martes, 7 de agosto de 2018

Préstamos a estudiantes, una experiencia negativa e incluso peligrosa

Juan Torres López
CTXT

En casi todos los países donde existen esta práctica la deuda es creciente y se alimenta a sí misma. Eso es lo que lleva a pensar que el sistema es insostenible o que terminará estallando en algún momento

Un grupo de economistas vinculados a FEDEA acaba de publicar una propuesta de financiación de la universidad basada en la concesión de créditos a estudiantes a semejanza de lo que ya ocurre en otros lugares del mundo.

FEDEA es una fundación financiada principalmente por la banca y es lógico que los economistas que trabajan en su seno hagan propuestas como ésta, que está clara y casi exclusivamente orientada a aumentar el negocio bancario, es decir, la deuda. La banca no tira el dinero y es legítimo que financie a quien defiende sus intereses haciendo propuestas que aumentan su cuenta de resultados. Pero, precisamente por eso, es imprescindible que la ciudadanía sea consciente de que las “soluciones” que se lanzan como científicas y objetivas por fundaciones de apariencia neutral no lo son en realidad, sino que forman parte del negocio de quien financia a sus autores. En este caso, de la banca, cuyo negocio es sencillamente el de crear deuda convirtiendo de cualquier manera a los individuos y a las empresas, a la economía en general, en consumidores compulsivos de crédito.

En 2015 escribí un documento sobre la naturaleza de los créditos a estudiantes sobre su funcionamiento y sus consecuencias reales en los países donde han funcionado (incluyendo España). Como la nueva propuesta de FEDEA pone de nuevo de actualidad el tema voy a resumir a continuación sus principales conclusiones. Quien desee leer el documento completo, con el análisis concreto de las experiencias y los datos de donde obtengo mis conclusiones puede hacerlo aquí:
Los prestamos a estudiantes: una mala vía para financiar la universidad 

http://ctxt.es/es/20180704/Firmas/20646/Juan-Torre-Lopez-prestamos-estudiantiles-FEDEA-deuda.htm


Es cierto que el sistema de préstamos a estudiantes para financiar los estudios universitarios es complejo, que las diferentes experiencias son muy diversas y aún es pronto para conocer con total seguridad cuáles son sus resultados finales. Pero si se analiza con un mínimo de rigor y objetividad la literatura científica disponible se pueden establecer algunas conclusiones básicas sobre sus resultados en los países en donde se lleva aplicando algún tiempo.

En primer lugar, hay que señalar que prácticamente en todos los países donde existen estos préstamos a estudiantes la deuda es creciente y se alimenta a sí misma (Brown y otros 2015a). Y eso es lo que lleva a pensar que el sistema es insostenible o que terminará estallando en algún momento, después de provocar grandes problemas financieros y personales. Según la Reserva Federal, la deuda estudiantil en Estados Unidos ha pasado de 600.000 millones de dólares a 1,5 billones en la actualidad en solo 10 años. Y algo parecido viene ocurriendo en Inglaterra y otros países, aunque es verdad que en menor escala, de momento.

Los análisis de cohortes que se realizan en diversos países son claros en este sentido (Brown y otros 2015b): los estudiantes terminan pagando una cantidad considerablemente mayor de la inicial y eso hace que los impagos se multipliquen. En Estados Unidos, a medida que avanzan las cohortes aumentan el porcentaje de impagos y el montante de la deuda. La cohorte de 2005 en Estados Unidos tendría que haber desembolsado ya el 90% de su deuda inicial pero solo ha pagado el 38%. Y la de 2010 solo ha desembolsado el 9%. Más de la mitad de la cohorte de 2009 ha dejado de pagar o ve aumentar su deuda.

El porcentaje de impagos aumenta también claramente a medida que pasa el tiempo. A los cinco años del inicio del reembolso de la deuda, se había impagado el 21% de los préstamos de la cohorte del año 2005. Pero la cohorte de 2009 tenía ya un porcentaje de impagos del 26% a los cinco años de haber empezado el reembolso.

En segundo lugar, hay que tener en cuenta que los préstamos a estudiantes no se establecen porque se haya demostrado que con ellos se disponga de una vía más adecuada para financiar la enseñanza universitaria sino para ahorrar gasto público. Así se ha reconocido explícitamente en algún documento gubernamental, como en el caso británico (Department for Business, Innovation and Skills (2011).

Diversos estudios de entidades tan poco sospechosas como el Banco de la Reserva Federal de Nueva York (Federal Reserve of New York 2014) o el Banco de Francia (Mistretta-Belna 2014) han reconocido los problemas de todo tipo que está generando el sistema y el incremento extraordinario de la deuda que lleva consigo. Y los principales aspectos críticos que se suelen poner de manifiesto en la literatura científica que ha evaluado el sistema de préstamos a estudiantes son los siguientes.

– Los préstamos estudiantiles no solo han provocado una deuda gigantesca que por sí misma es peligrosa, sino que también han afectado negativamente al consumo y al ahorro de las familias. En Estados Unidos se ha podido comprobar que existe una fuerte correlación entre este tipo de deuda y la disminución del consumo y la compra de viviendas o de automóviles, por ejemplo.

– También se ha comprobado que el sistema de préstamos genera exclusión porque los estudiantes más endeudados tienen además dificultades añadidas a la hora de acceder a otras vías de financiación, lo que disminuye sus posibilidades de acceso a nuevas fuentes de rentas.

– La suscripción de préstamos y el aumento de la deuda estudiantil va de la mano del retraso en la creación de familias. Y también de la prostitución de miles de estudiantes. Uno de los más grandes portales de citas y encuentros sexuales incluso tiene una entrada especial con el señuelo explícito de encontrar financiación para pagar la deuda estudiantil: Say goodbye to college debt.

– También se ha puesto de relieve que el sistema es muy dependiente del ciclo económico. En fases de crisis o recesivas aumentan los impagos y las dificultades para hacerles frente, provocando una dinámica que refuerza la caída de la actividad.

– Estos préstamos generan problemas financieros tanto si son asumidos por la banca privada como si no. En el primer caso, los bancos proceden a titulizarlos (convirtiéndolos en nuevos productos financieros), generando antes o después, como en Estados Unidos, burbujas o añadiendo problemas a los que vienen ocasionando la inestabilidad financiera de nuestros días. Y la deuda también puede terminar vendiéndose en los mercados financieros aunque el sistema se base en préstamos concedidos por el sector público o con dinero de los contribuyentes (el gobierno británico reconoció que se lo plantea y que estudia diversas posibilidades de hacerlo).

– Cuando el sistema de préstamos va acompañado de subidas en los gastos de escolarización (lo que ha ocurrido casi siempre) se produce, como en el caso claro del Reino Unido, una disminución de la demanda de estudios universitarios por razones de renta y, por tanto, inequitativa e ineficiente pues puede dar lugar a que dispongan de titulaciones no quienes estén más preparados sino quienes gocen de más recursos familiares.

– El sistema de préstamos se basa en una idea falsa: que quien se beneficia de la inversión en estudios universitarios es el propio estudiante. Pero es evidente que eso es cierto solo parcialmente puesto que la sociedad en su conjunto también se beneficia, y eso es lo que justifica que la enseñanza universitaria se financie, en todo o al menos en parte, con recursos públicos.

– Cuando se recurre a préstamos y se establece el principio de que deben ser los propios individuos quienes asuman la carga financiera de sus estudios lo que ocurre es que los gobiernos tienen más fácil desentenderse de su financiación, cuando se ha podido comprobar que ésta es fundamental para garantizar que el sistema sea eficiente, suficiente y justo y funcione adecuadamente.

– También se ha podido comprobar que los costes que pueden llegar a suponerle al Estado (por ejemplo, cuando ha de hacer frente a avales por impagos o por costes de administración del sistema) pueden encarecerse tanto que el sistema de préstamos ni siquiera suponga un ahorro de gasto público respecto al mejor sistema de becas.

– Cuando se toman en cuenta todos los factores que hay que considerar (coste general, equidad, incentivos, balance de costes y beneficios sociales...) no está de ningún modo claro, ni se ha podido demostrar que recurrir a préstamos sea más eficaz, más económico o más equitativo que proporcionar becas.

– Aunque no sea el tipo de crédito más rentable para la banca, el sistema siempre supone un negocio para ella, bien como financiadora directa o porque fideliza clientes o porque le proporciona recursos para generar nuevos negocios en los mercados financieros.

– La literatura científica suele concluir señalando algunas condiciones que, en todo caso, parece que son las que deberían darse para que un sistema de préstamos no genere problemas de ese tipo, o para que sus inconvenientes no sean mayores que las ventajas. Entre ellas, que sea menos costoso que el de becas (lo que, como acabamos de señalar, ni siquiera está asegurado); que haya una buena administración específica del sistema para demorar sin dificultades los pagos cuando no se puedan hacer por razones temporales; que la administración fiscal sea fuerte y eficiente, puesto que conviene que esté vinculada con ésta última; que haya voluntad política de perseguir a los malos pagadores con capacidad para pagar; que los préstamos se utilicen en alguna medida como incentivos para determinadas titulaciones; que no se utilice el sistema como una renta básica disimulada; que el sistema financiero sea sofisticado y solvente; que no haya elevados niveles de paro; que se produzcan economías de escala (porque se sabe que el sistema funciona mejor cuando está más extendido); o que se subsidien los intereses. En otras circunstancias no solo no se puede asegurar que el sistema sea bueno o mejor que cualquiera otro, sino que puede inferirse que lo más seguro es que provoque costes sociales, públicos y personales elevados, problemas financieros y administrativos graves e incluso consecuencias macroeconómicas muy negativas.

En cualquier caso, y antes de establecer este sistema, se debe abrir un debate amplio, plural y riguroso sobre las consecuencias de mercantilizar la educación. Hay que evaluar previamente los costes y beneficios de todo tipo de este sistema en relación con el de becas. Debe disponerse una administración específica y de recursos financieros que impidan que aquí se reproduzcan los males de otros países. Y deberían tenerse en cuenta las condiciones de entorno (paro, desigualdad de partida, previsiones económicas...) para evitar que el sistema colapsara incluso antes de haber llegado a consolidarse.

Pero la propuesta de FEDEA no va por aquí. Es un simple camino corto para que la banca siga haciendo negocio convirtiendo la economía española en una bomba de deuda.

La aplicación del sistema en España (sin economía de escala, sin administración ad hoc, con alto nivel de paro, con paro juvenil elevado que expresa poco aprecio a los valores de la educación, con un sistema bancario propicio al riesgo, poco riguroso y con grandes privilegios) puede ser muy negativo desde todos los puntos de vista. Así se ha podido comprobar incluso cuando el volumen de préstamos concedidos hasta ahora ha sido bastante bajo. Juan Torres López es economista. Es miembro del Consejo Científico de Attac España y catedrático de Economía aplicada en la Universidad de Sevilla.

lunes, 6 de agosto de 2018

Al-Juarismi, el erudito persa que introdujo los números a Occidente y nos salvó de tener que multiplicar CXXIII por XI

Galileo, Newton, Einstein... apenas tres de los grandes de la ciencia occidental. Pero como el mismo Newton escribió, citando al erudito del siglo XII Bernardo de Chartres, "Si he visto más lejos es porque estoy sentado sobre los hombros de gigantes". Varios de esos gigantes sobre los que se sentaron y se siguen sentando los científicos, han quedado en un olvido relativo... aunque a veces, si nos fijamos con cuidado, los encontramos en las páginas de los gigantes conocidos. Según los historiadores, el mayor legado del gran matemático italiano, Leonardo Pisano, más conocido como Fibonacci, fue ayudar a Europa a descartar el antiguo sistema de números romanos y cambiarlo por números indo-arábigos. Aparecieron en su "Liber Abaci" o "Libro de cálculo", que escribió en 1202 tras estudiar con un maestro árabe.
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 https://www.bbc.com/mundo/noticias-44933192

En ese mismo libro, hay una referencia a un texto anterior llamado "Modum algebre et almuchabale" y en el margen está el nombre Maumeht, que es la versión latinizada del nombre, Mohammed.

La persona a la que se refiere es Abu Abdallah Muḥammad ibn Mūsā al-Jwārizmī, conocido en español como Al-Juarismi, quien vivió aproximadamente entre los años 780 y 850. Fue gracias a él que los intelectuales europeos se enteraron de la existencia de los números indo-arábigos. De los indios a Medio Oriente, de Bagdad a Europa La obra de Al-Juarismi toca un aspecto crucial de todas nuestras vidas. Por ella, el mundo europeo se dio cuenta de que su forma de hacer aritmética, que todavía se basaba esencialmente en números romanos, era irremediablemente ineficiente y francamente torpe. Si te pidiera que multiplicaras 123 por 11, podrías hacerlo hasta en tu cabeza. La respuesta es 1.353. Pero intenta hacerlo con números romanos: tienes que multiplicar CXXIII por XI. Se puede hacer pero, créeme, no es divertido.


quizDerechos de autor de la imagenGETTY IMAGES


mage captionNi siquiera sumar y restar es igual de fácil pero, ¿notaste que estas ecuaciones son incorrectas? Si quitas sólo un fósforo las corregirás (respuestas al final).
En su "Libro de la suma y de la resta, según el cálculo indio", Al-Juarismi describió una idea revolucionaria: se puede representar cualquier número que desee con solo 10 sencillos símbolos. Esta idea de usar solo diez símbolos -los dígitos del 1 al 9 más un símbolo 0- para representar todos los números desde uno hasta el infinito, fue desarrollada por matemáticos indios alrededor del siglo VI y es difícil exagerar su importancia.

Evolución de los números

Punto y aparte Al-Juarismi y sus colegas hicieron más que traducir el sistema indio al árabe: crearon el punto decimal. Lo sabemos gracias a la obra del matemático Abu'l Hasan Ahmad ibn Ibrahim Al-Uqlidisi. En "Kitab al-fusul fi al-hisab al-Hindi" de los años 952-3 -el manuscrito más antiguo en el que se propone un tratamiento de las fracciones decimales, escrito apenas un siglo después de Al-Juarismi- muestra que el mismo sistema decimal se puede extender para describir no solo los números enteros sino también las fracciones. La idea del punto decimal nos resulta tan familiar, que es difícil entender cómo antes se las arreglaban sin ella. Como toda gran ciencia, es deslumbrantemente obvio después de haber sido descubierto.


Número de Euler


¿Quién era Al-Juarismi?

Al-Juarismi, el gran matemático que le dio a Occidente los números y el sistema decimal, era además astrónomo, cortesano y favorito del Califa al-Mam'un.
Era un emigrante de Persia oriental a Bagdad y producto de su época, la Edad de Oro del islam.
Su manera de pensar era audaz y gozaba de un gran un lujo: estaba rodeado de libros.
Gracias al Movimiento de la traducción, que recogió obras científicas de todo el mundo conocido, a fines del siglo IX, un importante corpus matemático griego -que incluía obras de Euclides, Arquímedes, Apolonio de Perga, Tolomeo y Diofanto- había sido traducido al árabe.
Del mismo modo, las matemáticas antiguas babilónicas e indias, así como las contribuciones más recientes de los sabios judíos, estaban disponibles para los estudiosos islámicos.
Al-Juarismi se encontraba en la sorprendente posición de tener acceso a diferentes tradiciones matemáticas.
La griega trataba principalmente de la geometría, la ciencia de formas como triángulos, círculos y polígonos, y cómo calcular el área y el volumen.
La india había inventado el sistema decimal de diez símbolos que hacía el cálculo mucho más simple.
Al combinar la intuición geométrica con precisión aritmética, imágenes griegas y símbolos indios, inspiró una nueva forma de pensamiento matemático que hoy llamamos álgebra.
Al-Jabr
En el libro de Al-Juarismi "Al-Jabr w'al-Muqabala" es la primera vez que aparece la palabra Al-Jabr. Álgebra.
Empieza diciendo: "Descubrí que las personas requieren tres tipos de números: unidades, raíces y cuadrados".
Así te prepara para un libro sobre cómo resolver ecuaciones mediante métodos algebraicos.
Ya en los tiempos de Babilonia se resolvían ecuaciones cuadráticas.
La diferencia es que no había fórmulas, sino que cada problema se resolvía como único: "Toma la mitad de 10, que es 5, y el cuadrado, que es 25"; y más adelante, otro diría: "Toma la mitad de 12, que es 6, y el cuadrado, que es 36".
Así sucesivamente, te hacían pasar por el mismo proceso una y otra vez con diferentes números, según el caso.
Para Al-Juarismi, la solución no se eran números que debíamos descubrir, sino un proceso que pudiéramos aplicar.
Es decir: el cuadrado significa tomar la raíz y multiplicarla por sí misma. Y esa fórmula es cierta, cualquiera que sea la raíz. Si es 5, es 5 veces 5, es 25; si es 3, es 3 veces 3...
No usar números sino símbolos resultó ser una idea increíblemente liberadora, pues permite resolver problemas sin atascarse en cálculos numéricos desordenados.
Algoritmi de número Indorum
Al abandonar temporalmente el enlace con números específicos, manipulas los nuevos objetos (x, y, z) de acuerdo a las reglas que su libro explicó: una serie de recetas generales.
Los números que los símbolos representan en tu problema particular aparecerán milagrosamente al final.
Piensa en algo sencillo y cotidiano, que era lo que Al-Juarismi quería ayudar a resolver:
Ahmed muere y deja 80 monedas de herencia. A un amigo le deja un cuarto de ella; a su viuda, un octavo; lo demás es para sus tres hijos. ¿Cuánto le corresponde a cada uno de ellos?

Al Juarismi hizo que lo desconocido fuera parte de la ecuación: lo que llamamos X en algebra. Entonces:
El tratado escrito por Al-Juarismi circa 825 sobre el sistema numérico indio-árabe fue traducido en el siglo XII con el nombre "Algoritmi de numero Indorum", que significa "Algoritmi sobre los números de los indios"; "Algoritmi" fue la latinización del traductor del nombre Al-Juarismi.
En él nos dio esas recetas que, debido a esa traducción de su nombre, terminaron llamándose algoritmos.
Al-Juarismi hizo posible que el álgebra existiera como un área de las matemáticas por derecho propio, y que se convirtiera en un hilo unificador de casi todas las demás.
El álgebra es una hermosa serie general de principios, y si los comprendes, la entenderás.

¿Cuál es la verdadera importancia del álgebra?

Se ha utilizado a lo largo de las eras para resolver todo tipo de problemas.
Si la masa de una bala de cañón es ​​'m', y la distancia que tiene que viajar, 'd', usas álgebra para calcular el ángulo óptimo en el que tienes que apuntar tu cañón.
Ese tipo de conocimiento gana guerras.
O llamemos a la velocidad de la luz 'c', el cambio en la masa de un núcleo atómico 'm', y luego calculemos la energía liberada con esta sencilla fórmula algebraica:

Fórmula de EinsteinDerechos de autor de la imagenGETTY IMAGES
Image captionLa ecuación más famosa, la equivalencia entre la masa y la energía dada por la expresión de la teoría de la relatividad.

Ese tipo de conocimiento es el poder real.

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Condena las crueldades del comunismo, pero no olvides el terrible historial del capitalismo.

eldiario.es

La derecha denuncia los horrores del estalinismo y oculta la miseria humana sobre la que se construyó su modelo económico favorito.

Un fantasma se cierne sobre los medios de comunicación británicos: el fantasma de las opiniones negativas sobre el capitalismo. Desde que la escritora Ash Sarkar pronunció las palabras "¡soy comunista, idiota!" en una cadena de televisión, la derecha se retuerce horrorizada. La rapidez con que los analistas han salido a responder al comentario improvisado de Sarkar es profundamente reveladora.

Desde que hace un año Jeremy Corbyn arrebató la mayoría a los conservadores, la derecha está aterrada al sentir que está perdiendo la guerra ideológica. El accidental rescate de Sarkar de la visión del comunismo de Marx –una sociedad sin Estado, sin clases, en la que la mayoría de la humanidad se haya librado del trabajo asalariado– como contraposición al totalitarismo estalinista hizo que la revista Elle declarara que Sarkar es "literalmente comunista y literalmente nuestra heroína".  The Telegraph reflexionó: "El comunismo mató a millones de personas. ¿Por qué es guay llevarlo en una camiseta?" A su vez, según la opinión de Douglas Murray de the Spectator, Sarkar no es mejor que una fascista.

No me malinterpretéis: los regímenes que tomaron el nombre de "comunistas" –desde Stalin a Pol Pot– cometieron crímenes monstruosos e inenarrables. Pero para la derecha, un resurgimiento del interés en la visión del comunismo marxista anterior al estalinismo es el ejemplo más sorprendente y escalofriante del propio colapso de su supremacía ideológica: "comunismo" es sinónimo de millones de muertes y nada más que eso. Por el contrario, presentan al capitalismo como una máquina de prosperidad humana, sin culpa ni sangre.

La historia del capitalismo es algo más complicada que eso. Si queréis leer una efusiva alabanza al capitalismo, la encontraréis en el Manifiesto comunista de Marx y Engels: el dinamismo revolucionario de los capitalistas, escribieron, había creado "maravillas que superan a las pirámides de Egipto, los acueductos romanos y las catedrales góticas". Pero el capitalismo es un sistema económico manchado con la sangre de innumerables millones de personas.

Por supuesto que eso no es una excusa para los horrores del estalinismo: el modelo totalitario que creó y exportó el régimen de Stalin le quitó a millones de personas su libertad y en muchos casos también su vida. De igual forma, no debemos olvidar las millones de vidas que se perdieron en la China maoísta por los asesinatos y la hambruna. Aun así, la lista de crímenes del comunismo no ayuda a los campeones del capitalismo tanto como ellos quisieran.

Según el Libro negro del comunismo, un nada respetable punto de referencia para la derecha, casi cien millones de vidas humanas perecieron a manos de los autodenominados regímenes "comunistas", la mayoría víctimas de Mao Zedong en China. El economista Amartya Sen, ganador del premio Nobel, señala que entre 23 y  30 millones de personas murieron como consecuencia de las catastróficas  medidas del Gran Salto Adelante de Mao, a fines de los años 50 y principios de los 60.

Pero Sen también destacó en un artículo de 2006 que a mediados del siglo XX China e India tenían la misma esperanza de vida, unos 40 años. Tras la revolución china, la cifra cambió drásticamente. En 1979, la China maoísta tenía una esperanza de vida de 68 años, 28 más que la India capitalista.

El exceso de mortalidad en la India capitalista en relación a la China comunista se estima en la horrorosa cifra de cuatro millones de vidas humanas al año. ¿Entonces por qué India no se estudia como un caso de la naturaleza homicida del capitalismo?

Desde un comienzo, el capitalismo se construyó sobre los cadáveres de millones de personas. Desde el siglo XVII en adelante, el tráfico de esclavos a través del Océano Atlántico se convirtió en un pilar del capitalismo emergente. Mucha de la riqueza de Londres, Bristol y Liverpool –que fue alguna vez el mayor puerto de esclavos de Europa– nació del trabajo de los africanos esclavizados.

El capital acumulado gracias a la esclavitud –en las plantaciones de tabaco, algodón y azúcar– dio pie a la revolución industrial en Manchester y Lancashire, y muchos bancos pueden actualmente rastrear en la esclavitud el origen de sus fortunas. 

Incluso cuando el comercio internacional de esclavos comenzó a decaer, el dinero sangriento del colonialismo enriqueció al capitalismo occidental. India fue durante mucho tiempo una colonia del Reino Unido, la potencia capitalista más eminente del mundo: como estudia Mike Davis en su libro Los holocaustos del fin de la era victoriana, unos 35 millones de indios murieron en una hambruna evitable, mientras que Reino Unido se llevaba del país millones de toneladas de trigo.

India fue la gallina de los huevos de oro del capitalismo británico, convirtiéndose en la mayor fuente de beneficios del país a fines del siglo XIX. Occidente está construido sobre la riqueza que robó a aquellos que sometió con un costo humano inmenso.

Ya era el siglo XX cuando Europa comenzó a importar los horrores masivos que antes había impuesto a otros. La Gran Depresión –que sigue siendo la peor crisis capitalista– ayudó a crear las condiciones de descontento popular que llevó al ascenso del nazismo. En los primeros tiempos del régimen nazi, las grandes empresas, temerosas del poder de la izquierda alemana, pactaron con el nacionalsocialismo, ya que veían a los nazis como un instrumento contundente con el que atacar tanto al comunismo como al sindicalismo.

Las empresas alemanas hicieron grandes donaciones a los nazis, tanto antes como después de su ascenso al poder, entre ellas el conglomerado industrial IG Farben y Krupp. Muchas empresas se beneficiaron del trabajo esclavo y del Holocausto nazi, incluyendo a IBM BMW, el Deutsche Bank y el Grupo Schaeffler.

Es posible creer apasionadamente en el capitalismo, o simplemente resignarse a que es el único sistema viable, pero también hay que reconocer que tiene sus sombras oscuras y sus complicidades con episodios sangrientos de la historia de la humanidad. Por supuesto que el suprimir la noción de que existe una alternativa al capitalismo –una que se apoya en valores y principios diferentes– cumple una función política útil.

Hace mucho que la izquierda radical y democrática repudia la pesadilla del totalitarismo y ha reflexionado mucho sobre por qué sucedió. Pero muchos de los defensores irredentos del capitalismo no han podido analizar su propio pasado: políticos e historiadores respetables todavía defienden al colonialismo, a pesar de sus grotescos horrores. No es justo atacar a los socialistas democráticos del siglo XXI utilizando los días más oscuros del totalitarismo del siglo XX.

Aspirar a un mundo con abundancia material, libre del Estado y basado en la cooperación no lo convierte a uno en un asesino totalitario. Incluso si piensas que eso no podría llegar a pasar jamás, eso no significa que uno deba rendirse al fundamentalismo del mercado, mucho menos cuando el cambio climático –causado por un orden económico insostenible– amenaza con desatar el caos en nuestro planeta. Una nueva sociedad más justa y más democrática está esperando a nacer, una que rompa definitivamente con todos los fallidos sistemas del pasado.

Fuente original:
https://www.eldiario.es/theguardian/crueldades-comunismo-capitalismo-historial-horroroso_0_797220612.html

Traducido por Lucía Balducci
Ver video del dialogo entre Sarkar y Jones:
https://www.youtube.com/watch?v=-H4J7nNazO0&feature=youtu.be

El poder del lenguaje para alcanzar el bienestar.

Las palabras que utilizamos tienen la capacidad de transformar nuestra realidad. Ya lo decía el filósofo Ludwig Wittgenstein en 1921: "los límites de mi lenguaje son los límites de mi mundo"

Las palabras que utilizamos tienen la capacidad de transformar nuestra realidad. El lenguaje genera cambios en nuestro cerebro y modifica nuestra percepción del entorno que nos rodea.

El lenguaje va vinculado a las emociones. Nuestras palabras envían constantemente mensajes a nuestro cerebro. A nivel neurológico, el uso del lenguaje positivo genera cambios en el lóbulo parietal, la parte del celebro que determina la forma en la que nos vemos a nosotros mismos. Según los estudios de los neurocientíficos Andrew Newberg y Mark Robert Waldman, las palabras negativas hacen que liberemos cortisol, la hormona del estrés. Por lo cual, adoptar una actitud negativa y usar un lenguaje basado en expresiones como no puedo, fracaso o es imposible podría debilitar la salud física y mental de una persona.

Por el contrario, estudios como el famoso Informe Monja —que demostró que las monjas que usaban en su lenguaje más términos positivos vivían hasta diez años más—, nos muestran que expresar palabras positivas y escuchar lenguaje motivador en nuestro ambiente diario favorece nuestra salud. Somos las palabras que usamos.

Actualmente, son muchas las corrientes que utilizan técnicas asociadas al cambio del lenguaje para tratar diversos trastornos psicológicos. Ejemplo de ello son las terapias cognitivo-conductuales, que demuestran que el fomento de pensamientos positivos a través del lenguaje que usa el paciente mejora su estado mental.

Esta teoría tiene como objetivo sustituir las opiniones negativas de los pacientes sobre sí mismos y sobre lo que les rodea por otras más positivas. Estas técnicas han demostrado ser un tratamiento eficaz para trastornos como la depresión —aunque también para fobias, adicciones o ansiedad—, ya que la actividad de nuestra amígdala cerebral aumenta al percibir un futuro más próspero a través de palabras positivas. En muchas ocasiones, estas terapias han resultado ser igual de eficaces que los medicamentos.

Uno de los expertos actuales más reconocidos a nivel mundial, el citado neurocientífico Mark Waldman de la Universidad Loyola Marymount (Los Ángeles), asegura que el cerebro se vuelve más saludable cuando empezamos a usar "tres, cuatro o cinco expresiones positivas por cada una negativa". El lenguaje tiene una potente capacidad de cambiar nuestro mundo. Lo bueno es que, igual que un lenguaje pobre y derrotista nos influye negativamente, también funciona a la inversa.

La solución pasa por comenzar a adoptar una serie de técnicas sencillas y cotidianas, pero muy efectivas. Por ejemplo, usar todavía en lugar de un no radical. Todavía deja las puertas abiertas, plantea una esperanza, evoca una motivación. También debemos olvidarnos de los peros o, al menos, cambiarlos de lugar. No causa el mismo efecto decir: "has hecho un buen trabajo, pero me lo has entregado tarde" que "me lo has entregado tarde, pero has hecho un buen trabajo". Dejar lo malo para el final hace que el efecto negativo perdure, que ese pero anule lo anterior.

Los tiempos verbales también nos dan una gran oportunidad para cambiar nuestras emociones. Si en lugar del condicional usamos el futuro, cambiamos un escenario hipotético por uno cierto. No es lo mismo decir: “Si escribo un libro, sería sobre felicidad” que “Cuando escriba un libro será sobre felicidad”. En el condicional vive la duda, en el futuro la certeza.

Al mismo tiempo, palabras como fracaso, problema, imposible o culpa deben ser desterradas de nuestro lenguaje y sustituidas por construcciones más estimulantes como error, reto, desafío o responsabilidad. Estás últimas no solo nos empujan a crecer y nos abren más puertas, sino que además hacen que nos tratemos con más benevolencia.

Además, cambiar los ¿Y si no podemos,  no es posible ...? negativos por los ¿Y si lo hacemos... Y si sale bien,  y si lo intentamos, no perderemos nada ? positivos hace que entrenemos nuestra valentía y que pasemos de pensamientos que nos hunden a otros que nos impulsan.

Dicho de otra forma, tenemos que dejar de ponernos siempre en lo peor. La precaución es necesaria, pero distingamos entre la advertencia y la parálisis.

Los que triunfan no emplean un lenguaje decaído, sino que expresan un mensaje positivo, fuerte y convincente.

Las palabras no son inocuas: contienen la energía de su significado.
Cambiando tu lenguaje mejorarás tu imagen frente al resto, pues es nuestro vehículo para llegar al otro. Con tus palabras influyes emocionalmente en los demás; con un vocabulario estimulante, mejoras el ambiente que se crea a tu alrededor.

María Fernández es fundadora de Coaching & Media y autora de El pequeño libro que hará grande tu vida.

Fuente: https://retina.elpais.com/retina/2018/07/27/talento/1532701669_217047.html

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"Si cuidas las palabras, las palabras cuidarán de ti"

Ana de Miguel: "Los hombres de izquierdas no pueden estar a favor de la prostitución y los vientres de alquiler"

Laura Martínez
www.eldiario.es

La filósofa feminista, discípula de Celia Amorós, participó en el foro de pensamiento Avivament y ofrece una lectura con perspectiva de los filósofos clásicos.

"Los hombres de izquierdas no pueden estar a favor de la prostitución y de los vientres de alquiler si defienden un mundo en el que todo no se puede comprar y vender". Así respondía Ana de Miguel a la primera pregunta posterior a su intervención en el foro de pensamiento Avivament de este viernes en Valencia y de un plumazo recordaba que el feminismo, si no cuestiona las estructuras de poder, sirve de poco.

Ana de Miguel no necesita presentación. Pero, para los recién llegados, un resumen: filósofa y feminista consagrada, discípula de Amelia Valcárcel y Celia Amorós, profesora de Filosofía Moral y Política en la Universidad Rey Juan Carlos, ha escrito la bibliografía básica para hacer una introducción al feminismo radical. Entre su obra destaca Como leer a John Stuart Mill, Alejandra Kollontai y Neoliberalismo sexual. El mito de la libre elección. Junto a la valenciana Celia Amorós, ha editado los tres volúmenes de Teoría feminista. De la Ilustración a la globalización, una actualización de la historia del pensamiento feminista.

Considera que en el feminismo la teoría es crucial, que ayuda a ver un sistema casi invisible. Y, tomando esta lección de sus maestras, que la mirada se construye, que el conocimiento es crucial. "En España hemos tenido maestras que nos hicieron darnos cuenta -a las feministas militantes- de la importancia del conocimiento", narraba la filósofa.

Basta leer el título de sus libros para saber cuál es la perspectiva de De Miguel. Un feminismo sin medias tintas, abolicionista y que busca la emancipación de la mujer cortando los problemas de raíz. "No transformaremos la sociedad si nos quedamos en la condena. Hay que conocer las causas para erradicar la violencia", exponía ante un auditorio repleto de mujeres -y algún hombre- atentas. Para la filósofa, estos deberían preguntarse cómo históricamente "nos han hecho eso a las mujeres". Y por "eso" se refería a las prácticas de dominación patriarcal.

Ana de Miguel plantea que el patriarcado no nace en las religiones monoteistas, ni en la modernidad, ni en el medievo. Sus orígenes se remontan a los anteriores de la filosofía, ya que, por ejemplo, Aristóteles ya organizó su pensamiento viciado, reduciendo a las mujeres a simples "vasijas" con las que concebir.

Así, pasando por San Agustín y Nietzsche, hace un repaso por las principales aportaciones a la filosofía, para llegar a concluir que "los grandes filósofos han engendrado la desigualdad" y se debe "hacer un ajuste de cuentas con esta filosofía" en las aulas. La académica no se refiere a dejar de impartir estos autores, si no a explicar a los alumnos "que hay dos verdades: una para los hombres y otra para las mujeres", en referencia al planteamiento de su papel en el mundo que hacen los autores.

Sobre esta idea de la doble verdad ha escrito bastante las últimas semanas, especialmente después del 8M, donde destaca la presencia masculina. "Nuestra sociedad enseña que tenemos que ser iguales, los chicos vienen a las manifestaciones, pero luego aprenden que la mujer es un ser que debe hacer su vida más agradable -dice citando a Russeau- y eso lo aprenden con lo relacionado con el sexo. Saben que no pueden pegar y humillar a una mujer, que no pueden llamarla guarra, puta o zorra, y en el porno eso es lo más flojo que encuentran", relata de Miguel.

Además, considera, la prostitución indica que no deben poner límites al deseo; "pueden encontrar mujeres de todas las razas, con todos los rasgos y a todos los precios... Solo hay que traer un poco de dinero en el bolsillo", explicaba indignada. Y esto, concluía, "es consecuencia del neoliberalismo más destructor" en una sociedad en la que todo se puede comprar y vender. Hasta las personas. Sobre las reivindicaciones del cuerpo y la mercantilización de algunas corrientes feministas, la filósofa tiene claro que no hay que caer en esa trampa.

Las feministas desde los años sesenta "lucharon por dejar de ser un cuerpo y ahora otras vienen con teorías del cuerpo no normativo, que no hace falta ya ni que pienses para ser transgresora", ironizaba. "No es cuestión de cuerpos, somos personas (...) hemos pasado del 'mi cuerpo es mío' a 'es mi mercancía", lamentaba.

Por último, retomaba el tema de la libertad sexual como excusa para defender la prostitución y hacer de cortina de humo respecto a problemas como la precariedad laboral y la inseguridad económica. "Nos hacen pensar que la libertad es la sexual, acostarte con quien quieras y hacer una orgía, nadie cree ya que la libre elección sea por ejemplo ver en qué trabajo te sientes más realizado". En lugar de eso, "tenemos a chicas discutiendo ver si es bueno para el feminismo o no ir con minifalda".

Fuente:

https://www.eldiario.es/cv/femilenial/Ana-Miguel_6_779782026.html

domingo, 5 de agosto de 2018

La OTAN es la mina de oro del armamentismo

Manuel E. Yepe Diario ¡Por esto! (Mérida)

El Presidente Trump ha ordenado a los países de la Alianza Militar Atlántica (OTAN, según sus siglas en inglés) que aumenten sus gastos en armamento y las razones de su insistencia en hacerlo se aclaran cada vez más. No tiene nada que ver con alguna lógica de defensa, porque, después de todo, el Secretario General de la alianza militar EEUU-OTAN, Jens Stoltenberg, ha admitido que "no vemos que exista amenaza inminente alguna contra un aliado de la OTAN" y el Instituto Internacional de Estocolmo sobre Investigaciones de la Paz (Stockholm International Peace Research Institute) registró en su Informe Mundial de 2018 que "con 66.300 millones de dólares, el gasto militar de Rusia en 2017 era un 20 % menor que en 2016".

Radio Europa Libre (Radio Free Europe), la emisora anti-rusa del gobierno estadounidense, reporta reiteradamente que Rusia ha reducido sus gastos de defensa.

Está demostrado que Rusia no representa amenaza alguna para ningún país de la OTAN, pero incluso esto se considera irrelevante en el contexto de que las ventas de armas de EEUU están floreciendo y sus ejecutores están siendo animados a aumentar sus negocios y multiplicarse.

El 12 de julio, segundo y último día de la reciente reunión entre Estados Unidos y la OTAN, la agencia de noticias británica Reuters citó una categórica declaración de clara orientación promocional de Trump: "Estados Unidos fabrica, con mucho, el mejor equipamiento militar del mundo: los mejores aviones, los mejores misiles, las mejores armas, lo mejor de todo".

A continuación el presidente, enumeró por sus nombres a los principales fabricantes de armas estadounidenses: Lockheed Martin Corp, Boeing Co y Northrop Grumman Corp".

Trump declaró orgulloso en la citada Conferencia de la OTAN que Estados Unidos tiene como clientes a muchos países ricos, “pero tenemos también algunos no tan ricos y me preguntan si pueden comprarnos equipamiento militar y si podemos ayudarles, y les decimos que les ayudaremos un poco.” Agregó que “los países más pobres que quieran comprar armas estadounidenses quizás no tengan que poner dinero en efectivo para sus compras”.

Esa sola declaración elevó más de diez dólares los precios de las acciones de los tres fabricantes de armas nombrados por Donald Trump referidos en el párrafo anterior.

Para impulsar la bonanza, el Departamento de Estado hizo todo lo posible para facilitar aún más la venta de armas de Estados Unidos al permitir a los fabricantes de armas obviar los controles y equilibrios que se habían establecido para obstaculizar mediante la hoja de parra de algunas restricciones legales, morales y económicas las compras de armas a Estados Unidos por regímenes considerados de mala reputación en el mundo que quieren comprar armas en EEUU.

De hecho, estas regulaciones ya no se aplican, porque el 13 de julio el Departamento de Estado anunció nuevas medidas para "acelerar la aprobación gubernamental de las propuestas de las empresas de defensa y aeroespaciales",

Dentro de la OTAN europea, los mayores compradores de armas estadounidenses son Polonia, Rumanía, Gran Bretaña y Grecia, y las cantidades implicadas son colosales.

El mensaje para la OTAN europea es que EEUU está haciendo todo lo posible para vender armas y les quiere hacer ver que hay margen para comprar más de "los mejores jets, los mejores misiles, las mejores armas" que les ofrece Trump.

Como lo ha definido el periodista Brian Cloughley el 30 de julio en las publicaciones digitales Counterpunch y Strategic-Culture, “la mina de oro de la OTAN está ahí para ser explotada y, tras el entusiasta aliento de Trump a los fabricantes de sus armas, parece que la extracción será eficaz. El Complejo Militar-Industrial de los Estados Unidos se beneficiará enormemente de la campaña de su Presidente para aumentar las cantidades de armas en el mundo.

El teniente general Charles Hooper, Director de la Agencia de Cooperación para la Seguridad de la Defensa estadounidense, declaró en el Salón Aeronáutico Internacional de Farnborough el 18 de julio que "las exportaciones de defensa son buenas para nuestra seguridad nacional, son buenas para nuestra política exterior… y son buenos para nuestra seguridad económica". Luego propuso que su agencia redujera la tarifa de transporte cobrada a los clientes extranjeros de ventas militares, lo que sería un importante estimulante para las ventas de "los mejores jets, los mejores misiles, las mejores armas" tan valoradas por el Sr. Trump.

Este oficial, obviamente un devoto seguidor de su Presidente, siguió su línea de acción con dedicación recordando a los medios de comunicación que como lo han dicho "la administración y nuestro liderazgo, la seguridad económica es seguridad nacional".

La ONU abre por primera vez en España una investigación sobre un bebé robado.

InfoLibre

Los tribunales españoles archivaron el caso, a pesar de que el Ministerio Fiscal "se mostró contrario al cierre"

El Alto Comisionado de Derechos Humanos de las Naciones Unidas ha abierto por primera vez en España un procedimiento de investigación en un caso individual de bebé robado, según ha informado la Cadena Ser.

La queja fue presentada en 2017 por un matrimonio residente en Navarra al que supuestamente robaron su hijo al nacer en 1985. El presidente de la asociación SOS Bebés Robados, Enrique Vila, ha sido quien ha anunciado la apertura de esta investigación.

El abogado ha recordado que los tribunales españoles archivaron el caso: "tanto el Jugado de Instrucción navarro como la Audiencia Provincial de Navarra decretaron el archivo de las actuaciones de investigación penal, pese a que no se había practicado las pruebas mínimas solicitadas por los denunciantes ni por el propio Ministerio Fiscal", que "se mostró contrario al cierre de la investigación".

Ante esta situación, se solicitó la intervención del Comité de los Derechos del Niño de las Naciones Unidas, con sede en Ginebra, y este organismo internacional de defensa de los derechos humanos, a través del Alto Comisionado para los Derechos Humanos, aceptó la queja interpuesta, y abrió el primer proceso de investigación contra el Estado por un caso de supuesto robo de un niño.

En el mismo, se dio al Estado un plazo de seis meses para que diese sus explicaciones y argumentase su defensa ante su inactividad en la investigación, pero "ha pasado el plazo establecido sin que se haya contestado por parte de España", siempre según Vila.

Fuente:

http://www.infolibre.es/noticias/politica/2018/07/31/la_onu_abre_por_primera_vez_espana_una_investigacion_sobre_bebe_robado_85560_1012.html

sábado, 4 de agosto de 2018

La maldita suerte. Rosa Montero

Hay muchísimas personas de talento que se dejan la piel y el alma como las que más en sus proyectos, y que, sin embargo, no consiguen salir adelante

Siempre he pensado que la buena suerte no existe: la vida te la vas labrando con mil pequeñas decisiones cada día, con esfuerzo y con tenacidad de estalactita. Pero creo en la existencia de la mala suerte, porque hay muchísimas personas de talento que se dejan la piel y el alma como las que más en sus proyectos, y que, sin embargo, no consiguen salir adelante en sus vidas. De hecho, hay biografías que parecen marcadas por una luna negra. Personas con tal cúmulo de desgracias a sus espaldas que su destino empavorece. Son víctimas inocentes a las que un dios ciego escoge castigar.

Me sobrecogió, por ejemplo, el caso de un traductor chileno al que conocí en Berlín en 1989, cuando la caída del muro. Tenía cuarenta y pocos años, hablaba un alemán magnífico y servía de intérprete a los periodistas españoles que acudíamos en tropel a cubrir las noticias. Estuvimos varios días de la ceca a la meca, trabajando mil horas, y al final se abrió y me confió su historia. En 1973, cuando el golpe de Pinochet, él y su mujer habían sido detenidos con veintipocos años. Los torturaron a ambos de una manera aberrante y atroz que me contó. Cuando, años después, lograron salir ambos del país, intentaron quererse, pero no pudieron. La historia se rompió. Necesitaron ayuda psíquica y médica. Seguían convaleciendo, cada uno por su lado. Pero él estaba empezando a salir del pozo. Lo explicó todo muy bien. Me emocionó. Era un tipo estupendo. Seis meses después, regresé a Berlín para hacer otro reportaje e intenté contratarlo de nuevo como intérprete. Y entonces me enteré de que se había matado unas semanas antes, mientras trabajaba con un equipo de televisión. Se estrellaron con el coche y ardieron. Se abrasaron. Sigo rogando mentalmente que ya estuviera muerto. O inconsciente. No fue justo.

Hay muchos otros casos, también históricos. Como el de Polidori, médico, secretario, quizá amante y desde luego víctima de Lord Byron. De entre los muchos libros que cuentan la famosa noche en Villa Diodati en la que Mary Shelley creó a Frankenstein, recomiendo El año del verano que nunca llegó, de William Ospina, en donde se reivindica la imagen de este hombre, al que Byron llamaba, despectivamente, “el pobre Polidori”. Byron, cruel, lo destrozó: le repetía que era un inútil, que sus obras (el médico escribía) eran espantosas, que era un hombre ridículo. No parece serlo en absoluto, y aquella noche de truenos en la que los invitados de Byron se propusieron escribir cuentos de terror, mientras Mary paría a Frankenstein, Polidori creó El vampiro, el antecedente de Drácula y en realidad un retrato del chupasangres anfitrión. El destino cruel (luna negra, dios ciego) hizo que el libro se publicara bajo el nombre del vampiro inspirador, es decir, de Byron, que no se dio ninguna prisa en deshacer el entuerto. El relato fue un éxito tremendo: al principio vendía 5.000 libros al día… con el nombre del malo. Al cabo Polidori consiguió que se reconociera su autoría, pero ya era tarde, estaba emocionalmente deshecho. Se suicidó a los 25 años bebiendo ácido prúsico. Hace falta estar muy desesperado para darle a la muerte un beso tan atroz. Y su mala suerte perdura: hoy apenas si se le recuerda, y su imagen sigue estando manchada por la versión ponzoñosa de Byron: en la Wikipedia, por ejemplo, le dejan bastante mal.

De modo que yo sólo creía, repito, en la mala suerte, no en la buena. Y de pronto ha salido en la revista Nature un estudio tremendo de la Universidad de Northwestern que, tras analizar la carrera de 30.000 cineastas, artistas y científicos, concluye que el éxito viene en rachas; que estas rachas duran poco, como máximo cinco años; que por lo general sólo se tiene una en la vida, y que son un completo producto del azar. Es decir, de la buena suerte. Un veredicto aterrador que te deja tiritando. Supongo que todos nos plantearemos lo mismo: ¿La he tenido ya, no la he tenido? Si ya hubo una etapa buena, ¿el futuro sólo será decaer? ¿Importa un bledo el esfuerzo? Espero que el estudio no ande muy atinado. Mientras tanto, en este agosto en el que no nos veremos (volveré a publicar mis artículos en septiembre), les deseo que tengan mucha suerte. Por si acaso. 

 https://elpais.com/elpais/2018/07/23/eps/1532360741_105523.html