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lunes, 22 de diciembre de 2014

Jeffrey Sachs: La lección de la Primera Guerra Mundial que la economía global olvida.

Jeffrey Sachs es uno de los más destacados economistas del mundo. Entre los muchos gobiernos a los que ha asesorado durante tres décadas están Bolivia, Polonia y Rusia al final de la Guerra Fría. En esta reflexión escrita para la BBC, señala que la forma en la que se comportan los vencedores al final de un conflicto determina lo que ocurrirá en el futuro.

Este ha sido un año de grandes aniversarios geopolíticos. Hace 100 años empezó la Primera Guerra Mundial, un evento que, más que ningún otro, le dio forma a la historia durante el siglo pasado. Hace 25 años cayó el Muro de Berlín, el primer capítulo de la desaparición del Imperio soviético y el fin de la Guerra Fría. Y sin embargo, dolorosamente observamos algo que va más lejos que el mero recuerdo.

Como dijo William Faulkner, "el pasado nunca muere. Ni siquiera es pasado".

La Primera Guerra Mundial y el Muro siguen moldeando nuestras realidades más urgentes en la actualidad. Las guerras en Siria e Irak son un legado del cierre de la Gran Guerra, y los dramáticos eventos en Ucrania se desarrollan bajo la larga sombra de 1989.

1914 y 1989 son momentos bisagra, puntos decisivos en la historia que cambian el rumbo de los eventos subsecuentes. La manera en la que se comportan tanto las naciones grandes como las pequeñas en esos momentos determina el curso futuro de la guerra y la paz.

Yo participé directa y personalmente en los eventos de 1989, y vi cómo se desarrollaba esa lección: positivamente en el caso de Polonia y negativamente en el de Rusia. Les puedo decir que mientras me desempeñaba como asesor económico durante 1989-92, constantemente recordaba preocupado lo ocurrido en 1914. Y hoy en día sigo con la misma preocupación.

En 1919, al final de la Primera Guerra Mundial, el gran economista británico John Maynard Keynes nos enseñó una lección invaluable y perdurable sobre esos momentos bisagra: cómo las decisiones de los vencedores impactan las economías de los vencidos, y cómo los pasos falsos de los poderosos pueden fijar el rumbo de las guerras futuras.

Con una visión astuta, clarividencia y dotes literarias, "Las consecuencias económicas de la paz" de Keynes (1919) predijo que el cinismo y miopía de la base del Tratado de Versalles, especialmente la imposición de reparaciones de guerra punitivas para Alemania, y la falta de soluciones para las crisis financieras de los países deudores, condenaría a las economías europeas a crisis continuas que de hecho incitarían el surgimiento de otro tirano vengativo en la próxima generación.

El apasionado llamado de Keynes es uno de esos admirables estallidos geniales que retumba por generaciones. Ese libro y sus lecciones se convirtieron en una guía formativa para mí durante mi carrera como asesor y analista económico.

De la angustia de Bolivia a la de Polonia
Como un economista recientemente formado hace unos 30 años, de repente me vi a cargo de asistir a un pequeño y casi olvidado país: Bolivia, en la búsqueda de una salida a su rotundo desastre económico. Los escritos de Keynes me ayudaron a entender que la crisis financiera de Bolivia debía considerarse en términos sociales y políticos y que el acreedor de ese país, Estados Unidos, compartía la responsabilidad de resolver la angustia económica boliviana.

Mi experiencia en Bolivia en 1985-86 me llevó a Polonia, en la primavera de 1989, invitado por el último gobierno comunista y el sindicato Solidaridad, que era su fuerte opositor. Polonia, como Bolivia, estaba en la bancarrota financieramente. Y Europa en 1989, como Europa en 1919, estaba en un gran momento bisagra de la historia.

Mijaíl Gorvachov estaba en el poder en la Unión Soviética, y estaba dispuesto a ver a Europa reconciliada en paz y democracia. Ese gran hombre deseaba llevar a su propio país hacia un nuevo orden democrático. Polonia fue la primera nación de la región en tomar el camino de la democracia en ese año trascendental. Pronto me convertí en el principal asesor económico foráneo del nuevo gobierno polaco. Una vez más, basándome en Keynes, abogué por el tipo de asistencia internacional que me parecía vital para que Polonia pudiera hacer una transición pacífica y exitosa a un gobierno democrático postcomunista.

Específicamente, apelé a la Casa Blanca, 10 Downing Street, el Palacio del Elíseo y la Cancillería alemana para que proveyeran una asistencia progresista, como un elemento clave en la construcción de una Europa nueva, unida y democrática.

Fueron días embriagadores para mí como asesor económico. Había momentos en los que parecía que mis deseos eran órdenes para la Casa Blanca. Una mañana, en septiembre de 1989, recurrí al gobierno estadounidense para que le diera a Polonia US$1.000 millones para estabilizar la moneda. En la tarde del mismo día, la Casa Blanca confirmó la entrega del dinero. No es chiste: ¡ocho horas entre la solicitud y el resultado!

Convencer a la Casa Blanca de que apoyara una cancelación de las deudas polacas tomó un poco más de tiempo, con negociaciones de alto nivel que se extendieron por cerca de un año, pero al final en eso también tuve éxito.

El resto, como dicen, es historia. Polonia introdujo fuertes medidas de reforma, basadas en parte en las recomendaciones que yo había ayudado a diseñar. EE.UU. y Europa apoyaron esas medidas con ayuda generosa y oportuna. La economía polaca fue restructurada y empezó a crecer, y 15 años después, se convirtió en un miembro de pleno derecho de la Unión Europea.
Ojalá pudiera suspender aquí mi rememoración, con este final feliz.

Pero la historia del final de la Guerra Fría no comprende sólo aciertos de Occidente -como en Polonia- sino también un tremendo desacierto: Rusia.

Para Moscú, Versalles
Mientras que la generosidad estadounidense y europea prevaleció en Polonia, la actitud en el caso de la Rusia postsoviética recuerda mucho más los errores garrafales del Tratado de Versalles. Y hasta el día de hoy estamos pagando las consecuencias.

En 1990 y 1991, el gobierno de Gorvachov, habiendo visto los resultados positivos en Polonia, me solicitó que lo asesorara respecto a las reformas económicas. En esa época Rusia enfrentaba el mismo tipo de calamidad financiera que había hundido a Bolivia a mediados de los 80 y a Polonia en 1989.

En la primavera de 1991, trabajé con colegas de la Universidad de Harvard y MIT para ayudarle a Gorvachov a obtener apoyo financiero de Occidente, para poder reformar la política y transformar la economía. No obstante, nuestros esfuerzos fracasaron completamente.

Ese verano, Gorvachov regresó a Moscú de la cumbre del G7 con las manos vacías. A su retorno, una conspiración intentó derrocarlo en el notorio Golpe de Agosto, del que nunca se recuperó políticamente. Cuando Boris Yeltsin ascendió, y la disolución de la Unión Soviética estaba a puertas, su equipo económico nuevamente me pidió asistencia, tanto para lidiar con los desafíos técnicos de la estabilización como en la tarea de obtener la vital ayuda financiera de EE.UU. y Europa.

Yo le vaticiné al presidente Yeltsin y a su equipo que esa ayuda llegaría pronto. Después de todo, la asistencia de emergencia para Polonia se organizó en cuestión de horas o semanas. Estaba seguro de que lo mismo sucedería en el caso de la nueva Rusia independiente y democrática. Sin embargo, perplejo y horrorizado, me fui dando cuenta de que no sería igual.

Mientras que a Polonia le habían perdonado las deudas, a Rusia le exigieron que las siguiera pagando.

Mientras que a Polonia le habían concedido asistencia financiera generosa y rápida, Rusia recibió visitas de grupos de estudio del FMI pero nada de fondos.

Yo le supliqué a EE.UU. que hiciera más. Apelé a las lecciones de Polonia, pero todo fue en vano. Washington no cedió.

Al final, la maligna crisis financiera rusa aplastó los intentos de reformar y regularizar. El gobierno de Yegor Gaidar cayó en desgracia. Yo renuncié tras dos años duros de tratar de ayudar y lograr muy poco. Unos años más tarde, Vladimir Putin reemplazó a Yeltsin y tomó el timón de la nación rusa.

El botín de los vencedores
A lo largo de esa debacle, los expertos estadounidenses culparon a los reformadores en Rusia en vez de a la cruel negligencia de EE.UU. y Europa.

Me tomó 20 años entender bien qué pasó después de 1991. ¿Por qué EE.UU., que se había comportado con tanta sabiduría y visión en Polonia, actuó con una negligencia tan cruel en el caso de Rusia? Paso a paso, recuerdo tras recuerdo, la verdadera historia salió a la luz.

Occidente había ayudado a Polonia financiera y diplomáticamente porque Polonia se iba a convertir en el baluarte oriental de una OTAN en expansión. Polonia era Occidente, por lo tanto, era digna de ayuda. Rusia, en contraste, era vista por los líderes estadounidenses más o menos de la misma forma en la que Lloyd George y Clemenceau habían considerado a Alemania en Versalles: como un enemigo vencido que merecía ser aplastado, no auxiliado.

En su libro recientemente publicado, el general Wesley Clark, antiguo comandante de la OTAN, relata una conversación que tuvo en 1991 con Paul Wolfowitz, quien era el director de política del Pentágono.

Wolfowitz le dijo a Clark que EE.UU. sabía que podía actuar con impunidad en Medio Oriente, y ostensiblemente en otras regiones también, sin la amenaza de la interferencia rusa.

En resumen, EE.UU. podía comportarse como un vencedor y un matón, cosechando los frutos de la victoria en la Guerra Fría de ser necesario a través de guerras. Washington estaría a la cabeza y Moscú sería incapaz de impedirlo.

En un reciente discurso pronunciado en Moscú, Putin describió la conducta de EE.UU. en casi los mismos términos que Wolfowitz.

"La Guerra Fría llegó a su fin", dijo Putin, "pero no terminó con la firma de un tratado de paz con acuerdos claros y transparentes sobre el respeto de las reglas existentes o la creación de nuevas reglas y estándares. Eso creó la impresión de que los llamados 'vencedores' de la Guerra Fría decidieron presionar y moldear al mundo para que satisfaga sus propios intereses y necesidades"... sigue
Fuente: BBC,

http://www.bbc.co.uk/mundo/noticias/2014/12/141218_jeffrey_sachs_problemas_globales_finde_dv

domingo, 16 de noviembre de 2014

Ellacuría vive. La influencia del filósofo y teólogo se mantiene en su obra 25 años tras su asesinato

"Ellacuría debe ser eliminado y no quiero testigos". Fue la orden que dio el coronel René Emilio Ponce al batallón Atlacatl, el más sanguinario del ejército salvadoreño. La orden se cumplió la noche del 16 de noviembre de 1989 en que fueron asesinados con premeditación, nocturnidad y alevosía seis jesuitas y dos colaboradoras, madre e hija, Elba y Celina, esta de 15 años en la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas, de San Salvador (UCA). Entre los asesinados se encontraba el jesuita vasco, nacionalizado salvadoreño, Ignacio Ellacuría, rector de la UCA, discípulo de Zubiri y editor de algunas de sus obras. Era filósofo y teólogo de la liberación, científico social y e impulsor de la teoría crítica de los derechos humanos, cuatro dimensiones que son difíciles de encontrar y de armonizar en una sola persona, pero, en este caso, convivieron no sin conflictos internos y externos, y se desarrollaron con lucidez intelectual y coherencia vital.

"Revertir la historia, subvertirla y lanzarla en otra dirección", "sanar la civilización enferma", "superar la civilización del capital", "evitar un desenlace fatídico y fatal", "bajar a los crucificados de la cruz" (son expresiones suyas) fueron los desafíos a los que quiso responder con la palabra y la escritura, el compromiso político y la vivencia religiosa. Y lo pagó con su vida.

25 años después de su asesinato Ellacuría sigue vivo y activo en sus obras, muchas de ellas publicadas póstumamente. En 1990 y 1991 aparecieron dos de sus libros mayores: Conceptos fundamentales de la teología de la liberación, de la que es editor junto con su compañero Jon Sobrino, entonces la mejor y más completa visión global de dicha corriente teológica latinoamericana, y Filosofía de la realidad histórica, editada por su colaborador Antonio González, cuyo hilo conductor es la filosofía de Zubiri, pero recreada y abierta a otras corrientes como Hegel y Marx, leídos críticamente. Es parte de un proyecto más ambicioso trabajado desde la década los setenta del siglo pasado y que quedó truncado con el asesinato. Posteriormente la UCA publicó sus Escritos Políticos, 3 vols., 1991; Escritos Filosóficos, 3 vols., 1996, 1999, 2001; Escritos Universitarios, 1999; Escritos Teológicos, 4 vols., 2000-2004.

En el cuarto de siglo posterior a su asesinato se han sucedido ininterrumpidamente los estudios, monografías, tesis doctorales, congresos, conferencias, investigaciones, cursos monográficos, círculos de estudio, Cátedras universitarias con su nombre, que demuestran la "autenticidad" de su vida y la creatividad y vigencia de su pensamiento en los diferentes campos del saber y del quehacer humano: política, religión, derechos humanos, universidad, ciencias sociales, filosofía, teología, ética, etc.

Lo que descubrimos con la publicación de sus escritos y los estudios sobre su figura es que Ellacuría tuvo excelentes maestros: Rahner en teología, Zubiri en filosofía, monseñor Romero en espiritualidad y compromiso liberador, de quienes aprendió a pensar y actuar. Pero su discipulado no fue escolar, sino enormemente creativo, ya que, inspirándose en sus maestros, desarrolló un pensamiento propio y él mismo se convirtió en maestro, si por tal entendemos no solo el que da lecciones magistrales en el aula, sino, en expresión de Kant aplicada al profesor de filosofía, el que enseña a pensar. Ellacuría parte del pensamiento de sus maestros, pero no se queda en ellos; avanza, va más allá, los interpreta en el nuevo contexto y, en buena medida, los transforma. Su relación con ellos es, por tanto, dialógica, de colaboración e influencia mutuas. Sus obras así lo acreditan y los estudios sobre él lo confirman.

Teología
Su colega y amigo Jon Sobrino ha escrito páginas de necesaria lectura sobre el "Ellacuría olvidado", en las que recupera tres pensamientos teológicos fundamentales suyos: el pueblo crucificado, el trabajo por una civilización de la pobreza, superadora de la civilización del capital y la historización de Dios en la vida de sus testigos, que Ellacuría acuñó con una aforismo memorable: "Con monseñor Romero Dios pasó por la historia". Ellacuría entiende la teología de la liberación como teología histórica a partir del clamor ante la injusticia, establece una correcta articulación entre teología y ciencias sociales y asume un compromiso por la transformación de la realidad histórica desde los análisis políticos y desde su función como mediador en los conflictos. Son tres aspectos que desarrolla José Sols Lucia. El teólogo austriaco Sebastián Pittl recupera la primera idea destacada por Jon Sobrino y la interpreta teológicamente: la realidad histórica de los pueblos crucificados como lugar hermenéutico y social de la teología. Asimismo hace una lectura de la concepción ellacuriana de la espiritualidad radicada en la historia desde la opción por los empobrecidos

El resultado es una teología posidealista cuyo método no es el trascendental de sus maestros, sino la historización de los conceptos teológicos y el punto de partida, la praxis histórica. La teología de Ellacuría tiene un fuerte componente ético-profético. Aplicándole a ella la consideración lévinasiana de la ética como filosofía primera, bien podría decirse que, para el teólogo hispano-salvadoreño, la ética es la teología primera y el profetismo la manifestación crítico-pública de la ética.

Filosofía
El objeto de su filosofía es la realidad histórica como unidad física, dinámica, procesual y ascendente. De aquí emanan los conceptos y las ideas fundamentales de su pensamiento: historia (materialidad, componente social, componente personal, temporalidad, realidad formal, estructura dinámica), praxis histórica, liberación y unidad de la historia. Su método es la historización de los conceptos filosóficos para liberarlos del idealismo y de la idealización en que suelen incurrir la filosofía y la teoría universalista de los derechos humanos. H. Samour, uno de sus mejores intérpretes y especialistas, reinterpreta al maestro relacionando su pensamiento con la realidad histórica contemporánea, al tiempo que considera la filosofía de la historia como filosofía de la praxis. Recientemente se está desarrollando una nueva línea de investigación del pensamiento filosófico de Ellacuría: la que hace una lectura pluridimensional con las siguientes derivaciones creativas, que enriquecen, recrean y reformulan su filosofía:

a) Su conexión con la dialéctica hegeliano-marxista, que implica analizar la concepción que Ellacuría tiene de la dialéctica, la utilización del método dialéctico en su análisis político e histórico, y la dialéctica entre historia personal -biografía- e historia colectiva -el pueblo salvadoreño-, en otras palabras, el impacto y la capacidad transformadora de su vida y de su muerte en la historia de El Salvador (Ricardo Ribera).

b) Su conexión con la teoría crítica de la primera Escuela de Frankfurt, que integra dialécticamente las diferentes disciplinas dando lugar a un conocimiento emancipador, así como su incidencia en la negatividad de la historia (L. Alvarenga).

c) Su conexión con la filosofía utópica de Bloch en uno de los últimos textos más emblemáticos de Ellacuría: "Utopía y profetismo en América Latina" (Tamayo).

d) Su original teoría del "mal común" como mal histórico, la crítica de la civilización del capital y las diferentes formas de superarla (Hector Samour).

e) La recuperación filosófica del cristianismo liberador (Carlos Molina).

f) La fundamentación moral de la actividad intelectual y la relevancia del lugar de los oprimidos en los diferentes campos y facetas de quehacer teórico (J. M. Romero).

Teoría crítica de los derechos humanos
Ellacuría ha hecho aportaciones relevantes en el terreno de la teoría y de la fundamentación de los derechos humanos. Cabe destacar a este respecto su contribución a la superación del universalismo jurídico abstracto y de una visión desarrollista de los derechos humanos, y a la elaboración de una teoría crítica de los derechos humanos (J. A. Senent, A. Rosillo).

El pensamiento de Ellacuría no es intemporal, sino histórico, y debe ser interpretado no de manera esencialista (aun cuando algunas de sus primeras obras escritas bajo el discipulado escolar y la influencia de Zubiri tuvieron esa orientación), sino históricamente, en diálogo con los nuevos climas culturales. Así leído e interpretado puede abrir nuevos horizonte e iluminar la realidad histórica contemporánea.

MÁS INFORMACIÓN

Conversión de la Iglesia al reino de Dios. Ignacio Ellacuría. Sal Terrae, Santander 1984
Conceptos fundamentales de la teología de la liberación, 2 vols. Ignacio Ellacuría. Trotta, Madrid 1990
Filosofía de la realidad histórica. Ignacio Ellacuría. Trotta, Madrid 1991
El legado de Ignacio Ellacuría. José Sols Lucia. Cuadernos Cristianisme i Justicia, Barcelona 1998
Crítica y liberación. Ellacuría y la realidad histórica. H. Samour. ADG-N LIBROS, Valencia 2013
La realidad histórica del pueblo crucificado como lugar de la teología. Sebastian Pittl. ADG-N LIBROS, 213
Ignacio Ellacuría. Utopía y teoría crítica. J. J Tamayo y L. Alvarenga (dirs.) Tirant lo Blanch, València 2014
La lucha por la justicia. Selección de textos de Ignacio Ellacuría, ed. de J. A. Senent de Frutos, Universidad de Deusto, Bilbao 2013
Fuente: El País, Babelia.
Palabras de Ignacio: "Aquellos que odian la injusticia están obligados a luchar, con cada onza de sus fuerzas. Ellos deben trabajar para un mundo nuevo en que la avaricia y el egoísmo sean finalmente vencidos".

jueves, 23 de octubre de 2014

España, el tercer país con más pobreza laboral de Europa. El 12,3% de las personas con un empleo están por debajo el umbral de la pobreza, una cifra que solo superan Rumanía y Grecia

España lidera dos de los ranking más preocupantes de Europa, uno bien conocido -el de paro- y otro cuya importancia ha ganado peso en los últimos años, el de pobreza laboral.
Los últimos datos disponibles sitúan a nuestro país como el tercero con más trabajadores pobres (un 12,3% de las personas con empleo lo son), solo superado por Rumanía (un 19,5%) y Grecia (un 15,1%), según recoge el último informe de la Fundación Primero de Mayo, vinculada al sindicato CCOO. Por el contrario, Finlandia, República Checa, Países Bajos y Bégica apenas alcanzan un 5% de pobreza laboral.

Más allá del dato general, el informe señala varias circunstancias que agravan la exclusión social de las personas con empleo. El autoempleo es, por ejemplo, un factor que aumenta la vulnerabilidad: el riesgo de pobreza entre autónomos es mayor que entre asalariados. Si la tasa de pobreza entre las personas ocupadas es del 12,3%, entre los trabajadores por cuenta propia llega al 35,5%. Solo Rumanía, con un 54%, supera a España en número de autónomos pobres.

La temporalidad y los contratos a tiempo parcial son otros dos factores que condicionan la pobreza laboral. El 16,2% de las personas con contrato temporal están bajo el umbral de la exclusión, una cifra que se reduce al 5,4% en el caso de las que están contratadas de forma indefinida. "Es una tendencia similar, aunque más acusada, de lo sucedido en el conjunto de Europa, donde las personas con contrato temporal registran una tasa de pobreza del 14% y aquellas que tienen un contrato indefinido muestran una tasa del 5,5%", dice el informe.

Tal es la tendencia, que las previsiones para el año 2013 subrayan que la pobreza entre los trabajadores fijos se reducirá "ligeramente" mientras que aumentará entre los temporales. En el caso de los contratos parciales, el riesgo de pobreza llega al 19%, una cifra nueve puntos mayor que para las personas que trabajan a tiempo completo.

Bajos salarios
"Las diversas estadísticas que registran la estructura de los salarios en España muestran que existe un proceso de empobrecimiento de la población asalariada en España, vinculado al aumento de los bajos salarios", afirma también el documento. Ha aumentado, por ejemplo, el porcentaje de población que cobra el salario mínimo (645 euros al mes), según el INE: si en 2010 era el 10,3% de la población asalariada, dos años después representaba ya el 12,3%.

Otras estadísticas muestran datos aún más elevados. Es el caso de la estadística de la Agencia Tributaria, que señala que el 33% de las personas asalariadas en España (5,6 millones de personas) cobra un sueldo igual o inferior al salario mínimo. En cualquier caso, el informe de la Fundación subraya que en los últimos años ha crecido el número de trabajadores que tiene salarios más bajos, mientras que aquellos con sueldos más altos "son menos y sus salarios crecen mucho más que el resto".

A más formación, menos pobreza
La formación es otra de las claves que inciden en la probabilidad de que un trabajador caiga en la pobreza. Las personas ocupadas que no superaron la primera etapa de la educación secundaria tienen cinco veces más probabilidades que las que alcanzaron los estudios universitarios. "Si se relaciona la elevada tasa de abandono escolar con la mayor incidencia de la pobreza en las personas con menor formación se puede señalar que la peor situación de España en la comparación internacional está lejos de solucionarse y que perdurará en el tiempo", apunta el informe.

La existencia de personas dependientes en el hogar condiciona también la pobreza laboral. Los ocupados que viven en hogares donde hay menores dependientes tienen una tasa de pobreza que duplica a la de aquellos que están en hogares donde no existe esta circunstancia.

Por otro lado, las familias donde una mujer trabaja de forma remunerada presentan menos tasas de pobreza. De hecho, el informe resalta que aunque las mujeres están más afectadas por la parcialidad, la temporalidad o los bajos salarios, tienden a presentar menores tasas de riesgo de pobreza que los hombres en su misma situación.
Fuente: El Pais,

miércoles, 6 de agosto de 2014

Justicia e igualdad. Noticias de prensa del mismo día. El que tiene dinero no va a la cárcel; ¿es eso justo? ¿La cárcel es sólo para pobres? ¿Quiénes hacen las leyes y para quiénes las hacen?

El dueño de Gowex evita la prisión al presentar la fianza de 600.000 euros
La esposa de Jenaro García hace una transferencia desde una cuenta de una sociedad de Luxemburgo con tres millones
Noticia de El País 5 de agosto de 2014

Otra noticia.
Se abre un nuevo escándalo en el entorno de la F1 con los sobornos que Bernie Ecclestone habría realizado a un banquero alemán. El antiguo directivo del banco público alemán BayernLB Gerhard Gribkowsky ha sido condenado hoy a ocho años y seis meses de cárcel por dejarse sobornar por el jefe de la Fórmula 1, Bernie Ecclestone, con un total de 44 millones de euros. La Audiencia de Múnich, al sur de Alemania, declaró hoy culpable de cohecho, desfalco y fraude fiscal a Gribkowsky, que hace una semana confesó ampliamente ante el tribunal haber recibido la citada cantidad como soborno de parte de Ecclestone y no haberla declarado al fisco. Según el tribunal, Gribkowsky recibió en 2006 el encargo del instituto BayernLB, a cuyo consejo de administración pertenecía, de vender sus participaciones en el negocio de la F1, operación en la que trabajó estrechamente con Ecclestone, que quería librarse a toda costa del socio germano.

Ecclestone, libre por 74 millones.
Evita 10 años de cárcel. (Diario Hoy, 5 de agosto de 2014 pág., 44) Bernie Ecclestone, jefe de la Fórmula 1, evitará un juicio por soborno y corrupción, con su correspondiente condena de 10 años de cárcel, mediante el pago de 74 millones de euros. Así lo acordaron abogados y fiscales el martes pasado.

martes, 13 de mayo de 2014

Los tribunales frenan a Competencia. La Audiencia Nacional anula parcial o totalmente una decena de resoluciones en 2014. La nueva CNMC cambia de estrategia y reduce drásticamente las multas

Papel mojado en el Jerez y el asfalto

El vino de Jerez se ha librado de ser multado. La CNC sancionó en 2011 a la Federación de Bodegas del Marco de Jerez (Fedejerez) con 300.000 euros por pactar precios de la uva y del mosto de entre 1991 y 2009, junto con otras asociaciones de agricultores y, por primera vez, se consideró responsable de la mala práctica a una administración pública: la Junta de Andalucía. El motivo es que los pactos habían tenido lugar en el Marco de Jerez y en el ámbito de acuerdos sobre Planes de Reconversión sectorial o Planes Estratégicos para el Marco. Esta circunstancia permite a la Audiencia inferir que las empresas infractoras podían tener dudas de que sus prácticas no fuera correctas.

La “reconversión del sector, intervención de dos Administraciones Públicas en el proceso, y actuación clara y directa, hemos de concluir que la recurrente no tuvo la conciencia de que el comportamiento realizado constituía una conducta contraria a la libre competencia, sino, bien al contrario, su comportamiento revela la conciencia de estar actuando dentro de la legalidad; lo que implica ausencia de elemento subjetivo del injusto”, señala el fallo con fecha del pasado febrero. En esta línea, “la conducta enjuiciada es contraria a la libre competencia, pero la sanción impuesta es contraria a Derecho por faltar el elemento subjetivo de la infracción”, concluye.

El caso del llamado cartel del asfalto, que supuso más de 16 millones en multa a una docena de empresas, también se ha llevado un revés judicial. Competencia determinó en noviembre de 2011 que las compañías habían estado “ejecutado el reparto del mercado” en las provincias de León, Burgos y en la Comunidad Autónoma del País Vasco”. Ahora, la Audiencia estima en parte del recurso de Orsa, sancionada con dos millones. La Sala no ve “elementos fácticos para determinar cuál fue el volumen de negocio de la empresa actora en el territorio del cartel del que es responsable”.
Fuente, El País.

martes, 22 de abril de 2014

El viaje de la vida

Ante el reto de vivir, dice Ulises, hay cinco cosas que no hay que empeñarse en variar:

1. Todo cambia y todo acaba.
2. Las cosas no siempre suceden como las habíamos planeado.
3. La vida no siempre es justa.
4. El dolor forma parte de la vida.
5. La gente no es siempre amorosa y leal.

Tenemos necesidades como personas, y la felicidad se refiere a la satisfacción de esas necesidades.
El camino de la aceptación, de reconocer que lo que es, lo es, acaba siendo más beneficioso ante las falsas ilusiones.
Ulises fue astuto al jugar con el engaño, por eso ideó el caballo de Troya. Les dio a sus oponentes la ilusión que necesitaban ver, sucumbiendo al final por su propia ceguera. Una cosa es tener ilusión y la otra vivir de ilusiones.

Entre las fuentes más importantes de la felicidad están:
-una sensación de seguridad;
-un buen pronóstico;
-autonomía o control sobre nuestras vidas;
-buenas relaciones;
-y la práctica de una actividad especializada y significativa.

Si no está satisfecho, hay una buena probabilidad de que sea por falta de algo en esta lista. (NYT)

Fuente: Leer más en El País Semanal.
Los divorciados

Cuidar las relaciones

lunes, 31 de marzo de 2014

Las verdades de José Luis Sampedro



La conciencia de la agonía fue plena en el escritor José Luis Sampedro (Barcelona, 1917-Madrid, 2013). Murió a los 96 años sabiendo y aceptando que aquello se acababa. “La muerte me lleva de la mano, pero se está portando bien porque me deja pensar”, le dijo a una amiga. Con su envidiable lucidez y calma, la frase pervive ahora grabada en el lomo azul de Sala de espera (Plaza y Janés), libro póstumo del escritor que se publica esta semana como homenaje al primer año de su ausencia.

Sampedro falleció un 8 de abril dejando multitud de anotaciones y textos inéditos, escribió hasta el final. Dos de sus últimos proyectos, Los Ríos y Sala de espera, ven ahora la luz por decisión de su compañera y legataria, Olga Lucas, quien explica que dejará “aparcadas” las obras inconclusas iniciadas en “un pasado remoto” pero se ocupará de los inéditos del final de su vida. “Es decir de aquellos de los que tengo seguridad y conocimiento directo acerca de sus intenciones”, afirma en el prólogo del libro.

... “La sublevación de los militares españoles en 1936 hundió para siempre el mundo anterior. Desde entonces soy un inmigrante en el tiempo (no solo hay migraciones espaciales), sin esperanza de retornar a mi origen —la España de 1935— porque desapareció como la Atlántida”...

Cree en la palabra, pero advierte de sus peligros: del naufragio del sentido crítico, de la cobardía de los que no quieren significarse. “No solo hay que reivindicar siempre el derecho a la palabra, como máxima expresión de nuestra humanidad. También hay que cumplir el deber de usarla en pro de la dignidad propia o ajena. Pues, como proclamó magistralmente Martin Luther King, hay una conducta más escandalosa que la de los malvados y es el silencio de los hombres buenos que callan y miran para otro lado sin protestar de las maldades”...
Fuente El País.
Árbol de más de 2000 años de USA, que no había sido retratado completo.

viernes, 21 de marzo de 2014

Juan José Millás entrevista a José Mujica, presidente de Uruguay

El mandatario de un país que sorprende al mundo nos abre las puertas de su humilde casa, su despacho y su residencia
Un viaje alucinante para retratar a un líder extraordinario

"La distancia de los políticos con la gente está creando mucho descrédito, y la peor enfermedad es la de los ciudadanos que no creen en su Gobierno (...) En los países grandes hay núcleos económicos que pesan sobre los Gobiernos con un poder del diablo (...) Solo me arrepiento de los amores perdidos", conversa José Mujica con Juan José Millás, que junto al fotógrafo Jordi Socías recorrió Uruguay y compartió varias jornadas con el presidente de este pequeño país abrazado entre Brasil y Argentina.

El video que aquí presentamos es tan solo una pequeña parte de un viaje maravilloso por un territorio que fue elegido por The Economist como país en 2013 por su "receta para la felicidad humana". Su atípico presidente, el mandatario que sorprende al mundo con sus reformas, recibe a El País Semanal en su humilde casa y en su despacho. Un periplo que traza el retrato de un hombre y de una nación, un reportaje que se publica este próximo domingo 23 de marzo.
Ver la fuente en El País y el vídeo aquí.
El reportaje en El País Semanal.

jueves, 13 de marzo de 2014

La crisis perpetua

Luis García Montero

"Las penas son de nosotros, las ganancias son ajenas".

La salida de la crisis no es una salida real, sino la santificación de un tiempo nuevo que podemos definir como crisis perpetua. Las meditaciones de Kant sobre la paz necesitaron debatir unas circunstancias capaces de asegurar la concordia definitiva. No bastaba con la posibilidad de una tregua, había que conseguir un futuro sin herencias bélicas. Paz perpetua… Con la misma ambición, parece que la política española, medida a medida, se ha empeñado en instaurar una crisis perpetua. Lo que se justificó como consecuencia de una coyuntura difícil, se define ya como la costumbre del futuro. El porvenir se confunde con una realidad precaria.

El poder es, antes que nada, un profesor de filología. Le saca punta a las palabras, analiza la semántica de sus sílabas, la coloca, la desordena, la recoloca. Pidió sacrificios en nombre de la palabra crisis porque significaba escasez, carestía, situación dificultosa o complicada. Pero ocultó en lo que pudo el verdadero sentido de sus letras: mutación importante, proceso de cambio físico, histórico o espiritual. De la escasez a la mutación, la crisis ha sido un tiempo de acercamiento a la precariedad definitiva. Ahora salimos de la crisis, porque el proceso de mutación ha concluido y la desigualdad más insolente está fundada.

Cada vez que el presidente de gobierno, o la ministra, o el secretario de Estado, o el experto de las tertulias, hablan de buenos síntomas se produce una redefinición de la verdad. Los puestos de trabajo creados que tanto se aplauden son en realidad una conquista no sólo escasa, sino también muy triste. Si miramos con los ojos de un pasado inmediato, los ojos que buscaban unas condiciones laborales dignas, el panorama es aterrador.

Bajo el gobierno del PP, en España se han hecho 34 reformas que afectan al Estatuto de los Trabajadores, el empleo y las pensiones. En España hay 23 millones de personas en riesgo de pobreza y exclusión social. En España se ha impuesto la desigualdad más alta de la Unión Europea hasta el punto de que una pequeña población rica tiene un ingreso 7 veces mayor que una inmensa población pobre. En España no basta con encontrar trabajo para salir de los índices de pobreza, porque los salarios son tan bajos que no sirven para cubrir unas necesidades mínimas. En España baja de manera notable el empleo a tiempo completo y suben el contrato basura y las condiciones miserables de los autónomos. Y en España decir estas cosas empieza a ser propio de los aguafiestas… Mientras todo el mundo busca la luz, parece que uno no quiere reconocer la salida de la crisis. Molesta la conciencia de que no hay salida de la dificultad, sino mutación en un estado de dificultad perpetua.

El poderoso Filólogo quiere redefinir, imponer, decretar la palabra alegría. La dignidad es un valor que sólo se pueden permitir los afortunados. Poner un ejemplo futbolístico nunca está de más en España, porque es el único fenómeno social que se resiste a la desvertebración. Carles Puyol, el admirable central barcelonista, se ha despedido de la afición y de su club esta semana. Se retira de forma muy digna. Las lesiones y la edad han castigado su rendimiento. En vez de amarrarse al banquillo y a la ficha, renuncia a dos años de contrato. Es sin duda una postura honesta. ¿Pero quién puede permitirse la honestidad? ¿Hubiera podido anunciar Puyol su despedida estando en unas condiciones adversas? La dignidad personal es inseparable de la situación social de los individuos.

En España no están las cosas para renunciar a un contrato, aunque sea basura, aunque se rebaje el poder adquisitivo, aunque las condiciones laborales conviertan al trabajador en una cosa de usar y tirar. Se juntan, además, el hambre con las ganas de comer. 6 millones de parado definen bien una realidad en la que ni siquiera el dinero resulta lo más importante. Llegar a fin de mes es decisivo, por supuesto; pero hace más daño el estado de ánimo que la situación económica. Sentirnos inútiles, una carga para los demás, unos excluidos, nos degrada el carácter, nos deja huecos por dentro. Sólo en un país de muertos vivientes resulta posible que un presidente de gobierno se atreva a borrar la experiencia de la gente para vender el triunfo de la precarización como el final de la crisis.

Y la gente está tan necesitada, tan angustiada, que corren peligro las voces empeñadas en recordar la dignidad. No hablo de luchadores, sino de rutina común. Hace pocos años existía una sociedad en la que se tomaba en serio el derecho de los trabajadores y el salario como factor indispensable en el reparto de la democracia y de la riqueza. Ahora ese recuerdo es una molestia para disfrutar del “justo y necesario final de la crisis”. Y otra aclaración: no estoy hablando de ningún paraíso pasado, sino del infierno presente, del infierno que le dejamos a nuestros hijos.

Peor que la crisis misma es esta salida de la crisis.
Fuente: Artículo publicado en Público.es

miércoles, 12 de febrero de 2014

Profesores de la UPV lanzan el manifiesto "Por una economía al servicio de las personas"

Los docentes plantean que las alternativas a la salida de la crisis no deben ser excluyentes y deben sustentarse en la equidad, la transparencia, la democracia y la cohesión social.

El próximo 3 de marzo se celebrará en Bilbao el Global Forum Spain, un foro económico internacional organizado por el ministerio de Economía y el Club de Exportadores e Inversores Españoles  en el que se hablará de crecimiento y competitividad. En la cita participarán importantes personalidades de la economía y de la política. Ante la celebración de este foro, un grupo de profesores de Economía de la Universidad del País Vasco (UPV) ha lanzado un manifiesto cuyo título ya es muy significativo: Por una economía al servicio de las personas.
"Creemos que vivimos circunstancias excepcionales en las que, como ha sucedido en otras ocasiones, también excepcionales, es oportuno que desde nuestro ámbito nos pronunciemos en medio de tanto desconcierto e incertidumbre", señalan los impulsores del manifiesto para justificar la publicación del documento. Y añaden: "Somos plenamente conscientes del pluralismo y del debate de ideas existente en el ámbito económico, tanto dentro de la academia como fuera de ella. Por consiguiente, hemos tratado de evitar planteamientos excluyentes, centrando la atención en dos ideas fundamentales: la necesidad de huir de los dogmas a la hora de buscar alternativas; y la necesidad de que estas se sustenten en la búsqueda de la equidad, la transparencia, la democracia y la cohesiónsocial".
En cuanto al manifiesto en sí, los profesores de la UPV sostienen que hay que apostar por la equidad y que "la competitividad no puede ser un fin en sí misma". Defienden una Europa "equilibrada social y territorialmente", más democracia y transparente. Afirman que las finanzas públicas "no son el origen de la crisis"  y que ésta es sobre todo una crisis social.
Sus impulsores quieren dar la máxima visibilidad al manifiesto, sobre todo del mundo académico, y por eso reclaman la adhesión de sus colegas docentes. Muchos ya lo han hecho, entre ellos, los profesores vinculados a la asociación EconoNuestra, cuyo blog está alojado en Público.
Si quieres apoyar el manifiesto Por una economía al servicio de las personas, puedes firmar aquí.
Fuente: Público

jueves, 6 de febrero de 2014

Irlanda pone cara a la crisis con un histórico juicio a tres exbanqueros

El ex director ejecutivo y otros dos altos directivos del Anglo Irish Bank, cuyo colapso llevó al Gobierno a invertir 30.000 millones de euros en su rescate, están acusados de fraude y de otros delitos relacionados con la situación económica que atraviesa el país

Entre fuertes medidas de seguridad y enorme expectación, tres altos directivos del Anglo Irish Bank acusados de fraude comparecieron este miércoles ante un tribunal de Dublín, al comienzo de un juicio histórico que pone cara a los presuntos culpables de la crisis.

El ex director ejecutivo Sean FitzPatrick y otros dos altos directivos del Anglo Irish Bank son los primeros banqueros de renombre que se sientan ante un tribunal de lo penal en Irlanda por delitos relacionados con la crisis que atraviesa este país desde 2008, en gran parte originada por la burbuja inmobiliaria. El colapso de ese banco llevó al Gobierno a nacionalizarlo en 2009 y a invertir más de 30.000 millones de euros en su rescate. Un año después, ahogado por la deuda, Irlanda pidió un rescate a la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional por 85.000 millones de euros, que abandonó con éxito en diciembre pasado.

FitzPatrick, el ex director de finanzas William McAteer y el ex director general de préstamos Patrick Whelan se han declarado inocentes de los 16 cargos presentados contra cada uno por la "prestación ilegal de asistencia financiera", por un total de 451 millones de euros, a "16 individuos" en julio de 2008 con el fin de revalorizar de manera fraudulenta las acciones del Anglo. Ese delito está penado en Irlanda con un máximo de cinco años de cárcel y una multa que se situaría en un mínimo de 3.100 euros.

Vestidos con traje y corbata a excepción de Whelan, que optó por una camisa desabrochada, los tres volvieron a declararse inocentes este miércoles al inicio de un proceso que el abogado del Estado, Paul O'Higgins, calificó de único en la historia de Irlanda por la composición del jurado. El juicio ha generado tanto interés que las autoridades han habilitado otra sala en el complejo judicial de la capital irlandesa para que se pueda seguir el proceso a través de pantallas de televisión. Unos 800 testigos, entre ellos 42 policías, y más de 24 millones de documentos serán presentados a un jurado compuesto por doce personas, al que se añade, por primera vez, a otras tres para que el proceso no se venga abajo en caso de que enfermen más de dos miembros, en un juicio que durará entre cuatro y seis meses.

En su presentación, O'Higgins indicó al jurado que se tratará de esclarecer qué pasó con las "acciones o parte de las acciones" del Anglo en 2008 y enumeró ciertos aspectos contenidos en la Ley de Empresas irlandesa (2012) que son relevantes para la instrucción. "Las compañías son estructuras que pueden generar un gran beneficio y, otras veces, daños considerables. Es vital que las acciones de una compañía sean tratadas de la manera adecuada, y, si no es así, se podría incurrir en un delito", señaló el abogado. En referencia al Anglo, recordó, se ofrecieron "préstamos en circunstancias muy extraordinarias, que no tenían nada que ver con sus negocios ordinarios, lo cual es muy importante para este caso".

Durante el "boom" de la construcción en Irlanda, el Anglo Irish Bank se convirtió en el prestamista preferido de ese sector por su facilidad para conceder créditos de alto riesgo, lo que generó deudas multimillonarias cuando estalló la burbuja en 2008. FiztPatrick, McAteer y Whelan llegaron a prestar de manera supuestamente fraudulenta 451 millones de euros a esos 16 individuos, miembros de un grupo conocido como "Maple 10", para comprar acciones del banco.

Entre los integrantes del "Maple 10" figuran seis miembros de la familia de Sean Quinn, el que fuera el hombre más rico de Irlanda y a quien el Anglo reclama una deuda de casi 3.000 millones de euros, a pesar de que el exmillonario se ha declarado en bancarrota. Como parte de la reestructuración del sistema bancario irlandés, el Gobierno de Dublín fusionó en 2011 el Anglo Irish Bank y el Irish Nationwide, y ambos fueron cerrados definitivamente el pasado año a través de una entidad llamada Irish Bank Resolution Corporation.
Fuente: http://www.publico.es/dinero/500172/irlanda-pone-cara-a-la-crisis-con-un-historico-juicio-a-tres-exbanqueros

miércoles, 5 de febrero de 2014

Derecho a decir “sí”, derecho -y con frecuencia deber- a decir “no”

Asentir o disentir, expresándose libremente, sin cortapisas.

Sólo en los últimos años, ¡Si se hubiera dicho no cuando el dúo Reagan-Thatcher preconizó la sustitución de los “principios democráticos” -tan bien establecidos en la Constitución de la UNESCO desde 1945- por las leyes del mercado, y las Naciones Unidas por los grupos plutocráticos, G7. G8… G20!

¡Si se hubiera dicho no en un auténtico clamor popular, a la invasión de Irak! ¡Si se hubiera dicho no a una unión monetaria en Europa sin una previa unión económica y política!

¡Si se hubiera dicho no aquel día aciago del 10 de mayo de 2010 en el que el “gran dominio” impuso sus pautas de total dependencia económica!

¡Si se hubiera dicho no a los recortes en sanidad, educación, ciencia y justicia!

¡Si se hubiera dicho no a la retrógrada LOMCE! Si se hubiera dicho no a la increíble reducción progresiva de la “memoria histórica”, dejando sin esclarecer tantos hechos, dejando tantas heridas abiertas!
etc, etc, etc.

Hasta hace poco, la mayoría de la ciudadanía no podía expresarse. Permanecía silenciosa por silenciada. Ahora, no. Ahora, la tecnología digital permite de forma progresiva a muchos decir lo que desean decir. Y la voz del pueblo puede ser, será muy pronto, la expresión del poder ciudadano, esencial en una democracia genuina.

Comprendo que haya numerosas personas que se abstengan de manifestar su opinión por los nocivos resultados que para ellas y los suyos podrían derivarse. Pero animo a todos los demás a que unan su voz o su grito -”siempre nos quedará la palabra”, dijo Blas Infante- para manifestar, siempre sin violencia, lo que consideran que no debe ser aceptado en un contexto de libertades públicas. No es tolerable que cada día se inviertan en gastos militares y armas más de 3.000 millones de dólares cuando mueren de hambre decenas y decenas de personas; y no es tolerable que 2.000 millones de seres humanos vivan por debajo del umbral de la pobreza; y no es tolerable que, con total olvido de nuestros compromisos intergeracionales, dejemos que la habitabilidad de la Tierra se degrade; y es intolerable que 85 personas tengan una fortuna equivalente a la de de 3.500 millones de personas, la mitad de la Humanidad… Y no es tolerable, hoy mismo, que veamos cómo se pretende “recortar” el alcance de la justicia a escala mundial, cuando España estaba en la vanguardia…

Digamos no. O digamos sí cuando creamos que debemos asentir. Pero siendo dueños de nuestro destino. En otro caso, mereceríamos la terrible frase de Albert Camus que recuerdo con frecuencia: “Los despreciaba porque pudiendo tanto se atrevían a tan poco”.
http://federicomayor.blogspot.com.es/

Federico Mayor Zaragoza – Comité de Apoyo de ATTAC España

lunes, 3 de febrero de 2014

Ataque a los jueces que frenan los despidos colectivos

En los últimos años de crisis económica y recortes, los jueces españoles han alcanzado un protagonismo especial como defensores de los derechos de los ciudadanos. “En este momento los jueces españoles están siendo valorados muy positivamente porque están luchando contra la corrupción. También han sido pioneros en la lucha contra los desahucios y están teniendo mucho protagonismo en otros temas que afectan a los ciudadanos como las preferentes o las cláusulas abusivas. Creo que en estos momentos la percepción que hay es que los jueces están tutelando los derechos de la gente más desfavorecida socialmente, como muestra también el tema de la reforma laboral. La gente ve como la última confianza que tiene es acudir al juez”, afirma Margarita Robles, magistrada del Tribunal Supremo y vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), en una entrevista para el dossier sobre la Justicia en el número de febrero de la revista de La Marea.

Sin embargo, el Gobierno está intentando cortarles las alas a los jueces, especialmente en los casos de despidos colectivos (EREs) en los que los tribunales han estado más del lado de los trabajadores que de las empresas desde que muchos conflictos laborales acabasen en los juzgados a consecuencia de la reforma laboral. La Troika –Comisión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional (FMI)- advertía en sus últimos informes sobre el rescate a la banca española de que los jueces eran un obstáculo.

El Ministerio de Trabajo ya retocó la legislación para reducir el margen de interpretación de los tribunales en los EREs. Y en enero, el Tribunal Supremo ratificó la reforma laboral y pidió a los jueces que no se excedan a la hora de evaluar las causas de los despidos colectivos. “El legislador de 2012 ha querido, y así lo ha hecho constar en la exposición de motivos de la Ley 3/2012, que los órganos jurisdiccionales encargados del enjuiciamiento de los despidos colectivos no sustituyan al empresario en la elección de las medidas concretas a adoptar, limitando su control a verificar que las causas económicas alegadas existen, que tienen seriedad suficiente para justificar una reestructuración de los objetivos y de los recursos productivos de la empresa, que no son por tanto un pretexto o excusa para despedir, y que la supresión o amortización de puestos de trabajo acordada es una medida apropiada (o una de las medidas apropiadas) para hacerles frente”, dijo el máximo órgano del poder judicial en un comunicado.

Al parecer no ha sido suficiente. Hace unos días, el FMI advirtió al Gobierno de España que “la eficacia de reformas pasadas se vio menoscabada, en parte, por una interpretación restrictiva por parte de los tribunales“. Esta recomendación ha provocado una respuesta contundente por parte de los jueces españoles que piden al Ejecutivo de Mariano Rajoy amparo del sistema judicial ante estas críticas de las organizaciones internacionales.

“Con estas manifestaciones el FMI está sugiriendo la supresión del poder judicial en material laboral y la vuelta a las relaciones laborales del siglo XIX, cuando no existían derechos. Con sus pretensiones este organismo internacional parece querer convertirse en una divinidad de adoración obligatoria. Sin embargo, debemos poner de manifiesto que los jueces españoles únicamente están sometidos al imperio de la ley y de los principios constitucionales, según establece nuestro ordenamiento jurídico. Además, esta actuación judicial es la propia de un Estado Constitucional con división de poderes, en la que nuestros tribunales son la garantía ante cualquier vulneración de derechos”, dijo Jueces para la Democracia en un comunicado.
Thilo Schäfer. La Marea
Fuente: http://www.lamarea.com/2014/02/02/ataque-los-jueces-que-frenan-los-despidos-colectivos/

martes, 21 de enero de 2014

Yo tengo razón, tú estás equivocado

Somos adictos a "tener razón", pero quedar cautivos de nuestras opiniones es un trampa
Escuchar a los demás es prueba de empatía y respeto, claves para crecer y estar en paz


La mayoría de nosotros creemos que podemos cambiar lo que los demás piensan; de otro modo, no pasaríamos tanto tiempo en la vida dándole vueltas a “qué opinan los demás de nosotros” y tratando de mejorar su juicio sobre nuestra persona. Eleanor Roosevelt dijo: “Nadie puede hacer que te sientas inferior si tú no lo permites”. Esta afirmación pone el foco de atención hacia nosotros mismos y no en los demás; por ello, quizá el único pensamiento que precisa ser cambiado es la creencia de que “los demás deberían pensar diferente”.

Querer tener razón es la enfermedad crónica de la humanidad, seguramente una de las causas que han enfrentado más a las personas, las naciones y las religiones organizadas del planeta. La posesión de las personas por sus propias ideas es siempre una causa de sufrimiento. El problema, al consistir las creencias en “posesiones mentales” no visibles, ha sido buscar la solución a nuestras diferencias tratando de cambiar a los demás antes que examinar la causa real de los conflictos (la necesidad de tener razón).

En demasiadas ocasiones comprobamos cómo querer imponer nuestras razones y opiniones a los demás nos cuesta caro. Tal vez logremos desautorizar las ideas de alguien, pero al final acabamos con una razón más y un amigo menos. ¿Vale la pena? Seguramente no. El resultado es que querer estar siempre en posesión de la verdad consume una gran cantidad de energía y tiempo que nos impide disfrutar de los demás y de la paz mental de saber que en el fondo todos tenemos nuestra propia lógica.

¿Es mejor tener razón a toda costa antes que ser feliz? Que cada uno responda esta pregunta con sinceridad.

La perspectiva materialista o newtoniana del universo nos conduce a cosificar todo con lo que entramos en contacto, ya sea algo material o inmaterial. Incluso lo no material, como un pensamiento, acaba tomando forma y se convierte en objeto de conflicto. Así, una idea o una creencia se acaban convirtiendo en una posesión, una propiedad, algo que debe ser defendido para que no perezca.

Todo pensamiento consciente, repetido durante un tiempo, se convierte en un programa mental invisible. Con el tiempo acumulamos opiniones, creencias, que pasan a conformar lo que llamamos identidad construida o ego. Si alguien agrede esas posesiones mentales, en realidad es como si lanzara un ataque personal, porque confundimos pensamiento e identidad. No parece sensato confundir lo que somos con lo que pensamos, pero esto no lo tienen tan claro quienes se aferran a sus creencias con desesperación.

Tener opiniones es normal, también tener gustos y preferencias… pero que esas ideas y predilecciones le tengan a uno cautivo o secuestrado es una trampa. El libre pensamiento es una conquista humana, pero la libertad de opinión se convierte en una desventaja cuando las posiciones mentales impiden abrirse a nuevas perspectivas o puntos de vista que no concuerdan con las propias.

La pregunta ¿somos nuestras creencias? se responde con un rotundo no. Desde luego, tenemos convicciones, pero en esencia no somos lo que pensamos; a un nivel profundo y esencial, nuestras opiniones no pueden definirnos. Pero llegar a esta claridad no es sencillo ni rápido. De hecho, los conflictos del mundo son tanto disputas por pertenencias materiales (cosas) como por posesiones inmateriales (ideales). Cuando entendemos que tenemos una mente y la usamos, pero que no somos esta, nos liberamos de su contenido y nos autoexcluimos de cualquier conflicto y, por tanto, sufrimiento.
Fuente: El País.

jueves, 16 de enero de 2014

¿Ilegal o parte de la cultura? El trabajo infantil divide a Bolivia

Veronica Smink BBC Mundo, Cono Sur

Se estima que 850.000 niños y adolescentes trabajan en Bolivia.

¿Deben o no deben trabajar los niños? Esa es la pregunta que tratan de responder por estos días los legisladores en Bolivia, país que está inmerso en una polémica sobre el trabajo infantil en la que hasta el presidente Evo Morales ha terciado diciendo que, por razones culturales, los menores deben trabajar para desarrollar "conciencia social", pese a que contraviene convenios internacionales suscritos por el país.

Se trata de un problema regional, según la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en América Latina y el Caribe 13 millones de niños forman parte de la fuerza laboral.

A pesar de que en 1973 el organismo adoptó un convenio que prohibió que los menores de 14 años trabajen, en muchos países que son miembros de la organización es muy común ver a menores empleados.

Tal es el caso de Bolivia, donde el 28% de los chicos de entre cinco y 17 años trabaja, según datos de la Defensoría del Pueblo. Si bien el país ratificó el convenio de la OIT en 1997, aún hay muchos que se resisten a imponer por ley una edad mínima para trabajar.

A fines de 2013, un grupo de niños y adolescentes trabajadores protestó frente a la Asamblea Legislativa luego que la Cámara de Diputados aprobara el llamado Código Niña, Niño, Adolescente, que ratifica los 14 años como la edad mínima para trabajar y establece un plan para erradicar el empleo infantil.

La protesta, que fue reprimida por la policía con gases, generó una polémica que llevó al Senado a suspender el debate del Código hasta mediados de enero y a convocar una reunión con los menores, que forman parte de la Unión de Niños, Niñas y Adolescentes Trabajadores de Bolivia (Unatsbo), una organización que agrupa a más de 10 mil chicos.

Empleo infantil en Bolivia
850.000 niños y adolescentes trabajan
87% desempeña oficios considerados peligrosos como la zafra y la minería
77% no recibe sueldo porque ayuda a la familia
(Fuente: Defensoría del Pueblo de Bolivia)

Esta semana, representantes de la Unatsbo fueron recibidos por la presidenta del Senado, Gabriela Montaño, a quien le solicitaron que no se ponga límite de edad para el trabajo independiente (como la venta callejera o el cuidado de vehículos) y se establezcan los 12 años como la edad mínima para el trabajo en relación de dependencia.

El propio presidente Evo Morales terció a favor de los menores, expresando su rechazo a imponer un límite de edad en el nuevo Código.

"Mi experiencia, mi posición: no debería eliminarse el trabajo de niñas, niños y adolescentes, pero tampoco deberían explotar o incitarlos a trabajar. Algunos trabajan por necesidad, pero además eliminar el trabajo de niños es como eliminar que tengan conciencia social", afirmó el mandatario tras reunirse con los jóvenes de la Unatsbo unos días antes de Navidad.

"En las áreas rurales, desde el momento en que se aprende a caminar uno ya presta un servicio a la familia. No es explotación, es sacrificado pero eso es vivencia misma", agregó el mandatario.

Cuestión cultural
Históricamente, el tema del trabajo infantil ha generado polémica en Bolivia y otros países andinos, como Perú, donde muchos creen que es normal que los niños colaboren desde pequeños con las tareas del hogar y ayuden a mantener a su familia.

"En esta región los niños son considerados parte activa de la sociedad y de la economía familiar y desde pequeños cumplen un rol en la comunidad", explicó a BBC Mundo una vocera de la oficina andina de Save The Children, una de varias ONG dedicada a promover los derechos de los niños que no considera que toda forma de trabajo infantil sea explotación.

Lo mismo piensa el presidente Morales, quien cree que el foco debería estar puesto en erradicar las prácticas abusivas de empleo infantil y no todo el trabajo realizado por menores.

El mandatario incluso ha resaltado varias veces su propia historia de vida, recordando cómo ayudaba a su familia a los seis años vendiendo helados, y también usó el ejemplo de sus propios hijos para recalcar los efectos beneficiosos que puede traer el trabajo para los niños y adolescentes.

Contó que envió a sus hijos Eva Liz, de 19 años, y Álvaro, de 17, a pastear llamas en los arenales de su pueblo natal, Orinoca, en el departamento de Oruro, para que aprendan sobre los orígenes de su padre.

"Un poco que conozcan cómo se vive y viven todavía, se trata de eso, no es un castigo, sino que conozcan", afirmó, tras admitir que sus hijos se habían quejado por tener que cumplir con esa tarea.

Los niños que piden trabajar
Pero mientras que los hijos de Morales se quejaron, otros niños reclaman el derecho de poder trabajar.

Por eso, en los últimos años en la región andina surgieron una serie de movimientos de niños trabajadores, como la Unatsbo, que funcionan como sindicatos de menores.

Según ellos, establecer límites de edad para el trabajo infantil no lo erradicará, sino que generará mayor trabajo clandestino.

Sin embargo la OIT rechaza este tipo de argumento.
"El Ministerio de Trabajo y los sistemas de protección de los niños son los responsables de realizar inspecciones y evitar el trabajo clandestino", dijo a BBC Mundo Guillermo Dema, especialista en trabajo infantil de la oficina regional de la OIT.

Según Dema, los argumentos que se utilizan para justificar el empleo infantil son similares a los que se planteaban en el pasado para rechazar la abolición de la esclavitud.

"Dicen que limitar el empleo infantil perjudicará a los niños así como antes decían que si se liberaba a los esclavos morirían de hambre, y que era mejor concentrarse en garantizar la calidad de su empleo", afirmó.

El especialista también consideró "una excusa" el tema cultural, afirmando que en los países del norte también se consideraba una práctica normal y aceptada que los niños trabajasen en siglos pasados.

Además, señaló que otros países andinos, como Colombia, Perú y Ecuador, han trabajado para abolir el empleo infantil, por lo que no se trata de una polémica regional.

"Trampa perversa"
Para Dema, el trabajo infantil es "una trampa perversa que perpetúa la pobreza y la exclusión social".

"El límite de edad de 14 años se impone para que los niños se concentren en su educación, que es la única forma en la que podrán salir de la pobreza", afirmó.
Según el Instituto Nacional de Estadística (INE) solo el 2,5% de los niños que trabajan viven en condiciones de extrema pobreza.
Pero, ¿qué pasa con aquellos niños que trabajan por necesidad, como señaló Morales? Después de todo, Bolivia es uno de los países más pobres de Sudamérica y muchos menores trabajan para poder subsistir.
Según el funcionario de la OIT, la solución pasa por priorizar los recursos de otra manera.

"Honduras y Nicaragua lograron reducir el empleo infantil, a pesar de no ser países ricos", ejemplificó Dema.
Para el experto, es responsabilidad del Estado garantizar el derecho a la educación.

"Una nación que no apuesta por la educación y depende de la contribución del trabajo de los niños para su desarrollo es un país no está estableciendo bien sus prioridades", criticó.

La Asamblea Nacional de Bolivia anunció que se crearán dos comisiones para estudiar posibles ajustes al Código Niña, Niño y Adolescente.

Si Bolivia decidiera eliminar o reducir la edad mínima para el empleo infantil quedaría en violación de varios tratados internacionales que subscribió, entre ellos el de la OIT.
Fuente: BBC.

miércoles, 15 de enero de 2014

ABC. Con esta ley se seguirá abortando igual, solo que las ricas lo harán con garantías y en el extranjero y las pobres en una carnicera mesa de cocina. Ya hemos vivido eso

Nunca pensé que me tocaría volver a discutir este tema desde tan abajo. Creí que ese nivel básico de debate estaba superado, que era una obviedad, un logro civil comúnmente aceptado. Ese fue mi primer error: todo avance colectivo puede verse amenazado por un impulso reaccionario; no se debe bajar jamás la guardia.

Así que heme aquí volviendo a teclear, 30 años después, el mismo abecedario elemental sobre el aborto. Y así, repetiré que nadie está a favor del aborto: es siempre un horror, una pena, un trauma. Y, desde luego, no es un método anticonceptivo; de hecho, debemos fomentar por todos los medios el acceso a los anticonceptivos para minimizar los embarazos no deseados (por cierto: a veces quienes más protestan contra el aborto son también los más reticentes a la contracepción). De lo que estamos a favor es de una ley justa que permita el acceso igualitario a una intervención que, además de penosa, puede ser peligrosa. Es evidente que hay grandes desigualdades sociales y culturales; hay personas desprotegidas que no conocen bien los métodos anticonceptivos o no tienen acceso a ellos: por dinero, por prejuicio social, por imposición familiar. Y ni siquiera usando un método adecuado se está a salvo de un fallo: el condón, por ejemplo, solo tiene un 98% de efectividad. Por no hablar de la crueldad de no contemplar la malformación del feto como causa suficiente. Como dice Mónica Arango, del Centro de Derechos Reproductivos, desde 1994 más de 30 países del mundo han liberalizado sus leyes de aborto. El retrógrado proyecto de Gallardón (contestado incluso desde el PP) nos descolgaría del entorno europeo y nos dejaría al nivel de la ultracatólica Polonia y de Malta. Con esta ley se seguirá abortando igual, solo que las ricas lo harán con garantías y en el extranjero y las pobres en una carnicera mesa de cocina. Ya hemos vivido eso.
Fuente: Rosa Montero. El País.

jueves, 17 de octubre de 2013

La esclavitud no se regula. Se declara ilegal y se combate

Gustavo Duch Guillot La Jornada


Que pocas corporaciones globales y fondos capitalistas estén sistemáticamente pertrechando crímenes ecológicos y sociales en todo el mundo –en forma de explotación de minas a cielo abierto, expulsando pueblos de sus moradas, privatizando zonas marítimas o acaparando las semillas– sólo se explica por una perfecta arquitectura de impunidad construida con la complicidad de gobiernos neoliberales, que, como un sastre particular, tallan a su medida legislaciones que les protege y favorece. Por si tales mecanismos no fueran suficientes, las propias empresas se acicalan con maquillajes color verde solidario en tiernos espots publicitarios donde explican su compromiso con el planeta y la humanidad. Bajo esta farsa –insitucionalizada con el apelativo de Responsabilidad Social Corporativa (RSC)– encontramos al BBVA, Unión Fenosa, Repsol o Iberdrola, qué más da, presumiendo de lo que no son: empresas comprometidas con la calidad de vida de las personas, con el cuidado del medio ambiente, o una empresa que escucha a la gente.

El mecanismo siempre es parecido. Primero se comete el delito, explotar mano de obra o expoliar recursos naturales. A continuación, como es lógico, llegan las denuncias, los reclamos, la lucha y se deja en evidencia a tales corporaciones, y entonces, éstas contratacan con directores de marketing en las cocinas que le dan la vuelta a la tortilla. Nuestros negocios –dicen entre fogones– favorecerán el desarrollo de la zona. Y finalmente llegamos a la fase más perversa, cuando instituciones internacionales gubernamentales y no gubernamentales avalan y promocionan el elegante vestido de la prestigiosa marca RSC.

En este punto nos encontramos ahora, cuando el ya bien conocido y denunciado fenómeno de acaparamiento de tierras está encontrando en el Banco Mundial, la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y en algunas ONG una inverosímil legitimidad bajo el eufemismo de inversión agrícola responsable. Fíjense en la trampa semántica, es la clave. Cuando el hacerse con tierras campesinas –se calcula que al menos 80 millones de hectáreas en todo el mundo han pasado al control de grandes corporaciones, fondos de inversión e incluso gobiernos extranjeros, generando enormes desplazamientos de personas que pierden sus raíces y su sustento– cambia de nombre, y ya no es acaparamiento, sino inversión, rápidamente se justifica tremenda injusticia. Eso es lo que hay detrás de nuevos protocolos y regulaciones voluntarias que estas instituciones proponen para descatalogar lo que son injustos e inaceptables acaparamientos y colocarlos en la categoría siempre bien vista de inversiones y sus supuestas bondades.

Los argumentos que defienden este tipo de regulación dicen que permite diferenciar entre negocios hechos con buenas intenciones, que generan empleo y economía, de los claramente acaparamientos y todos sus estigmas, algo muy parecido a quienes justificaban la esclavitud porque había buenos amos que mucho cuidaban del bienestar de sus siervos. Pero, como dice GRAIN: La esclavitud no se regula, se declara ilegal. De la misma manera, cualquier enfoque serio para luchar contra el hambre y la pobreza requiere garantizar a los pueblos el control sobre sus tierras y territorios, no directrices y reglas sobre qué puedan hacer las corporaciones y los inversionistas extranjeros para trabajar para sí mismos. Lo que necesitamos no es inversión responsable en tierras agrícolas, sino restitución. Por esto queremos decir que en vez de tratar de hacer funcionar esta nueva tendencia de financializar la tierra agrícola, se necesita detener estos negocios y revertirlos, restituyendo las tierras a las comunidades que vivían de ellas.

En esta línea también se han pronunciado los movimientos sociales de América Latina y el Caribe (entre ellos CLOC-La Vía Campesina y el MAELA) reunidos el pasado 7 y 8 de agosto en Bogotá, Colombia, en una consulta continental para discutir sobre el concepto de inversión agrícola responsable. Allí afirmaron que se deben rechazar cualquier medida que siga promoviendo o justificando el crecimiento de la agricultura industrial y agroexportadora, como la que se desarrolla en los acaparamientos de tierra. Y que, en cambio, se necesita fortalecer, en todo el mundo, el enfoque de la soberanía alimentaria, basada en una agricultura gestionada por las propias comunidades, de pequeña escala y para los mercados locales.

De acuerdo, los acaparamientos no se regulan se declaran ilegales.
Gustavo Duch Guillot. Coordinador de la revista Soberanía alimentaria, biodiversidad y culturas
Fuente: http://www.jornada.unam.mx/2013/10/15/index.php?section=opinion&article=022a1pol

jueves, 26 de septiembre de 2013

El Constitucional impide que se revise la causa de Garzón que firmó su presidente

El tribunal alega que no cabe recurso contra sus decisiones

El exjuez cuestionaba la imparcialidad del presidente de la institución


El Tribunal Constitucional ha rechazado por unanimidad el recurso que planteó el exjuez Baltasar Garzón contra la decisión que le inhabilitaba, al poner en duda la imparcialidad del presidente del Alto tribunal, Francisco Pérez de los Cobos, por su militancia en el PP.
El Tribunal Constitucional alega que no admite recurso a sus decisiones, por lo que no cabe la petición de nulidad. Y lo dice así: la ley "no contempla el incidente de nulidad de actuaciones entre los medios impugnatorios que puedan promoverse contra las resoluciones de este tribunal". Con lo que argumenta más una cuestión de forma que de fondo. Considera que "resulta inviable, con carácter general, cualquier petición de revisión o nulidad, puesto que una vez que ha devenido firme la resolución que puso fin al correspondiente proceso ni siquiera este Tribunal puede dejarla sin efecto sino, a lo más, proceder a su aclaración o a corregir errores materiales".
Garzón había pedido al Constitucional que anulase la resolución por la que este tribunal inadmitió, el pasado octubre, la petición de amparo contra la condena por prevaricación que pesa sobre él. En aquel recurso, el juez pedía al tribunal que revisara la inhabilitación de 12 años que se le impuso en una condena relacionada con las escuchas telefónicas del caso Gurtel que, en su opinión, era injusta.
En octubre, el Constitucional consideró que no debía admitir a trámite aquel recurso, pero Garzón cree que, como esa decisión fue adoptada por una Sala en la que figuraba el presidente del Constitucional, que en aquel momento era militante del PP, el rechazo de su recurso debía ser anulado.
A juicio de Garzón, la militancia en el PP privaba a Cobos de imparcialidad para decidir sobre su asunto, por lo que debió abstenerse. Como no lo hizo, ahora el exjuez solicitaba al tribunal que anulara el rechazo de su petición de amparo y volviera a estudiarlo.
Pero el alto tribunal ha rechazado de nuevo la solicitud de Garzón y ha adoptado por unanimidad una decisión contraria a sus pretensiones...
Fuente: El País.