trabajo de cuidar en condiciones de inferioridad y desigualdad. La inmensa mayoría de las trabajadoras de hogar a tiempo completo, y casi todas las internas, están atendiendo personas en situación de dependencia. El incremento del coste del empleo de hogar es inasumible para una parte de quienes contratan, claro que sí. Esta cuestión y otras muchas sólo muestran que no es una buena solución para el cuidado, lo que no significa que la atención en casa deba desaparecer, sino su fórmula actual mediante el contrato directo de trabajo de hogar. Pero mientras se generan otras alternativas, no vale echar tierra sobre los derechos de las trabajadoras.

Si a alguien le cuesta creer que la actuación ilegal de la Tesorería haya respondido a una decisión política de no aplicar el salario mínimo de 2019 en la cotización de hogar, tanto mejor porque la solución es fácil. Regularización de todas las cotizaciones, pasadas y presentes, sin necesidad de denuncia individual de las perjudicadas, que normalmente no están en condiciones de hacerlo, porque en hogar se puede poner a alguien en la calle con una indemnización de 7 o 12 días por año, dependiendo de la antigüedad y sin prestación de desempleo.

Este 14 de noviembre, el Pleno del Parlamento Vasco debatirá una Proposición no de Ley de EHBildu que Elkarrekin Podemos comparte, por la que “el Parlamento insta al Gobierno de España a establecer de inmediato mecanismos para la cotización legal en función del salario mínimo establecido para cada jornada laboral, tanto en lo que corresponde a este año, como en lo que corresponde retroactivamente a años anteriores”, frente a la cual PNV y PSE han presentado una enmienda que suprime la exigencia de regularización de cotizaciones, y a cambio propone otra por la que “el Parlamento Vasco insta al Gobierno de España a ratificar el Convenio 189 de 2011, relativo a las trabajadoras y los trabajadores domésticos”.

Llueve sobre mojado: propuestas y promesas de ratificación del C189 de la OIT en un contexto de negación de derechos concretos ya reconocidos por leyes vigentes. Creo que no se atreverían a practicar ese juego con ningún otro sector y me confirma el interés de pelear por objetivos precisos y verificables: los que ya reconocen las leyes, pero no se cumplen, y los que quedan pendientes, con o sin Convenio 189.

Nota de la redacción: Adjuntamos este escrito encabezado por organizaciones de trabajadoras de hogar y entidades que defienden sus derechos, de A Coruña, Barcelona, Bizkaia, Gipuzkoa, Granada, Huelva, Madrid, Sevilla, Valencia, Zaragoza, y ámbito Estatal

AL DEFENSOR DEL PUEBLO

Ante el Defensor del Pueblo comparecemos y exponemos:

Que mediante este escrito y los documentos que se adjuntan, presentamos QUEJA y solicitamos la intervención de esa defensoría frente a las administraciones y por los hechos que pasamos a relatar:

1) Antecedentes.

Con fecha 24 de junio de 2019, tuvo entrada en el Registro de la Tesorería Territorial de Bizkaia escrito dirigido a la Tesorería General, cuya copia se adjunta (doc. 1). En él se presentaban los problemas detectados en la cotización a la Seguridad Social del Sistema Especial de Empleados de Hogar, que se referían a:

a) los instrumentos de gestión de la Tesorería (los impresos de alta),

b) la regulación legal de las obligaciones de cotización (el sistema de tramos y su diseño, la regulación de la variación de datos)

c) la propia gestión de la recaudación de cuotas por parte de la TGSS y sus delegaciones territoriales.

Se añadió al escrito una muestra representativa de los problemas detectados en las Vidas Laborales y en Informes de Bases de Cotización, que también se acompaña (doc. 2).

Con fecha 9 de julio siguiente, presentaban el escrito ante la TGSS 34 entidades y organizaciones de trabajadoras de hogar y cuidados y de defensa de sus derechos. Se pedía una reunión con el responsable de la TGSS, que no fue concedida en razón, se argumentó, del momento político.

Con fecha 12 de septiembre, se registró de nuevo la solicitud de reunión, que fue denegada con la misma motivación, junto con el agradecimiento a las observaciones y propuestas de mejora realizadas, que, se decía, iban a ser tenidas en cuenta.

2) Objetivo de la queja.

No habiendo obtenido respuesta concreta a nuestras peticiones, nos dirigimos al Defensor del Pueblo con el fin de que intervenga para asegurar que se revisarán y actualizarán las cotizaciones de todas las trabajadoras afectadas.

Realizada la regularización, pedimos que esta se comunique a las trabajadoras interesadas, a fin de que, puedan controlar y, en su caso, instar la revisión de la cuantía de las prestaciones de enfermedad, accidente, riesgo durante el embarazo y maternidad percibidas durante los últimos años, prestaciones que en muchos casos se han abonado en cuantía inferior a la debida. También, cuando haya lugar, la cuantía de sus pensiones.

3) Descripción del problema que origina la Queja.

Como es sabido, la creación por Ley 27/2011, del Sistema especial dentro del Régimen General, trae un cambio radical en el sistema de cotización del sector. Durante todo el periodo de vigencia del Régimen Especial de Seguridad Social del Servicio Doméstico, que va del año 1969 hasta el 2011, el hecho del alta generaba la obligación de pagar una cuota fija e independiente de las horas realizadas o el salario percibido y la única obligación formal de la parte empleadora era presentarse una sola vez en la oficina de la Tesorería para entregar el impreso de alta. La TGSS se ocupaba de actualizar la cuota anualmente, de acuerdo con lo establecido en la normativa de cotización de cada año.

En el Sistema Especial vigente desde 2012, la obligación de cotización cambia radicalmente: se fija de acuerdo a tramos salariales a los que corresponden diferentes bases de cotización. Por tanto, para que la obligación de cotizar se ajuste a la legalidad, es preciso que la cuota se calcule sobre la base de cotización correspondiente a los salarios que se debieran percibir, o los que realmente se perciban, de ser estos superiores (art. 147 Ley General de Seguridad Social vigente).

De esta norma derivaba la obligación de la TGSS de haber atribuido a cada trabajadora la base que le correspondía de acuerdo a la normativa salarial vigente en cada momento: esto es, en el caso de las trabajadoras a tiempo completo, haberles incluido de oficio en el tramo de cotización correspondiente al salario mínimo íntegro de cada año; en los supuestos de trabajo “por horas”, la parte proporcional.

Sobre esta obligación básica, para cuyo incumplimiento no hay excusa, la TGSS debía haber advertido a los empleadores que estaban obligados a comunicarle las variaciones del salario. Ello, con el fin de haber incluido a las trabajadoras en el tramo de cotización correspondiente en el caso de recibir salarios superiores al mínimo.

Pero a los empleadores, tanto a los que acudieron en 2012 a declarar el horario y salario de las trabajadoras que ya tenían contratadas, como a los que a partir de entonces han contratado y solicitado las altas de trabajadoras no se les ha informaba de que las variaciones del salario debían comunicarse a la TGSS .

Año tras año, la TGSS se limitó a recaudar las cuotas sobre los salarios que la empleadora había declarado inicialmente, aplicando las bases de cotización correspondientes a aquellos salarios; incluso cuando la antigüedad venía desde el año 2012, e incluso cuando aplicarlos suponía cotizar por cuantías inferiores al salario mínimo correspondiente en relación con la jornada declarada.

Esta dejación de sus responsabilidades legales, no ha tenido lugar en uno o varios casos aislados, sino en todos los examinados en los territorios de Bizkaia y Gipuzkoa; y es de pensar que el descontrol ha sido la pauta de todos los territorios.

La gravedad del abandono de la administración de la Seguridad Social debe mirarse a la luz de la situación concreta del sector: las trabajadoras de hogar y cuidados no reciben nómina en casi ningún caso, y el sistema de cotización por tramos disocia salario y base de cotización. Así que regulada la cotización por un sistema de tramos que hace más difícil a la persona interesada descubrir la ilegalidad, privadas del documento que informa de la base de cotización atribuida, la infracotización ha pasado desapercibida.

Pero al llegar el año 2019, el problema se hace perceptible más fácilmente a partir del incremento del 22,3% del s.m.i.para este año: trabajadoras a tiempo completo, muchas de ellas, internas, han cotizado y cotizan todavía muy por debajo de la base de 1050€.

En el año 2018, los salarios a tiempo completo podían cotizar por dos bases: la del tramo 7, de 858,60, correspondiente al mínimo interprofesional de aquél año o por el tramo 8, que era el máximo y hacía tope, con una base de 896,94€, que correspondía a los salarios superiores al mínimo.

En 2019 debían haber ocurrido dos cosas, ambas responsabilidad de la TGSS:

- en los contratos a tiempo completo, una aplicación de oficio de la base de cotización de 1050, correspondiente al tramo 7, y además,

- una investigación para detectar salarios superiores al mínimo, dado que en 2019 desaparecen los topes de cotización hasta entonces existentes. Era previsible, como ha sucedido, que la información sobre salarios con la que contaba la TGSS estuviese desfasada.

Pues bien, todas aquellas trabajadoras a tiempo completo que en 2018 no tenían declarados salarios superiores a 914,01€ (lo que el año pasado era legal, porque el mínimo era 858,60), en 2019 han sido encuadradas en el tramo 6, que es el correspondiente a los salarios entre 780,01 a 914,00, con una base de cotización de 877€.

Lo que describimos, dicho de otra manera, es que en 2019 la TGSS renunció ilegalmente a aplicar (en lo que le concernía) el incremento del salario mínimo hasta los 1.050 € a las trabajadoras a tiempo completo, que no solo no vieron incrementadas sus bases de oficio, sino que las vieron reducidas tal como se ha explicado.

Para mayor incumplimiento de la legalidad, en 2019 la TGSS ha solucionado la falta de actualización de las bases atribuyendo a los contratos coeficientes de parcialidad diferentes según el tramo por el que estaban cotizando, lo que era a simple vista incongruente con el dato de que se trataba de trabajadoras contratadas a tiempo completo, hecho conocido y reconocido por la entidad gestora en sus Informes de Vida Laboral.

El escrito a la Tesorería General describe otros problemas en la gestión y planteamiento legal de la cotización, que damos aquí por reproducidos.

4) Presentación de los casos concretos que demuestran lo que se ha expuesto.

La situación se ha producido en toda la escala de jornadas, aunque no contamos con casos a presentar en contratos a tiempo parcial, que además serán puntuales debido a que el salario en el trabajo por horas suele ser superior al mínimo.

Al no haber accedido a expedientes de trabajadoras a tiempo parcial, presentamos únicamente datos recogidos de Vidas Laborales e Informes de Bases de Cotización pertenecientes a contratos a tiempo completo, indefinidos (Clave 100) y temporales (Clave 401).

El documento aportado como n.º 2 se refería a casos representativos recogidos antes del escrito a la Dirección General de la SS en el mes de junio. En el que aportamos ahora con el n.º 3, se recogen supuestos recogidos en certificaciones obtenidas la segunda quincena del mes de Octubre. La situación continúa.

Los casos de cotización correcta encontrados en 2019 tienen lugar cuando la relación laboral ha comenzado en ese año, o ha pasado de ser trabajo externo por horas a trabajo interno para la misma parte empleadora.

Por lo demás, cuando la relación laboral a tiempo completo es anterior aparece siempre la ilegalidad: o se produce la caída de tramo y la bajada de base de cotización respeto al año 2018 (es la situación ampliamente mayoritaria) o la infracotización porque no se está cotizando sobre los salarios realmente percibidos.

Este año, cuando trabajadoras que debían haber sido encuadradas en tramos superiores al correspondiente al salario mínimo han acudido ellas mismas a pedir explicaciones (en 2019 no hay más tope de cotización que el común del Régimen General), la TGSS ha vuelto a incumplir con su deber de vigilancia de la legalidad de la cotización, ya que ha ajustado las bases solo a partir de la reclamación, y no con retroactividad desde enero, como era debido en todos los supuestos que conocemos. Las interesadas no nos autorizan a documentar con sus datos esta afirmación, pero pedimos que se investiguen también estas situaciones.

5) Consideración final.

Los hechos que fundamentan esta queja responden a la manera de actuar de la TGSS a partir de 2012 en la recaudación del Sistema Especial de Hogar. Los números de afiliación que se aportan en los anexos numerados 2 y 3, corresponden a trabajadoras cuya cotización se ha gestionado en oficinas de Bizkaia y Gipuzkoa, pero no se trata de algo particular sino de un esquema de funcionamiento general.

Las trabajadoras de hogar y cuidados están encuadradas en un régimen de Seguridad Social que no cuenta con la prestación de desempleo, y con un régimen laboral que permite a la parte empleadora rescindir unilateralmente su relación laboral mediante el desistimiento, con una indemnización de 7 o 12 días por año, dependiendo de su antigüedad.

No son las interesadas quienes deben dirigirse a la Administración denunciando su situación particular, es la Tesorería quien debe actuar de oficio con carácter general en todos y cada uno de los casos, revisando las cotizaciones y actualizándolas. También deben comunicarse a las trabajadoras las rectificaciones de bases que hayan tenido lugar, al ser parte interesada a todos los efectos.

Por todo ello,

SOLICITAMOS que se tenga por presentada la queja junto con la documentación que se acompaña, se investiguen los hechos a que se refiere y se inste a las instituciones competentes a ajustar su actuación a la legalidad, con efectos retroactivos y tomando medidas para que la situación denunciada no se reproduzca en el futuro.

En Bilbao, a 11 de noviembre de 2019

Fuente:
http://vientosur.info/spip.php?article15311