lunes, 29 de junio de 2020

¿Qué ocurre con los niños prodigio cuando crecen?

Antes de poder caminar, ya Michael Kearney había empezado a dominar el inglés.

Desde que tenía cuatro meses, cuando pronunció su primera palabra, Kearney tenía las características de un niño prodigio.

Educado en casa por sus padres, su desarrollo intelectual se aceleró a un ritmo frenético. Tras pasar rápidamente por la secundaria y el bachillerato, Kearney ingresó en la Universidad de Alabama en 1991, con solo 8 años.

Dos años más tarde, se graduó en Antropología, lo que supuso su entrada en el Libro Guinness de los Récords como el graduado universitario más joven. Esta marca permanece imbatible a día de hoy.

El éxito académico continuó en su adolescencia y hasta que cumplió 20 años. En ese tiempo consiguió dos másteres, un doctorado y un millón de dólares que se ganó en un juego de trivial.

Lo que sucedió desde entonces está menos documentado. Desde finales de la década de los 2000 no existe mucha más huella documental en internet sobre Kearney.

Hoy en día, según averiguó la BBC, el hombre de 35 años vive su vida fuera del foco público y su último paradero conocido es la ciudad de Nashville, Tennessee, Estados Unidos.

Desde el maestro músico Wolfgang Amadeus Mozart hasta la talentosa matemática Ruth Lawrence, no hay dos niños prodigios iguales. Sin embargo, el caso de Michael Kearney es un recordatorio de que la precocidad no necesariamente garantiza el éxito y la atención durante toda la vida adulta.

Laurent Simons, el niño prodigio
El caso de Laurent Simons, un niño genio belga de 9 años, recuerda a todo lo que también prometía Michael Kearney en su momento.

Él también posee talentos excepcionales que ha canalizado en actividades académicas. Si alguien podía romper el récord universitario de Kearney, el pequeño Laurent parecía ser el indicado.

Primero apareció en los titulares en 2018, cuando a los 8 años se graduó de la escuela secundaria junto a jóvenes que tenían 18. Se dice que Simons tiene un cociente intelectual de 145, y desde entonces ha captado la atención de los medios.

Con sus credenciales de niño prodigio consolidadas, el siguiente paso era obtener el título de ingeniería eléctrica en la Universidad de Eindhoven, en Países Bajos. Desde noviembre, Simons estaba en camino de completar el curso de tres años antes del 26 de diciembre, el día de su décimo cumpleaños.

Laurent Simons leyendo.
Laurent Simons, de nueve años, estaba estudiando para obtener el título de ingeniería eléctrica. Al parecer, tenía el antiguo récord de Kearney en el punto de mira.

Pero a principios de este mes, la universidad dijo que no sería factible que Simons completara el curso antes de cumplir los 10 años, y le ofreció una fecha de graduación a mediados de 2020. Sus padres, Alexander y Lydia, rechazaron la oferta e inmediatamente lo sacaron del curso. Dijeron que continuaría sus estudios en una universidad en Estados Unidos.

Laurent Simons deja la universidad porque no le iban a dejar graduarse antes de los 10 años En su defensa, la universidad argumentó que si Simons apresuraba el curso, su desarrollo académico se vería afectado.

La institución también se posicionó en contra de "ejercer una presión excesiva sobre este estudiante de 9 años" que, según dijo, tenía "un talento sin precedentes".

Laurent Simons, en la foto junto a sus padres, iba a terminar en 10 meses un curso que requiere 3 años. Rompa el récord o no, el progreso académico de Simons sigue siendo excepcional. De cualquier forma, se espera que se gradúe de la universidad, cuando sea y donde sea.

Aunque la presión para graduarse se ha intensificado, a Simons no parece afectarle. En las entrevistas se muestra seguro y optimista por un futuro lleno de posibilidades. Entre sus objetivos está estudiar medicina y fabricar órganos artificiales.

Según la profesora de psicología de la Universidad de Boston Ellen Winner, Laurent tiene "furor por superarse", es decir, una motivación imparable para dominar sus habilidades.

Cuando Laurent se convierta en adulto, quizás llegue al tope de esa habilidad, permitiendo que otros individuos de edad similar le alcancen. Como resultado, puede que su talento sea menos especial.

"Cuando los prodigios no realizan la transición a creadores adultos, pueden llegar a sentirse como fracasados", dijo Winner a la BBC. "Nadie se interesa por un chico de 21 años que puede tocar el violín con habilidad, que domina el cálculo o que entiende latín o griego".

La profesora de psicología Ellen Winner dijo que Laurent tiene "furor por superarse".

Prodigio en matemáticas
Gabriel Carroll, de 30 años, se siente incómodo cuando otros hablan sobre su ilustre pasado como niño prodigio.
"Es como si no hubiera hecho nada desde entonces", dijo a la BBC.

Pero la vida adulta de Carroll está lejos de ser un fracaso. Como profesor de economía en la Universidad de Stanford, persiguió una carrera vinculada a su don de resolver problemas matemáticos.

En sus exámenes SAT (Pruebas de evaluación académica) de séptimo grado, Carroll obtuvo la puntuación más alta de California, incluyendo un perfecto 800 en matemáticas.

En la escuela secundaria, su habilidad matemática se puso a prueba contra las mejores mentes jóvenes del mundo en la Olimpiada Internacional de Matemáticas, donde ganó dos medallas de oro en 1998 y 2001.

Al hablar de sus logros, Carroll usa un tono humilde. Se encuentra más cómodo señalando sus debilidades que sus fortalezas.

Gabriel Carroll consiguió la nota más alta de matemáticas en el estado de California el séptimo grado.
"Me siento menos habilidoso en la interacción social y las emociones de lo que habría sido si no estuviera tan centrado en la parte técnica", dice.

Destaca como sus padres, ambos trabajadores tecnológicos en California, le inculcaron su gusto por lo que hace. Ellos fueron "extremadamente importantes" en su desarrollo, enseñándole matemáticas y dándole libros de problemas para resolverlos desde que tenía seis años.

Con respecto a su crianza, se siente "muy afortunado en general", pero tiene un "par de lamentos".

Se refiere a la capacidad de niño de poder actuar con independencia, libre de la influencia abierta de sus padres. Este hecho cobra una relevancia particular en el contexto de los niños prodigio, cuyos padres comúnmente se les describe como dominantes e insistentes.

Etiqueta
"Soy consciente del mito, o creencia popular, de que los padres de alguna manera deben estar presionando a sus hijo para que viva sus sueños. Creo que esto es cierto en algunos casos, pero no en la mayoría", dijo Jennifer Pike, una violinista que irrumpió desde muy joven en la música clásica.

Jennifer Pike ganó el premio a Músico del Año de la BBC a los 12 años.

Pike, y no sus padres, fue la que tomó la iniciativa. Su autodeterminación se hizo más evidente en 2002, al ganar la competición de Músico Joven del Año de la BBC cuando solo tenía 12 años.

En ese momento se convirtió en la ganadora más joven de ese premio, récord que mantuvo durante seis años. Desde entonces, su mayor desafío ha sido "superar esa percepción propia en algún momento de su vida".

"La gente quiere mantenerte en esa caja", dijo Jennifer, ahora de 30 años.

"Nada más que probar"
Anne-Marie Imafidon, una emprendedora tecnológica con un máster en la Universidad de Oxford, en Reino Unido, dice que no puede imaginar una vida fuera de esa caja.
"Siempre he tenido esa etiqueta", dijo a la BBC.

La etiqueta fue puesta desde que Anne-Marie y sus cuatro hermanos fueron nombrados "la familia más inteligente de Reino Unido" por los medios británicos.

Imafidon destacaba en la escuela por sus habilidades en computación, matemáticas y lenguajes. Superó dos Certificados Generales de Educación Secundaria cuando aún cursaba la primaria y a los 11 años se convirtió en la persona más joven en recibir el nivel A, el más alto, en computación.

Anne-Marie Imafidon tiene un máster en la Universidad de Oxford

Casi 20 años después, Imafidon dice que no le queda nada más por probar.

Y eso es porque no se considera a sí misma una genio de la forma que "se ven en las películas". Sobresalir en su campo de dominio, es decir, las matemáticas y las ciencias de la computación, es suficiente para ella.

La diferencia entre un adulto genio y un niño prodigio es importante. Según Winner, la profesora de psicología, un prodigio es un niño muy precoz en cierto campo, dominando un campo que ya se ha inventado. Un genio sería alguien que revoluciona un área de conocimiento.

"La mayoría de los prodigios no dan el salto en la edad adulta desde la maestría hasta los grandes descubrimientos creativos", dijo Winner. "Algunos lo hacen, la mayoría no. En cambio, la mayoría se convierten en expertos en las áreas que dominan, siendo profesores de matemáticas o intérpretes en una orquesta, por ejemplo".

Al igual que Imafidon y Carroll, Jennifer Pike dijo que "nunca definió el éxito en términos de logros de ese tipo". Sus objetivos de vida son mucho más modestos.

"Estoy feliz de tener una carrera y haber sobrevivido este recorrido", dijo Jennifer.

Laurent Simons dijo tener "planes gigantes" para el futuro en su cuenta de Instagram. Sobrevivir al tránsito de la niñez a la adultez con el aura de éxito intacta es exactamente lo que consiguieron los tres. Sus dones han trascendido la niñez, consiguiendo reconocimiento como adultos.

En cuanto a los niños prodigios que no lo hicieron, queda como una historia de advertencia para la próxima generación.

Por ahora, Laurent Simons asume su momento, publicando sobre sus "planes gigantescos" en Instagram.

Pero la profesora Winner dijo que los niños prodigios como él deberían desconfiar de la escena pública. Dadas las pruebas y tribulaciones de la vida adulta, no hace falta ser un genio para entender por qué.

https://www.bbc.com/mundo/noticias-50879819

domingo, 28 de junio de 2020

Gran hambruna de Irlanda: la crisis que provocó la muerte de un millón de personas por confiar en las fuerzas del mercado Stefania Gozzer BBC News Mundo

La pandemia de covid-19 ha golpeado de manera especialmente dura a las comunidades indígenas de Estados Unidos. Y, al otro lado del Atlántico, hay una isla donde mucha gente siente que es su deber hacer algo al respecto: Irlanda.

En la página web GoFundMe, una campaña que busca recaudar fondos para las comunidades Navajo y Hopi suma ya más de US$4 millones. Entre los donantes, abundan los apellidos irlandeses.

"Desde Irlanda, con mucho amor", escribe en el muro de la campaña RJ MacReady, que aportó US$200. "Irlanda recuerda", escribe Rachel Adams, que puso US$20.

Su gratitud se remonta a otra gran crisis que ni siquiera les tocó vivir en carne propia, como recuerda Christopher Doughan, que donó US$25: "En Irlanda, no olvidamos y no olvidaremos. Gracias por su increíble bondad hace más de 170 años".

En 1845, la isla de Irlanda sufrió un desastre alimentario del que no lograría salir durante los siguientes cinco años y que acabaría cobrándose la vida de más de un millón de personas y empujando a emigrar a otro millón y medio.

El episodio pasó a la historia como la Gran Hambruna Irlandesa. 1845-1851.

"Redujo en más de un tercio los habitantes de la isla de Irlanda en un periodo de seis años", le explica a BBC Mundo Christine Kinealy, directora del Instituto de la Gran Hambruna de Irlanda.

La hambruna fue tan brutal y prolongada que, cuando el empobrecido pueblo nativo americano de los Choctaw oyeron sobre ella, reunieron el dinero que pudieron (US$170 de la época, unos US$5.000 actuales según la revista Time) y se lo enviaron a los irlandeses, que desde entonces se sienten hermanados con las comunidades indígenas de Estados Unidos.

Pero ¿qué provocó una tragedia de tal dimensión que, casi dos siglos después, aún inspira un sentimiento de fraternidad tan fuerte?

La hambruna de la patata
En la década de 1840, la isla de Irlanda formaba parte del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda. Carecía de gobierno propio, aunque contaba con más de 100 escaños en el Parlamento británico.

"En la práctica, era una colonia de Reino Unido", le asegura a BBC Mundo Gaia Narciso, directora del Departamento de Economía de Trinity College, de Dublín.
Familia irlandesa a las puertas de su casa en Killarney.
Familia irlandesa a las puertas de su casa en Killarney.

Kinealy coincide: "Irlanda había sido esencialmente empobrecida y era una colonia de Gran Bretaña y las mejores tierras habían sido dadas a los colonos, que en su mayoría eran protestantes ingleses y escoceses".

"El 85% de la población nativa irlandesa era católica y sobrevivía con muy poco, así fue como acabaron dependiendo tanto de la papa", afirma. "Ningún otro país de Europa tenía una dependencia tan alta de un solo tipo de cosecha".

La papa, originaria de Perú y llevada a Europa tras la conquista de América, se volvió rápidamente el elemento esencial de la dieta irlandesa.

El increíble viaje de la papa andina, el tubérculo que transformó el mundo
En las décadas anteriores, la población de la isla de Irlanda había crecido más que la de cualquier país de Europa Occidental, como explicó el historiador económico irlandés Cormac Ó Gráda en un análisis al que se puede acceder en la página web de la Sociedad de Historia Económica.

Si bien los irlandeses igualaban en casi un tercio a la población de Gran Bretaña, apenas percibían dos quintos de sus ingresos per cápita.

El tercio más pobre subsistía intercambiando mano de obra por un pedazo de tierra donde poder cultivar. Y la mejor forma de sacar provecho a ese limitado terreno era sembrar papa, un alimento muy completo nutricionalmente y que no requería de mucho espacio para su cultivo y almacenamiento.

¿Podrías sobrevivir comiendo un solo tipo de alimento?
Hasta que, en 1845, una plaga de hongos que atacaba las cosechas de papas se expandió por Europa.

"La plaga llegó de México. Lo raro que tenía era que no podías ver por fuera si la planta estaba enferma o no. Recién al momento de la cosecha, cuando sacabas la papa, veías que estaba podrida", explica Gaia Narciso.

El 85% de la población nativa irlandesa era católica y sobrevivía con muy poco. Así fue como, cosecha tras cosecha, los irlandeses iban descubriendo que su principal fuente de alimentación se desvanecía.

Una penuria que duró más de un lustro y que explica porque otro de los nombres que se da a este episodio histórico es el de la "hambruna irlandesa de la papa".

Fuerzas del mercado
Si bien las continuas pérdidas de cosechas de papa ya eran en sí una gran tragedia para el pueblo irlandés, los historiadores coinciden en que las acciones del gobierno británico, entonces en manos de los Whigs, el antiguo Partido Liberal, amplificaron sus efectos.

La élite y la clase media británica de la época no veían con buenos ojos las ayudas estatales para paliar la crisis, como explicó en un artículo publicado por la BBC en 2017 el historiador James Donnelly.

Él señala tres doctrinas económicas populares en aquella época como las responsables de la falta de solidaridad: el laissez-faire, la creencia protestante en la divina providencia y los "enraizados" prejuicios étnicos contra los irlandeses católicos.

El laissez-faire o "dejar hacer" es una corriente que se opone a que los gobiernos interfieran en la economía de un país y que defiende que, sin estas intervenciones, las fuerzas del mercado serán los suficientemente libres para alcanzar el equilibrio por sí solas.

"Así que el gobierno británico no quiso traer comida ni impedir que esta saliera del país", explica Christine Kinealy.

"Eso fue desastroso porque grandes cantidades de alimentos salieron de Irlanda mientras que el país se moría de hambre literalmente por esa creencia de que el mercado se autorregularía, lo cual no sucede ni sucedió".

Como explica Donnelly, bajo esta doctrina el gobierno británico rechazó medidas como prohibir la exportación de granos en Irlanda, que podrían haber servido para alimentar a la población local.

Pero, ante la cantidad de muertes, había que hacer algo así que entre 1846 y 1847, el gobierno invirtió en obras públicas para crear empleos en una medida que no solo no duró sino que solo proveyó a unos pocos de salarios insuficientes.
Un millón y medio de irlandeses tuvieron que emigrar. La mayoría, a América del Norte.
Un millón y medio de irlandeses tuvieron que emigrar. La mayoría, a América del Norte.

"El problema era que la gente estaba debilitada porque no tenía acceso a comida y tenía que hacer estos trabajos pesados. Además, los salarios eran extremadamente bajos… Fue un total fracaso en términos de organización", afirma Narciso.

"Eran trabajos físicos duros 12 horas al día, seis días a la semana (72 horas semanales), para ganar salarios muy bajos. Había mucha hambruna porque los sueldos eran muy bajos y los precios de la comida muy altos…", asegura Kinealy.

"Para finales de 1846, ya estábamos viendo una mortalidad en masa en Irlanda".

La medida no duró más que un invierno y fue reemplazada con los comedores populares, que en el verano de 1847 llegaron a alimentar a tres millones de personas.

Pero este esquema apenas duró seis meses y, según Donnelly, el motivo fue una vez más el laissez-faire.

"La idea de alimentar directamente a una gran proporción de la población irlandesa violaba todas las preciadas nociones de los Whigs de cómo un gobierno y una sociedad deben funcionar", escribió Donnelly.

Para ser coherentes con el laissez-faire, el gobierno también se negó a facilitar la emigración de irlandeses.

"En ese sentido, el virrey irlandés de hecho propuso limpiar la provincia occidental de Connacht de los 400.000 pequeños agricultores empobrecidos que eran demasiado pobres para emigrar por su cuenta”, dijo Donnelly.

"Pero la mayoría del gabinete de ministros Whigs vio poca importancia a gastar dinero público para acelerar un proceso que ya se estaba llevando a cabo ‘de manera privada’ a gran ritmo".

Asilos para pobres
Una vez fueron cerrados los comedores populares, a los más necesitados no les quedó más que recurrir a las workhouses o asilos para pobres.

"No son un lugar al que uno quiera ir", explica Narciso. "Estaban superpoblados. Ir a un asilo de pobres era el último recurso".

Casas en ruinas en el pueblo de Tullig, en 1849, durante la Gran Hambruna.
Los asilos para pobres han sido descritos como una de las instituciones más tenebrosas de Irlanda. La gente sin recursos acudía a ellos en busca de comida y techo a cambio de trabajo.

Una vez dentro, las familias eran separadas y las condiciones de vida eran lo suficientemente desagradables para fomentar que la gente quisiera irse y evitar así que estos lugares acabaran abarrotados.

Aún así, estos asilos alcanzaron su capacidad máxima aquel 1847. A partir de entonces, se convirtieron en la única forma de asistencia pública en Irlanda.

Al laissez-faire se sumó, según Donnelly, la creencia que había en Gran Bretaña de que la hambruna en Irlanda era un castigo divino, un acto de providencia para librar a los irlandeses de un régimen agrario que los británicos veían como ineficiente y abusivo.

"Según las autoridades británicas de la época, el funcionamiento de la divina providencia se revelaba en las operaciones sin restricciones de la economía de mercado y, por lo tanto, era malo interferir con su correcto funcionamiento", escribió Donnelly en su artículo.

Por último, están los prejuicios contra los irlandeses que había en Gran Bretaña.

"Todas las decisiones que concernían a Irlanda venían de Londres, y la gente que gobernaba Irlanda en aquella época no era muy solidaria", afirma Kinealy. "Creían que los irlandeses eran ociosos y que eran pobres porque eran ociosos".

"Si se daba mucha ayuda, habría más hambrunas. Así que había una idea de que ‘No puedes ser muy generoso porque eso solo crearía dificultades de dependencia y las cosas nunca mejorarían".

En opinión de la experta: "Las decisiones que se tomaron en Londres y el tipo de ayuda que se dio a los pobres irlandeses, en cierta forma, exacerbaron los problemas y no trajeron ayuda a la gente".

La hambruna solo se resolvió cuando la plaga acabó, algo que, en algunas zonas de Irlanda, no se dio hasta 1851.
tumbas en Irlanda
Un millón de irlandeses murieron debido a esta crisis.
"Irlanda nunca se recuperó de esa pérdida de población", asegura Kinealy.

Antes de la hambruna, 8,5 millones de personas vivían en la isla de Irlanda. Un número que, incluso hoy en día, no se ha vuelto a alcanzar.

Cómo el gobierno colonial británico dejó morir de hambre a un millón de indios

En la actualidad, Irlanda del Norte, que pertenece a Reino Unido, cuenta con cerca de 1,9 millones de habitantes y la República de Irlanda no llega a los 5 millones.

El legado de esta experiencia traumática se ve aún tanto en la demografía actual de la isla como en aquellas donaciones de irlandeses en GoFundMe para las poblaciones nativo americanas que más sufren la pandemia de covid-19.

Pero va incluso más allá, como explica Gaia Narciso, que dirige una investigación para establecer la relación entre la hambruna y los movimientos que consiguieron la independencia de la República de Irlanda en 1921.

"Lo que encontramos es que la gente cuyas familias habían estado más expuestas a la hambruna resultaron los que tenían más probabilidades de rebelarse contra el mando británico 70 años después".

Para ella, la lección que deja es que en momentos de crisis es que "lo importante es proveer ayudas" a quienes más lo necesitan.

"Felizmente, en la actualidad, la respuesta ha sido la opuesta a la que vimos en el siglo XVIII".

https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-52826839

sábado, 27 de junio de 2020

_- Emmy Noether, la mujer cuyo teorema revolucionó la física y a quien Einstein calificó de un absoluto "genio matemático".

_- Cuando la alemana Emmy Noether quiso estudiar matemáticas, no estaba permitido que las mujeres se inscribieran en la universidad.

Años después, cuando consiguió que le dieran permiso para dar clases a estudiantes universitarios, no recibió salario.

Aun así, para Albert Einstein, "la señorita Noether fue el genio matemático creativo más importante que haya existido desde que comenzó la educación superior para las mujeres".

Se le considera la madre del algebra moderna con sus teorías sobre anillos y cuerpos, pero su aporte a la ciencia no se restringe a las matemáticas.

Su trabajo es fundamental para entender la teoría de la relatividad.
Y tampoco se limita a ella.

Noether es clave para comprender todas las teorías de la física.
"Al conocer su historia te preguntas: ¿qué otras contribuciones hubiese hecho una persona con ese tipo de genio matemático si todas las puertas hubiesen estado abiertas para ella desde el primer día?", le dice a BBC Mundo Mayly Sánchez, profesora de Física del departamento de Física y Astronomía de la Universidad del Estado de Iowa, en Estados Unidos.

Sin salario
Nació en 1882 y su padre, el matemático Max Noether, enseñaba en la Universidad de Erlangen, en Baviera.

Emmy Noether nació en el seno de una familia apasionada por las matemáticas. El claustro de esa casa de estudios había dicho que permitir que las mujeres se registraran "derrocaría todo el orden académico".

Sin embargo, dos años después -indica la Sociedad Estadounidense de Física (APS, por sus siglas en inglés: American Physical Society)- Noether fue una de las dos estudiantes a la que se le permitió inscribirse en esa universidad.

Pero no con los mismos derechos que el resto de estudiantes.

Sólo se le permitía entrar como oyente a las clases y eso si los profesores daban la autorización expresa de que podía entrar al aula.

"Pero eso fue suficiente para que pasara el examen de graduación en 1903 y para que calificara a un título equivalente al de una licenciatura", indica Michael Lucibella, autor de la biografía sobre Noether publicada por APS.

"Pasó el año siguiente estudiando en la Universidad de Gotinga, pero regresó a Erlangen cuando la universidad finalmente revocó las restricciones contra las estudiantes y terminó su disertación sobre invariantes para las formas biquadráticas ternarias en 1907", señala el escritor.

Pese a que la universidad dio un paso adelante para permitir a mujeres estudiantes, continuaba excluyendo a las mujeres de tener posiciones en la facultad.

"Noether enseñó en Erlangen por los siguientes siete años sin salario, en algunas ocasiones reemplazando a su padre", indica Lucibella.

"Somos una universidad, no un sauna"
En 1915, el gran matemático alemán David Hilbert trató de llevarla a la Universidad de Gotinga, pero recibió el rechazo de sus colegas en el departamento de matemáticas.

No veo por qué el sexo de los candidatos sea un argumento contra su admisión. Somos una universidad, no un sauna
David Hilbert, matemático

"¿Qué pensarán nuestros soldados cuando regresen a la universidad y encuentren que se les pedirá que aprendan de una mujer?", un profesor se quejó de la propuesta.

A lo que Hilbert respondió:
"No veo por qué el sexo de los candidatos sea un argumento contra su admisión. Somos una universidad, no un sauna".

Noether tuvo que dar clases bajo el nombre de Hilbert por los siguientes cuatro años y sin pago alguno.

Lucibella explica que la esperanza de Hilbert de contar con la matemática en la Universidad de Gotinga era que su conocimiento y experiencia sobre "la teoría invariante -los números que se mantienen constantes incluso aunque sean manipulados de diferentes maneras- pudiera ser llevada a la incipiente teoría general de la relatividad de Albert Einstein, que parecía violar la (ley) de la conservación de energía".

El teorema de Noether
Noether desarrolló un teorema que es clave para entender la física de partículas elementales y la teoría cuántica de campos.

En pocas palabras, "para comprender toda la física más sofisticada", le dice a BBC Mundo Manuel Lozano Leyva, catedrático de Física Atómica y Nuclear de la Universidad de Sevilla.

Una copa de vino para entender un teorema clave en la física.
"Cuando Einstein vio el trabajo de Noether sobre las invariantes, le escribió a Hilbert: 'Estoy impresionado de que esas cosas puedan ser entendidas de una manera tan general. La vieja guardia de Gotinga debería aprender algunas lecciones de la señorita Noether. Se ve que sabe de lo suyo'", indica la biografía de APS.

Pero en qué consiste este teorema.
Le pasamos la tiza al profesor Lozano, quien durante 30 años se lo enseñó a sus alumnos en España.

"El teorema conceptualmente es muy sencillo y matemáticamente muy complicado. Se trata de relacionar la simetría con las cantidades conservadas", le dice el docente a BBC Mundo.

El profesor de Física Manuel Lozano Leyva se declara un enamorado del teorema de Noether.

"¿Qué es una simetría?", empieza.

"Imagínese que tengo una copa de vino en la mano y le digo que cierre los ojos. Mientras los tiene cerrados, giro la copa en su eje y después le digo que los abra. Seguramente no se dará cuenta si la copa se ha movido o no".

"Pero si el giro que hago es perpendicular a ese eje, es decir, le doy la vuelta a la copa, y le digo que abra los ojos, sí se dará cuenta que ha habido una transformación, que le ha pasado algo a la copa".

"Eso significa que la copa es simétrica con respecto a las rotaciones en relación a un eje y no es simétrica respecto a las rotaciones en otro eje".

Es un teorema sumamente elegante, trae la belleza de un concepto de simetría a lo que son los principios de la física

Mayly Sánchez, Universidad del Estado de Iowa
"Ahora piense", señala el profesor, "en cantidades físicas que todo el mundo conoce como lo es la energía, que ni se crea ni se destruye, sino que se transforma. Eso se llama una cantidad conservada".

"Lo que hizo Emmy Noether fue fundamentalmente relacionar la simetría de un sistema con las cantidades físicas que se conservan y esas cantidades son una herramienta fundamental a la hora de plantear problemas y de resolverlos en física".

Y eso afecta a todos los sistemas físicos, desde el sistema planetario hasta un cristal, los metales. "¡Todo!", dice con emoción el profesor.

"El teorema más bello del mundo"
El teorema creado por la científica alemana ha recibido un sinnúmero de adjetivos y no precisamente fríos.

La profesora Sánchez explicándoles el teorema de Noether a sus alumnos en Estados Unidos.

"Lo llaman el teorema más bello del mundo, pero no es solo que sea hermoso por las cuestiones de la simetría sino que es de una potencia matemática tremenda y de una potencia de cálculo fantástica", indica Lozano.

"Mis estudiantes quedaban maravillados cuando se los enseñaba porque, aunque sea matemáticamente difícil de formular, las consecuencias son muy grandes".

"A esta mujer le debemos mucho todos los físicos", señala el académico desde España.

Y esa opinión la comparte la profesora Sánchez desde Estados Unidos.

"Es un teorema sumamente elegante, trae la belleza de un concepto de simetría a lo que son los principios de la física", le dice a BBC Mundo.

"Noether es una de esas figuras en la historia de la física que se te escoden y después la descubres", cuenta.

"Cuando aprendí el teorema por primera vez, me enamoré del concepto. Mi profesor nos dio una clase bellísima de cómo este era uno de los principios más elegantes de la física y, ahora, que enseño la misma materia en el pregrado, todavía me emociono cuando doy esa clase. Es uno de los puntos donde la física y la matemática se conectan de una manera muy bonita".

"Lo que no me dijo el profesor ese día es que el teorema de Noether estaba escrito por Emmy Noether. Nunca me dijo que era una mujer y solo años más tarde, en mi doctorado, descubrí que había sido una mujer la que lo concibió".

"Los chicos de Noether"
Tras el fin de la Primera Guerra Mundial, hubo algunos avances en materia de los derechos de las mujeres en Alemania.

El Nazismo obligó a mentes brillantes como Noether y Einstein a abandonar su país.
"Noether recibió un pequeño salario en la Universidad de Gotinga en 1923", señala Lucibella. "Sin embargo, nunca se le otorgó el rango de profesora titular".

La mayoría de los estudiantes de la matemática eran hombres. Se les conocía como "Los chicos de Noether", indica la Sociedad Estadounidense de Física.

Con el surgimiento del Nazismo en Alemania, Noether tuvo que abandonar la vida académica en su país debido a la puesta en vigencia de una ley que sacaba a los judíos de posiciones gubernamentales y universitarias, recuerda Lucibella.

Noether fue despedida de la casa de estudios de Gotinga.
"Inicialmente recibió a los estudiantes en su casa, pero finalmente fue forzada a abandonar Alemania, junto a muchos otros académicos judíos", señala Lucibella.

Se fue a Estados Unidos, en donde continuó con su vida académica en el Colegio Bryn Mawr de Princeton y en el Instituto de Estudios Avanzados de esa ciudad.

En 1935, le detectaron un tumor en la pelvis. Fue operada y aunque la intervención fue un éxito, una serie de complicaciones la llevaron a la muerte cuatro días después.
Tenía 53 años.

La carta de Albert Einstein en honor a Emmy Noether tras su muerte
"A juicio de los matemáticos vivos más competentes, la señorita Noether fue el genio matemático creativo más importante que haya existido desde que comenzó la educación superior para las mujeres.

En el campo del álgebra, en el cual los matemáticos más talentosos han estado ocupados por siglos, ella descubrió métodos que han probado ser de una importancia enorme en el desarrollo de la actual generación de matemáticos jóvenes.

La matemática pura es, a su manera, la poesía de las ideas lógicas.

Nacida en una familia judía que se distinguió por el amor al aprendizaje, Emmy Noether, quien, pese a los esfuerzos del gran matemático de Gotinga, Hilbert, nunca alcanzó la posición académica que se merecía en su propio país, pero aun así se rodeó de un grupo de estudiantes e investigadores en Gotinga, quienes ya se han convertido en distinguidos profesores e investigadores.

Su desinteresado y significativo trabajo realizado durante muchos años fue recompensado por los nuevos gobernantes de Alemania con un despido, el cual le costó su ingreso para poder mantener su (estilo de) vida simple y la oportunidad de continuar con sus estudios matemáticos.

Sus amigos visionarios de la ciencia en este país (EE.UU.) fueron afortunados de poder hacer las gestiones necesarias con el Colegio Bryn Mawr y (la Universidad de) Princeton para que ella encontrara en Estados Unidos, hasta el día de su muerte, no solo colegas que apreciaron su amistad sino pupilos agradecidos, cuyo entusiasmo hizo de sus últimos años los más felices y quizás los más fructíferos de su carrera entera".

Fragmentos de la carta que escribió Albert Einstein y que dirigió a The New York Times. Fecha: 1 de mayo de 1935

https://www.bbc.com/mundo/noticias-39231616

viernes, 26 de junio de 2020

Cómo vuelan los pájaros desde hace 120 millones de años. La actividad de la proteína SHH en el tercer día de incubación es clave para el desarrollo de las plumas.

Un colibrí busca miel en la zona de Guápiles, al este de San José (Costa Rica).
Un colibrí busca miel en la zona de Guápiles, al este de San José (Costa Rica).JEFFREY ARGUEDAS / EFE

El vencejo común puede vivir en el aire, sin posarse, durante casi un año. El colibrí tiene un vuelo comparable al de una mosca. Son las dos especies en las cuales piensa Juan Benito, experto en la evolución de las aves e investigador del departamento de Ciencias de la Tierra de la Universidad de Cambridge, cuando se le pregunta por los pájaros que mejor cumplen esta hazaña. “Se me hace complicado imaginar que se pueda llegar a volar mejor. Estas dos aves no han cambiado mucho en 50 millones de años. El sistema muscular ya ha avanzado mucho desde los dinosaurios voladores. Creo que es la estructura de vuelo definitiva”, comenta.

Esta estructura en cuestión se prepara desde los primeros momentos de incubación del embrión de pollo gracias a señales moleculares de la proteína Sonic Hedgehog (SHH). Las células recuerdan la información recibida para proceder al desarrollo cuando es el momento adecuado. Tanto la posición como la morfología de las plumas se forma gracias a la expresión de esta proteína en torno al tercer día de incubación que dura unos 20 días en total, cifra que varía en función de la especie. Un estudio publicado en la revista Development demuestra que el mismo sistema desarrolla el esqueleto del pájaro y sus plumas, para lo que la SHH juega un papel fundamental.

Una fragata común vuela sobre las playas de Cartagena (Colombia) que permanecen cerradas a causa de la pandemia de coronavirus.

Una fragata común vuela sobre las playas de Cartagena (Colombia) que permanecen cerradas a causa de la pandemia de coronavirus. Una fragata común vuela sobre las playas de Cartagena (Colombia) que permanecen cerradas a causa de la pandemia de coronavirus. RICARDO MALDONADO ROZO / EFE

Marian Ros, investigadora del Instituto de Biomedicina y Biotecnologı́a (CSIC-SODERCAN) de la Universidad de Cantabria y coautora del trabajo, explica que lo más sorprendente fue que, al impedir la señalización de SHH mediante el uso de una droga, no se formaban las plumas de vuelo, es decir, las más complejas, fuertes y largas que constituyen una gran estructura para permitir los primeros impulsos del animal y mantenerlo en el aire.

Esta proteína no es exclusiva de los pájaros y mucho menos de las plumas. Es un elemento genético esencial en la formación de las extremidades de todos los tetrápodos. “Ya se sabía mucho de cómo SHH influye en la formación de los dedos. Es responsable de la graduación y de que cada dedo de la mano sea diferente, pero no se sabía que tenía un papel tan importante para las plumas de vuelo y que mandaba una función adicional", explica la experta. En la evolución de especies, cuando un mecanismo funciona para algo, se suele reutilizar. "Es muy probable que estuviera ya en uso para que los dedos sean diferentes y ahora confirmamos que se utiliza también para hacer plumas más especiales y más grandes”, estima Ros.

El primer dinosaurio que voló se llamaba ‘Archaeopteryx’ y tenía plumas de vuelo idénticas a las de las aves actuales hace 150 millones de años Las plumas son el tejido clave del vuelo y la mayor ventaja de las aves sobre otros animales voladores. Aunque la forma del ala ayude, que el ambiente favorezca el movimiento o que la estructura muscular del animal sea más o menos potente, cada pluma se controla de manera independiente y permite modular el vuelo. Benito lo confirma: “Tienen un mínimo de 30 vértices que les permite controlar el movimiento. Cada pluma actúa. Los pájaros cuentan con una flexibilidad mucho más mayor que cualquier otra especie. El murciélago por ejemplo, solo tiene cinco opciones gracias a sus dedos”. El color de las plumas también es importante. Cuanto más negras, mejor, ya que la melanina les hace más resistentes. “Si miras una paloma blanca verás que tiene la punta de sus alas oscuras. Es por eso. El color da resistencia”, ejemplifica el investigador de la Universidad de Cambridge.

Cuando existían dinosaurios
La proteína SHH se encarga de dibujar el patrón del esqueleto. Desde que existían los dinosaurios, este elemento clave para el crecimiento modificó poco a poco la morfología de las especies y se fueron perdiendo los dedos. Por otro lado, los huesos se aligeraron, pero guardaron la solidez. Lo que eran escamas terminaron siendo plumas. Todo esto para que las especies pudiesen empezar a volar hace 150 millones de años.

Unos de los primeros dinosaurios que voló se llamaba Archaeopteryx y tenía plumas de vuelo idénticas a las de las aves actuales. “En la mayoría de los dinosaurios se encuentran plumas de algún tipo por lo que parece que la evolución de las de vuelo fue un paso fundamental en ese momento”, explica Matthew Towers, coautor e investigador del departamento de Ciencias Biomédicas de Universidad de Sheffield (Reino Unido). Unos 30 millones de años más tarde, llegaron unos importantes cambios en el esqueleto. Uno de ellos es la fusión entre algunas de las vértebras y los huesos de la faja pélvica, según un estudio publicado en la revista PNAS que describe el fósil de pájaro más antiguo encontrado hasta ahora con esta morfología “moderna”.

En esa era muy lejana, algunos animales tenían alas aunque todavía no sirvieran para volar. La comunidad científica asoció la aparición de ese miembro a la selección sexual. “Este estudio no tiene implicaciones en el origen del vuelo porque se estima que las alas es una estructura preexistente que luego se aprovechó”, asegura Benito. En definitiva, la proteína SHH siempre estuvo ahí, pero con el paso del tiempo — a escala geológica — surgieron mutaciones genéticas que la llevaron a desarrollar plumas y permitieron que las aves conquistasen el cielo.

https://elpais.com/ciencia/2020-06-12/como-vuelan-los-pajaros-desde-hace-120-millones-de-anos.html

jueves, 25 de junio de 2020

_- Einstein: el "año milagroso" en el que escribió 5 estudios científicos que revolucionaron la física. BBC News Mundo

_- Mientras trabajaba evaluando solicitudes de patentes de métodos para sincronizar relojes y otros procedimientos rutinarios, Albert Einstein escribió cinco estudios científicos que revolucionaron la física de inicios del siglo XX.

Ese 1905 pasó a la historia como el Annus mirabilis ("año milagroso") del físico alemán.

Por ese entonces, era un empleado de la Oficina de Patentes de Berna, Suiza, que trabajaba ocho horas de lunes a sábado, aunque según cuenta en una carta a su amigo Conrad Habicht fechada entre junio y septiembre de 1905, cada día tenía "ocho horas para perder el tiempo".

En ese momento, Einstein también tenía dos años de casado, era padre primerizo, pero era sobre todo, un genio desconocido.

Pese al anonimato, el entonces joven de 26 años estaba al tanto de las incógnitas pendientes para los científicos y dedicaba su tiempo libre a tratar de resolverlas.

Los cinco trabajos que Einstein escribió en 1905 y que publicó en la revista Annalen der Physik tratan sobre problemas relacionados con tres grandes ramas de la física de esa época:
la mecánica clásica, 
el electromagnetismo y 
la termodinámica,
dice Dennis Lehmkuhl, editor científico de Einstein Papers Project, del Instituto de Tecnología de California (Caltech), a BBC Mundo.

Para el físico español Roberto Emparan, autor del libro "Iluminando el lado oscuro del universo", "es sorprendente que alguien joven, desconocido, vaya directamente al grano de los principales problemas abiertos".

"La ecuación E=mc² de Albert Einstein le dio forma a todo el siglo XX": Christophe Galfard, discípulo de Stephen Hawking "Pero Einstein tenía instinto para identificar los problemas importantes, reducirlos a su esencia y avanzar. En eso era excepcional", dice Emparan a BBC Mundo.

Además, "tenía el ímpetu necesario" para prescindir de ideas convencionales y dejar al descubierto las contradicciones de la física, "y su imaginación visual le permitía dar saltos conceptuales que escapaban a otros pensadores más tradicionales", dice Walter Isaacson en la biografía "Einstein: su vida y su universo".

Como resultado de estas habilidades extraordinarias, dejó para la historia un Annus mirabilis como solo el célebre Isaac Newton había alcanzado antes.

Newton también tuvo su propio "Annus mirabilis", donde desarrolló su famosa teoría de la gravedad, que estuvo vigente hasta inicios del siglo XX. Entre 1665 y 1666 el matemático, astrónomo y físico inglés desarrolló el cálculo, la teoría de la composición de la luz y la teoría de la gravedad, mientras estaba recluido en su casa familiar para protegerse de una epidemia de peste que asolaba Inglaterra.

¿De qué se trataban las cinco teorías qué escribió Einstein en su propio "año milagroso"?

1. Efecto fotoeléctrico 
Fue por esta investigación, publicada en junio de 1905, que Einstein ganó el premio Nobel de Física en 1921 (y no por la teoría de la relatividad).

¿Es la luz una onda o una partícula? Einstein respondió "ambas" y cambió la física para siempre
Desde 1887, gracias a Heinrich Hertz, los científicos conocían el efecto fotoeléctrico, que se produce cuando una placa metálica, al ser iluminada, emite electrones y genera una corriente eléctrica.

Los físicos de la época no podían explicar algunas particularidades del efecto fotoeléctrico si partían de la premisa -dominante en aquella época- de que la luz era una onda, dice el físico John Rigden en su libro Einstein 1905: The Standard of Greatness.

El físico alemán Max Planck ya había introducido la idea de que la luz podía ser emitida o absorbida en forma de pequeños paquetes discontinuos de energía, que denominó "cuantos".

"Pero en verdad, [Planck] no creía que [los cuantos] fueran reales", dice el físico Christophe Galfard en su libro "Para entender E=mc²". "Pensaba en ellos como un truco matemático para que le salieran bien los resultados de sus experimentos", agrega.

Sin embargo, Einstein aplicó la idea de Planck al efecto fotoeléctrico, al proponer que la luz realmente podía comportarse como un conjunto de partículas.

Einstein llamó "cuantos de luz" a estas partículas, que posteriormente pasaron a conocerse como "fotones".

De acuerdo a Einstein, era más fácil que la luz incidiera sobre electrones particulares concentrando su energía en forma de partículas en vez de hacerlo en forma de ondas continuas.

Las ondas no tendrían la energía suficiente para expulsar electrones del metal, en cambio cada partícula de luz podría colisionar directamente con cada electrón y expulsarlo, explica Rigden en Einstein 1905: The Standard of Greatness.

Einstein se refiere a esta investigación como "muy revolucionaria" en una carta enviada a Habitch, fechada en mayo de 1905, en la que le enumera cuatro de los estudios que estaba desarrollando ese año.

"Este estudio nos dejaba en una situación en la que no sabíamos cuál era el suelo firme para continuar. No encajaba con la física anterior", dice Emparan a BBC Mundo. "Durante mucho tiempo este artículo no fue tomado muy en serio".

"El propio Planck, viendo una aplicación de sus ideas que parecía explicar bien las cosas, no lo aceptó. Porque la luz tenía propiedades de onda muy bien verificadas", agrega.

El nobel Serge Haroche: Einstein se equivocó, "Dios efectivamente está jugando a los dados" en el universo cuántico "Ese era el grado de confusión que había en la época. Pero Einstein tuvo un instinto excepcional para moverse en estas situaciones de confusión", señala.

De hecho, al mismo tiempo que demostraba que la luz se comporta como partículas, Einstein subrayó que "no era necesario descartar la teoría ondulatoria, pues podía seguir resultando útil para explicar fenómenos ópticos", dice Isaacson en la biografía del físico.

"Más adelante ya se comprobó que algunos fenómenos los explicas si la luz se comporta como partículas y otras veces mejor como ondas, pero tiene ambas propiedades", explica Emparan.

Sin embargo, esta dualidad de onda-partícula de la luz, uno de los fundamentos de la física cuántica, desconcertó a Einstein hasta mucho años después, escribe Isaacson.

En una carta enviada a su amigo Michele Besso, en 1951, le cuenta que "estos 50 años de reflexión no me han llevado en absoluto más cerca de la respuesta a la pregunta: '¿Qué son los cuantos de luz?'".

2. Determinación de las dimensiones moleculares
Este estudio le valió su doctorado en la Universidad de Zúrich, en Suiza.

Varios autores lo consideran como parte del "año milagroso" porque Einstein terminó de escribirlo en abril de 1905 y lo envió a Annalen der Physik en agosto, pero fue publicado en enero de 1906, después de corregir algunos cálculos.

En esta investigación, Einstein desarrolló un método de dos ecuaciones para medir el tamaño y la masa de las moléculas.

Mileva Einstein: la poco conocida historia de la brillante mujer de Albert Einstein que ayudó a descubrir la teoría de la relatividad

Las ecuaciones se valían de datos sobre la viscosidad (resistencia que ofrece un líquido a la acción de fluir) y la difusión de partículas de azúcar en agua, para despejar las dos variables que buscaba: el tamaño de las moléculas y el número que hay de ellas (conocido como el número de Avogadro).

"Su tesis se convertiría en uno de sus trabajos más citados y de mayor utilidad práctica, con aplicaciones en ámbitos tan diversos como la mezcla de cemento, la producción de leche y la fabricación de aerosoles", señala Isaacson en la biografía del físico.

3. Movimiento browniano
En 1827 Robert Brown, un botánico escocés, observó en el microscopio que unas partículas de polen llamadas amiloplastos se movían aleatoriamente cuando estaban suspendidas en agua, sin seguir un patrón definido. Pero no supo explicar por qué.

Este misterioso movimiento pasó a ser conocido como "movimiento browniano".

En su investigación, publicada en 1905, Einstein dijo que las partículas suspendidas se movían al ser colisionadas por pequeñas partículas del agua, que a su vez se movían por efecto del calor, un fenómeno de la termodinámica.

Mientras más calor haya, más se mueven las partículas, que no serían otra cosa que átomos y moléculas de agua.

Esta explicación de Einstein sirvió como una prueba de la existencia de los átomos, que en esa época todavía no estaba completamente confirmada.

Aunque hoy parezca contradictorio, en aquel entonces se podía creer en los electrones del efecto fotoeléctrico sin creer en los átomos, porque los primeros todavía no se consideraban como parte de los segundos, sino solo como pequeñas partículas de la materia con carga eléctrica negativa, dice Lehmkuhl a BBC Mundo.

Para Lehmkuhl, "el trabajo sobre el movimiento browniano es estructuralmente similar al del efecto fotoeléctrico".

Las teorías vigentes en la época describían a los líquidos y a la luz como objetos "continuos", explica.

"Einstein se preguntó: '¿Qué pasa si asumimos que estos no son realmente continuos, sino que tienen una estructura de partículas?'. Eso es lo que une a ambos estudios", agrega.

4. Electrodinámica de los cuerpos en movimiento o "relatividad especial"
Quizá este artículo, publicado en septiembre de 1905, sea el más famoso de los cinco que escribió en el "año milagroso".

Einstein contaba que el origen de su trabajo sobre la relatividad especial se remontaba a un problema que él mismo se había planteado a los 16 años: ¿cómo se vería un rayo de luz si uno viajara al lado de este a su misma velocidad?, cuenta Isaacson en la biografía del físico.

Casi 50 años después de su estudio del efecto fotoeléctrico, Einstein no entendía qué eran los quantos de luz. Para resolver el problema, Einstein partió de dos grandes postulados: el de la relatividad de Galileo Galilei, de 1632, y de las ecuaciones del electromagnetismo de James Clerk Maxwell.

Es por esto que la relatividad especial fue un problema "límite" entre la mecánica clásica y la electrodinámica, dice Lehmkuhl.

Según la relatividad de Galileo, "las leyes de la física son las mismas para todos los observadores que se muevan a velocidad constante unos con respecto a otros", apunta Isaacson.

Siguiendo este principio, si dos cuerpos se mueven a velocidad constante en relación al otro, no se puede saber cuál se mueve y cuál está en reposo. Además, las velocidades de los cuerpos debían sumarse o restarse, dependiendo de si el observador se acerca o se aleja.

Por su parte, en el siglo XIX, Maxwell había descubierto que "la luz era la manifestación visible de todo un abanico de ondas electromagnéticas", dice Isaacson, al determinar que la luz y las ondas viajan a la misma velocidad, 300.000 km/s.

Las ecuaciones de Maxwell mostraban que "la luz viajaba siempre a una velocidad constante de 300.000 km/s, independientemente de la velocidad de la fuente emisora".

Einstein estaba en lo cierto: el "monstruo gravitatorio" que permitió comprobar la teoría de la relatividad en condiciones extremas

Según la relatividad de Galileo, si Einstein viajaba a la misma velocidad que un rayo, este debía verse como un campo magnético en reposo (como cuando vamos en un auto y otros que viajan a la misma velocidad parecen estar quietos).

Pero según las ecuaciones de Maxwell, la luz debía mantener su velocidad de 300.000 km/s.

Entonces, ¿cuál de los dos postulados era cierto?

Albert Einstein murió en 1955 ya elevado al estatus de celebridad mundial.
"Einstein dijo: 'Vamos a asumir que los dos son verdaderos'. Para que encajen, Einstein se deshizo de la idea de simultaneidad absoluta", explica Lehmkuhl.

Eliminar la simultaneidad absoluta significaba que dos sucesos que son simultáneos para un observador, dejan de serlo cuando el observador se mueve con respecto a uno de los dos sucesos, según explicó Einstein en su artículo.

"Estamos viajando al futuro constantemente"
"Dado que no existe la simultaneidad absoluta, tampoco existe el tiempo real o absoluto. Como Einstein señalaría más tarde: 'No hay ningún tictac audible en ninguna parte del mundo que pueda considerarse que es el tiempo'", dice Isaacson. "Einstein señalaba que si el tiempo es relativo, el espacio y la distancia también lo son".

"Las mediciones del tiempo y del espacio pueden ser relativas, dependiendo del movimiento de uno o más observadores. Y no hay forma alguna de afirmar que uno de los observadores es quien está en lo cierto", dice Isaacson.

Con la relatividad especial, que se aplica a cuerpos que se mueven a velocidad constante, Einstein derribó la idea de simultaneidad absoluta, del tiempo y espacio absolutos y confirmó a la velocidad de la luz como una constante universal, independientemente de la posición, movimiento o velocidad del observador.

5. Equivalencia de la masa y energía
En esta investigación, publicada en noviembre de 1905, Einstein presentó la fórmula E=mc², que es tal vez la ecuación más famosa del mundo, aunque no necesariamente sea la más fácil de entender.

En una carta enviada a Habitch, entre junio y septiembre de 1905, Einstein se refiere a este estudio, aunque reconoce que duda de sus resultados.

"Una consecuencia del estudio de la electrodinámica (relatividad especial) cruzó mi mente. El principio de la relatividad, junto con las ecuaciones de Maxwell, requieren que la masa sea una medida directa de la energía contenida en un cuerpo. La luz transporta masa con ella", le dice a su amigo.

"La idea es divertida y seductora pero hasta donde sé, Dios podría estar riéndose de todo el asunto y podría muy bien haberme tomado el pelo", añade.

Sin embargo, Einstein tenía razón. En la fórmula que propuso, "E" es por energía, "m" es por masa y "c", por la velocidad de la luz (300.000 km/s) al cuadrado.

El aumento de energía causa un aumento directamente proporcional en la masa. En otras palabras, al viajar más rápido y aumentar la energía, la masa crece, y mientras más masa tiene un objeto, más difícil es acelerar, por lo que nada puede alcanzar la velocidad de la luz.

Esta fórmula completó la teoría de la relatividad especial.

"El brote de creatividad de Einstein en 1905 resultó asombroso", escribe Isaacson.

Y continúa: "Había concebido una revolucionaria teoría cuántica de la luz, había contribuido a probar la existencia de los átomos, había explicado el movimiento browniano, había cambiado el concepto de espacio y tiempo, y había ideado la que se convertiría en la ecuación más conocida de la historia de la ciencia".

En palabras de Lehmkuhl: "Todos los estudios de 1905 fueron la culminación de años de investigación y de pensar sobre estos temas. En 1905 todo se puso en su lugar".

https://www.bbc.com/mundo/noticias-52596330

martes, 23 de junio de 2020

José Andrés: "El hambre no se ve y está presente en tu ciudad”. El chef viaja a Madrid desde Estados Unidos para ver cómo funciona su ONG durante la pandemia. “No puede dejarse a la casualidad que una ong cubra al día miles de comidas”, afirma.

LA OPORTUNIDAD DE ESPAÑA DE SER “LA SUIZA DE LA HOSTELERÍA”
Entrevista al chef José Andrés que ha venido a España a visitar las cocinas de su ong world central kitchen madrid centro

Foto: Inma Flores
En las cocinas de World Kitchen Food han participado chefs a los que José Andrés admira. Sus negocios han estado parados, con los envíos a domicilio como única salida posible. De cara a la recuperación económica, el chef asturiano plantea la importancia de promocionar la gastronomía como baza turística. “El turismo es un motor importante en España. Si hay algún ministro que piense que hay que diversificar la industria que empiece hacerlo creando las medidas” para “atraer inversión nacional y extranjera”.

Lo ejemplifica con que hay “muy pocas campañas” que intenten atraer al turista de invierno. “¿Por qué no invertir en eso? ¿Por qué no nos podemos convertir en la nueva Suiza de la hostelería?”, se pregunta, y destaca el éxito “notable” de la Escuela de Hostelería en el País Vasco, en San Sebastián. “¿Por qué España no toma la iniciativa con ayuda pública y privada y crea cinco o seis escuelas más de hostelería si somos líderes en turismo? Si somos potencia turística en atraer, tenemos que serlo también en crear. ¿Por qué las mejores escuelas están todas en Suiza, EEUU o Alemania? Yo quise hacer una con un grupo de amigos en Sigüenza (Guadalajara), un sitio maravilloso y ahí se quedó. La de riqueza que hubiera traído a un lugar así”, dice. La ONG dice adiós a los chefs más notables pero seguirá en marcha: ha creado escuela para continuar la labor.

Karla Hoyos, en la cocina de Santa Eugenia de la ONG WCK de José Andrés.
La enviada especial de José Andrés para alimentar a familias vulnerables de Madrid
Comedor social en la parroquia San Ramón Nonato en Puente de Vallecas. Alvaro Garcia. 22/04/2020

Las colas del hambre y la pobreza inician su escalada en Madrid: “Cada día viene más gente nueva”.

No acabó el bachillerato. No hizo el examen final de la escuela de Barcelona porque estaba en la mili, trabajó en el Bulli, se fue a Estados Unidos con 50 dólares en el bolsillo y se quedó. Hoy es un líder indiscutible a nivel mundial con su ONG World Central Kitchen (WCK), fundada en 2010. Con ella entra en países azotados por una tragedia y coordina a cocineros y voluntarios para alimentar al mayor número de personas posibles. Solo durante la covid-19 han repartido en el mundo 15 millones de comidas.

El cocinero asturiano voló de Washington a Madrid el jueves sin billete de vuelta y anunció su visita solo a las personas de su confianza. “Quería planear las siguientes semanas y agradecer personalmente a los cientos de personas que se han volcado”, explica. Los voluntarios, distribuidos en 16 ciudades españolas y capitaneados por cocineros como su mano derecha Karla Hoyos, Pepa de El Qüenco de Pepa, Diego Guerrero, Carlos Tejedor, Iván Morales o Álvaro Castellanos, han elaborado casi dos millones de comidas desde el 27 de marzo: en algunos días llegaron a repartir 50.000 en toda España, 25.000 en Madrid. “Tenemos aquí a los Messi de la cocina. Habrá pocas emergencias en la historia que la comida sea más rica”, cuenta.

José Andrés camina con decisión por la Escuela de Hostelería Santa Eugenia, la mayor cocina solidaria que ha montado World Central Kitchen y los voluntarios, sin parar de trabajar, le dan las gracias. Muchos cuentan que no sabían cómo colaborar en estos días y que WCK les ofreció el canal para hacerlo. La actividad es frenética. Diego Guerrero carga con cajas, Karla Hoyos le echa un ojo al estofado y las comidas empaquetadas salen rumbo a Villaverde Alto, donde José Andrés se pondrá a repartir en un rato. “Para entender el problema de raíz hay que estar con la gente en la calle”, dice.
Pero esta pedazo de cocina, ¿cómo no estaba abierta?

JOSÉ ANDRÉS, A SU LLEGADA A LAS INSTALACIONES DE LA ESCUELA DE HOSTELERÍA DE SANTA EUGENIA

José Andrés camina por las estancias de la cocina y exclama: “Pero este pedazo de cocina, ¿cómo no estaba abierta y para qué la hicieron?”. Nadie contesta. “¿Me has visto a mí hacer una rueda de prensa para decir que voy a hacer un millón de comidas? No. ¿Cómo anunciaron que iban a hacer 50.000 diarias en un estadio? Karla, que es una tía curtida en mil batallas y que ha cocinado en playas desiertas sin nada, podría hacerlo”, admite.

Pregunta. ¿Cuándo moviliza a World Central Kitchen?
Respuesta. Nuestra misión es alimentar en tragedias en el momento donde la gente lo ha perdido todo y no hay nadie dispuesto a hacerlo. Cada vez llegamos a más gente porque tenemos más medios, pero se hace complicado porque a su vez también hay más huracanes, terremotos, tifones, incendios, etc. Hay muchos lugares donde ya había hambre y una pandemia como esta te muestra problema a corazón abierto.

P. ¿Y en España?
R. Me dijeron que 5.000 pequeñas cocinas sociales llevadas por diferentes grupos habían cerrado por falta de fondos, de voluntarios o porque les obligaron. Muchos compañeros míos desde sus restaurantes empezaron a cubrir las necesidades de lo que iban pudiendo. Daban cien comidas aquí, doscientas allá y veían que no era suficiente. Cuando hay un incendio en un barrio sabes que siempre va a haber un restaurante que abra sus puertas para dar de comer a los bomberos, a la gente que ha perdido la casa y a los que han ido a ayudar. Para eso no necesitas a WCK. Pero cuando las cosas se convierten en algo más grande, nos movemos como pez en el agua. No hacemos nada muy especial: somos una ONG fundada por cocineros, apoyada por cocineros, siempre hay cocinas en cualquier parte del mundo, sabemos donde hay comida y fuego, voluntarios y gente que nos ayude a distribuir. Cuando eso entra en un plan que trazas sobre la marcha es algo mágico. Nosotros solo decimos: dejarnos a nosotros que sabemos lo que hacemos. No tiene sentido que haya otro tipo de personas hablando de dar de comer cuando tienes a los mejores dispuestos a hacerlo.
Voluntarios de la ong preparando bocadillos en las cocinas de la Escuela de Hostelería de Santa Eugenia.

Voluntarios de la ong preparando bocadillos en las cocinas de la Escuela de Hostelería de Santa Eugenia. Voluntarios de la ong preparando bocadillos en las cocinas de la Escuela de Hostelería de Santa Eugenia.INMA FLORES / EL PAIS

P. ¿Y cuándo abandonan un lugar?
R. En Madrid ya estamos empezando a hacerlo [este lunes regresa a Miami Karla Hoyos]. Pero no nos gusta irnos hasta que no apoyamos al crecimiento. En Puerto Rico dimos préstamos a fondo perdido a doscientas granjas de pequeños agricultores que se hubieran tenido que ir por haberlo perdido todo. En Haití montamos una escuela de hostelería para chicas, les buscamos puestos de trabajo y espero que sea el futuro del país con más turismo.

P. Y en España han presentado el Plan Nacional de Emergencia Alimentaria.
R. Sí. Para poner en marcha un sinfín de mecanismos y evitar el hambre. Porque el hambre es algo que no se ve y está presente en tus ciudades. Piensas que nunca te va a pasar hasta que te sucede. Hay que buscar formas para que todo el mundo pueda beneficiarse de la riqueza que genera una sociedad de consumo. En una tragedia como esta lo primero es reconocer que hay una crisis humanitaria. Yo estoy con los pies en los barrios y veo cómo la gente que vive al día se ha quedado de golpe sin empleo y no tiene ninguna forma de que nadie les ayude. Esa gente va a pasar hambre. Y como no queremos tener una ciudad llena de gente pidiendo, no porque haya que ocultarlos sino porque no es digno darle a las personas esa única salida, hemos hecho ese plan con ayudas y posibilidades que hay que adaptar a la realidad de España, a los partidos políticos con la visión que ellos tengan. Pero hay que tener un plan. No puede dejarse a la casualidad que una ONG como WCK venga a cubrir 50.000 comidas al día, más de dos millones en total. Los gobiernos están aquí para en momentos así cubrir estas necesidades. El hambre no debería ser de derechas ni de izquierdas, sino que debería ser algo que todo el mundo apoyara para que no existiera.

Para entender el problema de raíz hay que estar con la gente, en la calle”

P. ¿WCK tiene muchas donaciones españolas?
R. No me fijo mucho en eso pero España no es tan fácilmente caritativa. En América hemos tenido apoyos de Laurene Jobs, Jeff Bezos o Bloomberg, el alcalde de Nueva York. Lo bueno o lo malo es que lo hacemos igualmente porque como tengamos que esperar a tener dinero en el banco no habríamos hecho nada. A veces recibo la llamada de que estamos en números rojos pero la gente sigue con hambre y pienso que ya nos apañaremos. Y así vamos tirando. Pero América es más generosa. En España habría que hacer una ley que permita donar y tener algún beneficio con los impuestos. Al fin y al cabo, esto lo tiene que hacer alguien. Y así sería una manera indirecta de que lo hiciera el gobierno.

P. Acaba de llegar de Washington, ¿cómo ha vivido el ambiente en la calle?
R. La gente está enfadada pero ha sido muy pacifista. La noche es como las películas, donde hay grupos de individuos que han hecho destrozos. Si pones todas esas imágenes juntas, sí puede parecer el apocalipsis y el derrumbe de la democracia americana. Pero te puedo poner las mismas imágenes todas positivas. Ha habido destrucción pero no como para decir que los cimientos de América se están tambaleando. Hay mucha gente muy ofendida y la gente que te tiene que estar protegiendo te está matando. Yo entiendo que los policías en América viven bajo mucho miedo. No hay país en el mundo con más armas en la historia ni en el que muera más gente por arma. Yo ahora no quisiera ser policía en Estados Unidos porque nadie es Superman. Pero es verdad que por esa actitud casi probélica que tienen algunos, en parte por defensa en parte por ser malas personas si están viendo que estás en el suelo, esposado y con dos policías encima no tiene sentido que te maten porque tiene su rodilla en tu cuello durante nueve minutos. Eso hay que cambiarlo con empatía.

Todo se resume en una película de ‘La guerra de las galaxias’: está el bien, el mal y unos contra los otros. Necesitamos líderes que todos quieran ser Jedis

P. ¿Qué le pediría a Trump?
R. Lo mismo que todos. La salida que hizo de la Casa Blanca el otro día fue patética. Hay dos imágenes que para mí lo explican todo: la del presidente Obama en la marcha de Selma, cruzando el puente, sin prácticamente nadie de seguridad a su alrededor junto a miles de personas detrás y la de Trump saliendo solo, apoyado por dos líneas de policías y guardia militar armados hasta los dientes. Por dar la impresión de ser opresivo y militarista en vez de tener empatía para escuchar, sucede lo que está pasando en diferentes ciudades norteamericanas. Es un momento histórico, la tormenta perfecta para que de aquí salga algo. Esta no es la América que la gente quiere. Nunca ha habido más desunión y todo comienza por una persona. Trump no tiene la culpa de todo el racismo. Pero es el líder que lleva tres años sacando lo peor de América en vez de intentar apaciguar y acercar más a las personas. Cuando hay ese tipo de liderazgo vale más cambiar de país. Pero eso se lo digo a todo el mundo. Cuando tenemos líderes que van a insultar, denigrar y no buscar consenso hay que quitarlos del medio rápidamente porque lo único que van a lograr es llevar a nuestros hijos a guerras civiles. El pasado está lleno de ellas. Tenemos que exigir líderes que busquen el consenso y nos guíen a lo mejor de nosotros mismos. Cuando hay partidos políticos que solo lanzan discursos de unos contra otros hasta que se den, así no se puede crear un país. En temas raciales es lo mismo. Parece que todo se resume en una película de La guerra de las galaxias: está el bien, el mal y unos contra los otros. Y el que era malo resulta que tenía el corazón bueno. La vida es más compleja que todo esto pero necesitamos líderes que todos quieran ser Jedis. Y que entiendan que el que no es como tú también te puede enriquecer. Yo no pienso lo mismo ahora que cuando tenía 20 años. He ido escuchando, aprendiendo y encontrando un punto más pragmático en la vida.

Los cocineros de la ong WKF, este sábado en Santa Eugenia. Los cocineros de la ong WKF, este sábado en Santa Eugenia.INMA FLORES / EL PAIS

P. En su biografía de Twitter dice: “Si estás perdido, comparte un plato de comida con un extraño y te encontrarás”. ¿Cuándo fue la primera vez que lo descubrió?
R. No lo recuerdo. A mí me gusta ir a los restaurantes más high top y a las barriadas más pobres donde una señora cocinando con un carbón te ofrece un humilde plato de potaje con un poco de arroz. Ahí entablas conversación con gente con la que nunca hablas porque socialmente estamos muy fragmentados. Esos sitios me ponen en mi lugar. Creo que cuando hay esas grandes conferencias de “vamos a cambiar el mundo”, las hacen en los lugares equivocados. Esas personas que hablan de acabar con el hambre en el edifico de las Naciones Unidas, cuando hay un receso se van a comer a los restaurantes más lujosos de Manhattan. Hay tal desconexión entre el mensaje y la realidad, que es imposible que las palabras de estos líderes tengan efecto.

P. ¿Y se lo dice a ellos?
R. Y me responden que ellos también van a las barriadas. Pero sé que sólo acuden para hacerse la foto. Cuando los discursos los das en el lugar equivocado es imposible tener efecto. Ahora hablando contigo estoy perdiendo tiempo de estar en los barrios de Madrid. Lo que perdemos en los discursos se lo estamos quitando a los sitios donde hay que estar. Hay que estar en la calle, al pie del cañón. No puedes ser líder de despacho.

LA OPORTUNIDAD DE ESPAÑA DE SER “LA SUIZA DE LA HOSTELERÍA”
Entrevista al chef José Andrés que ha venido a España a visitar las cocinas de su ong world central kitchen madrid centro

Foto: Inma Flores
En las cocinas de World Central Kitchen Food han participado chefs a los que José Andrés admira. Sus negocios han estado parados, con los envíos a domicilio como única salida posible. De cara a la recuperación económica, el chef asturiano plantea la importancia de promocionar la gastronomía como baza turística. “El turismo es un motor importante en España. Si hay algún ministro que piense que hay que diversificar la industria que empiece hacerlo creando las medidas” para “atraer inversión nacional y extranjera”.

Lo ejemplifica con que hay “muy pocas campañas” que intenten atraer al turista de invierno. “¿Por qué no invertir en eso? ¿Por qué no nos podemos convertir en la nueva Suiza de la hostelería?”, se pregunta, y destaca el éxito “notable” de la Escuela de Hostelería en el País Vasco, en San Sebastián. “¿Por qué España no toma la iniciativa con ayuda pública y privada y crea cinco o seis escuelas más de hostelería si somos líderes en turismo? Si somos potencia turística en atraer, tenemos que serlo también en crear. ¿Por qué las mejores escuelas están todas en Suiza, EEUU o Alemania? Yo quise hacer una con un grupo de amigos en Sigüenza (Guadalajara), un sitio maravilloso y ahí se quedó. La de riqueza que hubiera traído a un lugar así”, dice. La ONG dice adiós a los chefs más notables pero seguirá en marcha: ha creado escuela para continuar la labor.

https://elpais.com/espana/madrid/2020-06-06/jose-andres-el-hambre-no-se-ve-y-esta-presente-en-tu-ciudad.html

lunes, 22 de junio de 2020

_- 1. EEUU: “Protestan por cuatrocientos años de represión”. Entrevista Noam Chomsky 06/06/2020

_- Arden los Estados Unidos. Se ha impuesto el toque de queda en varias ciudades, mientras los desórdenes en las calles de manifestantes tanto negros como blancos no dan señales de disminuir y el ejército está listo para intervenir.

Entretanto, las palabras y acciones del gobierno norteamericano, sobre todo de Trump (sus últimos comentarios de “ley y orden”, que evocan una serie dramática televisiva), muestran poco interés en la reconciliación con comunidades que están ya exasperadas por la crisis del coronavirus, el desempleo y las desigualdades sociales.

Para comprender las raíces históricas y sociales de los disturbios, planteamos unas cuantas preguntas [formuladas por la periodista Silvia Nicolini] al profesor Noam Chomsky, uno de los más renombrados expertos en el mundo en la política y la sociedad norteamericanas.

Las protestas que han seguido a la muerte de George Floyd se han convertido en disturbios y se han extendido de Minneapolis a otras diversas ciudades de los Estados Unidos. Mientras tanto, el Pentágono ha apremiado a la policía militar a prepararse. Profesor Chomsky, ¿qué está pasando en los Estados Unidos? ¿Hay algo más profundo detrás de las protestas contra el racismo y el abuso de poder de los policías blancos?

Lo que hay de más profundo son cuatrocientos años de brutal represión: primero, el más feroz sistema esclavista de la historia humana, que proporcionó buena parte de la base del crecimiento económico y la prosperidad de los EE.UU. (y de Inglaterra); luego, diez años de libertad en los que los negros pudieron incorporarse a la sociedad y lo hicieron con notable éxito; después, un pacto Norte-Sur que otorgó de modo efectivo a los antiguos estados esclavistas la autoridad para obrar como les placiera. Lo que hicieron fue criminalizar la vida de los negros, creando la “esclavitud con otro nombre”, título de uno de los libros más importantes sobre el tema.

Esto duró prácticamente hasta la II Guerra Mundial, época en la que se necesitaba mano de obra. Vino después un periodo de relativa libertad, obstaculizado por leyes racistas tan extremas que las rechazaban los nazis, y por leyes federales que exigían segregación en la vivienda financiada por el gobierno que se construyó después de la guerra. Y por supuesto, a los negros (y a las mujeres) se les excluyó de la educación superior gratuita que se les concedió a los veteranos. Llegó luego otra oleada de criminalización de la vida negra.

Ya se puede imaginar el resto. Persiste el racismo, aunque sea menos rampante que antes. Y cuando se manifiesta, como en el caso del asesinato de Floyd, se produce naturalmente una explosion, a la que en este caso se suma buena parte de la población blanca, un reflejo de progreso entre algunas partes de la población a la hora de superar esta espantosa maldición.

¿Cree usted que la pandemia ha desempeñado algún papel en las protestas que se han desatado en días recientes? ¿Ha puesto en primer plano las desigualdades del país y los profundos problemas de justicia social? ¿O simplemente reventó algo que ya llevaba cociéndose durante algún tiempo?

La pandemia ha puesto de relieve algunos de estos problemas. Así, por ejemplo, los negros mueren tres veces más que los blancos a causa de la Covid-19. Trump, cuya mezquindad no tiene límites, se ha aprovechado de la pandemia para recortar las regulaciones que limitan la contaminación del aire, que tiene efectos demoledores en la actual pandemia respiratoria. La prensa económica estima que, como resultado de ello, pueden morir decenas de miles de personas, con una elevada concentración entre personas negras que pueden permitirse vivir solamente en las zonas más contaminadas. De qué modo va a influir esto en la opinion pública depende de la medida en que se vea obscurecido por disquisiciones racistas.

¿Hay circunstancias como éstas en las que pueda justificarse la violencia de una población exasperada?

Se puede entender, desde luego. Los anales revelan que no resulta sensato. Conduce de manera sistemática a que haya más gente que apoye una represión más dura.

Donald Trump reaccionó a las protestas con un tuit que se borró posteriormente, pero no sin antes echar más leña al fuego: “Cuando empiezan los saqueos, empiezan los tiroteos”. ¿Nos puede explicar por qué, más allá de la incitación a la violencia contra los manifestantes, esta frase ha tenido un impacto tan contundente en la sociedad norteamericana? Y además, ¿cree usted que el “pecado original que todavía hoy mancha a nuestro país” (tal como dijo Joe Biden) se ve hoy agravado por la presencia de Trump? ¿Le ayuda también su fiera retórica a volver a subir en las encuestas, que muestran hoy a Biden en cabeza?

Trump citaba a un alcalde de Florida de hace cincuenta años sobre cómo reaccionaría a las protestas contra el racismo. El significado quedaba claro, aunque después de una reacción enormemente negativa, Trump mintió sobre eso y declaró que los que dispararían serían los saqueadores. Trump se ha salido de su vía habitual para extender el “baldón” apelando a los elementos supremacistas blancos. Es difícil prever la repercusión popular.

¿Qué opina de la reacción de los liberales? ¿Hay alguna enseñanza de lo que está sucediendo estos días para ellos y para Biden?

Debería. Si va a ser este el caso, ya lo veremos.

Profesor, una última pregunta. Ha citado usted la “criminalización de la vida de los negros”, a la que ha menudo se ha referido en sus libros. ¿Puede explicarnos brevemente cómo ha funciado y sigue funcionando en la sociedad norteamericana y su economía?

No puedo atribuirme la frase, que se utiliza comunmente en los estudios sobre la sociedad norteamericana. En los antiguos estados esclavistas del siglo XIX se trataba de una política deliberada. Si había un hombre negro en una calle, le podían detener por vagabundear, le podían imponer una multa que no pudiera pagar y mandarlo a la cárcel…en la que se le podía ofrecer a las empresas como perfecto trabajador: disciplinado, sin protestas, barato. Esa fue una aportación de primer orden a la revolución manufacturera de la época, así como a la industria agroalimentaria.

La segunda oleada de criminalización despegó con Ronald Reagan. En 1980, cuando tomó posesión de su cargo, las cifras de población reclusa estaban dentro de los baremos europeos. Desde entonces han explotado rebasando con mucho las de Europa. La gente encarcelada es población negra de una manera desproporcionada. Eso se debe en parte a la guerra de las drogas, y en parte se puede remontar al mayor número de delitos entre los negros. Este ultimo hecho es algo que se aduce a veces en las disquisiciones racistas, eliminando la pregunta de por qué razón hay más delitos entre los negros. Es algo típico de las comunidades oprimidas. El caso de los negros es de lejos el más grave.

Noam Chomsky Catedrático emérito de lingüística del Massachusetts Institute of Technology, EE UU, es uno de los activistas sociales más reconocido por su magisterio y compromiso político.

Fuente:

il manifesto global, 2 de junio de 2020

Traducción: Lucas Antón

domingo, 21 de junio de 2020

“Detrás de la asistencia social sigue existiendo una mirada franquista, de caridad”. Entrevista

Berta Lago Bornstein 



Tiene Berta Lago Bornstein (Madrid, 1949) la santa paciencia de ilustrar al que no sabe. “Será por experiencia”, apunta con ironía una de las personas que mejor conoce en España la gestión de las rentas sociales. Quizá por eso su objetivo principal siempre ha sido situar las políticas que luchan contra la pobreza y la desigualdad en el centro de la mentalidad de los españoles, en el mapa de la conciencia de un país más acostumbrado a la beneficencia que a los derechos sociales. En ese sentido, concibe el Ingreso Mínimo Vital (IMV) como un avance importante aunque cree que habrá gente que se quedará fuera. Por edades, por requisitos y por consideraciones que matizan la universalidad de la ayuda.

Activista por una renta digna desde los años 80, Lago Bornstein ha volcado toda su energía en los servicios sociales, primero en la administración estatal en la época de la Transición y, más tarde, en el Gobierno de Madrid donde llegó a dirigir la gestión de rentas mínimas y medidas de inserción entre 2003 y 2013. “No me fío de la reacción del gobierno de Díaz Ayuso a la puesta en marcha del IMV porque su recorrido es cada vez más neoliberal”, advierte.

Desde la atalaya que le aporta su larga trayectoria profesional tiene un convencimiento de la realidad española. “La aporofobia, la aversión a las personas pobres o desfavorecidas, está más extendida de lo que pensamos en España. Quizá nos falte cultura democrática y algo de pedagogía para explicar a la población la importancia que tienen los impuestos para profundizar en la justicia social”, afirma. La entrevista la realizó Gorka Castillo.

A diferencia de lo que sucede en gran parte de los países de la Unión Europea, en España siempre ha habido mucha oposición a los mecanismos estatales de protección social fuertes. ¿Por qué?

No es fácil responder. Pienso que tiene que ver mucho el arraigo del concepto del merecimiento, del esfuerzo, del ganarás el pan con el sudor de tu frente. En España, se cuestiona y se responsabiliza mucho más al pobre por su situación que a las grandes fortunas por la forma en la que han llegado a amasar su patrimonio. Nadie se cuestiona las ventajas que tienen los ricos pero se reprochan las ayudas que se destinan a las personas sin recursos, siempre examinadas con lupa. En España, no se tiene una visión estructural de las políticas sociales, es decir, que el Estado debe garantizar y velar por los derechos y la justicia de toda la población. La aporofobia está más extendida de lo que pensamos. Creo que nos falta un poco de cultura democrática real para asumir que hay derechos sociales que son innegociables.

¿Y a quién le afecta más, a su juicio, ese déficit democrático del que habla?

A la infancia, sin duda. Me parece realmente trágico. Para mi es gravísimo que no se considere la infancia un bien de la sociedad cuando el futuro de un país entero depende de cómo atendamos y qué medios proporcionemos a los niños para que se desarrollen en toda su plenitud. En Alemania, un país que conozco bien, la infancia está muy protegida y no sólo desde el punto de vista estrictamente económico. Sin embargo, en España parece que sólo es responsabilidad de los padres. Deberíamos cuestionarnos nuestro modelo.

¿Le resulta contradictorio que la cuarta economía europea, y una de las tres más desiguales del continente, no haya tenido hasta ahora un Ingreso Mínimo Vital (IMV) garantizado?

Sin duda. Desde mi experiencia preconstitucional –empecé a trabajar en esta materia antes de la llegada de la democracia a España– la inclusión en la Constitución del concepto “asistencia social” en lugar de “beneficencia”, una palabra utilizada en el franquismo, se produjo en el último momento, en el debate del Senado. Con eso quiero decir que se modifican las palabras pero no se cambian tan fácilmente las mentalidades. Y creo que eso ha llegado hasta nuestros días. Detrás de la asistencia social sigue existiendo una mirada franquista, de atención a los pobres, de caridad. Esta percepción benéfica de la ayudas ha perjudicado el desarrollo de prestaciones como el IMV, que se podían haber articulado hace mucho tiempo pero que desde que las rentas mínimas se regularon en los años 90 han endurecido y burocratizado su tramitación. Ya no te digo después de la crisis de 2008. Lo que se intentó hacer a principios de los años 80, y yo estaba en ese momento en la Dirección general de Acción Social como jefa de servicio, era articular una ley de servicios sociales marco que evitara la competencia entre comunidades autónomas pero resultó imposible. El resultado es que hoy existe una gran desigualdad autonómica en esta materia. En ese sentido, creo que el IMV es un avance largamente esperado que incluso el PSOE incluyó en su programa hace cinco años.

¿Qué aspectos positivos tiene el IMV?

No he tenido tiempo de analizarlo en profundidad pero, por lo que he visto, aunque es un avance importante va a dejar fuera a mucha gente. No estoy de acuerdo que vaya a prevenir la pobreza y la exclusión, como dicen, porque el primer requisito para optar a esta ayuda es carecer de determinados ingresos, todos por debajo del umbral de la pobreza, con lo cual tienes acreditar que eres pobre. Eso no es prevenir. Prevenir la pobreza se consigue con la renta básica universal.

¿En qué se diferencia de la Renta Básica Universal (RBU)?

La diferencia es que la RBU es un ingreso monetario pagado por el Estado a toda la población, individual, independiente de la unidad de convivencia e incondicional. Es decir, no se concede en respuesta a una situación de vulnerabilidad sino como un derecho de ciudadanía para garantizar que sus ingresos nunca caigan por debajo del umbral de la pobreza. Y además se confiere sin límite de edad. Las conclusiones de los estudios que hemos venido realizando a lo largo de los años en España determinan que alrededor del 80% de la población se vería beneficiado por esta medida. La RBU, además de actuar como un motor de la distribución de la riqueza, concede más dignidad a la persona ya que no exige demostrar a nadie su situación de vulnerabilidad. Soy consciente de que en España es muy difícil de entender pero en países europeos como Alemania, donde la prestación universal por hijo a cargo es algo consolidado e incuestionable, no lo es. Todo el mundo tiene claro que una renta básica otorga una dimensión diferente a las relaciones laborales, a la educación, a la salud o a los cuidados y da más libertad. Creo que si se implementara en España la RBU cambiaría las reglas de juego.

Algunos economistas creen que con este tipo de políticas se instaura en España un Estado subsidiario. Sólo con la IMV, según sus cálculos, habrá 17,5 millones de personas sostenidas por poco más 18 millones de cotizantes.

Esa idea de que las personas que reciben una prestación social no buscan activamente un empleo, o son vagas, no la comparto en absoluto. Cuanto mejor sea la prestación y más dignifique al receptor, más cosas hará. Cuando los empleos son tan precarios y no hay políticas complementarias serias, por ejemplo en vivienda, ¿qué efectos provoca en los afectados? En España lo conocemos bien: exclusión y pobreza. Yo cuestiono mucho que en España exista una educación universal porque, dependiendo de las comunidades autónomas, se apoya más a la enseñanza concertada donde se generan desigualdades. En la sanidad sucede lo mismo. Me sorprende la enorme fortaleza que tienen las entidades privadas. Si realmente queremos que estos sistemas sean universales deberían ser exclusivamente públicos.

Pero los críticos más acerados, los neoliberales, aseguran que las ayudas están muy bien pero una cosa es financiar la creación de empleo y otra muy diferente es subvencionar el paro.

No estoy de acuerdo. De hecho, hasta ahora han sido las propias formas de estructurar las prestaciones las que empujaban a las personas a no aceptar un empleo formal, a menudo temporal, frágil y mal remunerado. En este sentido, el IMV incorpora la novedad de hacerlo compatible con un trabajo, al menos con un porcentaje de los ingresos, lo que me parece razonable. Pero la norma en España ha sido acusar al receptor de estas ayudas cuando la realidad es otra. Cuando me plantean esta cuestión siempre respondo que se pongan en el lugar de esa persona. Salvo en el País Vasco y Navarra, las prestaciones contempladas sólo garantizan una parte de los gastos que tiene un receptor, algo importantísimo porque es el único ingreso que tienen asegurado y lógicamente no quieren perderlo ante la incertidumbre de cómo es el mercado de trabajo en este país. La gente quiere salir adelante. Nadie es feliz en esa situación porque con ayudas de 400 o 500 euros nadie puede vivir en una ciudad como Madrid.

¿Y el fraude?

Yo no lo considero así. Es cierto que si rascas un poco, muchos receptores tienen “trabajillos” que no pueden considerarse empleos estables ni formales ni serios sino simplemente de supervivencia para terminar el mes. ¿Qué puede hacer una persona sola con los 400 euros que recibe de la Comunidad de Madrid? O se incluye en la red de protección de asociaciones que le pueda facilitar una vivienda y se alimenta en un comedor social o no puede vivir. Una de las peticiones de emergencia que desde Plataforma RMI Tu Derecho hemos realizado al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso, y que no ha sido atendida, es que no rebajen la cuantía de la Renta Mínima de Inserción a todos aquellos a los les descontaban ingresos por trabajillos de supervivencia –el chatarreo, las chapuzas o la venta ambulante– y que con el confinamiento no han podido realizar. Recuerdo el caso de una familia gitana con un hijo que había hecho una formación en informática excelente y que recibió una oferta de empleo con el sueldo equivalente al salario mínimo. Pues si el chaval aceptaba el trabajo, la familia perdía la renta mínima. Lo absurdo de esto es que en lugar de favorecer el empleo y la autonomía del hijo, lo convertían en el sostén económico de toda la familia. Eso es lo que desincentiva a la gente.

Pero hay quien considera que cobrar sin trabajar puede ser la respuesta a una situación de emergencia pero nunca la norma general. ¿Qué opina?

Es un planteamiento que me hace gracia. Y los hijos de familias con mucho dinero que no dan un palo al agua, ¿ellos pueden recibir el dinero de sus padres que vaya a usted a saber cómo lo han conseguido? Nadie se cuestiona cómo se obtiene la riqueza pero sí ponemos bajo la lupa las intenciones de quienes piden ayudas de supervivencia al Estado. Somos un país que fiscalmente dejamos mucho que desear. Aquí se ha impuesto el discurso neoliberal de bajar impuestos continuamente cuando la mejor manera de contribuir al crecimiento de un país es por la vía impositiva. Parece que somos muy solidarios para donar alimentos, algo que no me gusta mucho en cuanto a organización y planteamiento, destinado a personas en situación de emergencia pero, sin embargo, no lo somos a la hora de declarar impuestos que van a contribuir a mejorar los servicios básicos de toda la población.

¿Por qué ocurre esto en España y no en Alemania, por ejemplo?

No lo sé. Quizá nos falta cultura para romper ese discurso imperante, muy parecido a la beneficencia, y también necesitamos algo más de pedagogía para explicar a la población la importancia que tienen los impuestos para mejorar los servicios básicos y profundizar en la justicia social. Eso de que “tienes que trabajar” o “tienes que merecerlo” me suena muy religioso. Creo que la religión juega un papel muy negativo en todo esto.

Euskadi y Navarra gestionarán el IMV pero varias comunidades autónomas, entre ellas Madrid, han reaccionado negativamente porque lo consideran que es un agravio comparativo. ¿Le parece un privilegio?

Depende de lo que se entienda por privilegio. Creo que es acorde a la trayectoria y al tratamiento que sobre esa materia han tenido el País Vasco y Navarra. El IMV es una norma estatal pero también lo es la Ley de dependencia y la realidad es que, con la gestión delegada en las comunidades autónomas, se ha producido una enorme desigualdad en la forma de gestionar los servicios sociales entre comunidades. Respecto a Madrid, uno de mis grandes temores es cómo responderá la administración cuando entre en funcionamiento el IMV ya que en 2018 y 2019 no gastó todo el presupuesto de partida asignado a la Renta Mínima de Inserción siendo una de las comunidades autónomas con mayores tasas de desigualdad y pobreza.

¿No se fía de esta administración autonómica?

Es que no sé bien cómo reaccionará porque la cuantía de su renta mínima es inferior al IMV. Pero en cualquier caso, su recorrido ha sido cada vez más neoliberal y aunque difundan que dan cobertura a cualquier persona, en la práctica no es así. Es un laberinto burocrático para los solicitantes. En el caso de familias inmigrantes se exigen papeles casi imposibles de conseguir en su país de origen. Hay un libro absolutamente descriptivo de Sara Mesa, titulado Silencio administrativo, donde se explica el enredo burocrático que se construye alrededor de las rentas mínimas cuando en el fondo no te interesa dar respuestas a esas situaciones que dices combatir.

Para una mujer que ha dedicado media vida al progreso del bienestar social en España, ¿qué ha supuesto la aprobación del IMV?

Creo que es muy positivo porque al menos hemos conseguido que haya una prestación de derecho subjetivo que garantiza una base para todos los ciudadanos del Estado. Pero el IMV se me queda corto porque no creo que pueda cumplir ese objetivo repetido de que “nadie se quedará atrás”. Habrá gente que se quedará fuera. Por edades, por requisitos y por consideraciones que matizan la universalidad de la ayuda. Sin embargo, desde mi práctica profesional y conocimiento, y porque soy una defensora de la renta básica universal, considero que es un paso importante aunque habrá que seguir peleando para que funcione lo mejor posible y para que las comunidades autónomas, como por ejemplo la de Madrid, no minimice sus prestaciones y complemente la cuantía del IMV con el fin de acercarse al umbral de pobreza, que hoy está en torno a los 739 euros por persona. Tenemos una gran oportunidad para cumplir con la carta social europea.

Berta Lago Bornstein Dirigió la gestión de rentas mínimas para pobres y medidas de inserción en la Comunidad de Madrid entre 2003 y 2013.

Fuente:

https://ctxt.es/es/20200601/Politica/32458/berta-lago-bornstein-ingreso-minimo-vital-madrid-gorka-castillo.htm

sábado, 20 de junio de 2020

Constancia de la Mora

La forja de una rebelde. Nieta de Antonio Maura y educada en la alta sociedad, Constancia de la Mora (1906-1950) abrazó la causa republicana.
La Vanguardia - 28 de abril 2005



Escrita a los 33 años, su autobiografía constituye un emotivo testimonio de la época

Su vida como mujer separada, con una hija, y decidida a vivir por sí misma en la España de 1931, no fue fácil.
GABRIEL TORTELLA - 27/04/2005

Una clara mañana de marzo de 1931 una joven de la alta sociedad española se apeaba en la estación de Atocha de Madrid del tren que la traía de Málaga; acababa de separarse definitivamente de su marido, el malagueño Manuel Bolín y, a los 25 años, venía dispuesta a "empezar una nueva vida". Entonces se dio cuenta de que "España entera se disponía a hacer algo muy parecido". Éste es uno de los atractivos del libro autobiográfico de Constancia de la Mora Doble esplendor. La vida de esta mujer aristocrática, nacida en 1906, se enlaza estrechamente con la historia de España, y esta autobiografía constituye un documento elocuente sobre la historia de la mujer española en la primera mitad del XX.

Resulta sorprendente lo poco conocidos que este libro y su autora son en España; resulta sorprendente porque, al haber sido la autora protagonista destacada en el esfuerzo republicano durante la Guerra Civil, la segunda mitad del libro es un apasionante diario de la guerra vista por una observadora inteligente y comprometida desde, sucesivamente, Madrid, Alicante, Valencia y Barcelona, ciudades donde la autora vivió durante la contienda, llevada por los avatares del conflicto y por sus diversos cargos y misiones. Pero aún más sorprendente resulta por cuanto el libro es citado por autores anglosajones de la talla y difusión en España de Edward Malefakis, Gabriel Jackson, Burnett Bollotten o Hugh Thomas, y además porque el interés por la historia de la mujer, con especial atención a su papel en la Guerra Civil, ha aumentado tanto en los últimos años. Se añade a todo ello el aspecto autobiográfico, casi novelesco, del libro, cuya primera parte describe con lúcido detalle cómo una niña bien -pero que muy bien- del Madrid de la Restauración se convierte en una rebelde con simpatías republicanas, enfrentada a su familia y su anterior círculo íntimo, y se refugia en la amistad de intelectuales como Zenobia Camprubí y su marido, el poeta Juan Ramón Jiménez, y acaba divorciándose y casándose por lo civil con un oficial de aviación republicano.

El que el libro sea más conocido en el mundo anglosajón se debe sin duda a que su primera edición (1939) fue en lengua inglesa. Educada en Inglaterra, Constancia de la Mora hablaba y escribía el inglés casi como el español, y el libro fue compuesto como una llamada de auxilio además de como un testimonio. Es evidente que al redactarlo en Estados Unidos en el verano de 1939 su autora todavía albergaba alguna esperanza de que cambiaran las tornas en España, quizá por el inicio de la Segunda Guerra Mundial. Cuando sus esperanzas se frustraron, Constancia de la Mora se estableció en México, donde escribió la versión española que se publicó en el país azteca. Luego se hicieron traducciones al francés, alemán e italiano, pero ya puede suponerse que apenas entraron en la España de Franco. En 1977 se hizo una edición española (Crítica), que se agotó pronto, pero que no se reeditó. Iba siendo ya hora de que este impresionante documento llegara en condiciones normales al lector español.

Constancia de la Mora Maura era hija primogénita de un rico ingeniero miembro de una conocida familia de financieros y empresarios. Su madre era hija de Antonio Maura, el gran político liberal-conservador de origen mallorquín, cuya figura presidía lejanamente la vida de toda la familia. Educada en la opulencia, se fue encontrando cada vez más incómoda por la mediocridad intelectual de su medio, por la rigidez y frialdad de las relaciones familiares, por la injusticia social que percibía en su alrededor y por el destino de señora de sociedad que su condición le imponía.Un matrimonio desacertado, al que se sintió empujada por la presión social, con un miembro de una familia de la buena sociedad malagueña (su ex cuñado, Luis Bolín, corresponsal en Londres, fue quien fletó el famoso Dragon Rapide que llevó a Franco de Canarias a Marruecos el 18 de julio de 1936), la colocó en la tesitura que he descrito en el primer párrafo de este artículo. Su vida como mujer separada, con una hija, y decidida a vivir por sí misma en aquella España de 1931, no fue fácil. Sentía una cierta afinidad con su tío Miguel Maura, que pasó de la cárcel al ministerio de la Gobernación con el primer gabinete republicano, pero eran de diferente generación y las preferencias políticas de ella mucho más radicales. Conoció a Ignacio Hidalgo de Cisneros y López de Montenegro, oficial aviador amigo de Ramón Franco y sublevado como él en Cuatro Vientos, perseguido por la Monarquía, exiliado y repatriado con la República. Se enamoraron y esperaron impacientemente a que se aprobara la Ley del Divorcio; fue sin duda una de las primeras mujeres en acogerse a ella en la historia de España.

Hidalgo de Cisneros, amigo también de Indalecio Prieto, era aristócrata como ella, aunque no rico, y con simpatías comunistas. Él tuvo cargos importantes en el ministerio de la Guerra durante la República; ella trabajaba en una boutique y hacía traducciones. Durante la guerra él fue el jefe de la aviación republicana y ella trabajó en la oficina de prensa del ministerio de Asuntos Exteriores, además de dirigir escuelas para huérfanos en Alicante. La última ciudad española en que vivió por varios meses fue Barcelona; su narración de la batalla del Ebro y de los feroces bombardeos de la ciudad que siguieron, en preparación del asalto final, son vívidos y estremecedores. También es impresionante su descripción del valor con que la población civil soportaba las bombas, hasta el punto de que cita un informe militar que concluía que "la guerra española ha demostrado que las poblaciones civiles no pueden desmoralizarse con la aviación", y aducía el caso de Barcelona como prueba. La retirada final hacia los Pirineos, los últimos días en Puigcerdà, las mezquindades de algunos políticos en esas horas desesperadas, son de una lectura apasionante aunque deprimente. Constancia e Ignacio se separaron al cruzar los Pirineos, probablemente para no verse más. Él volvía a España para contribuir a la defensa del último reducto republicano, el triángulo Madrid-Alicante-Valencia. Ella partió hacia Estados Unidos para recabar ayuda a la ya desahuciada causa de la República. En América trabó amistad con Eleanor Roosevelt y con Ernest Hemingway (a éste le conoció muy posiblemente en España, pero no le menciona), que la apreciaron y la ayudaron, pero ya era tarde. A los 33 años escribió esta impresionante autobiografía y a los 44 moría accidentalmente en Guatemala dejando atrás una verdadera y heroica odisea.

Alternativa al franquismo
Constancia de la Mora no nos dice claramente cuando se hizo comunista. Habla maravillas de la Unión Soviética, y allí envió a su hija en los años de la guerra. Su primo Jorge Semprún, que escribe el prólogo, le reprocha con cariño "la ceguera habitual del militante comunista". Esto resulta claro 75 años más tarde; leyendo a Constancia se comprende su elección. Uno de los temas del último tercio del libro es el de la traición de las democracias occidentales a la República, que abandonaron a la invasión de las tropas y armamento italianos y alemanes. En aquel momento, como ella reitera, la Unión Soviética fue el único país que apoyó militar y económicamente a la República; lo que ella no advirtió fue cómo Stalin retiró a las Brigadas Internacionales cuando preparaba ya el pacto Ribbentrop-Molotov, cómo se quedó con el oro del Banco de España que los republicanos cándidamente le confiaron, y cómo envió a menudo material de saldo y lo cobró, nunca mejor dicho, a precio de oro. Tantos españoles, entonces y más tarde, abrazaron la causa comunista como única alternativa seria al franquismo que su apasionamiento en medio de la contienda resulta más que comprensible.

La vida de Constancia de la Mora, como la de Aquiles, fue corta y gloriosa, aunque la inmensa mayoría en España la haya desconocido hasta ahora. Ya lo decían los romanos: nemo propheta in patria. Pero su vida y su libro, tan de principios del siglo XX, tienen una gran actualidad hoy. Realmente sí tuvo mucho de profetisa, de precursora; tuvo tanto, que seguir ignorándola sería un desdoro para los españoles de hoy.